La inteligencia artificial ya nos dejó sin trabajo… y aún no hemos ni encendido el ordenador

IMAGE: OpenAI's DALL·E, via ChatGPT

Resulta muy tentador celebrar toda innovación como la panacea que solucionará las grandes carencias de la humanidad. Sin embargo, cada vez son más los informes sobre el tema que parecen empeñados en demostrarnos que toda esa aparente panacea se puede convertir, en un abrir y cerrar de ojos, en un multiplicador de desigualdad sin precedentes.

La estimación del Fondo Monetario Internacional (IMF) advierte que «la inteligencia artificial podría afectar a casi un 40% del empleo global«, y que podríamos enfrentarnos a una disrupción social de dimensiones inéditas. Del mismo modo, la ONU sugieren que «la inteligencia artificial podría afectar a un 40% de los empleos y acentuar la desigualdad entre países» y el World Economic Forum (WEF) afirma, entre otras cosas, que el 60% de las compañías verán transformarse su negocio en 2030, dejando muy claro que esta tecnología no solo se dispone a reconfigurar el mercado laboral, sino que lo hará de forma asimétrica, exponiendo aún más las ya profundas brechas estructurales y geopolíticas.

La desigualdad entre naciones no viene únicamente determinada por la latitud o el grado de desarrollo económico y tecnológico, sino también en gran medida por las decisiones políticas y las estrategias de inversión. Hasta la fecha, buena parte de los debates sobre inteligencia artificial en la mayoría de las las administraciones se centran más en los potenciales réditos electorales y en el espectáculo cortoplacista que en la implantación de políticas formativas y de infraestructuras adecuadas. El resultado: quienes cuentan con medios para investigar y desplegar sistemas de inteligencia artificial parece que podrán obtener mejoras de productividad significativas, mientras que los que no lo hagan verán cómo esas oportunidades de generar valor se reducen drásticamente.

¿Qué camino tomar para evitar que la inteligencia artificial se convierta en el gran factor de polarización y desigualdad del siglo XXI? Aquí van algunas modestas recomendaciones que ningún país con una mínima ambición de no excluir a sus ciudadanos debería ignorar:

  1. Fortalecer la educación y la formación continua
    La educación y el aprendizaje basados en el apalancamiento de la inteligencia artificial no pueden ser ni un lujo, ni un aderezo. Diseñar un sistema educativo que cuente con la inteligencia artificial como protagonista, proporcionando competencias digitales desde edades tempranas y programas de recualificación (reskilling y upskilling) para la población activa, es la única forma realista de no caer en la obsolescencia laboral. Cualquier razonamiento que pretenda que «la inteligencia artificial no debe entrar en la educación» es patéticamente limitado.
  2. Fomentar la transparencia y la gobernanza de los algoritmos
    La mayoría de procesos decisorios que afecten a la vida de las personas (desde la contratación laboral hasta la concesión de créditos) deben someterse a mecanismos que garanticen la explicabilidad de la inteligencia artificial y un respeto escrupuloso a la privacidad y al respeto de los derechos de las personas en la obtención de los datos. Sin esto, terminaremos creando mercados laborales, financieros y de todo tipo completamente opacos, con consecuencias que no resultan difíciles de imaginar.
  3. Incentivar la inversión en infraestructuras de datos y en acceso a Internet de alta velocidad
    No existe inteligencia artificial sin datos, y no existen datos fiables sin infraestructuras robustas que alcancen incluso los lugares más remotos. Esto resulta esencial para que la adopción de la inteligencia artificial sea justa y para evitar que se concentre en manos de unos pocos gigantes globales. Debemos disciplinarnos para recopilar los datos generados por nuestras actividades y aprender a utilizarlos para obtener algoritmos más inteligentes y potentes.
  4. Impulsar la colaboración internacional
    La inteligencia artificial no entiende de fronteras, y las consecuencias de un mal uso (o no uso) de la misma podrían, en efecto, propagar desigualdades y tensiones a escala planetaria. Se requieren entornos de diálogo y cooperación, en los que la transferencia de conocimiento y recursos forme parte de una estrategia común adecuadamente coordinada.

Implementar estas recomendaciones requiere algo tan difícil como inusual: una voluntad política firme que priorice el bienestar colectivo por encima de la mera rentabilidad electoral. Y, por supuesto, un cambio de enfoque: la inteligencia artificial no debería ser vista como un juguete de laboratorio, sino como un acelerador de desarrollo que, si no se gestiona correctamente, amenaza con llevarse por delante la estabilidad social y económica de muchos países.

Al final, la cuestión no es si la inteligencia artificial tendrá o no un impacto profundo, sino cómo organizarnos para que el mundo del futuro no sea una versión distópica e insostenible del presente. La llamada a la acción es cada vez más clara: o asumimos la necesidad de políticas audaces y visionarias o veremos cómo un puñado de países y empresas concentran todo el progreso tecnológico, mientras la mayoría se queda mirando literalmente desde la barrera.

No lo olvidemos: como digo constantemente, la tecnología no es buena ni mala en sí misma, pero puede convertirse en un problema gigantesco si renunciamos a gestionar sus efectos de manera justa y equitativa. Se nos acaba el tiempo para seguir mirando hacia otro lado y pensar que nos podremos ocupar de este tema más adelante. El momento de tomar decisiones para no quedarnos definitivamente sin trabajo ni oportunidades es precisamente ahora.


This article is also available in English on my Medium page, «AI is already taking our jobs, and it’s barely started, so what are we going to do

17 comentarios

  • #001
    Benji - 5 abril 2025 - 18:11

    Sinceramente discrepo un poquito. Creo que son números muy inflados. Ahora mismo no puede sustituir ni a un simple contable porque es capaz de equivocarse o «inventarse» los datos. ¿Quién supervisaría el trabajo contable de una máquina? Pues un humano. Así que igualmente ese contable trabajaría más rápido, pero seguirá contratado.

    Lo mismo en programación, en agencias de publicidad, etc.

    Yo creo que todos pensaban que el coche iba a terminar con el caballo. Y mira, en muchos sitios se sigue arando con caballos y no con tractores porque es mejor o más barato o más conveniente.

    Tampoco los aviones, pese a su velocidad muy superior, han acabado con el transporte por mar ni el PDF ha acabado con el papel y el boli. Ni el coche eléctrico a acabado con el de combustión.

    Creo que es una burbuja que pinchará y luego vendrá lo que realmente aporte valor. Ahora mismo son máquinas de perder dinero.

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    • JM - 5 abril 2025 - 20:51

      Yo creo que el principal peligro es que no se use la IA para potenciar la Inteligencia Humana, sino la Inteligencia Humana para controlar a la IA.

      Eso tendría el efecto de tener a humanos supervisando lo que hace la IA a toda velocidad para encontrar ese pequeño % de veces que se equivoca. Eso es algo que los humanos no hacemos bien además de resultar enormemente frustrante.

      Al final el humano para cumplir la cuota hará como que supervisa y se le hará responsable de los errores de la IA.

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    • Moncho Bouso - 5 abril 2025 - 20:53

      Te equivocas trabajo con IA chinas avanzadas y siento decirte que lo que dices en estos modelos ya no existe.

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    • Luis F. - 5 abril 2025 - 22:33

      Totalmente de acuerdo: están dando una publicidad a la IA como si fuese la fuente de la sabiduiría universal y no es más que una serie de algoritmos mejorados para elaborar modelos estadísticos y predecir resultados. Un método de plagio colosal y una falta de control de lo que sale de ahí, ya que ni los que los crean saben lo que va a generar esa IA. Siempre hay que filtrar para que no produzca barbaridades.

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  • #005
    Xaquín - 5 abril 2025 - 18:15

    «también en gran medida por las decisiones políticas y las estrategias de inversión. Hasta la fecha,» (EDans).

    Todo el texto es muy válido, pero me quedaría con este trozo, quitándole, eso sí, la primera palabra… ya que, realmente, vale para decir que también lo anterior (el desarrollo tecnológico y social) puede producir efectos negativos, pero siempre estará condicionado a la política que se aplique previamente.

    Toda aplicación informática depende de lo que hagan las IHs, que previamente la idearon y realizaron.

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    • Xaquín - 5 abril 2025 - 18:22

      Quise ser tan corto, que faltó una aclaración final, ligando con la cita del inicio… lo que hace falta es planificar las cosas con xeito y prever la necesidades antes de que aparezcan… es el abc de la guerra y lo contrario de lo que hacen los caraculos llamados políticos actuales (con poder). Y eso lo repites con fruición, no solo hoy.

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  • #007
    Gorki - 5 abril 2025 - 19:32

    Repito lo que dije ayer

    «De siempre Jeremías ha tenido una buena aceptación editorial porque agrada al público. Lo que no se catastrofista no vende.»

    La informática plenamente establecida en las oficinas desde 1950, no ha aumentado el paro.La robótica plenamente establecida en talleres desde 1980 no ha aumentado el paro. La globalización de la fabricación de 1990 no ha aumentado el paro La venta por internet del año 2320 no ha aumentado el paro ¿Por qué lo va a hacer la AGI?

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    • Ignacio - 5 abril 2025 - 19:49

      Así es, no llegaremos a ese escenario apocalíptico porque en economía muchas cosas son contra-intuitivas, es mejor como tu haces centrarte en lo que sucede y no en lo que tu crees en tu cabeza que debería suceder.

      Pasa lo mismo con la ayuda al desarrollo, en vez de darles leche en polvo, deberían apoyar la producción de lechera local. Si tu ofreces leche a precio cero ¿cómo va a competir con eso un congoleño que tenga un par de vacas?

      Para colmo trata de explicar que para acabar con el hambre el sufrimiento y la injusticia de países con baja acumulación de capital, mal llamados en vías de desarrollo, no hay otro camino que el capitalismo, la acumulación de capital a toda costa y por todos los medios, cuando en las escualas se dan clases a niños sobre lo bueno que es entregar el 50% de tu renta al partido en el gobierno y sus respectivos reinos de taifas.

      La prueba viviente que la educación puede hacer tanto daños como bien, es un arma nuclear.

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  • #009
    Matt - 6 abril 2025 - 01:45

    Ni siquiera los puntos mencionados solucionarían el problema.
    1: En el improbable caso de que se logrará un perfecto sistema educativo al que se formará perfectamente a todo el mundo en inteligencia artificial … la conflictividad y la disrupción social serían la misma porque si se reduce tanto el trabajo da igual lo educada que esté la ciudadanía, habrán muchos menos puestos de trabajo.
    2: Esta me parece casi de ciencia ficción. Las empresas no son éticas ni responables. Las empresas solo piensan en ganar la mayor cantidad de dinero posible sea como sea. Nunca van a respetar la privacidad, los derechos de las personas ni nada si no se les obliga a ello. Y actualmente las multinacionales (que son las que dominaran la inteligencia artificial) estan por encima de los gobiernos y no hay ninguno que les meta mano.

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  • #010
    Buzzword - 6 abril 2025 - 10:35

    Nunca van a pagar RBUs, BIGTECHs que no saben o no pueden monetizar sus negocios de IA, que solamente les importa su lucro, conseguir subvenciones e inversiones para estirar el chicle hasta 2030 con sus planes quinquenales, mientras manipulan a sus ciudadanos con medios como FOX, comprando RRSS, distorsionando las leyes a su favor para implementar sus políticas oligárquicas. Musk es el Goebbels de 2025. La IA no quita trabajos lo hacen las personas y los sistemas fascistas vestidos de democracias.

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  • #011
    Michel Henric-Coll - 6 abril 2025 - 11:34

    Con perdón percibo una paradoja en el apartado (2) de este artículo: “transparencia y gobernanza de los algoritmos”.

    Querer implantar mecanismos que garanticen la explicabilidad de la inteligencia artificial es querer limitar la I.A. para que no supere la inteligencia humana. Lo cual me parece, y sin juicio de valor alguno, mantener la llamada IA a nivel de herramienta, pero en absoluto llegar a nivel de inteligencia.

    Por definición misma, una inteligencia superior está fuera de la total comprensión de una inteligencia inferior.

    Estoy totalmente convencido de los peligros de desarrollar una inteligencia superior que no podamos comprender y explicar. Estos escenarios han llenado libros de Ciencia Ficción, con una inteligencia extraterrestre superior que llegaría a la Tierra y sus consecuencias; salvo que en este caso somos nosotros mismos quienes la estamos creando.

    No obstante, controlar totalmente un sistema cuya variedad es (mucho) mayor que la de nuestros cerebros infringe la Ley de Ashby, y como tal lo considero imposible.

    O nos quedamos con un «A.I.» (ie: Algo Artificial) a nivel de herramienta, lo cual me parece bastante más seguro (aunque menos motivador para los investigadores), o renunciamos a la explicabilidad de la criatura.

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  • #012
    F3r - 6 abril 2025 - 11:59

    «una voluntad política firme que priorice el bienestar colectivo por encima de la mera rentabilidad electoral»
    Os suena de algo?
    Traduzco: unos políticos que hagan lo que la mayoría no quiere, algo que esté por encima de la voluntad egoísta individual. Lo que sea que propones no es democracia, no?

    De lo que dices, permea una idea clara subyacente: nuestra organización socio-económica es incapaz de gestionar los problemas gordos que tenemos. Es decir, la combinación de ultraavaricia capitalista semifrenada por una socialdemocracia es, visto desde arriba, capitalismo salvaje sin más, y NO ha funcionado, igual que no funcionó el comunismo en su primera versión.

    Veremos si para cambiar este sindios necesitamos un desastre similar a la 2a guerra mundial (que nos ayudó a cambiar, o intentarlo, la falsa dicotomía comunismo-capitalismo por una mezcla que funcionaba mejor que esos dos extremos), o si lo conseguimos a través de la luz de la razón.

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  • #013
    KOLDO SARRIA - 6 abril 2025 - 12:48

    “Implementar estas recomendaciones requiere algo tan difícil como inusual: una voluntad política firme que priorice el bienestar colectivo…”

    Nunca ha ocurrido en la historia. ¿Qué nos hace pensar que ocurrirá ahora?

    “O asumimos la necesidad de políticas audaces y visionarias o veremos cómo un puñado de países y empresas concentran todo el progreso tecnológico, mientras la mayoría se queda mirando literalmente desde la barrera”.

    Tú mismo sugieres en el artículo, Enrique, lo que en mi opinión acabará ocurriendo con todo esto.

    La naturaleza humana operando de manera inexorable.

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  • #014
    Gorki - 6 abril 2025 - 17:55

    Por si hubiera poco con las catástrofes que hemos a preparado los hombres con nuestra tecnología alocada, la NASA predice la inundación de los mil años, Así que empezar a hacer el Arca de Noé nuevamente

    Satélites de la NASA alertan de la llegada de una inundación que se produce una vez cada 1.000 años

    Suerte que yo me voy a morir de muerte natural dentro de poco

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  • #015
    José - 7 abril 2025 - 09:58

    La IA tiene la necesidad de datos para funcionar correctamente. Open Al y ChatGpt cuando apareció tenía programado los datos de muchos años y podía responder lo que cientos de millones personas le preguntaban.
    Los algoritmos de la IA y de Chatgpt se nutren de todas los datos que reciben diariamente y los procesa para que Chatgpt responda cada día mejor.
    Ahora mismo Chatgpt está perfectamente para escribir una carta comercial sin que el más experto pueda analizar que si está escrito por un humano o una máquina la perfección es tan alta que es imposible conocerlo.
    Las personas humanas sin conocimientos de la IA le han dado mucha vida a la IA y está es perfectamente más inteligente que una persona humana.
    Las empresas prefieren tener una IA que les ahorra el trabajo de un departamento de 10 talentos que con dos sólo todo irá mucho mejor y el trabajadores a la puta calle.
    Ésto ocurrió con despidos masivos por más talento y los desempleados fueron freelance y con más talento del mercado y con costes más asequible compitieron con las empresas que les habían despedido y salieron ganando los Freelance y las empresas perdieron ventas.
    Lo bueno bonito y fácil trae consecuencias la IA será una enfermedad que dará pasó a otras Startups similares a la pandemia del Covid que la mayoría no tenían ni idea de biología así como siempre el Venture Capital invertirá en Startups que no tienen ni un año de vida.
    Cuantas Startups de IA tienen sus sedes en las islas Caimán y Vírgenes el 90% sólo interesa tener en nómina dé los Gobiernos aquellos que pueden aportar valor en Armamento militar, salud, máquina inteligente y en algo más que sea el entretenimiento en el trabajo y en día a día en casa.
    Ésto acabará así.
    La IA ahora mismo es una burbuja que acabará explotando en los mercados bursátiles.
    Saludos.

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  • #016
    El hombre que ríe - 8 abril 2025 - 04:26

    Al final, la cuestión no es si la inteligencia artificial tendrá o no un impacto profundo, sino cómo organizarnos para que el mundo del futuro no sea una versión distópica e insostenible del presente

    Lo cierto que la idea «los robots que quitan trabajo» genera escandalo pero lo cierto millones de personas estarán felices con la idea que los robots les quite el trabajo, por ejemplo en mi ciudad esta reparando las alcantarillas, y si lo robots están en todas partes, misteriosamente no hay robots reparando alcantarillas, tal vez demasiado «distopico»

    Lo curioso es cuando se trata de este tema, los robots solo pueden aspirar a trabajos de oficina, mientras que su ausencia en reparación de alcantarillas u otros servicios públicos son monopolizados por humanos

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  • #017
    Gian-Lluís Ribechini - 8 abril 2025 - 17:42

    Si consideramos que la IA no es más que un programa, avanzado, pero un programa. Las expectativas serían más razonables.
    Pero si la IA se usa como concepto de marketing entonces se dicen estupideces. Hoy en día la IA se usa para vender de todo, desde informes hasta zapatillas pasando por conseguir subvenciones sólo con que salga la palabra IA.

    http://innogeniero.com/no-es-inteligencia-artificial-es-un-puto-programa/.

    Responder

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