Vale la pena leer el interesantísimo reportaje de Monte Reel que fue portada en Bloomberg Businessweek la semana pasada, «It’s not spying if they’re always watching«, en el que describe cómo desde principios de este año en Baltimore, la policía se ha dedicado a experimentar con un sistema de vigilancia aérea mediante avionetas, adaptado de los tiempos de la presencia militar norteamericana en Iraq, sin informar en ningún momento a los ciudadanos de la existencia del programa.
La avioneta, una pequeña Cessna equipada con una serie de sofisticadas cámaras, captura hasta diez horas al día un área de unos 80 kilómetros cuadrados y transmite continuamente imágenes en tiempo real a una serie de analistas en tierra, que lo archivan y revisan si es necesario. El sistema, comercializado por la compañía Persistent Surveillance Systems, es utilizado rutinariamente para la investigación de todo tipo de crímenes, desde robos hasta tiroteos, o eventos como manifestaciones o protestas que puedan resultar acompañadas de desórdenes públicos.
El creador de la compañía, que desarrolló en su momento el sistema para tratar de localizar a quienes ponían bombas en Iraq para activarlas al paso de convoyes militares estadounidenses, y que trabajó durante un tiempo revisando desde el aire la actividad de los cárteles de la droga y el crimen organizado en Ciudad Juárez, buscaba una ciudad en la que poder comercializar el sistema para su uso civil y que le sirviera como elemento para convencer a otras ciudades. Describe el sistema como «un Google Earth con función de TiVo», mapas sobre los que puedes rebobinar.
Aunque la calidad de las imágenes obtenidas no permiten reconocer personas, ni siquiera en muchos casos modelos de vehículos, sí pueden localizar el momento de una explosión o de la comisión de un delito determinado, localizar a las personas o vehículos cercanos, y dar marcha atrás en el tiempo para averiguar datos sobre su procedencia, movimientos previos, etc., y eventualmente, obtener imágenes de calidad suficiente como para practicar una identificación revisando las imágenes captadas por cámaras en tierra en los momentos en que el sistema informa que la persona ha pasado por delante de una o varias de ellas.
Un auténtico ojo en el cielo capaz de seguir las evoluciones de las personas en una ciudad durante horas, que presuntamente no infringe directamente la legislación porque no permite más que seguir a pequeños pixeles no identificados, pero que, adecuadamente coordinado con otros sistemas, permite un nivel de control absolutamente insospechado. Consultado sobre el reportaje tras una rueda de prensa de la policía al respecto, el alcalde de Baltimore respondió a las críticas afirmando que
«Hablamos de tecnología para la seguridad pública: no se trata de espiar o de seguir a nadie, sino de atrapar a aquellos que deciden causar daño a los ciudadanos de nuestra ciudad.»
El futuro es esto. Ciudades monitorizadas de manera constante desde el aire y desde todas partes utilizando combinaciones de cámaras y sensores ubicuos, de manera cada vez más precisa a medida que el desarrollo tecnológico lo permite. Las redes de cámaras en tiendas, propiedades privadas y lugares públicos ya pueden permitir descubrir la identidad de una persona incluso aunque su rostro no se vea claramente o esté oculto, utilizando patrones biométricos que alimentan algoritmos de machine learning y comparan con otras imágenes obtenidas en otros momentos. La biometría ha generado un ecosistema en el que lo primero que va a hacer nuestro iPhone si nos lo roban es transmitir las huellas, imágenes, vídeos o audio de la persona que lo tiene, por si pueden ser utilizadas para su identificación.
¿Un mundo más seguro? ¿Una pesadilla orwelliana? ¿La prolongación hasta el infinito de aquel razonamiento que afirmaba que «si no tengo nada que ocultar, no tengo nada que temer«? Las percepciones de la sociedad sobre este tipo de temas están evolucionando a gran velocidad, a medida que la tecnología ofrece nuevas posibilidades. ¿En qué dirección crees que lo están haciendo?
This article is also available in English in my Medium page, “What’s the difference between spying and surveillance?«
Creo, con honestidad, que el blog se te va a llenar de gente con problemas para separar sus miedos de la realidad.
Internet es un imán para personas con ese tipo de fabulaciones. Antes era el área 51, y ahora, la vigilancia indiscriminada y las maquinas que te roban el alma cuando fotografían tus datos. ‘Porque el producto eres tú’, que ya es un eslogan publicitario de L’oreal.
El miedo y la ignorancia nunca son un buen coctel. Y divulgar, debe consistir precisamente en lo contrario. Supongo que si al coctel de los drones le añades AI, ya tenemos de vuelta a la aldea al ‘moderno prometeo’.
No veo de que forma se puede explicar, que sencillamente son solo una proyección de esos miedos sobre la tecnología, no una posibilidad que tenga sustento real.
La cantidad de artefactos para garantizar la seguridad que no dejan de ser parte de un bestiario medieval no tiene fin. Y si además consigues un contrato público para impulsarlas, ya ni te cuento.
Es difícil tratar de desenredar la madeja de esos temores, y son la semilla de racionalizaciones sin freno.
Como todo en la vida, se trata de una evolución más del control que hacen los sistemas sobre la sociedad. Si retrocedemos en el tiempo el DNI se comenzó a utilizar en 1944, y por aquel entonces la información se guardaba en papel, con lo cual hacer búsquedas o sacar información era muy complicado.
Con las nuevas tecnologías, esta claro que cada vez los gobiernos y las empresas tendrán mas datos sobre la población y sobre nosotros mismos.
A nadie se le escapa que esto es buenísimo por ejemplo para controlar el crimen organizado o cualquier tipo de corrupción. Ahora bien al mismo tiempo estamos seguros que cuando existan intereses se utilizará para su beneficio.
¿Una avioneta con cámara para controlar la corrupción, José Luis? :-)
De qué estamos hablando exactamente…
http://elpais.com/diario/2001/02/13/ultima/982018801_850215.html
En 1944 papel solo?, IBM al servicio del fascismo
2016 que hará? Programas de TV al estilo quiero ser millonario?
Saludos a las inteligencias superiores de este blog y sus honestidades.
Para mi vamos inevitablemente hacia una pesadilla Orweliana, porque en este área, si algo se puede hacer, se hará.
Pasaremos sin poderlo evitar, de atrapar delincuentes, a «prevenir» la delincuencia y de ahí, a vigilar sistemáticamente a cualquier opositor al gobernante de turno.
Insistiré una y mil veces: Orwell escribió 1984 como denuncia de los totalitarismos (el soviético principalmente) y quién va a replicar de manera mas fidedigna ese mundo que imaginó van a ser las «democracias» capitalistas occidentales.
Lo harán también las democracias occidentales, con las habituales disculpas de la droga y el terrorismo, pero quien se adelantará en su uso, son los totalitarismos actuales, China, Iran, Corea del Norte, …
Así es, pero de las dictaduras te lo esperas, es lo lógico … la inmensa hipocresía es que las democracias que viven clamando contra estas dictaduras (bueno, contra China no, que tiene mucho dinero) hagan exactamente lo mismo.
Como hacer comprender a la gente que no es lo que tu consideres que tienes o no que ocultar según tus criterios (de bueno o malo, por ejemplo), sino que se trata de lo que otros (con otros criterios, los suyos) digan que ocultas, con su control y sin tu apelación?
Considero que a los tontos útiles del «yo no tengo nada que ocultar» hay que explicárselo con sencillos ejemplos que hasta ellos puedan entender. Por ejemplo: «¿Que te da igual que te espíen las 24 horas del día porque no tienes nada que ocultar? Bueno … pues pongamos que vives en la odiada Venezuela. ¿Te sentirías tan tranquilo si fueran Maduro y compañía los que te espiaran las 24 horas del día y tuvieran acceso a todas tus conversaciones y busquedas?»
Es curioso… Sin saber nada de esto, hace mucho tiempo que procuro esconderme bajo un árbol —o lo que sea— cuando cualquier aparato volador va a pasar sobre mí.
No es porque tenga algo que ocultar, es simplemente porque me fastidia que «alguien» sepa dónde estoy. Por esta misma razón desactivo la geo-localización del móvil.
Manías que tiene uno…
Ánimo, se fuerte. Todo terminará pasando….
La avioneta del anuncio de Enrique tiene una resolución malísima, como él mismo comenta,, no entiendo el anuncio web que tienen, a quien van a convencer. Quizás algún municipio… Puede servir para dar marcha atrás a algún delito y dar pistas, poco más…. Pero entiendo que la aplicación USA es más apropiada para una agencia federal¿?
La solución buena que está en otros lados, tienen una resolución mejorada montada en drones. Pero acceso muy restringido a esa tecnología. Cuando vuelan sobre ti es imposible verlos. Es un puntito minúsculo, y pueden distinguir hasta una matrícula
El ejército americano tiene una app que te bajas y se puede ver algo parecido al google maps en tiempo real. Y sirve para saber como está un pueblo después de un ataque de Daesh. Están teniendo problemas porque se ha hecho muy popular. Hasta en publico.es salío una reseña.
http://www.publico.es/sociedad/asirios-iraquies-piratean-app-militar.html
Si la policía de Baltimore no tenía nada que ocultar, ¿por qué lo mantuvo en secreto?
No deja de ser curiosa esa manía de los espías y sus jefes de mantenerse ellos mismos y lo que hacen en el más absoluto secreto. Eso sí, al mismo tiempo nos aseguran que es buena cosa que ellos lo sepan todo sobre ti.
Creo que hay mil maneras más de espiar a la gente en vivo, no es algo tan alarmante y tal y como dice el primer comentario, se te va a llenar de opiniones de gente que tiene miedo al mundo en el que vivimos actualmente.