Política, noticias y redes sociales

How the new digital grassroots is reshaping politics - The EconomistJames Badcock me cita hablando sobre la interacción entre redes sociales, noticias y política en su artículo en The Economist titulado «How the new digital grassroots is reshaping politics«, en el que se plantea las posibles formas de lidiar con las noticias falsas en un escenario en el que un porcentaje cada vez mayor de ciudadanos se informa en las redes sociales, lee noticias, las comparte y, en cierta medida, cambia de opinión sobre diversos temas en función de lo que lee.

En palabras de Tim Cook, CEO de Apple, «fake news is killing people’s minds«, y son precisas respuestas que vayan desde la tecnología y la ley, hasta campañas educacionales masivas que puedan concienciar a los ciudadanos de todos los segmentos sociodemográficos sobre la importancia del problema de las fake news.

Facebook, la misma compañía que se preciaba de haber influenciado la primavera árabe, no puede ya seguir negando su responsabilidad. Un número creciente de norteamericanos la consideran el medio de comunicación en el que se informan de cada vez más cosas a pesar de los esfuerzos de la compañía por negarlo, y ven cómo esos nuevos hábitos de adquisición de información, que podrían servir para dar acceso a noticias más plurales y variadas, para enriquecer puntos de vista y ayudar al desarrollo del pensamiento crítico, se convierten en realidad en campañas planificadas de intoxicación colectiva apoyadas en las características del medio.

No, la respuesta no es simplemente esperar a que las compañías tecnológicas aparezcan con una varita mágica que elimine el problema, porque para solucionar ese problema van a hacer falta muchas cosas más. No es tan sencillo como decir «prohibimos las noticias falsas y echamos a los que las publican», porque el problema tiene demasiados matices importantes que no pueden ser simplemente ignorados o minusvalorados. Va a ser necesario que desarrollemos nuestro sentido crítico y nos convirtamos en fact checkers a tiempo parcial, al tiempo que nos preparamos para una era en la que el activismo será más necesario que nunca.

 

 

This post is also available in English in my Medium page, “Politics, news and social networks«

 

14 comentarios

  • #001
    marcelo - 13 febrero 2017 - 12:50

    resulta gracioso ver ahora a los medios de comunicación «tradicionales» rasgarse histéricamente las vestiduras con las noticias falsas que proliferan por la red cuando ellos llevan siglos manipulando y mintiendo a su antojo para favorecer y protejer sus intereses siempre que lo han considerado oportuno. Estos fariseos, presuntos paladines de la verdad, ven horrorizados como su privilegiada posición (y sus magníficos sueldos) se están yendo por el sumidero porque la gente ya no compra ni lee sus productos y prefiere creerse cualquier mierda que le llegue por el FB y que confirme sus prejuicios y creencias.

  • #002
    Gorki - 13 febrero 2017 - 13:15

    Nunca comprenderé el por qué este afán de censurar las conversaciones que MIS AMIGOS digitales tienen CONMIGO. ¿Les preocupa la calidad de lo que me comunican, o que quieren es que no me entere de lo que ellos piensan?

    Sinceramente, preocupense los dueños de las redes en EVITAR la publicidad engañosa que me mandan sin que yo la pida y déjenme A Mí el trabajo de EVITAR amigos que me engañan.

    • Enrique Dans - 13 febrero 2017 - 13:27

      Gorki, algo no has leído bien. Nadie pretende censurar ninguna conversación con tus amigos. Nadie. Si tu amigo quiere inventarse una noticia y decir que el papa ha prometido la salvación eterna a los que voten a Trump, y enviártela junto con su comentario entusiasta, podrá hacerlo. Te la enviará, y la verás. Faltaría más. Si tu amigo no se inventa la noticia, sino que la ve por ahí, y te la reenvía, también la verás, como cualquier cosa que un amigo te envíe. Pero si la noticia inventada es compartida por cada vez más gente hasta el punto de que sube a los trending topics o hace saltar una serie de alarmas, un sistema de fact-checking que incluirá seguramente las opiniones expresadas por los usuarios, las listas negras de publicaciones que suelen generar noticias falsas, las listas negras de noticias mantenidas por diversas publicaciones y posiblemente otros mecanismos basados en machine learning, y etiquetará esa noticia como falsa. Es decir, te seguirá llegando, pero con la correspondiente etiqueta. Además, se eliminará la posibilidad de que alcance los trending topics para evitar su difusión adicional, se limitará la recomendación algorítmica para que no la veas si no ha sido expresamente compartida contigo, y se suspenderá la cuenta de quien la publicó originalmente en el sistema de publicidad de la red social para evitar que capitalice beneficios distribuyendo basura.

      ¿Así te vale, o lo sigues considerando una intromisión en las conversaciones con tus amigos? Ya sé que cuando un amigo en un bar te cuenta un bulo como si fuese cierto no te llama en ese momento Mark Zuckerberg a tu móvil para advertirte de que es un bulo, pero no me parece una mala solución…

      • Gorki - 13 febrero 2017 - 14:54

        En lo del «trending topic» de acuerdo ¿queda alguien que a estas alturas los siga?.
        De lo que me quejo, es que de lo que en lo que no les compete, lo que me envía uno de mi grupo, me ponga una nota diciendo, ¡Ojo! lo que te cuenta tu amigo es falso, pero en cambio. me ponga anuncios diariamente que no he pedido de Wolkswagen, pero no lo acompañe de un mensaje que diga ¡Ojo!, que esos coches contaminan mucho.

        Veo una postura tremendamente hipócrita en ello y no les doy por ello, el menos valor moral como censores de nada.
        .

        • Javier - 13 febrero 2017 - 16:23

          Facebook es una empresa pública. Cotiza en bolsa. Responde a los intereses de dos de sus tres patas:

          1- Inversores (Este)
          2- Usuarios (y este)
          3- Anunciantes (NADA)

          ¿Juicios de valor en un negocio legal? ¡WTF!

          • Gorki - 13 febrero 2017 - 18:28

            ¿Y tu quieres que una empresa que cotiza en bolsa y Responde a los intereses de inversores y anunciantes, tome el papel de Torquemada?
            .

  • #007
    Carlos Quintero - 13 febrero 2017 - 13:49

    Yo tampoco acabo de ver el problema, seguramente me estaré perdiendo algo dado el revuelo que se está levantando, pero a mi en Facebook mis amistades cercanas o remotas no me envían noticias, y si me llegan sus opiniones políticas pues ya sé de qué pie cojean y si se ponen muy pesados les silencio o les doy de baja la amistad.

    Luego está el tema de decidir qué es verdad y qué mentira, o manipulación, o titular tendencioso. Cuando yo era pequeño un día mi padre me envió al quiosco a comprar El País mientras él me esperaba en el coche. La del quiosco me dijo que no quedaba El País, así que yo, inocente de mi, le pedí otro, que resultó ser el Ya. Al volver al coche mi padre me explicó que no era lo mismo un periódico que otro, y que cada uno había que leerlo con un filtro, porque cada noticia se podía contar de distintas maneras… ahí aprendí yo que no había una verdad absoluta en las noticias.

    Y finalmente, si uno decide informarse por un solo medio, sea la barra del bar, Facebook o el periódico que sea, pues allá él, pero hoy en día es bastante más fácil informarse por más canales que nunca.

    Fomentar el espíritu crítico sería lo más importante, y sirve para todos los canales.

    • Enrique Dans - 13 febrero 2017 - 13:54

      Pues ahí está! Tu padre sabía que las noticias hay que leerlas con un prisma determinado según de donde vengan. Pero si tú y cada vez más gente lee en Facebook, que no lo olvides, no es una fuente a la que puedas adscribir una credibilidad determinada, sino una plataforma en la que caben todas las fuentes (y no puedes, por tanto, aplicar ese prisma porque hay de todo como en botica), la mayor parte de la gente lee la noticia sin saber de dónde diablos viene, y los prismas funcionan peor o se usan para reforzar creencias y visiones previas que cada persona tenía. Por eso lo que hay que hacer es buscar un sistema que sustituya el valor que antes tenía la cabecera, y por tanto, etiquetar las noticias como falsas si podemos comprobar que lo son, para evitar que alcancen una circulación que no les corresponde y que cuando salían en el quiosco bajo la cabecera de «El caso» o del «Morning Singer Post», no alcanzaban porque todo el mundo sabía de qué estábamos hablando…

      • Gorki - 13 febrero 2017 - 15:06

        No pretendo saber como se entera la gente de las cosas, pero yo cuando leo algo en FB si tengo en cuenta la firma de quien lo envía. Es mas, por diversos motivos sigo a personas cuya opinión la valoro en poco, cuando me llega una noticia a través de esa fuente generalmente la salto, independientemente sea valida o falsa lo que cuentan, ¿Quién ha dicho que yo no se poner el prisma adecuado de acuerdo con el origen de la noticia,

        Otra cosa es que hayan engañado a un amigo, lo que aun no siendo tonto puede ocurrir. Yo alguna vez me he leido en primera instancia una noticia de «El Mundo Today » y me la he creido y he estado a punto de retuitearla. Pero no creo que pese a ese riesgo, deba venir el GRAN HERMANO a avisar que eso es falso, porque no me creo su imparcialidad en los avisos.

        .

        • Xaquín - 14 febrero 2017 - 21:01

          Pienso que estais de acuerdo en lo básico: nadie debe censurar lo que dice un amigo (ou un enemigo) y se necesita criterio para delimitar la proporción de verdad que puede tener lo que dice un amigo (o un enemigo). Aquí empieza la discrepancia, en los métodos de «delimitación», ya que los expertos en tales cosas (sean humanos o máquinas) suelen caer en las normas establecidas por los poderosos.

          En los comentarios a los espectáculos políticos de estes días (congresos y encuentros de alcaldes) hubo de todo, en analógico y en virtual, nos toca delimitar al personal lector lo que queremos considerar verdad y lo que no. No debe ser cosa de intermediarios…

          De todas formas avanzando en las maneras, no me parece mala idea que las noticias lleven algún tipo de etiqueta informativa (el problema se repite: quien la escribe?).

  • #011
    Juan Navidad - 13 febrero 2017 - 18:33

    Creo que es una cuestión de tres cosas: educación, cultura y olfato. En un mundo en el que en todos los países los poderosos llevan décadas fomentando el borreguismo ahora no podemos quejarnos de que la gente no tiene en criterio suficiente. ¿Debe ser el criterio justo para votar lo que les interesa sin pasarse de borregos?

    Las propias familias por ejemplo, en España, están aleccionando desde la cuna a sus hijos para que sean unos dependientes, inmaduros, incapaces, sexistas, que no lean, que no estudien demasiado, que no se formen… ¿Y ahora nos hacemos cruces porque puedan votar a cualquiera?

    Me contaba una amiga que en en noviembre una amiga de ella hispana había votado a Trump, pensando que iba a ser bueno para ella. Una de las primeras órdenes ejecutivas que ha firmado ha cancelado precisamente algo que ella necesitaba. Por lo tanto, que cada uno sienta en sus carnes el peso de la ignorancia.

    Se puede educar en el criterio, se pueden ampliar las miras de la gente, pero no se puede hacer solo desde la ciencia, sino que habrá que apoyarse para ello en la filosofía, la poesía, la Historia, la literatura… Todo lo demás que el sistema desea que aprendamos está bien para encontrar un trabajito cualquiera y que nos exploten, pero no para pensar por nosotros mismos.

  • #012
    menestro - 13 febrero 2017 - 20:01

    Una colorida pincelada, que ilustra como el periodismo está perdiendo la credibilidad a pasos agigantados.

    Titular:

    «El uso del móvil tendrá efectos en nuestras conexiones neuronales»

    (Terror. Shock. El cerebro se ve alterado por el móvil.)

    Respuesta real del entrevistado:

    «Bueno… Lo que sabemos es que si uno lleva a cabo un comportamiento de manera repetitiva eso deja una impronta en el cerebro. (…) puede que sea algo positivo. Mire usted por ejemplo lo que sucede cuando se aprende a tocar un instrumento musical o a escribir a máquina: la persona desarrolla zonas del cerebro que antes no utilizaba, realiza nuevas conexiones neuronales que antes no hacía.»

    Pregunta del periodista:

    Y esos cambios en el cerebro fruto de las nuevas tecnologías ¿serán permanentes, serán cambios a nivel biológico?

    Respuesta del entrevistado:

    (…) Pero eso no significa que las nuevas tecnologías vayan a producir cambios en nuestra anatomía cerebral.

    El periodista insiste en el tema:

    Me refería a si los niños del futuro nacerán con un cerebro ya adaptado a las nuevas tecnologías, a los teléfonos inteligentes…

    (Teratogenia de las nuevas tecnologías. Fino filipino.)

    Respuesta del entrevistado:

    – «No. Eso serían cambios biogenéticos, y no es a ese nivel al que se producen los cambios por un comportamiento repetitivo.»

    El periodista sigue insistiendo en una alteración neurológica fruto de las nuevas tecnologías, y el entrevistado, desorientado, acaba por confesar que no sabe qué responderle.

    Sinopsis de la entrevista:

    «Futuro premio Nobel de Medicina, advierte sobre los efectos permanentes de las nuevas tecnologías en el funcionamiento de nuestras sinapsis neuronales. «

    Toma jeroma.


    Disclaimer.

    La facultad de periodismo también altera las conexiones neuronales, a tenor de la evidencia empírica que se ve.


    «El uso del móvil tendrá efectos en nuestras conexiones neuronales» – 13/02/2017

  • #013
    Lope - 13 febrero 2017 - 22:21

    Es curioso, uno de los enlaces que citas, The Economist, cita un caso de «fake news» que es en efecto una noticia falsa inventada por Megyn Kelly (ex reportera de la Fox) haciendo un burdo copia y pega (descontextualizando unas declaraciones y poniéndolas en otro contexto).
    Es el perfecto ejemplo de «fake news», pero protagonizado y amplificado por «Mainstream Media», contra los medios independientes, una vez que han descubierto que sí tienen un impacto en la opinión pública.

  • #014
    Alejo Rodríguez - 14 febrero 2017 - 11:55

    Hasta que la inteligencia artificial lo supla.. no hay nada tan potente como una comunidad activa que audite cualquier tipo de contenido..

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