Según acaba de publicar Reuters, Amazon será objeto de una nueva demanda antimonopolio en la Unión Europea, que investigará algo completamente obvio: que la compañía favorece sus propios productos de su propia marca en su plataforma.
Aquí no hay nada que investigar: cada vez que alguien se mete en Amazon y busca cualquier producto, las primeras opciones son siempre, de manera sistemática, los productos de la propia Amazon, siempre que existan. Un comportamiento al que nos hemos acostumbrado desde hace mucho tiempo, y que de hecho, reporta a la marca cuantiosos beneficios, dado que la identificación generalmente positiva de la marca hace que sean percibidos como productos de cierta calidad.
¿De qué estamos hablando? Como es bien sabido, la legislación antimonopolio no puede castigar a una compañía por ser exitosa, por tener una cuota de mercado elevada o por competir mejor que otras. Lo que sí castiga, y de manera muy justificada, son las estrategias predatorias, es decir, apalancar esas posiciones dominantes para dificultar que otras compañías puedan competir con ella, y eso es exactamente lo que vemos aquí: una compañía que apalanca el funcionamiento de su plataforma para hacer cambios en ella y situar los productos de su propia marca sistemáticamente como la primera opción. Básicamente, lo que ocurre cuando eres el gestor de una plataforma exitosa, y decides además que tus productos se dediquen a «competir» en ella con los de otros fabricantes.
¿Qué ocurre en ese caso? Simplemente, que los productos competidores reciben un trato discriminatorio en la plataforma, lo que equivale a utilizar una estrategia predatoria para impedir que compitan en igualdad de condiciones con los de Amazon. En este caso, además, la cuestión es todavía peor: los productos competidores son obligados a pagar publicidad para conseguir aparecer en los primeros lugares de los listados, pero el primer lugar suele estar reservado para un producto con marca Amazon, que no paga publicidad, lo que crea una discriminación y una ventaja en costes.
Desde hace muchos años, las big tech obtienen buena parte de sus beneficios precisamente de esa estrategia: apalancar el poder de sus plataformas y beneficiar en ellas a sus propios productos. Esa ha sido la esencia de la mayoría de las multas que han recibido: Google ha sido multada en varias ocasiones por poner sus comparadores de productos en la búsqueda por encima de los de los competidores, Apple por favorecer sus propias apps en su App Store, Microsoft por integrar sus productos en su sistema operativo, y así sucesivamente. Sin duda, se trata de un patrón de comportamiento sistemático… y muy rentable para quien lo ejecuta.
Lo que ocurre es que, además, ese patrón no es exclusivo del mundo online: un supermercado es, a todos los efectos, una plataforma de distribución, y todos llevan años apalancando el poder de esa plataforma para averiguar qué productos de cada marca son más rentables, fabricarlos con su propia marca y distribuirlos a mejor precio situándolos en los lugares más privilegiados de sus estanterías. Un comportamiento exactamente igual de discriminatorio y predatorio, que sin embargo parecemos obviar y considerar como perfectamente normal.
La regla de oro está clara: si alguien explota una plataforma, nunca, bajo ningún concepto debería poder operar en ella de manera privilegiada ofreciendo sus propios productos. Si tu negocio es ofrecer una plataforma de venta online o física, no te dediques a vender en ella tus productos, porque el conflicto de intereses es ineludible e inevitable. Sin embargo, esa regla de oro lleva tanto tiempo siendo vulnerada de forma habitual, que parece haber perdido su sentido, y de ahí los problemas. Cuando empiezas a tolerar excepciones a esa regla, o cuando las multas por violarla no son suficientemente disuasorias, llegamos a la situación que todos conocemos, en la que cada uno hace con su plataforma lo que buenamente quiere y lleva a cabo comportamientos discriminatorios que favorecen sus productos e, implícitamente, perjudican a los de sus competidores. Gestionar la plataforma y operar con tus productos en ella: comportamiento de monopolio predatorio en estado puro. Ahora, vayamos a los supermercados a decirles que no pueden vender productos de sus propias marcas de distribución, a ver qué nos dicen…
Lo del «súper» es paradigmático… yo abro una tienda y no puedo poner en la puerta mis productos porque sería un mal competidor… la pescadilla que se muerde la cola… la mafia, que no puede vender protección, porque ella es precisamente la enemiga de los tenderos… y es que el súper lo puse para vender productos de otros, pero si descubro que yo puedo ser distribuidor privilegiado, por qué no evitarlo???… ¿los pongo al final del pasillo, para ser majo?
Y claro, de paso, le pago un buen salario al personal, para que me elogien las ONGs (que también tienen lo suyo!!!) por mi baja extracción de plusvalía… y, desde luego, no cambio cajeras por robots, porque eso es malo para la conciencia empresarial capitalista… ah, coño/pito, pero si es que estamos en un sistema capitalista… aunque sea estatal.
Pero ya los «socialismos reales» inventaron un disfraz muy interesante, empezaron a hablar de socialismo con rostro humano… ya tenemos la cuadratura de la circunferencia… y el capitalismo puede ser bueno, solo tiene que ser más católico… porque cristiano es totalmente imposible.
Eso es lo que esta pasando con las «marcas blancas » en los distribuidores «físicos» y no solo nadie se ha quejado, sino que de ello nos lucramos los consumidores.
España se convierte en el paraíso europeo de las marcas blancas: arrasan en lejías, lácteos y conservas
Pretende que Amazon no potencie los productos que desea vender, puede ser muy «justo», pero es ir en contra de lo que tradicionalmente hace el comercio, que es poner en los sitios de mayor visibilidad aquello, que por lo que sea, le interesa vender.
¿Para qué valen los escaparates , las «cabeceras de góndola», y el material «punto de venta», si no es para facilitar la venta de un producto, en detrimento de los productos de los competidores?.
No es necesario inventar nada, hay muchos ejemplos de cómo se debe solucionar eso: las compañías de luz tuvieron que desgajar sus negocios, por un lado la distribución y por otro la comercialización, RENFE tuvo que desgajar la gestión de la infraestructura en ADIF. Una cadena de alimentación/distribución no debería tener marca propia.
Es lo mismo. Podrían sacar sus productos sin marca en paquetes blancos. Lo fundamental es si el consumidor se fía o no del detallista que le ofrece el producto
Lo que no puedes hacer es fabricar un determinado producto y venderlo en una tienda abierta a todo el mundo, porque al final ofreces lo que más margen te da…
Para eso está la regulación si fabricas x no puedes vender otra cosa más que x. Con el mercado de internet, es que al final solo quedan 2 ó 3 grandes vendedores. Es decir monopolizas el mercado…
Por eso si vendes móviles, no puedes cerrar otro mercado paralelo, el de las apps, al libre mercado
Por eso si vendes Hacendado, es malo que vendas en tu casa Bimbo, Danone o cuaquier otra marca. Te debes limitar a vender tus marcas.
El mercado si no es competitivo no es mercado, y en eso no entra el Dumping, el comerte tu margen por sinergias de ventas, conduce al monopolio
Nosotros como consumidores,… ¿allá se maten? Pues si y no… si la fiesta lo aguanta cojonudo, lo que suele pasar es que al final se llegan a situaciones de monopolio de facto, y esa es la trampa del capitalismo…. ¿porque cuesta el paracetamol céntimos y el Gelocatil 10€? porque hay una regulación para servir a la Sanidad Pública… sin esa regulación os vendían el paracetamol en forma de supositorio a 20€ para vendertelo por via rectal…
No el capitalismo no es la ley de la oferta y de la demanda, que yupi! la competencia baja los precios. EL CAPITALISMO ES LA LEY DEL FARWEST que si necesitas la pastilla de los 1000€ y tienen la patente y Hepatitis C te jodes y pagas los 1000€
Es como la integración vertical de apple, desde el chip que diseñan ellos hasta el modem (si pudieran) sería hecho con productos propios para ahorrarse los márgenes de beneficio de los externos.
Pero bueno, aquí pecan de ilusos los legisladores. Es como si abro un concesionario multimarca y me dedico a vender solo BMW. Es cosa mía. Si la gente los quiere, bien por mí. Si la gente no los quiere, me j*do
El caso de amazon es paradigmático porque parece que te meten los productos por los ojos, pero para cualquiera que investigue un poco (por ejemplo, los mAH de cada pila) verá que es morraña lo que intentar venderte.
Mejor iría si bajas al mercadona a comprarlas. Más baratas, más rápidas y contratando gente local. Que pena que las pilas no sean de Hacendado, ¿no? Así serían mas baratas aun
Yo… hay una cosa que no me queda clara con esto de los antimonopolios…
Si Amazon, crea una empresa, por ejemplo, «SelvaNegra» y totalmente separada de la matriz y con ella oferta sus productos propios/patrocinados… no podría vender esos productos en la plataforma de Amazon exactamente igual que hace ahora?
Acaso los beneficios no seguirían yendo al mismo bolsillo (pero con distinto nombre)?
Acaso el publico, no acabaria sabiendo, que los productos «SelvaNegra», son de Amazon?
Acaso al publico no le importa tres pitos, si el producto es Amazon, SelvaNegra o DesiertodeGobi, mientras lo encuentre a buen precio y calidad exigible?
Matizar, eso sí, que en los casos tipo Google o Apple, que tengan la obligación de permitir otros markets que no sean los propios y sin sangrar con comisiones. Creo que es un caso diferente.
Y siempre que Selva Negra reciba las mismas condiciones que cualquier otro vendedor, tenga que hacer la mismas publicidad que ellos para alcanzar las primeras posiciones, se le cobren los mismos precios y comisiones, alles ist gut, todo está bien. Pero si no es así, multazo…