El enorme error del retorno a la oficina

IMAGE: Sean Pollock - Unsplash

Cada vez son más las compañías que se arrepienten de haber puesto en marcha políticas para el retorno a la oficina, el ya conocido como RTO o Return To Office, de sus trabajadores tras la pandemia.

Mientras compañías como Meta o como Zoom, uno de los artífices del movimiento hacia el trabajo distribuido, imponen a sus empleados algunos días de presencia obligatoria en la oficina y llevan a algunos a afirmar que el trabajo distribuido está muerto, otras empresas van dándose cuenta de que la realidad de trabajar ocho horas en un edificio de oficinas resulta completamente obsoleta tras haber comprobado que el trabajo se puede llevar a cabo de maneras mucho más racionales, y ven cómo sus trabajadores se rebelan contra ello anunciando dimisiones y protestas de todo tipo.

La batalla por la vuelta a la oficina solo está comenzando, y las compañías que obligan a sus trabajadores a hacer tal cosa se encuentran con la evidencia de que esa decisión responde únicamente a la existencia de una cultura de trabajo obsoleta, y de que, además, la decisión va radicalmente en contra de todo tipo de política responsable. La vuelta a la oficina es un desastre medioambiental: volver a un pasado de coches retenidos en interminables atascos, generando contaminación y frustración en trabajadores que ya experimentaron las posibilidades del trabajo distribuido es simplemente demencial, propio de directivos desactualizados que se confiesan incapaces de cambiar su cultura más allá del presencialismo.

La inmensa mayoría de los trabajadores no quieren volver a la oficina, y aquellos que de verdad pueden moverse por estar en alta demanda rechazan trabajar en las compañías que pretenden obligarles a ello. Eso genera un «efecto Mar Muerto» que hace que las compañías se queden únicamente con aquellos trabajadores resignados que no ven posibilidades de moverse en el mercado, generando entornos de trabajo empobrecidos en talento. Con los trabajadores más jóvenes pasa exactamente lo mismo: muchos condicionan el atractivo de un puesto de trabajo a la posibilidad de que permita el trabajo distribuido.

Mientras algunas compañías pretenden difundir la idea de que el trabajo distribuido genera productividades menores o falta de innovación, la realidad nos dice que lo que ocurre es que no se puede evaluar el trabajo distribuido con las mismas variables que se utilizaban anteriormente, y que un cambio de semejante dimensión y tan positivo para todos los implicados (y para el planeta) requiere un cambio cultural completo, que muchas compañías y la panda de inútiles que tienen como directivos están siendo incapaces siquiera de imaginar. Esas compañías, simplemente, pierden atractivo a la hora de atraer talento, con todo lo que ello conlleva.

El trabajo distribuido no tiene, en modo alguno, que significar menos trabajo o menos innovación. Si se hace bien, de hecho, implica lo contrario: empleados más satisfechos y motivados, que perciben una cultura de confianza que les permite conciliar mejor, y que, con las herramientas adecuadas, les lleva a sentirse mucho más útiles. Las culturas que promueven la vuelta a la oficina por encima de todo son, simplemente, propias de compañías obsoletas, que terminarán pagando el error que supone forzar a sus trabajadores a hacer algo que no quieren hacer. ¿Quieres arruinar tu compañía en el medio plazo? Pues dedícate a fastidiar y a martirizar a tus trabajadores obligándoles a meterse en un atasco por la mañana y en otro más por la tarde, en lugar de darles la libertad de trabajar desde donde quieran. Y ya verás qué bien te va.


This article is also available in English on my Medium page, «The huge mistake of Return-To-Office (RTO) policies»

29 comentarios

  • #001
    Xaquín - 18 agosto 2023 - 12:31

    Como todo, la solución suele darse en la gama de grises.

    Hay que moverse entre un extremo del agobio oficinil y la tendencia a engordar sentado en el sofá de casa (o la tumbona, aunque sea barata, de la piscina, aunque sea comunitaria). Eso sí, con el ordenata sobre las piernas.

    Además conviene tener un cúbiculo ad hoc, cerca del domicilio (para ir andando), porque el agobio caseril puede hacer bajar la eficiencia productiva. Sobre todo para la trabajador femenino.

    Yo soy de los que no confío en el empresario, «per se», pero tampoco en el trabajador «per se». Sobre todo, desde que se ha comprobado la inmensa cantidad de ofertas, que tiene la sociedad, para subir un escalón en la pirámide socical, aunque sea pisando alguna cabeza que otra de compañeros de trabajo.

    Lo de ser «trabajador» (ya ni digo obrero) está muy sobrevalorado. Por eso, cuando digo que somos una mediocre versión de homo sapiens, no me saco los datos del fondo del armario. Solo hay que observar el desarrollo diario de muchos «llamados» trabajadores.

    Porque, dado el tipo de sociedad que sufrimos, el nivel de subvencionismo barato «en mente», no se da solo en los llamados políticos.

  • #002
    Nortenio - 18 agosto 2023 - 12:39

    Creo que es absolutamente correcto lo que se señala en artículo. De hecho, ya hace tiempo que las empresas de selección ponen esa característica en los titulares de las ofertas. Es un gancho, es innegable, además funciona. Nosotros trabajamos así

    No obstante, este verano hemos tenido tres bajas en la compañía y una de ellas me confesó que necesitaba más contacto humano y fue una de sus motivaciones para irse a otro lado (dentro de un equipo autogestionado, manda guevs)

    Es un tablero nuevo y hay que entenderlo todo, no es fácil.

  • #003
    Lua - 18 agosto 2023 - 13:45

    Siempre voy a estar en favor de ese “teletrabajo”… por cuestiones de comodidad y porque no decirlo, también las medioambientales…

    Ahora bien. Desde que en estas líneas se hablo de ese teletrabajo (antes de pandemia) siempre he respaldado la opinión de que no todo el trabajo “puede” hacerse en remoto, y la peor/mejor, que no todo el mundo está capacitado para ese teletrabajo. Y lo apoyo con el mismo argumento de hace años: es muy fácil perderse en el camino de tu mesa a la nevera.

    Dejando de lado la exposición, cuando aquí se decía “el teletrabajo ha venido para quedarse”, también dije que eso era una falacia, alimentada por un proceso de pandemia (no deseada), y que, a la larga, todas esas “Big’s” que apostaban por ello, se iban a echar atrás.

    Y el tiempo, me ha dado la razón. Todas… TODAS.

    Lo razonable, seria no solo mantenerlo, sino fomentarlo. Pero ahí es donde entra la mentalidad del empresaurio. Quizás en USA, es mas fácil. En España, no solo es mas difícil, sino que estamos hartos de ver ofertas (de Infojobs, by ex.) donde se promete esa cualidad, que se acaba convirtiendo en “exigencia presencial”.

  • #006
    Sergio Espósito - 18 agosto 2023 - 14:15

    Se supone que los que abogan por volver a la oficina son los dinosaurios.

    ¿Lo son las Big Tech?

    PD: yo teletrabajo el 80% de la jornada y todos tan contentos

  • #007
    Benji - 18 agosto 2023 - 14:35

    Yo teletrabajo al 100% y no lo cambio por nada. De hecho, cuando me contactan por linkedin para modelos «híbridos» (3 días en casa, 2 en oficina) inmediatamente los descarto.

    Vivir a 500km es lo mejor que me podía pasar. Sueldo de capital en pueblo de provincia. Aquí he comprado un piso de 3 dormitorios por menos de 90k, algo impensable en Madrid. Y además como todos los meses puedo ahorrar, he reformado el piso y se parece al original como una castaña a un zapato.

    El día que venda de nuevo seguro que le saco un buen pico. Y todo gracias al trabajo en remoto.

    PD: Hoy no comento más, que me voy a la playa a disfrutar de salir del curro a las 15:00

    • Carlos Jerez - 18 agosto 2023 - 16:03

      Esa es una de las grandes razones. Encima si eres padre de niños pequeños ganas un tiempo vital. Creo entender que la conciliación familiar y la crisis demográfica (que da nombre a un ministerio) son bastante importantes.

    • Gustavo - 20 agosto 2023 - 12:55

      Idoloooo !!!!

  • #010
    JM - 18 agosto 2023 - 14:40

    Desde mi último cambio de empresa tengo teletrabajo al 60% además con la flexibilidad de poder extenderlo o reducirlo según mis necesidades de conciliación y las de la empresa (si surge una necesidad puntual de mayor asistencia a la oficina).

    De vez en cuando aunque me toque teletrabajo ese día voy a la oficina por saludar a alguien o porque me pilla de paso para algún recado.

  • #011
    Pablo Alonso - 18 agosto 2023 - 14:57

    ¿Tú vas al IE, Enrique?

    Saludos,

    • Enrique Dans - 18 agosto 2023 - 15:20

      Solo si tengo clase, y desde mucho antes de la pandemia. Trabajo desde mi casa, frente al jardín, viendo a los pajaritos…

      • Miguel GM - 18 agosto 2023 - 23:12

        ¿Porqué no hay clases virtuales?; se supóne que estás educando a una casta privilegiada que, a fuutro, dirigrá o fundará las empresas exitosas. Si los hacen ir a clases fomentan que es el mejor método de trabajo que existe.

      • Gustavo - 20 agosto 2023 - 12:56

        Idoloooo !!!!!

  • #015
    Ivan - 18 agosto 2023 - 16:59

    Tengo la gran suerte de trabajar en remoto. De vez en cuando hay rumores en radio patio diciendo que tendremos que volver a la oficina 2 dias a la semana o algo asi. Incluso se de gente que va a la oficina de vez en cuando para dejarse ver y que no nos castiguen con tener que ir a la oficina. Triste, pero cierto. Aun hay empresas que valoran la presencialidad como un sintoma inequivoco de que estas trabajando, y no te estas tocando lo que sea en casa. Me parece un poco cutre pensar que si no tienes a los trabajadores a la vista no van a trabajar y si fuera el caso en ese equipo habria un grave problema. No me parece mal ir a la oficina, muy de vez en cuando, para vernos y hablar en persona, para hacer equipo, pero no como mecanismo de control.

  • #016
    Juan T. - 18 agosto 2023 - 18:51

    Aunque se retrase por la inercia de costumbres obsoletas, todo aquello que vaya en contra de la retención de talento ( obligacion de presencialidad incluida ) está destinada a desaparecer.

    Cada vez será mas efectivo el trabajo en remoto, entre otras cosas por la inminente aparición de muchas herramientas de IA muy apropiadas para este tipo de trabajo, lo que hace que el remoto sea de mayor calidad y eficiencia,mientras que la inmensa mayoria de trabajadores susceptibles de trabajar en remoto lo prefiere así.

    Blanco y en botella.

  • #017
    C3PO - 18 agosto 2023 - 18:52

    INFORMACION IMPORTANTE

    Como este es un blog de Tecnología, os remito una noticia importante.

    Han robado la DB de DISCORD

    Si el password que usabais lo habéis reusado en otra aplicación, tenéis una brecha de seguridad importante

    • Javier - 18 agosto 2023 - 19:48

      El incidente de seguridad ha sido reconocido por la propia aplicación que, vale aclarar, nada tiene que ver con la compañía detrás de Discord aunque ofrece un servicio externo para sus usuarios

      Claickbait + no leer la noticia

      • c3po - 18 agosto 2023 - 20:44

        A ver el ataque es real y discord.io está caída en estos momentos y no puede ser usada.No es discord.com que si está funcionando. ¿afectada? no parece, salvo si…

        «Discord.io is a third-party service, with no official affiliation with Discord proper. The service’s lone purpose is the creation of custom URLs for individual Discord servers. These URLs allow the members of a Discord server to quickly and easily create a means for new members to find the server and join in, as well as make the process feel more like a personal invitation.

        According to the hacker «Akirah,» who spoke to BleepingComputer, Discord.io’s links were allegedly being used to connect to illegal and harmful content. «It’s not just about money, some of the servers they overlook are talking about pedophilia and similar things, they should blacklist them and not allow them,» they said.

  • #020
    Javier Lux - 18 agosto 2023 - 19:14

    Al final el empleado manda. Si su trabajo se puede hacer desde casa, eres bueno en lo tuyo y tu empresa te exige ir a la ofi, acabarás yéndote.

    ¿Y que pasa con toda empresa que pierde sus buenos trabajadores muy temprano(*)?
    O cambia o desaparece.

    (*) la inmensa mayoría de buenos empleados reciben ofertas que no podrán rechazar, más pronto que tarde.

    • Javier Lux - 18 agosto 2023 - 19:15

      Si no recibes periódicamente ofertas de trabajo, seguramente no serás muy bueno, o no trabajas bien tu marca en Linkedin.

  • #022
    Javier Cuchí - 18 agosto 2023 - 19:26

    No sé qué os pasará a los demás compañeros que estáis en la misma situación, pero la jubilación, si bien en parte te aleja un poco de la maquinaria que motoriza el mundo empresarial y laboral, también abre mucho las perspectivas como observador: es cambiar teleobjetivo por un gran angular.

    He defendido el teletrabajo desde que supe de su existencia, de su posibilidad; y lo seguiré haciendo, porque la pandemia demostró que el teletrabajo evitó el colapso de economías y sociedades burocratizadas en extremo, más dependientes de la oficina que de la fábrica.

    Pero, como digo, se amplía el campo y se da cuenta uno de una cosa. Tenemos el teletrabajo, por un lado; pero tenemos también, por ejemplo, la desaparición de las salas cinematográficas; proliferan los servicios de streaming, los videojuegos, jugables individualmente o con otros, pero por Internet

    ¿A dónde quiero llegar? A esto: cada vez interactuamos menos con los demás en el ámbito de las sensaciones. Yo, que llevo más de treinta años sin pisar una sala de cine (lo cual no quiere decir que no vea cine, sino que no lo hago en una sala) me doy cuenta, sin embargo, del valor de la sala, del espectáculo compartido, de vivir sensaciones con los demás: una película cómica te hace reir en el sofá de casa, pero mucho menos que si ves esa película en una sala con doscientas personas que ríen contigo (bien lo saben los norteamericanos desde hace muchos decenios, y por eso en muchas series ponen esas estúpidas risas de fondo). Cada vez compartimos menos sensaciones (risa, emoción -quizá llanto-, horror, ansiedad…) con los demás. Vamos viviendo cada vez más en una burbuja de individualidad blindada. Y el teletrabajo también contribuye a esto. Durante unos cuantos años de mi vida profesional fui delegado sindical y utilizaba muy poco la bolsa de horas -si no era que, en mis funciones sindicales- tuviera que desplazarme de un centro a otro o cosa parecida, porque siempre sostuve que el delegado sindical no podía encerrarse en la burbuja del liberado, porque tenía que convivir y compartir la cotidianidad con sus compañeros de trabajo, verlos y compartir sus agobios, sus problemas, sus preocupaciones. El liberado no se entera. Vive muy bien, eso sí.

    La ira, la rabia y las barbaridades que destilan las redes sociales no tienen tanto que ver con la impunidad que confiere el anonimato como la falta de empatía a que lleva ese progresivo aislamiento en la burbuja individual o, en el mejor de los casos, familiar.

    Desde ese punto de vista, el teletrabajo (o trabajo distribuido, como lo llama Enrique), con todas sus virtudes -que las tiene, y muchas- es una piedra más en el zapato de la convivencia y la armonía social. Caramba, que icariano me ha quedado eso

    • Gorki - 18 agosto 2023 - 22:14

      Icariano, pero de lo mas sensato que he leído. Si echaremos en falta compartir las sensaciones, que cuando se da por televisión un partido, la hinchada, no se queda en casa a verlo, sino que se va al bar de la esquina y se paga unas cervezas, solo por el placer de poder expresarse al unísono con otros hinchas de su equipo.

      En cuanto al cine te aconsejo que vuelvas, (para los jubilatas es muy barato), no tanto por compartir sensaciones, hoy los cines están desiertos salvo la sala de Berbie, como pore ver una película, en silencio, con un sonido envolvente y en un cuarto a oscuras. Nada tiene que ver con verla en el salón de tu casa, a la vez que cenas con el resto de la familia, como los apóstoles en la «Última Cena», todos del mismo lado de la mesa y con alguien que te habla al oído

      • Javier Cuchí - 19 agosto 2023 - 01:24

        Gracias por tu comentario, Gorki, pero no voy a seguir tu consejo, por varias razones:

        1. En casa, cuando se come o se cena, la tele se calla. Sólo en contadísimas ocasiones de acontecimientos importantísimos (por ejemplo, el atentado de las torres gemelas) se hace una excepción.

        2. Por lo mismo, casi nunca vemos cine ni otros contenidos en comunidad. Cuando todos queremos ver cosas distintas, uno se queda con la pantalla grande y los demás usan su tableta o su ordenador.

        3. Lo de las salas de cine es una guerra particular que sostengo con ellos desde hace muchos años, por varias causas que van desde un par de timos que me atizaron con películas impresentables hasta la soberbia con la que, años después, libraron -por la parte que les tocaba- la guerra de la SGAE.

        O sea que no, ni aunque me paguen encima. Sigo pensando, claro está, en el sentido que me he expresado, pero las salas de cine extán excluidas de mi vida. Sí que asisto a salas de concierto (música sinfónica o barroca, por supuesto, jazz y nada de rock; el rock que eventualmente me guste, en lata, nada de macroconciertos) y algún teatro muy de vez en cuando, porque lo que se hace en Barcelona, generalmente, no me gusta demasiado.

  • #025
    Gorki - 18 agosto 2023 - 21:46

    Creo que el Sr. Dans se mira un poco el ombligo. De los 20 millomes de asalariados que hay en España,. yo diría que la mitad, no pueden hacer teletrabajo, porque su trabajo exige el contacto físico con una herramienta o con una persona. Ni el futbolista de primera división, ni el DJ de discoteca, ni el fontanero del barrio, pueden pensar seriamente en realizar trabajo en casa.

    Así pues por mas que nos empeñemos, hay una parte de la población muy extensa que tendrá que ir a su puesto de trabajo si o si, El problema es si es posible si los otros, los que tienen un trabajo detrás de una pantalla, trabajan mejor en casa o en la oficina.

    Yo personalmente, quizá porque soy de «una cultura obsoleta», (tengo 80 años). tengo claro que mi capacidad de convicción y de dinamización se pierde en gran medida en una conferencia por Zoom, por lo que veo difícil ejercer varias de las profesiones que he tenido en mi vida, «viajante» para la venta al mayor, y «jefe de equipo de programacion», por ejemplo.

    En el primero de los casos, porque cuando pretendes que te compren un par de camiones de vajilla, precisas una capacidad de convicción, que puedes, (con dificultad), conseguir cara a cara, pero no por video conferencia. Razón por la cual la compañía me pagaba los gastos de unos 20.000 Km de desplazamientos anuales, cuando podía haber hablado con mis clientes por teléfono.

    Como Jefe de equipo, el primer paso, era «hacer piña» y conseguir que un grupo de asalariados aceptáramos y conserváramos, la noción de equipo, y el deseo de alcanzar entre todos, un objetivo común. Esto, en un trabajo de convivencia de todos ocho horas todos los días, es difícil de conseguir, pero no imposible, pero no creo que lo consiguiera, (al menos yo). con sesiones grupales de Zoom.

    Otra cosa, es que una vez conseguido ese sentimiento de grupo, el trabajo a realizar, (programar), si se pueda hacer en casa, lo que quizá permitiera. a mi modo de ver, un trabajo hibrido, con días de trabajo en casa programando y otros días de reunión del equipo para dar nuevas instrucciones y crear sentimiento de equipo y dinamizar.

    Creo, que según el trabajo que hagas, unos tendrán que ir por fuerza a su lugar de trabajo, (los peluqueros, por ejemplo), otros podrán hacer el 100% de su trabajo por teletrabajo, (agencias de viajes), y otros, en mas o menos medida, tendrán que optar por un trabajo hibrido. (programadores).

    En mi opinión, ni se puede ser talibán en un sentido ni en el contrario.

    • Luis - 21 agosto 2023 - 23:46

      «En mi opinión, ni se puede ser talibán en un sentido ni en el contrario.»
      Esa es la clave. A problemas complejos casi nunca hay soluciones simples….y mucho menos si hablamos de personal.

  • #027
    Juan Carlos - 19 agosto 2023 - 00:09

    Hice una encuesta a mi equipo de trabajo ( >40 personas) y el 95% quería seguir trabajando en home office. los motivos principales fueron; el tema económico , tiempo de desplazamiento y equilibrio familiar ( mas tiempo con sus seres querido). Obviamente seguimos en Home Office y los resultados en comparación a presencial han mejorado. Hecho empírico.

    Sin embargo, es importante el liderazgo que apliquen también: un liderazgo de confianza , de respeto y responsabilidad es clave.

  • #028
    Gabriel Schime - 19 agosto 2023 - 03:09

    No entiendo mucho este tema, quizá porque no sé muy bien en qué contribuyen al desarrollo social digamos que, ¿el96% de los tele-trabajadores?
    A ver: ¿ustedes, pilotan aviones, operan cánceres, comandan petroleros, conducen trenes, construyen puentes, viven en la estación espacial?…
    Saludos.

  • #029
    JC - 19 agosto 2023 - 12:07

    Como director de una productora, siempre fui un agnostico del teletrabajo. No se puede editar o crear en remoto, tengo que indicar in situ. La pandemia me obligó. Hoy, seguimos con un modelo 100% teletrabajo. Los empleados se han mudado a sitios más baratos y ganan más sin tocar el sueldo. Cobran % de beneficios y eso es lo que consigue implicación, no la cultura corporativa ni llevarlos a una granja en Toledo o poner posts azucarados en Linkedin. Eso sí, yo sigo yendo a la oficina!

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