Un interesante artículo en el New York Times, «Teenagers’ Internet Socializing Not a Bad Thing«, viene a incidir en una de las grandes discusiones en muchos hogares españoles: hasta qué punto las horas que los adolescentes o preadolescentes pasan delante de la pantalla son un síntoma de aislamiento y constituyen algún tipo de obsesión, o si por el contrario suponen un tiempo bien aprovechado en el que se desarrolla una parte importante de su vida social y que, además, les dota de un conjunto de habilidades que resultarán fundamentales para desenvolverse en el futuro.
El artículo del NYT, basado en un estudio de la MacArthur Foundation que se desarrolló entre 2005 y el verano pasado, apuesta claramente por esta segunda opción:
«… their participation is giving them the technological skills and literacy they need to succeed in the contemporary world. They’re learning how to get along with others, how to manage a public identity, how to create a home page… «
«… su participación les proporciona las habilidades tecnológicas que necesitan para triunfar en el mundo contemporáneo. Aprenden como relacionarse con otros, como gestionar una identidad pública, como crear una página… «
Según el estudio, la imagen de una red llena de peligros, plagada de ciberpredadores que acechan agazapados bajo identidades falsas han sido en gran medida sobredimensionados por los medios y por la imaginación popular. Que una cosa es que no sea conveniente bajar la guardia o informarse, y otra que haya un predador sexual colgando de cada poste de teléfonos o, menos aún, que los adolescentes no sepan cómo reaccionar cuando ese tipo de ocasiones aparecen, si es que llegan a aparecer alguna vez. Unos adolescentes que resultan ser mucho más aptos que sus padres a la hora de manejar su red: establecen relaciones con quienes realmente conocen, con quienes se mantienen además conectados en su vida offline y a través de medios como el móvil, el teléfono fijo y el SMS, carentes de convencionalismos sociales como los que en muchas ocasiones hacen que los adultos acepten a personas que no conocen realmente. Para los adolescentes, la red se convierte en algo necesario, en una parte fundamental en su vida y en sus relaciones sociales, en una conexión que resulta irresponsable romper. No, no están aislándose, ni obsesionados… están haciendo vida social. Una vida social que no sustituye, sino que complementa a la que tienen en el patio del colegio, en la calle o en el teléfono. Como comentaba en un artículo anterior: resulta más preocupante que no estén ahí, que el que estén ahí mucho tiempo. Nada fuera de lo normal: simplemente, un gap generacional que hace que sus padres lo vean así.
Hola Enrique,
Si te interesa este tema, te aconsejo que te leas un interesantísimo libro de John Palfrey, «Born Digital: Understanding the First Generation of Digital Natives».
Me lo compré el otro día en Amazon y da muchas claves interesantes sobre cómo es y como actua la generación de los Digital Natives.
Saludos.
Javi
Yo tengo una hija de tan sólo tres años y ya estoy mirando con un poco de detalle este tema. Ya se, que con tres años no sabe ni escribir, pero sirve para darme el tiempo necesario para investigar las herramientas disponibles para la defensa de mi hija. De momento estoy investigando los Controles Parentales que incluye Mac en su versión Leopard y eso no cubre todo, pero da una cierta protección, sobre todo en filtrado de webs y creación de logs.
Al final he llegado a la conclusión de que es imposible controlar todas las comunicaciones que mantenga mi hija con desconocidos, y que Internet es el menor de mis problemas. En Internet no la pueden violar, no la pueden matar y si alguien quiere hacer algún daño, siempre queda algún tipo de rastro para dar con ellos. Sólo los incautos se atreven a hacer daño por Internet, y como ejemplo está la cantidad de redes de pederastia que están cayendo y que da la sensación de que la pederastia se inventó con Internet. Pero donde realmente está fuera de mi control es en la calle, cuando salga, en el patio del colegio….
Pero los medios de comunicación ven a Internet una preocupante competencia publicitaria y sólo comentan lo malo exagerándolo. Pero pocas veces se comentan las buenas noticias, incluida esta que vemos en esta entrada.
Nos guste o no nos guste, el móvil, Messenger, Twiter y Tuenti están ahí, Mas vale que nos hagamos a la idea.
Por otra parte creo que cada generación adolescente encuentra su propio método de embrutecerse, Yo me pasé a adolescencia entre futbolines y máquinas recreativas, mis hijos con el walkman y las discotecas light con una música a un volumen infernal, y parece que ahora pierden el tiempo ante la pantalla de ordenador, bueno no sabría decir cual de los tres sistemas es más perverso.
Yo deje´los futbolines a los dieciseis años y las habilidades que aprendí no me han valido para mucho, mis hijos llevan aún música en el coche pero me parece que huyen de las pistas de baile, quizá mis nietos olviden escribir SMSs sin mirar. Tampoco pasará nada.
Lo peor es que por muy metidos que estemos en esto de Internet, los padres siempre seremos padres y existirá un salto generacional, no nos engañemos.
Calculo que me quedan unos siete añitos de reposo (la mayor va a cumplir seis)
Yo empecé a usar el que era recién creado IRC-Hispano cuando tenía 12 o 13 años (no recuerdo exactamente). No había mucho peligro en el tipo de conversaciones que tenía con completos desconocidos, porque en aquella época incluso preservaba más mi identidad que ahora en Internet. Pero sí sé de gente que contaba cosas demasiado privadas, que pueden no ser conveniente decir en un chat, o que quedaba asiduamente con gente que conocía en esos sitios. Esto último es el mayor peligro que veo en cuanto a niños o adolescentes en la red, pero con tenerlos controlados en la vida real, se soluciona.
Otra cosa es el acceso a cierta información que tienen los adolescentes. Por ejemplo recuerdo que cuando empecé a mirar Internet, estaba muy de moda compartir «trucos» para hackear cabinas de teléfono, instrucciones para fabricar bombas caseras, etc. Si eso es lo que había y yo encontraba hace más de 10 años, no me quiero imaginar lo que pueden encontrar ahora los adolescentes. Por ejemplo, los «consejos» de anoréxicas que hay por ahí colgados, es algo que puede convertir una simple idea fugaz en la cabeza de una chica en algo que se lleva a la práctica porque encuentra maneras de hacerlo, y gente que la «apoya».
No hay que olvidar que delegar la educación de los hijos a las pantallas, ya sea de televisión o de ordenador, es un peligro en potencia. Una cosa es que se muevan como pez en el agua manejando la tecnología y otra es que tengan el entendimiento necesario para evitar ciertas cosas, igual que no lo tendrían fuera de Internet. No quiero decir con esto que no tengáis razón en negar el alarmismo que tienen algunos, De hecho, estoy muy de acuerdo con la entrada de aquí y con la del NYT que ya leí en su día. Es una manera tan buena como otra de socializar.
(Tema aparte el hecho de que socializar todo el santo día tampoco fue nunca bueno, y hay chavales hoy que sólo leerían un libro hoy si lo publicasen en Tuenti, o que sólo hacen deporte con el dedo índice sobre el ratón… pero eso ya es otra historia)
Sin duda que lo que viven ahora nuestros hijos es algo más que el futuro. Gracias por el post
Quiza entendi mal, pero es muy diferente pasar toda la tarde jugando con tus amigos, que pasar toda la tarde frente a la pantalla jugando el fifa 09, una cosa no tiene nada que ver con la otra.
Yo soy de los tios que ocupa el pc a diario, que disfruta navegando por internet. Pero no hay que tener mas que un poco de sentido comun para darse cuenta que la sociabilidad que se da entre los jovenes que juegas Counter Strike y los que juegan paintball no es la misma, y por si alguien piensa algo fuera de real, este ultimo juego, el paint ball, es mucho mejor y nis relaciona mas.
Asi como la nintendo wii, con wiifit es mucho mas armnioso que jugar el juego de las olimpiadas en la PS3 o PS2.
Pienso que el problema de la red con los adolescentes y niños no es que estos esten acosados constante por pedrastras y violadores. Sino que su sociablidad real se vaya atrofiando de tal forma que solo quede el formato social digital.
Para mi los amigos de la red y los reales son tan iguales como leer un libro VS una pelicula.
comparto la visión, excepto en un punto. en la ausencia de convencionalismos sociales de los que impelen a aceptar vínculos de amistad digital. en mi opinión también los adolescentes y los preadolescentes siguen esos convencionalismos; cambia el tipo de motivación, cambian intereses por anhelos, pero haberlos, creo yo que haylos
yo tambien tengo una niña chiquita, y, igual que en su día mi madre podía revisar los cajones de mi escritorio buscando cartas o notas de «amiguitas», me parece claro que algún día tendre la tentación de espiar sus comunicaciones electronicas. ¡que feo!
Es curioso como, a pesar de que lo remarcas en el artículo, el debate se sigue centrando en la teórica «sustitución» de las relaciones reales por las virtuales.
Los chavales siguen relacionándose en el instituto, en la calle, en los bares, donde sea, sólo que al llegar a casa continúan esas relaciones en el ordenador o el móvil. Y sí, por supuesto también pueden empezar otras nuevas allí, e incluso tener relaciones puramente virtuales, pero nadie debe ver eso como una amenaza o un peligro porque no son sustitutivas, sino complementarias.
Bueno, es cierto, siempre habrá el caso de sustitución, pero el problema no está entonces en el ordenador, sino en la persona en cuestión. ¿Por qué rehuye las relaciones sociales presenciales? Esa es la pregunta que deben hacerse los padres, y no cómo apagarle el pc.
He moderado muchos grupos de opinión con jóvenes españoles, y aunque está claro que les encanta la vida online y que le dedican todas las horas posibles, también me han demostrado siempre que no cambiarían una noche de fiesta con los amigos o unas partidas al FIFA en casa de alguno de ellos por todas las horas de Tuenti, WoW o messenger del mundo.
A lo mejor voy a decir una barbaridad, pero por lo que tengo entendido por amigos y familiares con hijos de esa edad dificil, los chavales lo usan para comunicarse tipo pandilla y para cascársela como los mandriles.
Francamente entre eso y la pandilla del descampado y los intervius de los 70 no veo que la humanidad haya avanzado mucho.
Personalmente creo que hay que limitar el uso de internet y fomentar la lectura y las actividades al aire libre. Sino a nuestros hijos se les va a poner el culo zapatero.
Uno de los retos más apasionantes que tienen los niños de ahora y que no habrán tenido sus abuelos es el reto de crear, conformar y gestionar su identidad virtual.
Y eso les afectará sin duda a la hora de, no solo entablar relaciones de amistad o personales, sino en su carrera profesional y en el grado de influencia que tendrán en su entorno… como ciudadanos, líderes de opinión, etc.
Un tema apasionante, sin lugar a dudas.
Juan A.
http://www.businessinria.com/
Mas peligroso es llevar a los niños en el coche sin el cinturon de seguridad y la mayoría de los padres lo hacen.
Esta claro, internet no es el problema, como siempre lo es la educacion.
saludos
La lectura de algunos comentarios me trae a la mente aquella explicación del sacristán al monaguillo sobre cómo tocar la campana:
«Se coge la cuerda … lo justo … ni mucho, ni poco …»
Creo que el dilema aquí es encontrar ese punto «justo» ya que, como en todo, los extremos siempre suelen ser malos … pero, en una dosificación correcta, pocas cosas son perjudiciales.
Tampoco hay que olvidarse de que Internet es una prolongación del mundo real y hay situaciones con las que pueden terminar topándose en uno u otro lado en cualquier momento … por ello, creo que debe prevalecer la máxima de siempre: EDUCAR e INFORMAR (y prohibir lo menos posible).
No olvidar ese papel tan importante que corresponde, en primer término, a los padres y que no debería ser substituido por otras cosas.
Yo tengo hijos que usan la red desde que eran enanos y no he tenido ningún problema en ese sentido … eso sí, creo que los he INFORMADO (y formado) bien al respecto.
Nunca les he establecido filtro alguno de accesos y/o contenidos, pero sí les he controlado los horarios de uso.
Las redes sociales, los grupos de trabajo, en definitiva el trabajo colaborativo e interconectado, van a ser las claves de nuestro desarrollo futuro.
Cuando mi hijo de tres años tenga su primer móvil, el iphone será arqueología industrial.
¿Qué tamaño tendrá, y cuántas funciones, y cómo se llevará alojado ese futuro e imprescindible gadget?
La otra derivada son los complejos y limitaciones para su futuro que les podemos inducir a nuestros hijos (y alumnos) por utilizar Internet y las TIC de una forma que no entendemos (los immigrantes digitales) cuando ellos están en fotolog, facebook o tuenti…
Vale la pena hacer el esfuerzo de entender porqué y cómo usan Internet de ‘su’ forma natural. Un proyecto que desarrollamos para ayudar a familias y educadores desde Sabadell: www.i-confiable.net ; que incluye un concurso sobre webs seguras que te permite ganar un portátil, un proyector multimedia, etc.
Enrique, gracias por sacar este tema en unas fechas críticas para la invasión de los anticuerpos tecnológicos navideños en las familias !
Me preocupa que la muy loable protección al menor cada vez se pone más como excusa para implantar censuras indefendibles.
Al final quieren censurar internet por fas o por nefas.
Por las buenas (para luchar contra la pedofilia, los terroristas, y los hackers malos malísimos, si es por nuestro bien, tontorrones…)
http://www.20minutos.es/noticia/435181/0/proteccion/menores/internet/
O por las malas: En el momento en que he comprendido que se han alineado los intereses de los políticos y de las discograficas (censurar internet=acabar con ella tal y como la conocemos) me ha recorrido un escalofrio de «mal karma»:
http://www.adn.es/mundo/20081203/NWS-1395-Berlusconi-propone-G8-regulacion-internet.html
«La regulación internacional de internet es un asunto complicado todavía pendiente en la agenda de la comunidad internacional, ya que el ámbito virtual de la red dificulta y, en ocasiones, escapa a la aplicación de las legislaciones de cada país, sobre todo, en materia de descargas de contenidos culturales con derechos de autor.»
Acabo de visitar tu blog, muy interesante el post sobre Niños y Red que publicó el NYT (te dejé el mismo mensaje en Twitter pero parece que no te llega).
Después de una conferencia de Genís Roca en la que me descubrió a Marc Prensky y a Zygmunt Bauman, el tema de los Nativos Digitales me está interesando mucho (sobre todo porque tengo un par de ellos en casa de 10 y 7 años y es impresionante ver cómo se corroboran los comentarios de Prensky sobre su adaptación al nuevo mundo). Te he incluído en la lista de mis blog preferidos. Saludos. JAB
#18: Gracias, Juan. La verdad es que resulta curioso ver cómo entienden el tema las personas con hijos en esas edades: en las charlas, al mencionarlo, podrías hacer un diagnóstico de quiénes los tienen y quienes no en función de la cara que ponen :-)
Buenas noches. He recibido consultas de padres acojonadas sobre el uso que hacen de internet sus adolescentes y me he venido a los buscadores a informarme del peligro que hay realmente hoy en dia. Está claro que prohibir internet no es una buena solución. Pero hay que decir también que todos los padres prohiben a sus hijos de lo que no pueden defenderse si les sale mal. Todos hemos roto algún plato en casa, y cuando rompía una lámpara con una raqueta (o con un balón) mis padres me prohibian la raqueta.
He visto cómo adolescentes (de 12 años) se hacen fotos en bikini y con chupa-chups en la boca para colgarlas en tu3nti y cosas por el estilo, y evidentemente es problema de educación, pero no se debe permitir usar herramientas que no saben controlar y que se les escapan de las manos. Debemos recordar que a los adolescentes les llamamos adolescentes y no adultos por algo. Las prohibiciones son el último método, pero son igualmente efectivas en adolescentes, y no por eso seremos el gobierno chino. Yo fui un privilegiado y usé internet en mi adolescencia sabiendo qué riesgos tenia, y era consciente de que colgar una foto mia en mi web era lo mismo que ir a la tienda de fotos y hacer 10 millones de copias para regalarlas a todo el mundo entero, sin importar pais o lengua, y éstas ni se deteriorarán nunca ni se perderán, siempre habrá alguien que las guarda.
Soy profesional durante 6 años en desarrollo de ERP web y os aseguro que la web sirve para otras muchas cosas. Simplemente creo que los adolescentes tienen más problemas que nosotros y la red los agrava.