España es el único país de Europa con más de un millón de habitantes que no tiene todavía una ley de transparencia y acceso a la información pública.
Finalmente, tras sucesivos e impresentables retrasos, todo indica que el anteproyecto de la nueva ley de transparencia será aprobado por el Consejo de Ministros mañana viernes, y que los ciudadanos contaremos con un plazo de diez días para proponer aportaciones a un texto que se pretende presentar el próximo 17 de abril en la reunión del Open Government Partnership en Brasilia. Además, el propio desarrollo del texto se ha apoyado en un intenso trabajo de propuesta y supervisión por parte de organizaciones civiles como la coalición Pro Acceso, Pro Bono Público y otras, que llevaban ya mucho tiempo llevando a cabo un más que necesario activismo sobre el tema.
Es buen momento para que te informes y le des una lectura a los diez principios que deberían recogerse en la futura ley de transparencia y acceso a la información. Como bien dice José Luis Martí, profesor de Filosofía del Derecho de la UPF, «toda dominación social está basada en la gestión de la asimetría de la información«, y con esta ley de transparencia nos jugamos mucho como ciudadanos. Bien desarrollada y, sobre todo, bien llevada a la práctica, puede ser un instrumento fundamental en la evolución hacia una democracia más sólida y madura, en la que se empiece a considerar al ciudadano como algo más que un simple voto que se deposita cada cuatro años. No podemos seguir teniendo gobernantes que se amparen constantemente en la denegación, el silencio administrativo y el secretismo para ocultar información a los ciudadanos. La denegación de información y el secretismo deben ser la excepción, no la regla.
Para poner esto en marcha correctamente, lo mejor es tener ciudadanos informados. He tratado de componer esta entrada con los enlaces que me han parecido más relevantes, pero sin duda hay muchos más: añádelos, si lo consideras relevante, en los comentarios. En los próximos días, oirás hablar bastante de la ley de transparencia, y es importante que estés informado y que tengas posturas lo más claras posibles con respecto a la misma. Nos jugamos mucho.
ACTUALIZACIÓN: Marco Nurra ha adaptado, enriquecido y traducido esta entrada al italiano, podéis verla en «Spagna, Trasparenza e OpenGovernment«.
espero que sí, que oigamos hablar de ello; la Fundación CTIC publica un útil mapa de proyectos Open Data http://datos.fundacionctic.org/sandbox/catalog/faceted/
Access Info Europe y la Fundación Civio han desarrollado tuderechoasaber.es.
Una página web a través de la cual cualquier persona podrá enviar solicitudes de acceso a la información a cualquier institución pública española.
Habrá una presentación en Madrid el lunes 26 a las 20:00h en Utopic_US (Calle Concepción Jerónima, 22). A la que se puede apuntar uno en el siguiente enlace.
@tuderechoasaber
De nada sirven ni esta ni otras leyes mientras la justicia dependa de dinero que te puedas gastar en ella, y mientras los políticos sean una casta especial donde solo caben derechos nunca obligaciones. El cáncer de esta sociedad es el sistema político mientras no cambie todo seguirá igual.
Hola.
Otro ejemplo de falta de transparencia en España:
La Junta de Andalucía oculta el gasto de 20 millones destinados a los toros
http://www.pacma.es/n/12415/la_junta_de_andalucia_oculta_el_gasto_de_20_millones_destinados_a_los_toros
Esta noticia ha sido TOTALMENTE ignorada por los medios de comunicación.
Es vergonzosa la censura con la que nos están ROBANDO.
Saludos.
En respuesta al comentario 003 Enrique:
Precisamente la transparencia es muy importante para controlar y auditar las obligaciones y actuaciones de los políticos de los que te quejas.
Es un paso clave para poder cambiar cosas. No arregla todos nuestros problemas, pero decir que no sirve de nada es exagerar.
Este País nuestro es lo más parecido a una república bananera. Cualquier día, nuestros vecinos cambian los libros de texto para colocar el inicio de áfrica en los pirineos.
Nos lo hemos ganado a pulso con la impresentable clase política que tenemos y mantenemos.
Estoy totalmente a favor del «Open Government». Es imprescindible.
Lo que no se es si será sencillo conciliarlo con la ley de protección de datos…
La transparencia es otra cortina de humo para burlarse de los ciudadanos. Lo que hace falta es
1) INDEPENDENCIA DEL PODER JUDICIAL
2) Las contrataciones de obras no deben hacerlas los políticos, sino técnicos nombrados a sorteo para cada ocasión.
3) Los asesores deben ser técnicos, apolíticos y con plaza vitalicia ganada por oposición.
Yo no quiero políticos honrados, sino un sistema que no permita comportarse como sinvergüenza aunque lo seas. El sistema actual es tan corrupto que hace comportarse como sinvergüenza hasta a las personas honradas. Es el sistema lo que importa y no los políticos. Los políticos solo son actores, encantadores de masas, y lo que importa no es que el piloto sea muy bueno, sino que el avión tenga todos los elementos de seguridad imaginables y que pueda funcionar incluso con el piloto automático.
Es impensable que se cambie el sistema si no lo hace el pueblo en una revolución. En este sistema los políticos estñan tan cómodos que es impensable que lo cambien. YO también quiere poder robar un banco y con tal de que no me voten ya he cumplido, no tengo ni necesidad de devolver el dinero. Así viven los políticos en nuestro país y su único programa es convencer al electorado que los otros son todavía más corruptos.
En respuesta a Nacho 005:
Para lo único que creo creo y espero que sirva es para despertar al pueblo, si ahora nos cabreamos por cuatro cosas que ellos mismos nos dan a conocer cuando se nos informe de mas mas cabreo, pero como dice Juan 008 si tienen permitido robar, no pueden ser condenados, por el hecho de ser políticos. ¿Cuantos años llevan de retraso en la presentacion de cuentas en las subvención de los partidos? y existe,una ley que le obliga a presentarlas, porque tanto tiempo de retraso, pues porque ellos están fuera de la ley y si en algún punto están dentro la cambian y punto.
Mi padre, un hombre de 86 años y que gana con la edad, me lo ha explicado de una manera clara: somos los dueños de una hacienda, cortijo, terreno, o lo que sea; y para administrar ésta nuestra posesión, contratamos a alguien profesionalmente capacitado para ello, un administrador de fincas, un capataz, o una empresa,… Y ahora resulta que nosotros, los propietarios, para que nos enseñen las cuentas, nos vemos obligados a solicitarlas por escrito y el administrador ya verá qué es lo que nos enseña y qué es lo que se guarda en el fondo de los cajones, facturas falsas, deudas a proveedores de hace años sin pagar, etc., dosificando la información, falseando las cuentas.
Ha pasado el usurpador tanto tiempo administrando, que ha llegado a creer que es el dueño de la hacienda.
¿no sería cuestión de expulsar al impostor, denunciarlo ante la justicia por sus robos y contatar a otros administradores?
Pues eso es lo que no se nos mete en la cabeza, que la casta política no son nada más y nada menos que los administradores, defensores y representantes de nuestra propiedad. Nada más.
Soy pesimista, aunque reconozco que hay nbuena intención. La transparencia será una catarata de grandes números que no dirán absolutamente nada. La mordida, los fondos de reptiles, los «favores» a amigos y parientes, quedaran ocultos entre esas cifras, igual que ahora. Es un buen intento, pero mientras que políticos y empresarios se vallan de rositas y sisn devolver un duro, de nada valdrá esto.
¿Ha valido para algo que el plan E exigiera un carteel en el que costara el importe de la obra?. ¿Cree alguien que tal ingente cantidad de dinero, gastada en obras innecesarias, y en manos de nuestros «honrados ayutamientos», no ha producido ni un solo caso de corrupción?
Esta noche estaba oyendo en la radio una tertulia de tantas, la de Onda Cero, y me ha llamado mucho la atención, y la verdad es que me ha molestado bastante, que 2 de los 4 periodistas que tomaban parte parecían estar más preocupados por los inconvenientes de este tipo de leyes, que por sus ventajas.
Se supone que son periodistas profesionales, y ante una ley como esta, que por cierto les pilló, como suele decirse, «en bragas» (ni sabían de que iba eso de una ley de acceso a la información pública, ni sabían que iba mañana a consejo de ministros, ni tenían la más mínima idea de la situación española en comparación con otros países), y lo único que se les ocurre comentar (además de forma vehemente) es que una ley así no puede hacerse sin más porque «no hay funcionarios suficientes para responder a todas las preguntas tontas que podamos hacer los ciudadanos».
¡¡¡¡ Increíble !!!
Tanto me molestó que les envié un correo electrónico para quejarme (el segundo en 6 años, no es que me queje mucho pero esta vez me tocaron la fibra).
¿Periodistas? Ni por el forro. Y un pobre ejemplo de ciudadanos también.
Por cierto.
Algunos afirman que la cosa está tal mal que lo único que vale es quemar el edificio hasta sus cimientos y empezar de nuevo.
Pocos son los que lo dicen porque lo creen de verdad, para los más es sólo un truco muy viejo para justificar el no mover un dedo.
Cuidado confundir pesimismo con vagancia. No cuela.
Y que mas dara todo eso, si los que llegan a la politica no pueden ganar tanto dinero, entonces llegaran a politico aquellos que lo que quieren es dominar a los demas y dominar la sociedad, la Historia esta llena de esos totalitarios que entonces ni comen ni dejan comer, en comparacion es preferible los sanos ladrones de toda la vida
La falta de transparencia es algo que España viene arrastrando desde muchos años atrás. Antes cuando intentábamos ver como funcionaba la maquinaria que nos dirige, dábamos con las narices contra un muro de plomo. Ahora nos ancontramos con un cristal opaco y de diferentes colores.
Mi opinión es que si no hay nada que ocultar, ¿por qué no a la transparencia?.
Espero que mis hijos conozcan una democracia firme y verdadera.
El poder Legislativo, Ejecutivo y Judicial, está en nuestras manos:
1. Legislativo: presionar para que se redacte la ley sin injerencias de Estados Unidos y sus lobbys industriales: #nolesvotes
2. Ejecutivo: exigir que se apruebe: (este post)
3. Judicial: exigir que se cumplan: www.actuable.es/peticiones/tribunaldecuentas
La realidad es un ESPERPENTO. Human eats Human.
A mi el enfoque que veo no me acaba de gustar, me parece anticuado e insuficiente.
El enlace que das a la información oficial sobre el anteproyecto la verdad es que no dice nada sustancial sobre el tema, más bien se centra en amenazar con que le va a caer la del pulpo a los políticos despilfarradores, que gasten lo que no deben y bla, bla. Es decir, la transparencia se mete en un anteproyecto que se llama «Transparencia y Buen Gobierno» y el primer ítem parece merecer poca atención. Casi marginal.
Eso no es un buen comienzo. La transparencia de todas las Administraciones es algo fundamental, enormemente necesario, y merece una ley en exclusiva y bien pensada, no algunas disposiciones en una ley-batiburrillo.
El otro enlace sobre «los 10 principios» me parece bienintencionado y necesario, pero en absoluto suficiente.
No me lo parece porque, por un lado, consiste casi totalmente en principios muy generales (eso está bien, pero no basta) y por otra parte se centra en enfocar la transparencia gubernativa, en la regulación de la contestación a solicitudes individuales de información.
El enfoque de enfatizar el derecho a solicitar y obtener individualmente información de las Admnistraciones tiene probablemente sentido en su contexto original. Ese contexto es, según creo, el de las legislaciones al respecto de países anglosajones y nórdicos, que empezaron hace muchos años.
En ese contexto, tenía sentido: empezando porque hablamos de países con un concepto de la ciudadanía mucho más veterano y asentado, de épocas en las que la documentación que generaban las Administraciones era menos copiosa y masiva que ahora, y, sobre todo, de épocas en las que el tratamiento de esa información era manual y se almacenaba en archivos manuales.
Ninguna de esas tres circunstancias se da aquí y ahora: en España tenemos una tradición muy asentada según la cual las Administraciones y sus agentes no responden en plazo casi nunca (ni sufren consecuencias por ello) a las solicitudes en general que hacen los ciudadanos. Y muchos ciudadanos se siguen comportando como súbditos: ni saben exigir, ni han interiorizado sus derechos, o el hecho de que la Administración está para servirnos y no al revés. En cuanto a los tribunales, que son quienes deberian defendernos de eso… qué vamos a decir: Son la institucion estatal que peor funciona de todas. Como para defendernos de la desidia y el oscurantismo de las demás…
Es decir, si ahora p.e. una licencia de obras se puede tirar un año o dos sin expedirse (si a uno le toca la desgracia de vivir en determinados Ayuntamientos), y solo se agiliza en ese caso por enchufes, infinita insistencia y otros sistemas menos confesables… ¿qué motivo puede haber para pensar que ese Ayuntamiento se va a volver eficaz, diligente y honesto para contestar a un tocapelotas y darle información que en realidad no quiere darle? (porque si se la quiere dar de buena gana probablemente esa información no es interesante)
Ahora ya incumple la ley no expidiendo esa licencia, o no contestando un recurso en tres meses: y no pasa nada.
Ampliar ese derecho de solicitud particular a dirigirse a la Administración por más motivos, cuando no se cumplen los que ya hay, me parece inútil, y un ejercicio de «Aldea Potemkin» de libro. Espero equivocarme.
Porque además, tampoco se dan las otras dos circunstancias: la mayor parte, la inmensa parte de la información administrativa, no se almacena manualmente. Por supuesto, hay una parte que sí, y esa parte tendría que solicitarse y obtenerse individualmente a petición. Pero no la mayor parte. Y cada vez menos.
Una Ley de Transparencia que realmente supusiera un cambio político y cívico importante tendría que centrarse en exigir y enumerar la información que, por defecto y sin que nadie la tenga que pedir, debería estar accesible y publicada: es decir, en las páginas web de las Administraciones, esas que suelen ser tan inútiles y dedicarse al oropel y el ringorrango oficial.
¿Cual debiera ser el mínimo publicado por las Administraciones públicas? Es difícil hacer una enumeración adecuada para todos lso casos, pero algunos ítems son evidentes:
– El Presupuesto completamente detallado, hasta el máximo nivel de detalle, consultable tanto por programas como por naturaleza (es decir, que se pueda consultar p.e. tanto todas las partidas de gastos de un centro, proyecto o programa, como todos los centros, proyectos o programas a los que va un tipo de gasto).
– La ejecución y/o liquidación del Presupuesto, es decir, como se gasta e ingresa de verdad, porque al final eso es lo que importa, incluyendo ampliaciones, partidas no gastadas, deudas adquiridas y todo lo demás.
– Los informes de intervención o auditoría, los balances e inventarios al año, incluyendo activos y deudas de todo tipo. Las Memorias.
– Superimpoortante: las licitaciones, concursos y contratos. Los contratos enteritos con todas las cláusulas. Los pagos de los contratos.
– Los organigramas y efectivos de todas las unidades.
– Todas las estadísticas relevantes de los asuntos que lleva cada sitio. Con todos los datos de que se dispone. El apagón estadístico de las actividades estatales y autonomicas en España es más marcado cada año que pasa. En eso no se va para delante sino para atrás. Se trate de educación, sanidad, delitos, prisiones, demografía, impuestos… lo que sea, los datos estadísticos que se liberan son año tras año más fragmentarios, difíciles de comparar, tardíos.
En fin, seguro que hay muchas más cosas, dependiendo de qué se ocupe cada entidad concreta.
Pero lo que quiero decir es que la información de un expediente o tema concreto,a solicitud expresa, debería ser, no la norma, sino casi el caso especial.
Por defecto, todo lo que importa en cada oficina o unidad, deberia estar en internet (sin datos personales protegidos).
Disculpas por la extensión. Los comentarios tan largos se hacen casi inútiles.
Hay una cosa que me preocupa mucho en el anteproyecto de ley de transparencia, si leéis el artículo 17 apartado 4:
http://www.leydetransparencia.gob.es/anteproyecto/index.htm#AR17
viene a decir que establece rango de ley al silencio administrativo en una «ley de acceso a la información». O sea que si solicito información a una administración, simplemente no te contestan en 2 meses y se supone denegado tu acceso a la información.
Evidentemente, si no se modifica este apartado, todas las administraciones harán lo que hacen actualmente, no contestar y esta ley simplemente no valdrá para absolutamente nada.
Todavía está abierto el plazo para la consulta pública y solicitar cambios en el anteproyecto, en esta dirección:
http://www.leydetransparencia.gob.es/consulta/index.htm
es muy importante que consigamos que retiren dicho apartado si queremos poder tener acceso a datos públicos.