Los Ministros de Cultura de la Unión Europea, reunidos el pasado 20 de Noviembre, rechazan la aplicación del esquema «three strikes and you’re out» propuesto por Francia, y proponen en su lugar medidas que promuevan el intercambio legal de materiales en la red. Las conclusiones de la reunión están ya disponibles en la red.
El EU Culture Council abogó por un balance justo y razonable de los derechos fundamentales, priorizando primero el derecho a la protección de los datos personales, segundo la libertad de información, y únicamente en tercer lugar, la protección de la propiedad intelectual.
Nadie discute la necesidad de proteger la propiedad intelectual. Y la forma de hacerlo es, básicamente, aplicar el «follow the money»: cuando alguien pretende enriquecerse con la propiedad intelectual de otros incumpliendo los términos establecidos por éstos, debe ser castigado. Pero cuando nos descargamos música, no hay dinero que cambie de manos, y no hay castigo que ejercer, únicamente modelos de negocio que adaptar a los nuevos tiempos, algo que los políticos deben impulsar en lugar de subvencionar y privilegiar comportamientos anclados en el pasado más recalcitrante. El hecho de que hoy en día la música este cada vez mas disponible en Internet, y en muchos casos puesta por sus propios creadores, debería hacer reconsiderar algunas posturas.
Señor César Antonio Molina, ESTÁ USTED EQUIVOCADO, y carece de las cualificaciones mínimas imprescindibles para ser Ministro de Cultura. La red es un arma fundamental para la cultura en nuestros dias. No podemos tener en ese Ministerio a un retrógrado que cree que Internet está lleno de delincuentes peligrosos, y que se enfrenta al progreso intentando judicializar la red, perseguir a sus usuarios, eliminar derechos fundamentales y tildar de delincuentes a los ciudadanos. Afortunadamente, en la reunión de Ministros de Cultura europeos, había algunos que no eran tan cavernicolas como usted demuestra en sus últimas declaraciones, en las que no duda en insultar a diestro y siniestro a los ciudadanos usuarios de la red. Cuando se dicen esas barbaridades en television, señor ministro, se demuestran muchas cosas. Entre otras, que es usted un incompetente, que no defiende la Cultura sino otra serie de intereses, y que debe irse.
Uno de los puntos que cita el consejo de sabios
«online piracy, which in some cultural and creative sectors is reaching a critical threshold, is likely to do lasting harm to the appropriate remuneration of copyright holders and holders of related rights; besides its consequences for the marketing of traditional media (CD, DVD, etc.), it is a major factor holding back the development of the legal provision of cultural and creative content online on which, to a large extent, the dynamism of the European industry for cultural and creative content depends, and threatens cultural creativity and diversity;»
Esto lo dice alguien en España y lo fulminan ¿no?
Y la primera conclusión es instar a
«launch or encourage concerted approaches by the parties concerned, as soon as possible, designed to find concrete, effective, fair and proportionate solutions promoting the development of legal online offer and the prevention and combating of piracy;»
Que busquen soluciones, dicen, que todavía no parece haberlas…
Visto lo visto, igual lo que le pasa a nuestro ministro es que no se expresa en inglés.
Estimado Enrique, a pesar de que Chris Anderson y las telco no lo quieran decir, sí hay dinero -y bastante- que cambia de manos con las descargas por la red.
Mayoritariamente el acceso a Internet -en tu continente y el mio- es pagado, por lo tanto hay lucro involucrado y una injusticia que -aunque difícil precisar y regular dada la actual definición de propiedad intelectual- es evidente.
La descarga de contenidos sujetos a propiedad intelectual es -nos guste o no- parte importante del valor del servicio para los usuarios.
La verdad es que despues de las perlas que solto el ministro de incultura lo menos que podia hacer es DIMITIR.
No entiendo qué hace este tipo como Ministro de Cultura. Clama al cielo!
Yo le invitaría a que vuelva a la caverna a escribir poesía.
Además el imbecil utilizo mi ejemplo favorito: el del arquitecto: esa maravillosa actividad intelectual en la que los proyectos se cobran solo una vez. El arquitecto no tiene un diezmo vitalicio sobre la renta de las casas que ha proyectado, ni sobre el importe de la noche del hotel que diseñó..
Hasta cuando tenemos que ver a caspaprogres defendiendo un diezmo medieval? Porque un cantante tiene derechos vitalicios sobre su obra y el resto de la población no?
El día que yo tenga derechos de autor sobre mi trabajo respetare los de los artistas.
Un sincero aplauso.
Hombre, decir que el ministro «carece de los cualificaciones mínimas imprescindibles para ser Ministro de Cultura» (errata incluída) es mucho decir. Lo mismo se puede decir de cualquiera si nos podemos a ofender a la gente y no a cuestionar las políticas que ejecuta. Me parece que el actual ministro tiene más que ganadas sus credenciales en la gestión pública en el área de cultura (no se puede predicar lo mismo sobre otros ministerios). Otra cosa es que sepa qué es internet y cómo se puede utilizar para fomentar la cultura (la misión que debería tener su ministerio). En este terreno, decir que está flojito es muy generoso. Pero de ahí a vejarlo hay un trecho largo.
Desde luego, en lo que sí estoy de acuerdo es que es fragrante es la escasa noción y las nulas políticas de nuestros gobernantes (y quienes dicen oponérseles) tiene acerca de internet. La política del gobierno sobre internet y sobre los derechos de propiedad intelectual no sólo es de Cesár Antonio Molina. Es la política del PSOE, del PP, de CiU y de todos los que diariamente la corroboran en el Parlamento (y no lo que fuera dicen que hacen, cuidado).
#7: Hombre, decir que una persona carece de cualificaciones para su cargo porque no entiende algo tan importante para el desarrollo del mismo como Internet no es precisamente vejarlo. Vejarlo sería decir que es un imbécil, un idiota o un mamón, cosa que no he hecho ni pienso hacer. Pero negar su cualificación no es, hasta donde yo sé, una vejación…
Sigo pensando que para ser ministro es necesario aprobar unas oposiciones con un buen «tochotemario». Por lo menos que sepan de lo que se habla (otra cosa son los intereses económicos).
Salu2
Señor Dans, nos parece perfectamente comprensible que defienda usted sus opiniones, pero se está convirtiendo en la versión virtual de Jiménez Losantos
No puedo aportar nada concreto pero estas actitudes siempre me hacen reflexionar sobre el cambio brutal en todos los órdenes que ha traído Internet; parece que economía, sociedad y cultura ven modificarse sus relaciones. Todo ha ocurrido en muy poco tiempo y a veces cuesta metabolizarlo incluso para las «cabezas pensantes». Molina es un hombre de Gutemberg, le cuesta asimilar el paso del átomo al bit, pero hay cosas imparables.
No llego ni mcho menos a lo qe dice #10, pero creo que «t´has pasao», te ciegan tus fobias.
Tampoco es el mimistro más incompetente de este Gobierno, ese puesto esta muy duramente disputado entre Moratintos y la Maleny .
El problema no es exclusivamente el desconocimiento de los políticos acerca de internet, el problema es la enorme distancia , que crece cada dia, de los moradores de las élites políticas con la ciudadanía de a pie, el cerrojo que los partidos dan a la participación ciudadana en todos los ámbitos.
La opinión de la gente, que les importa, si lo que importa es manejar el poder e imponer lo que se les antoje. Este sistema político, en el que los medios de comunicación encumbran a dos partidos, a la hora de la verdad se diferencia solo en un partido y el poder cambiarlo ¡cada cuatro años!, del sistema que teníamos antes de la desaparición de Franco.
Ministros y ministrables, todos amiguetes entre ellos. Lo que quiere la ciudadanía….mañana, vuelva usted mañana….
Vamos a ver, el impresentable del Ministro de la SGAE va a esta reunión, se llega a estas conclusiones que son de sentido común ¿y el tio se viene a España y suelta una sarta de incongruencias en sentido diametralmente opuesto?
No lo entiendo, ¿Qué pasa, que no sabe leer? ¿o es que los señores para los que trabaja no le permiten decir la verdad?
Exijo la inmediata sustitución de este individuo. Es un ministro indigno y un político de dudosa moralidad.
¿Y que pasa con los medios de comunicación como, por ejemplo, «EL PAIS»? ¿Tampoco saben leer? o ¿es que en su desvergüenza siguen la máxima esa de no permitir que la realidad te estropee una noticia (Manipulada)?
A estos medios les exijo una inmediata rectificación o el cierre de sus rotativas por inútiles.
Ole, ole y ole. Se puede decir más alto pero no más claro. Bravo.
Coincido al 100% con tu exposición. Lástima que en este país todo (absolutamente TODO) se politice y resulta que, si criticas a un incompetente, en realidad lo que entienden es que estés criticando a un gobierno o a una ideología.
Repito, bravo, bravísimo Enrique Dans. :D
Del post: «…y proponen en su lugar medidas que promuevan el intercambio legal de materiales en la red»
En las conclusiones no se habla de «intercambio legal de materiales», sino de «intercambio de materiales legales». Que no quiere decir, como muchos quieren oír, que la ley apoyará explícitamente el intercambio de todo, sino que se promoverá que el material «legal» encuentre vías de difusión (y para ello la forma más inmediata es persiguiendo la competencia del «no legal», cuidado). Y todos sabemos que, mientras al usuario le toque pasar por caja en forma de pago, de canon, de micropago, o de lo que sea que implique pagar algo a alguien por algo, aquí se hablará de «modelos de negocio obsoletos». Que todos los ministros de la EU son tan retrasados o más que el nuestro, vaya. De no serlo, no estaríamos como estamos ¿no?
Creo que si piensas que «Cesar Antonio Molina carece de las cualificaciones mínimas imprescindibles para ser ministro de Cultura» es que 1) no conoces su currículum y 2) te atreves a opinar sobre cualquier tema.
No te lo tomes a mal. No soy de los que entran aquí sólo para criticar, pero creo que en este caso te faltó reflexionar un poco antes de darle a «publicar».
Creo que deberían entender una cosa.
Yo y como yo muchos, he tomado la firme decisión de no pagar nunca más por nada que no sea un producto original e irrepetible. Las copias vengan de quién vengan, las entiendo como promoción y no pago por ellas. Incluso es posible que cobre por verlas o escucharlas.
La cultura como industria no recibirá mi apoyo (Ni mi dinero) ni ahora, ni nunca. Se pongan como se pongan y legislen lo que legislen.
Lo repito para que quede claro. NUNCA MÁS.
Eso sí, batallaré contra cualquier ley que limite mis derechos civiles hasta verlas derogadas, ahí me gastaré mi dinero llegado el caso.
Y como consecuencia promoveré un cambio en las leyes electorales y en la forma de hacer política.
Si entienden esto, y creo que es sencillo de entender, se darán cuenta de que es inútil, legislar de forma injusta en contra de la opinión de la ciudadanía a sabiendas de que se obra de esta forma (Prevaricación) pues jamás conseguirán su objetivo que no es otro que hacerme pasar por caja a la fuerza. Eso jamás ocurrirá.
En el peor de los casos simplemente no consumiré.
Si entienden este sencillo planteamiento vital, entenderán que deben enfocar de forma más sensata el problema,porque el matonismo legislativo no tiene futuro. Y ellos, obrando así, tampoco.
No conozco la trayectoria de este Sr, y por ende no voy a entrar a discutir si debe o no ser ministro de cultura de España, pero en lo que se oye sobre sus declaraciones en cuanto a la Red, este hombre no tiene ni la más mínima idea de que hay muchísimos artistas que «no cobran por sus obras» (sino que aprovechan la publicidad para luego poder mostrar su trabajo en público y ahí sí, cobrar por ello). Y concuerdo con lo que dice Enrique de que la cultura no morirá, lo que morirá será la industria que se beneficia de los artistas. En fin… un saludo de un uruguayo que vivió 3 años en españa y ahora, ya desde Uruguay, sigue en contacto con esa tierra tan linda como la Española. Abrazo!
Enrique, suena un poco mal lo de «La red es un arma fundamental para la cultura», quedaría menos agresivo decir «es una herramienta» o algún otro sinónimo.
Por otra parte, a nadie le puede sorprender la actitud del señor ministro, si desde el primer día dejó bien claro su punto de vista. Y el del PSOE, que fue el que lo nombró y le ha mantenido en el cargo.
Me parece que se están mezclando muchas cosas algunos términos. El ministro de Cultura, no pone a nadie en la cárcel por bajarse música, esto está legislado por el Congreso y lo pone en práctica el Ministerio del Interior.
A mí, personalmente no me gusta, pero no por lo del internet, sino por otras cosas «más de su ministerio».
Y copmo decía aquel:» No les éxijamos demasiado a nuestros políticos, que son el reflejo de nuestra sociedad»
Hacia tiempo que no sentía tan profundo sentimiento de vergüenza ajena. Ojiplatico escucho el discurso vergonzante del Ministro de Cultura que da la impresión que sabe tanto de cultura e Internet como un guacamayo de la teoría cuántica.
Todo el que se precie de investigador debería ser riguroso con las fuentes que utiliza. Se puede asumir que el autor de la entrada le tenga tirria al Ministro del ramo, pero manipular para darle unas collejas suplementarias no honra al autor. En el texto original de la reunión se afirman cosas como:
INVITES MEMBER STATES to
….launch or encourage concerted approaches by the parties concerned, as soon as possible, designed to find concrete, effective, fair and proportionate solutions promoting the development of legal online offer and the prevention and combating of piracy;
INVITES THE COMMISSION
……more generally, to contribute by means of all relevant policies to the development of legal online offer and the fight against piracy;
Pues eso…
Resulta ciertamente sorprendente que a finales de 2008 el ministro de cultura español trace una línea divisoria tan gruesa entre su visión de un fenómeno tan definitorio de la sociedad de nuestros días como es Internet, y el parónima actual. Resulta igualmente cierto que, en la actualidad, no se debe, porqué no hay motivo legal, sancionar a alguien por descargar música de la red.
Sin embargo, mi inquietud se centra en otros temas, y es que no encuentro un argumento claro y contundente a favor de las descargas de Internet. Según parece el argumento más extendido en blogs y redes sociales es el siguiente: al no ser ilegal, es la industria de la música la que debe readaptar su modelo de negocio principalmente hacia un nuevo medio de distribución tan amplio, y tan lucrativo, como es la red.
No me vale. No me vale por una simple cuestión de sentido común: aquel que puede obtener un CD gratis no lo comprará, aunque se lo ofrezcan en Internet y a edición de coleccionista. Es cierto que el modelo de negocio podría seguir siendo viable bajo ese prisma atrayendo a los consumidores mediante ediciones especiales, contenidos exclusivos, o distintos recursos publicitarios por todos conocidos y enfocados hacia los fans más acérrimos del artista en cuestión. Aún así, se sigue renunciando a un amplio sector de potenciales compradores: aquellos oyentes (en el caso de la música) ocasionales quienes preferiran sin duda obtener contenidos de forma gratuita a través de la nube que comprandolo en centros comerciales o en la web de la propia distribuidora a un coste fijado. En este marco, resulta obvio que las las distribuidoras y los artistas siguen perdiendo dinero respecto al antiguo modelo de compra física, previa aparición de las descargas por Internet.
Si, es cierto que ejemplos como los de Radiohead demuestran que uno se puede adaptar a los tiempos, pero es igualmente cierto que ganaban más dinero sin la existencia de las descargas por Internet que con ellas.
Algunos, como yo, pensaran algo del estilo: «los artistas serán un poco menos ricos, ya les esta bien.
Pero, en este paradigma actual, resulta razonable (y debería entenderse aunque se este en contra) que las discográficas (mediante presiones a los gobiernos) aboguen por la prohibición de dichas descargas.
Así pues,me parece muy bien pedir un nuevo enfoque en el modelo de negocio de las distribuidoras, pero me gustaría oír proposiciones más claras y no tanto ¡adaptense a los tiempos señores empresarios!.
#8 Vejar, no es insultar. Según el RAE, vejar es «dar vejamen (reprensión satírica y festiva)» y en otra acepción «maltratar, molestar, perseguir a alguien, perjudicarle o hacerle padecer». Como es obvio no insultas por llamar ignorante al ministro Molina en un terreno en el todo parece ignorarlo. Al menos estarás de acuerdo en que le das vejamen ;-)
Pero, francamente, Cesár Antonio Molina es un hombre preparado en muchas otras facetas. No es supermán y tiene limitaciones… como cualquiera. A mí si me nombrasen ministro de cultura no sabría por donde empezar. Él, después de un largo servicio en la gestión cultural, creo que sí sabe.
En todo caso, como decía, la política que pregona es la que propugnan muchos políticos en este país. Eso es lo que debemos recriminarles, creo: su tozudez y su cortedad de miras, sin olvidar que a veces se desconoce porque no se ha tenido oportunidad de conocer. Se trata, creo, de convencer, no de vencer.
Ah, sigue la errata en «carece de los cualificaciones mínimas». Bueno, como estoy detrás de un proxy, a lo mejor, ya lo has cambiado y sigo viendo el caché.
Gerard #24 No veo que nadie, salvo los presuntos implicados, deba devanarse un segundo los sesos para resolverles el problema a los de la industria de venta de copias.
Internet no es un mero medio de comunicacion mas sino que es un contexto nuevo, un fenomeno mucho mas importante que las angustias de quienes se niegan a reconocer que ya no son necesarios o que cuanto menos su papel y funcion ha cambiado.
No se trata de perseguir la mal llamada pirateria internetera, no ese el quid de la cuestion, si no que se está haciendo presion para destruir internet o lo que es lo mismo procustianizarla a la medida de unos concretos intereses, al punto que cabe decir sin sombra de duda que en el supuesto de que se logre el objetivo de monitorizar el trafico y distinguir la clase de contenidos que circulan, equivaldra a darle cerrojazo a internet ya que, puestos a ello, todo, absolutamente todo esta bajo derechos de autor y una vez sentado el principio y dispuestos los medios para aplicarlo, la mera amenaza de litigio es mas que suficiente para surtir el deseado efecto.
Entiendo que se critique, o al menos se me reproche, mi aparente defensa de las discográficas. Pero más que defender las discográficas, yo reprocho la crítica vacía, o poco trabajada. Entiéndanme, no me siento bien conmigo mismo defendiendo un acceso gratuito, y por supuesto lícito, de los contenidos a través de Internet justificándome con algo tan vago, o tan carente de sustancia (si se me permite la expresión) como: adáptense a las vicisitudes de los nuevos tiempos. Porqué creo que mucha gente defiende esta postura pero sin embargo sería incapaz de dar un ejemplo rentable, para una discográfica, de adaptación a los nuevos tiempos.
Por supuesto que estoy completamente en contra de la privatización de Internet y de un Internet con copyright. Es más, entiendo imposible la existencia de la red vallada por derechos de autor pues dicho panorama viola el principio de libertad sobre el que se forja la nube.
Sin embargo necesitaría, o al menos desearía, poder ofrecer una solución acorde para las dos partes. Con ello no pretendo ayudar a ninguna multinacional privada, que para eso pagan a empleados, pero más bien pretendo convencerme a mi mismo que de veras existe otro modelo posible que compagine el derecho libre del internauta con un modelo de negocio rentable (tal vez no tan lucrativo, pero rentable) para las discográficas. Un modelo que yo pudiera defender, y que me permitiera criticar al mismo tiempo el obsesivo y reiterado ataque de las discográficas contra todo aquel que se atreva a descargar contenidos vía P2P o similares.
Yo no soy especialista en marketing, y por lo tanto ese trabajo se lo dejo a gente como Enrique Dans.
Pero pediría a todo aquel que no hubiera encontrado una propuesta de estas características, que no criticara a una discográfica por querer seguir el principio básico de toda compañía (de la que por cierto dependen muchos trabajadores), que es ganar dinero. O, al menos, que centrase su crítica en otros aspectos.
Por supuesto todo ello no deja de ser más que una opinión muy personal.
Gerard, internet no es un libro, un pamfleto, un periodico, una sala de cine, una radio, una cadena de TV, no es eso y a la vez abarca todo eso y mas.
Internet no tiene el origen, la estructura ni el objetivo de ninguno de los citados medios de comunicacion y difusion, pero los conjuga y supera.
Quizas, solo quizas, podría decirse que los dueños de internet son las operadoras de telecomunicaciones en tanto que es por sus maquinas, cables y radioondas por donde circula la savia internetera, pero no la producen ni determinan, tan siquiera son ellas quienes deciden de donde viene ni a donde va lo que vehiculan, pues aun siendo los dueños del medio fisico no lo son del canal, el canal o esencia de internet es el protocolo de comunicacion que faculta la interconectabilidad entre cualquier clase de redes.
Si tocas ese protocolo para hacerlo mas controlable solo estarias reproduciendo algun otro modelo de red preterito que fracasó, y ello fue asi precisamente porque era un modelo de canal muy parecido a cualquiera de los citados al inicio del comentario.
Si se asume lo antedicho tiene que ser mas facil comprender por que el viejo modelo de negocio es incompatible con y en internet. El canal/protocolo en que radica su esencia implica que lo que quiera que se entre en ella está siendo lanzado a la plaza pública, pero una plaza concurrida por agentes facultados para hacer algo mas que meramente recibir, aceptar, rechazar, soportar, comprar… lo que quiera que aparezca en esa plaza, ya que pueden reproducirlo con exacta fidelidad, pueden elaborar y emitir sus propios contenidos, ideas y opiniones cuyo alcance puede llegar a ser en principio planetario y a un coste nulo.
Antes de la existencia de internet para difundir contenidos e ideas se precisaba un complejo y caro aparato de produccion y difusion que dio pie al sistema de derechos de autor para regular la relaciones entre el relativamete pequeño conjunto de agentes interesados.
Sin embargo la denominacion es equivoca ya que el sistema de derechos de autor no tienen al autor como protagonista principal, pues no se trata de protegerlo frente a terceros, sino de objetivarlo para que puedan serle comprados los derechos, y es justamente tras la compra cuando cobran tal caracter de derechos, cuando ya no son del autor, y pasan a ser un objeto susceptible de trafico en el mercado. Asi pues los derechos de autor tienen como verdadero protagonista a los traficantes de derechos de autor. Paradojicamente el autor no es «tal» hasta que ha vendido sus derechos, y la monserga de acotar la vigencia de tales «derechos» hasta equis años tras la muerte del autor no tiene nada que ver con el autor ni con su vida sino con la longevidad potencial del comprador de derechos: las empresas.
Y para finalizar insito en el absoluto desinteres en trata de imaginar alguna manera de que el viejo modelo de negocio encuentre una manera de sobrevivir en internet, pues entiendo que si se consigue ya no hay internet.
Hombre mas penoso es el problema que hay con BOLONIA en el que no se quiere homologar la carrera de informatica, si los profesionales pasan de ser unos titulados de clase A a unos titulados de clase X con un curso de de especilizacion a A, vamos a perder todo el potencial de un grupo de creadores de software y lo vamos de jar en manos de ramoncines y de americanos.
Si ramoncin cobra porque no cobro yo por cada linea de codigo que escribo, acaso mis programas no son sino acordes interpretados por un mudo super sintetizador.
Hasta el software libre sobre el que muchos trabajamos nos hace dependientes de los grupos de desarrollo americanos, estrategicamente es un grave error no proteger a los creadores de software europeos.
Dubitador, quién quiera que seas, creo que expresaste muy bien la situación. Pero fíjate: si la plaza pública realmente fuera pública sería una cosa, en este caso hablamos de plazas a cuyo acceso se paga, hay lucro involucrado, sería razonable y justo que el que lucra comparta con el que produce lo que le está permitiendo lucrar, los autores. Para ello aún no se ha propuesto una solución definitiva, aunque confieso que tengo una idea, que he expresado en http://blog.canal.cl/2008/08/ms-vale-tarde-que-nunca-solucin-para-un.html .
Me gustaría citar -con nombre real- tu frase «no se trata de protegerlo frente a terceros, sino de objetivarlo para que puedan serle comprados los derechos», por favor escíbeme a info@canal.cl , si quieres, para poder identificarte con nombre y apellido. Saludos desde el sur del mundo.
Enrique: No te olvides de una cosa: mientas no puedan controlarla como al resto de los mass media, los políticos (y muchas empresas) temerán y odiarán a Internet a partes iguales. Internet se ha convertido en el primer medio de comunicación de masas donde la libertad de expresión tiene verdadero sentido. En el resto de medios, el receptor (espectador, oyente, lector) tiene un papel fundamentalmente pasivo y el mensaje está a merced del emisor (productor, emisora de TV o radio o editorial/periódico) de turno. Internet permite a los receptores romper con el papel pasivo al que se les (nos) venía condenando y generar una comunicación auténtica en dos direcciones, decidir lo que quieren escuchar y qué quieren que se emita, y hacerlo, pues es el único medio en el que el receptor puede ser tanto o más emisor de información.
Por supuesto la libertad de expresión aterroriza a muchos (aunque de palabra digan defenderla) y desde su nacimiento a Internet se la ha intentado legislar (LSSI con el PP, LISI con el PSOE) para cercenar las capacidades únicas que nos ofrece a todos los ciudadanos usuarios: desde los ataques al anonimato (muchas veces imprescindible para poder ejercer una verdadera libertad de expresión, cada vez en más paises) y la intimidad, hasta la legislación sobre qué se puede transmitir y qué no por la red, o el hecho de que nuestros derechos como consumidores se conviertan en papel mojado cuando hablamos de transacciones electrónicas o programas de ordenador, pasando por el filtrado de contenidos o el secuestro y espionaje del correo y las comunicaciones (con y sin orden judicial).
Aquí nos jugamos bastante más que escuchar música gratis o no. Nos jugamos nuestras libertades y la actitud del gobierno por ejemplo respecto al infame Canon de la SGAE al ningunear la iniciativa popular de mas de 2 millones de personas (Que se hayan manifestado públicamente, seguro que hay muchas más) dice bastante poco en favor de la salud de nuestra democracia y de la honestidad de nuestros políticos. Por cierto, que la SGAE no tiene nada que ver con los verdaderos autores. Los mal llamados «derechos de autor» están en el 99% de los casos en manos de editoriales, discográficas y distribuidoras, ya que los verdaderos autores se ven alienados a la fuerza de la propiedad de la obra, la cual deben ceder en exclusiva a algún gran grupo mediático, si quieren firmar un contrato. SGAE (La «E» de SGAE es de «Editores») es el brazo político de toda esta industria mediática que tiene como escaparate a un puñado de artistas prefabricados del star-system, que incluso en muchas ocasiones se ven obligados a hablar contra internet y contra el P2P por contrato, no son más que un lobby cuyo fin es corromper el proceso legislativo para obtener leyes faorables a sus negocios, al igual que la RIAA, la MPAA y la BSA. Y atacarán a todo lo que amenace sus caducos modelos de hacer dinero.
Por cierto, que todos los problemas por los que estas empresas y sociedades de gestión se rasgan constante- y ostensiblemente las vestiduras se acabarían con una solución bien fácil: Que bajen los abusivos precios de sus productos (y reduzcan sus indecentes márgenes de beneficios) y que dejen de una vez de putear a los ciudadanos (sus potenciales clientes), y de intentar corromper la legislación a su favor … aisss, si al final era tan sencillo… la supuesta “propiedad intelectual” y toda la cacareada defensa de la “cultura”, de los “creadores”, la “innovación” y de los “artistas” es lo de siempre: solo cuestión de pasta…. los intocables beneficios de un puñado de multinacionales…
Por favor, no mareen más la perdiz: señores de las fonográficas, gestoras de derechos de autor y mafias y chiringuitos afines, estudios de cine y multinacionales del software, enterense de una puñetera vez: Solo hay una “solución” a SU PROBLEMA que Vds llaman “piratería”: QUE BAJEN SUS INSULTANTES PRECIOS Y MÁRGENES DE BENEFICIOS . Mientras tanto, y sabiendo como sabemos todos que el coste de reproducción y fabricación de las “copias originales” (obsérvese el oxímoron) de CDs y DVDs de música y software es prácticamente despreciable, y que a los autores originales (músicos, cineastas, programadores) -que son quienes ponen el talento y la creatividad-, la venta de copias les reporta una cantidad irrisoria, lo que quieren llamar “Piratear” (es decir, ayudar al prójimo sin ánimo de lucro intercambiando información), no es ya que sea un derecho, es que es y será una obligación moral, un acto de desobediencia civil éticamente obligatorio. Y es que lo que es legal y lo que es justo no siempre va de la mano (de hecho en estos tiempos que corren, lo raro es que coincidan justicia y legalidad).Y por si alguien no lo sabe todavía, hace tiempo que las corporaciones empresariales nos han declarado la guerra a todos, no ya como trabajadores, sino también como consumidores, saltándose la regla de oro de que “no hay que morder la mano de quien te da de comer”
Ignace Rodríguez, gracias por tu gentileza y deseo de atribuir a quien corresponda algo que quizas consideres digno de ser citado.
Sin embargo has de tener en cuenta que no poseo cualificacion tecnica alguna para sustentar la concreta frase que apuntas, es pues una mera opinion mia y por lo tanto me encuentro mas comodo para expresar meras intuiciones o impresiones haciendolo desde el nick.
Si el predicado de la frase te convence o coincide con tus propias intuiciones y opinion entonces la frase es tambien tuya.
Respecto a lo que mencionas relativo al justo deber de compartir el lucro obtenido mediante el uso de cosas de otros, creo que debe puntualizarse que las operadoras de telecomunicaciones que facilitan el acceso a internet al publico no hacen uso lucrativo de contenidos sujetos a derechos de autor, ni tampoco hacen tal los clientes de dichas operadoras que se intercambian aquellos contenidos sin mediar clase alguna de pago o contraprestacion.
Quien deberá compensar a los propietarios de derechos de autor será solo y exclusivamente quien hagan uso lucrativo de contenidos pertenecientes a aquellos.
Estimado Dubitador, comprendo lo que dices, sin embargo insisto, el proveedor de acceso hace lucro.
Es fácil establecer estadísticamente -y debe ser también posible establecerlo en encuestas de usuarios- que una parte importante del valor por el cual el cliente paga por el acceso es la posibilidad de descargar música y películas. Podemos argüir que la ley es obsoleta, que nunca estuvo previsto un caso así en lo que definimos como propiedad intelectual, que no es un lucro tradicional en el sentido de que -a diferencia del caso de radios y TV- el proveedor no escoge lo que transmite si no que son los usuarios lo que escogen lo que comparten y descargan, pero el efecto final es similar, los contenidos están intermediados por alguien que cobra, que se beneficia gracias a ellos que lucra.
Yo sostengo que eso no es pirateo, y que no es malo, que simplemente hay que hallar la manera de regularlo para que haya compensación y justicia.
SubSonica ¿qué precios consideras que las sociedades deberían poner a sus productos? libros, películas, música, software. Di una cifra. Y luego veamos:
a)si los usuarios preferimos pagar lo que dices antes que obtenerlo de gratis como ahora.
b)si algún creador se lía la manta a la cabeza, pasa de sociedades de gestión y te hace caso.
Ignace: por ahí creo que acabarán tirando. Ni canon ni nada. Subida general a las cuotas de conexión y arreando.