Marcos Sierra, de Voz Pópuli, me llamó el pasado martes para adelantarme el aún embargado Informe Anual del Banco de España 2018, y para comentar especialmente una mención interesante que tiene que ver con los temas que tocamos habitualmente en esta página: los efectos de la tecnología en general, y del comercio electrónico en particular, sobre la economía. Ayer, Marcos introdujo algunos de mis comentarios en su artículo, coautoreado con Alejandra Olcese, titulado «Cada vez que compras por Internet y cumples años haces que baje la inflación» (pdf).
¿Juega el comercio electrónico un papel significativo a la hora de poner la inflación bajo control? En muchos sentidos, internet ha supuesto el desarrollo de un canal con una importancia cuantitativa progresivamente más importante, y con una serie de reglas propias características, relacionadas con la reducción de la fricción. Un entorno con una fricción menor hace posible unos costes inferiores para todos los participantes: el canal, como tal, es más barato para las compañías que los canales tradicionales, las operaciones se desarrollan con mayor eficiencia e imponen un control a todos los niveles, incluida la presión a la baja en los precios de la logística, y la posibilidad de comparación sencilla disminuye la claramente la propuesta de valor de muchos de aquellos competidores que podría tener la tentación de subir los precios.
Obviamente, ese mercado, como todo canal relativamente joven, está sujeto a una fortísima evolución: el primer resultado de la generalización progresiva de su uso y de su incremento de volumen es que la oferta crece, en muchos sentidos de manera desmesurada y sin control, lo que podría dar lugar a importantes cambios si algunas de las plataformas importantes, como es el caso de Amazon, decidiesen en algún momento, por motivos de optimización, dejar fuera a aquellas compañías que no obtienen un volumen mínimo determinado. Esto podría desencadenar una consolidación de la oferta en el canal electrónico, que sin embargo, seguiría tendiendo a una mayor eficiencia por efecto de la capacidad prácticamente ilimitada de comparación. Al tiempo, la generalización del acceso al propio canal electrónico da lugar a una presión a la baja en los precios de los canales tradicionales, que a pesar de la posibilidad de brindar un acceso inmediato a los productos, se encuentran en muchas ocasiones sujetos a fenómenos de comparación o de clientes que acuden a ellos para experimentar y tocar el producto, pero que lo terminan adquiriendo en canales online con precios más competitivos (showrooming), reforzando así su carácter anti-inflacionario.
El párrafo del informe del Banco de España en el que se hace referencia por primera vez al comercio electrónico como factor controlador de la inflación está en su página 166,
La llamada «revolución digital» se encuentra también entre los factores de carácter global que podrían estar induciendo presiones a la baja en la evolución de los precios. Por una parte, el desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación induce ahorros de costes de forma directa en la producción de los bienes y de los servicios de consumo genuinamente digitales (como el software o los servicios de comunicación), e indirecta a través del uso de estos como consumos intermedios en la producción de otros bienes y servicios de consumo. Por otra parte, además de los canales de costes, la generalización del comercio electrónico puede afectar a los precios de consumo a través de canales tanto directos (debido a los menores costes operativos de las empresas que operan por Internet) como indirectos (por la mayor transparencia de precios y el grado más elevado de competencia en los bienes y en los servicios adquiridos online). Una encuesta reciente del BCE a empresas no financieras del área del euro confirma que las nuevas tecnologías dotan a las empresas de una mayor flexibilidad para reducir sus costes.
En el fondo, bastante obvio: más transparencia de precios, menos costes de canal, más economías de escala y más competencia generan invariablemente precios más bajos, y eso alivia la inflación. Pero no es mala cosa ver los cambios que genera el desarrollo tecnológico en las páginas de un informe del Banco de España.
Cualquiera que haya vivido en pueblos o pequeñas ciudades antes y después de esta explosión del comercio electrónico le parecerá OBVIO, internet ha traido a los pueblos en ciertos sectores de consumo los precios que tenian las grandes capitales y eliminado algunos pequeños comercios que claramente abusaban de la falta de competencia cercana para poner precios que no tenian ningún sentido.
Luego algunos critican que compres online porque «puteas al pequeño comerciante» pues oye, que ese «pequeño comerciante» hubiera sido «honrado» en su momento y yo me preocuparía por él ahora quizá. (Que ya lo hago, soy muy dado a comprar en tiendas locales muchos productos, si el precio y el servicio es acorde, aunque el precio sea algo más alto dentro de lo aceptable y comprensible).
Pongo un caso, Una hermana mía quiere comprarse una tablet con pantalla sensible en la que pones una página de papel encima y pintas con un lápiz normal o un bolígrafo y el dibujo se trasfiere al ordenador.
Como yo soy el «experto» en informática de mi familia, la acompaño al Corte Inglés a ver ese aparato, para mi desconocido, Nos lo enseñan, pero vale unos 400 € y claro está, mi hermana se lo piensa.
A la salida del Corte Inglés, la comento, si decides comprártelo, seguro que lo encuentro por menos precio en Internet.
Evidentemente, si el precio que la consigo es 25€ s bajo, lo compra en el Corte Inglés, pues ella se fía mas de ese establecimiento y de su garantía postventa. que de un proveedor de Internet, pero si la diferencia de precio es mayor, no estoy tan seguro que siga fiel a ese establecimiento.
Esto es algo que también saben los comerciantes y ello tira de los precios hacia abajo, como tiran de los precios hacia abajo, las tiendas Mulalla en ropa femenina, los Oulet en las de productos de marca, los todo a 100 de las ferreterías, o los mercadillos en las frutas y verduras.
Siempre un nuevo canal competidor frena la escalada de precios, porque, (afortunadamente), los consumidores somos muy sensibles a ello.
Gorki, a lo importante, ¿a cuánto lo has conseguido?
Y más importante todavía: ¿qué invento del demonio es ese? Porque no será un Telesketch…
Jajajaja, será una Wacom o tableta digitalizadora similar, ¿no? :-)
No acabo de ver qué será eso, aunque sí pinta parecido a una tableta digitalizadora. Por mi parte, tengo una tableta Samsung Galaxy Tab S3 que hace un año costó poco más de 400 euros (en oferta, porque estaba a punto de salir la S4 que alcanzaba entonces casi los 700) que funciona con un puntero especial -parecido al de Apple- y es una maravilla: sobre su propia pantalla puedo escribir -y escribo- notas manuscritas, puedo anotar a mano sobre un PDF… Por supuesto, puedo también dibujar y es muy apta para eso que es ahora tanta moda, el sketching o para llevar un diario de viaje. Las propias aplicaciones de Samsung para estos efectos son fantásticas, pero si aflojas un poco de calderilla y te haces con la versión completa, directamente levitas.
No, es algo de este tipo, pero en barato, (solo es el «teclado» de este aparto), pero que funciona pintando con cualquier bolígrafo, rotulador e incluso con difuminos. Se les pone una especie de anillo y con la sensibilidad de la pantalla y la triangulación del anillo se hace el resto y si lo utilizas boca abajo (goma de borrar), borra..
https://www.youtube.com/watch?v=qnWG0icKqnU
Encontré lo que quiere mi hermana
https://www.youtube.com/watch?v=LMouEdyw3gI
Puesto a hacerlo barato aquí tienes una página que te explican como
http://www.maspixel.com/2011/09/pasar-una-imagen-de-papel-a-digital/
Escqanear un dibujo ya olo hace ahor4a como lo contrario mandarla por teléfono a un empresa de fotocopiadoras para que se las saque en formato A3
El problema es pasar el dibujo a la vez que se está creando
El BdE todavía no ha pedido perdón y rectificado por instigar la burbuja de crédito e inmobiliaria.
En economía y especialmente en monetarismo, existe el equivalente al principio de incertidumbre de Heissenberg: cuando quieres observar al electrón, cambias su posición.
La inflación es una víctima por ser un objetivo de la política monetaria, la cual persigue al conejo equivocado y sigue en trampa de liquidez, el no tener efecto sobre la economía real.
Mejor hablar de «presión a la baja de los precios» en vez de hablar de inflación, que si se fijan, es lo que hace el BdE en el extracto.
Como economista considero un enorme error que fomenta ciclos económicos keynesianos, el no meter en la inflación el efecto riqueza sobre el consumo. Por ejemplo, la subida de precios de la vivienda debería ir acompañada de aumento de sueldos, pero en cambio el BdE adviErte del aumento del endeudamiento.
¡QUÉ LISTOS!
Buén día. En esta nota, un economista habla de la verguenza profesional de (…entre otras…) esa crisis:
Los peores errores cometidos por los economistas y cómo los quieren enmendar
Si PPSOE quieren volver a repartirse el pastel, o seguir haciéndolo, más les vale no jugar a la ruleta rusa con las cajabancos y el mercado inmobiliario, que luego vienen las hostias, parafraseando a la difunta Rita Barberá.
Cuidado con confundir decisiones políticas con «económicas». En Caja Madrid solo hubo 3 consejeros que entendieron que la visa deja rastro y no sirve para pagar en negro.
La economía es una ciencia política, pero aquí el que toma las decisiones es quien es elegido en las urnas, y en todo caso, es el que se lleva el mérito o paga el precio de las consecuencias.
¿Cuantos millones de puestos de trabajo ha prometido el PPSOE esta vez?
Un cordial saludo
A mi lo que me preocupan son los monopolios. Cuando la competencia caiga como fruta madura los precios de internet volverán a subir, porque ya no tendrán alternativa.
Ya lo estamos viendo en las telecos y en las eléctricas. Cuando unos poco dominan el cotarro comienzan a subir los precios.
Hola Enrique,
Me ha gustado tu artículo mucho, ya que me dedico al comercio electrónico. Hay muchos que deben pedir perdón todavía, pero es que ya querer parar algo como comprar por internet…¡Vergonzoso!
Deberían de aprender a saber qué es internet y cómo utilizarlo.
En general lo bueno que tiene internet es que te da la oportunidad de encontrar una referencia de precio de forma sencilla y si vives lejos de una gran ciudad si que es verdad que puede ser cierto lo que dice ignasi.
Pero la realidad es que en un 95% de las veces siempre he conseguido mejores precios (o similares) en tienda física. Además de la ventaja de ver el producto real y no una foto. Por lo que en mi caso, si es cierto que sirve para bajar precio y sujetar la inflación. Así las tiendas que están al lado de casa no tienen que cerrar. Si tienes la ventaja de vivir en un pueblo, siempre tendrás un huerto tuyo o puedes acceder a productos locales que esos si son infinitamente más baratos y de mejor calidad
La inflación es un impuesto más a tus ahorros, una forma de recaudar que consiste en imprimir dinero de forma que el que tienes vale menos (menor poder adquisitivo) porque hay más en circulación. Los bancos centrales y los estados los los principales beneficiarios de este mecanismo que incita al endeudamiento y a hacer inversiones especulativas (buscando reservas de valor mejores que el propio dinero). De hecho uno de los ‘trabajos’ de BCE es mantener la inflación en torno al 2% anual.
Frente a esta dinámica inflacionaria que beneficia a quienes primero reciben el dinero recién impreso (bancos y estados), hay dos fuerzas deflacionarias muy fuertes hoy en día: en avance tecnológico y la mano de obra barata que se incorpora del tercer mundo: ambos hacen que los costes de producción y por lo tanto precios finales (si hay competencia) caigan en picado. Pues bien, a pesar de ello seguimos teniendo inflación, y en algunos países hiperinflación, lo cual da una idea de cómo se gestiona la creación de dinero.
Por lo tanto lo del comercio electrónico no es más que un aspecto del avance tecnológico generalizado que está siendo probablemente la mayor fuerza deflacionaria que tenemos hoy en día.
«¡Qué bueno que el comercio electrónico alivie la inflación!» NO, el sistema está diseñado para que haya inflación en cualquier caso. Echad un vistazo además a qué es lo que sube de precio y qué es lo que baja de precio: lo necesario (salud, educación, hogar, comida) sube y lo accesorio (coches, ropa, móviles, juguetes, televisores…) baja, con lo cual quien menos tiene no puede soportar la inflación generalizada ni aunque su sueldo suba al ritmo de la inflación.
Lo necesario sube y lo accesorio baja. Dice un comentarista. Supongo que el comercio electrónico se centra en lo accesorio. No deja de ser muy diferente con las tiendas reales, ¿donde se concentran las que venden «accesorios»?
La inflación, como los dragones de Daenerys, no entienden de ciudadanos buenos y ciudadanos malos. Pero se alimenta que da gusto de los excesos consumistas de unos y otros. El comercio electrónico, como las redes sociales con la información, pueden provocar fuego «normal» e incluso valyrio o simple aire caliente.