La reciente aprobación de varios fondos de inversión en bitcoin y la entrada de una gran cantidad de nuevos inversores en pos de una rentabilidad, la asociada con la creciente popularización de las criptomonedas, que parece seguir los patrones lógicos en toda adopción tecnológica, lleva a The Economist a plantearse la pregunta de si las criptomonedas son, como las cucarachas, algo prácticamente indestructible.
De hecho, a lo largo de su historia, criptomonedas como Bitcoin o Ethereum han sobrevivido a fases de escepticismo, de popularización, de copia y replicación constantes, de caída en desgracia de algunos de los principales exchanges utilizados por muchísimos usuarios, de incertidumbre regulatoria y hasta de prohibiciones. China, por ejemplo, prohibió las criptomonedas en 2021 pasando por diferentes fases: primero, el país prohibió a las instituciones financieras realizar transacciones con criptomonedas en mayo. Después, en junio, prohibió la minería de criptomonedas a nivel nacional, y finalmente prohibió por completo las criptomonedas en septiembre.
Además, Egipto, Irak, Qatar, Omán, Marruecos, Argelia, Túnez, y Bangladesh han prohibido las criptomonedas, y otros cuarenta y dos países, incluidos Argelia, Bahrein o Bolivia, han prohibido implícitamente las monedas digitales al imponer restricciones a la capacidad de los bancos para operar con ellas, o al prohibir los exchanges. Rusia lleva ya mucho tiempo barajando una prohibición total, e incluso el Fondo Monetario Internacional no descarta la posibilidad de llevar a cabo prohibiciones totales.
Y sin embargo, el valor de las criptomonedas consideradas solventes o relevantes como Bitcoin o Ethereum sigue describiendo un gráfico con subidas y bajadas, pero claramente ascendente. Incluso en el caso de China, la economía más importante que ha llevado a cabo una prohibición, nos encontramos con un paisaje que demuestra lo absurdo de ese tipo de medidas: el ecosistema bitcoin tardó muy poco en sobreponerse a la prohibición del minado en el país, los bancos chinos ofrecen a sus clientes la posibilidad de invertir a través de subsidiarias en Hong Kong, exchanges como Binance explican a los ciudadanos del país cómo evitar las prohibiciones, y cada vez son más los ciudadanos chinos que invierten en el prohibido bitcoin buscando unas rentabilidades que no encuentran en ninguna otra alternativa, manteniendo su actividad a pesar de la prohibición mediante todo tipo de esquemas pintorescos.
¿Qué ocurre cuando una tecnología distribuida, la cadena de bloques y su uso como soporte para criptomonedas, se convierte en una propuesta de valor que cada vez más personas entienden como el futuro del dinero? Simplemente, que ni siquiera una prohibición radical por parte de los estados consigue frenarla. La mayor parte de la gente no adquiere bitcoins o ether simplemente porque deseen especular con su valor, sino también porque consideran que es una buena apuesta de futuro, un valor, como dice The Economist, prácticamente indestructible y gobernado por algo tan seguro como un algoritmo, al margen de lo que el sistema al que pretende sustituir pretenda hacer para evitarlo.
Es, simplemente y a pesar de que muchos se nieguen a entenderlo, cómo funciona la innovación.
This article is also available in English on my Medium page, «Why cryptocurrencies are here to stay, regardless of what governments do«
«¿Qué ocurre cuando una tecnología… es prohibida?» (entre el Dans y yo). Como ha pasado con el móvil escolar.
Se impide practicar el carteo escolar al estilo Freinet, con una herramienta tan cojonuda como un móvil «inteligente». O se impide hacer horas lectivas extras personales en el recreo, consultando saber que información para hace madurar la mente del preadolescente que lo usa.
Y todo porque una panda de adultos, parcialmente desneuronados (será peor que imbécil?), no saben controlar lo que hace el alumno en el recreo. Por ejemplo, fumar. O el acoso escolar que se arregla mejor con mayor profesionalidad educativa, por parte del profesorado. Ese que hasta se siente prisionero de las guardias de recreo. Es mucho más cómodo prohibir el uso de tecnología, para unos menesteres, que se pueden desarrollar simplemente con un insulto oral y una patada en el culo del alumnado diferente.
Pero sí, la solución siempre será encriptar lo más posible, para que las mentiras del mundo adulto, como van encriptadas, ya se puedan considerar menos mentiras. Como si llamarle al genocidio sionista estar ejerciendo la defensa propia, quedara oculto por decirlo encriptado. Ahora resulta que el culpable es el mensaje, y el mensajero robótico, no los autores de los mensajes, sean reyes o plebeyos.
Y no es «off topic», aunque no hablara de las monedas «en concreto», como gustan de decir los entendidos anglosajonizados.
Durísimo entendimiento sobre un mal del momento, la criptomoneda es la obra de un poder que busca derrocar estados, pero su poderío no es tal y ya visos tiene de caer aún frente al pensamiento más orate disfrazado de catedrático.
El tema es que llevamos ya 15 años conviviendo con el Bitcoin, y yo no veo dónde me ha afectado, más allá de tener 4 duros ahí metidos.
¿Que serán el futuro?. A este paso el futuro de mis hijos…
Pues si dejas 4 btc a tus hijos no les vendrán mal.
Cuando la invención de Internet o la tecnología de la telefonía móvil llevaban 15 años tampoco ‘veías’ dónde te habían afectado…
Deberías de usar mejor tu respuesta.
No es lo mismo desde que inventó internet y la democratización del uso de las criptomonedas.
Las Criptomonedas, han llegado a un punto desde hace ya bastante tiempo, que no necesitas saber absolutamente nada.
Sin ir más lejos, yo no tengo demasiada idea de cómo funciona técnicamente. Hace años pensaba que tenías que acceder a un monedero concreto virtual, que si patatín, que si la contraseña del mismo…
Hoy es el día que Goin, una App especializada en ahorrar mediante el guardado de lo sobrante de pagos con tarjeta (es decir, si pagas 2,60 te ahorra esos 0,40). Esa misma App, me permite comprar una cantidad de Bitcoins u otras monedas virtuales, como quien compra algo en Amazon. Y venderlo cuando quieras sin problema.
Más sencillo imposible y accesible a casi cualquiera que sepa leer.
Desde el famoso efecto 2000 uno ya podía imaginar en qué medidas podía afectar la aparición de la web.
¿Al guien tiene noticia de como le va a El Salvador con la adopción del Bitcoin como moneda? ¿Se utiliza el realmente el Bitcoin en las transacciones del día a día, por ejemplo para pagar en el supermercado?¿El sueldo de los funcionarios es en Bitcoin?
«Pero algunos economistas consideran que la situación no es tan positiva como la presenta Bukele.
Y es que los más de US$100 millones que su gobierno gastó en la compra de la criptomoneda son sólo una parte de los fondos públicos utilizados para promover el uso del bitcoin entre los salvadoreños, desde que el país lo adoptó como moneda de curso legal en noviembre de 2021.
«El gobierno gastó mucho dinero en el desarrollo de la aplicación Chivo Wallet, en la instalación de cajeros automáticos, que en su mayoría no funcionan, en un bono de US$30 para todos los ciudadanos mayores de 18 años, en propaganda y eventos internacionales», dice Óscar Picardo, director del Instituto de Ciencias de la Universidad Francisco Gavidia de El Salvador.»
…..
«»Es un fracaso total», afirmó. «Casi nadie en El Salvador usa bitcoin. Ni siquiera en el turismo parece ser una atracción».»
Las dudas que despierta el triunfal mensaje de Bukele sobre las supuestas ganancias que El Salvador logró con el bitcoin
Dicho de otra forma: los btc que se repartieron entre la gente con el ChivoWallet, se gastaron, pero nunca mas se repusieron.
Igual necesitan 15 años mas… XDD
Yo estuve de viaje por Guatemala y El Salvador el año pasado.
En El Salvador compré 50€ de Bitcoin usando los cajeros Chivo. Funcionan muy bien y tienen un despliegue bastante decente.
Para pagar con los 50€ en bitcoins me fue fácil en la calle (puestos callejeros, propinas, etc). Mucha gente tiene la Chivo Wallet instalada por dos motivos: les daban 30€ y porqué apoyan a Bukele y entienden que Bitcoin es una apuesta del presidente. Aún así no sabían usarla muy bien (no sabían diferenciar entre blockchain y lightning, lo que repercute mucho en las comisiones)
En comercios más grandes me resultó más difícil usarlo. En alguna cadena de supermercados si lo aceptaban, pero al pedirles pagar con ellos se les veía un poco perdidos. En alguna gasolinera también me lo aceptaron.
Esa fue mi experiencia. No se si es lo que querías saber.
Me he encontrado esta predicción de ASIER el 5 noviembre 2017 en este blog:
«El primer país que adopte el bitcoin como moneda nacional tiene la posibilidad de pasar de ser un país pobre a uno de los más ricos del mundo en unos años.»
¿Cuantos años va a necesitar El Salvador para transformarse de un país pobre a uno de los más ricos del mundo?
Pues mira, desde esa fecha hubieran multiplicado su riqueza unas 6 veces.
Ya… Pero como Nostradamus ya no cuenta entre los vivos para saber el momemtum, Bukele hizo caso a los cryptobros como tu… Porque el btc era el futuro. «y da igual cuando lo leas» …
Lo único tangible a día de hoy es lo que te cuenta la BBC en mi enlace… Todo lo demás, cantos de sirenas
Dicho de otra forma. No es cuestión de si han ganado o perdido dinero…
Es que ni regalado la gente no lo usa.
Y dale con el uso. No necesita ser usado en el sentido de pagar una café con él, su principal caso de uso es la reserva de valor. ¿Acaso alguien utiliza oro para pagar?
Llevamos 15 años, sí, pero para mucho como si aun fuera el primer día…
Sólo se que las predicciones sobre el Bitcoin no se cumplen. Luego siempre hay una disculpa, pero no se cumplen.
Reserva de valor cero. Se usa para especular. Si no hay especulación, no se engaña a los paletos. Y si no hay paletos, como decía es algo que en el mejor de los casos está ahí latente, y en el peor de los casos pasa esto
Gracias, Asier… al menos ya nos reconoces una cosa… NO ES PARA USO DIARIO….. es decir, NO ES UNA MONEDA…
Entonces…??? Para que es…???
Para especular…???
Ale, que cada vez nos cambiais los argumentos, y lo unico cierto es que no dais ni una. Gorki ya te ha recordado una de TUS frases… y El Salvador, ahi esta… con un «algo» que nadie quiere usar…
Holdear malditos, holdear… XDDD
C3PO…. te falta este otro:
No, Rubiales no vendió en tres horas todos sus NFT: en realidad, han sido un fiasco
NFT, Criptos,… y luego escucho esto
Qué es una cucaracha de ello no hay duda. Y, como todos los parásitos, una vez encuentran aposento, cuesta deshacerse de ellos.
Como Gregor Samsa descubrió, es difícil cohabitar un espacio común con una criatura quimérica, de cabeza humana, espíritu animal, y capaz de disparar espinas venenosas para paralizar a sus presas y así, «devorar personas».
Con el Bitcoin pasa lo mismo; una vez introducida esa esa criptomoneda, es más difícil escapar de su influencia que de Godzilla.
El artículo original
«It’s really hard to kill cockroaches. Cryptocurrency has the same weird resilience. Despite massive scandals, a disreputable role in abetting criminality … What are the prospects for the widely despised asset?» »
«Cockroaches are unwelcome pests. cockroaches infect your home and spread disease and crypto is used for all kinds of unsavory things; criminals use it to launder money, terrorists use it to make payments but both also appear to be indestructible if you chop off a cockroach’s head it can live for up to a week.»
«And the same appears to be true for crypto in some ways. The industry’s head has been chopped off both, Chang Pang Xiao and bankman freed, the founder of the world’s biggest and second biggest cryptocurrency exchanges, are now awaiting sentencing for financial crimes and Regulators are stepping on crypto as well and yet Bitcoin ended 2023 higher.»
–
Why is crypto like a cockroach?
Los fondos cotizados en bitcoin y la oficialización de las criptomonedas – comment 501642
Su uso como sistema de intercambio, como moneda, parece limitarse a redes criminales.
Ahora mismo es más un valor sobre el que la gente invierte, no porque crean que vaya a tener utilidad en si misma, sino por motivos especulativos como reserva de valor, que ha mencionado Asier.
En todo tu artículo, si substituyes criptomonedas por «bombas de racimo» se mantiene perfecto el sentido…o su ausencia.
Salvo que unas son armas de destrucción masiva y las otras, armas de construcción masiva. Que tú juzgues todo un ecosistema en función que que lo usan algunos delincuentes no quita que te estés perdiendo todo lo que se puede generar con él y que es infinitamente mejor que lo que había…
La nueva revolución financiera que es DeFi también la están creando delincuentes?
En toda esta historia yo creo que hay que ir más allá de la criptomoneda, y comenzar ya a hablar de las plataformas de smart contracts, que incluyen criptomonedas, pero son libros de transacciones inalterables y distribuidos gracias a la criptología. Gestionan también títulos de propiedad y apps que no se pueden alterar, y pondrán a disposición de todos instrumentos financieros, pagos, envíos de dinero, apuestas, y cualquier otra cosa que se pueda comprar, vender y guardar a lo largo del tiempo. Sin intermediarios, y a lo largo de todo el tiempo que el smart contract lo codifique.
Eso es mucho más que una criptomoneda. Es dinero, finanzas, apuestas, títulos de propiedad o derechos de autor programable.
Si a mi me dan a escoger, entre un montón de Bitcoins que hoy valen 30.000.000 de US$, o un solar edificable en Madrid, que hoy vale 30.000.000, con la condición que no puedo venderlos hasta dentro de 5 años, con seguridad escojo el solar.
Claro está, que todas mis ahorros han sido en ladrillos y no me ha ido mal, puede que otro tenga otras experiencias.
Pues tan sencillo como mirar el historial de precio del bitcoin y compararlo con el ladrillo sin comentarios.
Leyendo los comentarios no entiendo la polarización que ocasionan as criptomonedas ni el esfuerzo de algunos en atacar y desligitimarlas. A quien no le interese o no crea en su propuesta de valor, por favor que lo ignore y siga con su vida.
«No hay mas desprecio que la falta de aprecio»
Con el tiempo se vera si se consolida la propuesta de valor y a que precio, como ha pasado con otras tecnologías en el pasado. Algunas llegaron para quedarse y otras desaparecieron. Y con eso se recopensó o penalizó a los visionarios que les dieron soporte.