Durante mucho tiempo, el sistema operativo y los programas de Microsoft fueron, sin lugar a dudas, los más distribuidos irregularmente del mundo. En épocas pasadas, resultaba perfectamente normal comprar un ordenador y que el distribuidor directamente te instalase Windows y Office sin siquiera preguntarte, como lo era el que te lo prestase un amigo o que te llevases los diskettes o el CD del trabajo a tu casa para instalarlos en tus ordenadores personales.
La estrategia, sin duda, le salió muy bien a Microsoft. Invertir durante un tiempo tolerando que muchas personas obtengan irregularmente tus productos, para que, al cabo de un cierto tiempo, esas personas se hubiesen acostumbrado tanto a su uso, que prescindir de ellos les supusiese una barrera, y ante una cierta presión para evitar esa distribución irregular, tomasen la decisión de pagar por ellos. Es la llamada «estrategia del traficante de droga«: las primeras dosis son gratis, hasta que te enganchas lo suficiente como para pagar por las siguientes.
Claramente, Netflix tomó una página de ese manual, y la replicó de manera exacta con los mismos buenos resultados. En 2017, la compañía todavía decía sin empacho alguno en tweets desde su cuenta oficial que «amor es compartir una contraseña», invitando claramente a que las personas que viviesen juntas pagasen una sola cuenta, pero también a que los hijos siguiesen utilizando la cuenta de sus padres cuando se independizaban o a que los amigos diesen sus contraseñas a otros amigos.
Ahora, tras empezar a advertir a sus usuarios en todo el mundo de que su cuenta es para su uso personal, que pueden utilizarla en otros sitios cuando viajan o cuando están en una segunda residencia, pero que si la utilizan consistentemente en más de un sitio se les invitará a añadir a ese usuario adicional a un cierto coste, la estrategia ha surtido efecto: de acuerdo con la compañía de analíticas de uso Antenna, las suscripciones a Netflix se han disparado a partir del comienzo de la campaña contra el uso compartido de sus contraseñas, hasta el punto que han logrado el pico histórico más elevado de suscripciones desde que Antenna comenzó a rastrear sus datos en el año 2019.
En la ventana de cuatro días que siguió al comienzo de los avisos, la compañía obtuvo 73,000 nuevas altas en su servicio, lo que supone un incremento del 102% sobre la media de los sesenta días anteriores, y por encima de los picos que marcó el principio de la pandemia y de los confinamientos en marzo y abril de 2020. Las cancelaciones también aumentaron algo durante este período, pero no lo hicieron tanto como las suscripciones: el ratio de suscripciones a cancelaciones desde el 23 de mayo aumentó un 25.6 % en comparación con el período anterior de 60 días.
Regala y tolera, que algo queda. No, Netflix no es un servicio fundamental que necesitemos para vivir, pero una vez que te has acostumbrado a tener un suministro regular de entretenimiento y a comentar las series con tus amigos, la combinación del hábito generado y del efecto social resultante hace que si te ves en la tesitura de tener que prescindir de ello, no lo hagas y prefieras convertirte en usuario de pago abriendo tu propia cuenta. Y si el pago de la suscripción completa se te hace muy cuesta arriba, siempre puedes pagar algo más de la mitad y resignarte a la asquerosa experiencia de pasar a ver Netflix con publicidad: cinco millones de personas optaron por esta oferta, que supuso hasta un 25% de las nuevas altas.
Amor es compartir una contraseña… hasta que deja de serlo.
This article is also available in English on my Medium page, «Netflix and the drug dealer’s strategy…»
De Netflix también se sale, si necesitas ayuda pídela.
Yo vivo tan feliz con Libeoffice.
Luego si tu cerebro es basura, no te olvides que desde aqui te ofrecimos ayuda.
PS: Tu has visto un pastillero amante de la ópera, pues…
Por cierto se puede empezar por aquí
https://www.arte.tv/es/videos/104808-000-A/los-ninos-de-la-estacion-del-zoo/
La historia de Christiane F.
A fines de los 70, el libro «Wir Kinder vom Bahnhof Zoo» sacude a Alemania Occidental al relatar la miseria de los jóvenes drogadictos que morían en las estaciones de tren y en los baños públicos de las principales ciudades alemanas. La obra toma como ejemplo a Christiane F., una niña de 13 años que se prostituye para comprar heroína. Un documental sobre una generación perdida.
Cambia eso por:
La historia de PON_TU_NOMBRE_AQUI
A principio de los 20, el artículo de Enrique relata la miseria de los jóvenes drogadictos mentales que se compraban gafas de 3500$ y se pasaban el día pegados a Netflix, y para poder acceder a ellos vendían sus almas en los baños púdicos de las cloacas empresariales. El artículo toma como ejemplo a Alter Ego., un preadolescente madurito que se prostituye mentalmente para conseguir su ración diaria de dopamina. Un documental sobre una generación perdida.
PS: Jamás he echado de menos estar enganchado a la TV rellena de series B… y también he vivido en un barrio que regalaban la heroina… sin embargo ponme un 5J, un Ribera, un coñac y de fondo a Smetana… va en gustos preferir la mortadela con aceitunas, el Lambrusco y el garrafón… con Fernando Esteso cantando la Ramona
Esta interesante la broma como ejemplo pero creo que el target de Netflix está muy por debajo del de las gafas de $3,500 usd. Además, para cuando esas gafas dominen el mercado y ese grupo de jóvenes represente un demográfico que valga la pena, van a costar la tercera parte del precio inicial. Pues como en todo, ese costo es solo para early adopters en su mayoría con videojuegos y canales de YouTube.
Aventurándonos mucho, las gafas que dominen el mercado solo lo harán en EU y seguramente la media vivirá hiperconectada con unas gafas chinas de 400 usd (o menos) donde entonces sí tendrá Netflix y como es de esperarse, usará algún clon de VisionOS creado por Google. Además, estarán convencidos que son unos listos que se han liberado del “yugo” de Apple y que la oferta que finalmente obtuvieron, es mejor.
Libre Office?
Yo simplemente he cambiado de camello. Ahora la merca me la sirve Google Docs.
Que conste que libreoffice está muy bien, pero se está quedando obsoleto. No he sido capaz de integrar bien el voice to text de google en el Libreoffice, y cortana es bastante intrusivo. Soy desorganizado y anárquico, así que tener los docs en la nube me gusta mucho.
Pensé que habría una «gran resignation» y no unas altas masivas.
Microsoft no ha cambiado de estrategia. El cambio de Windows 8 a 10 era gratis y de 10 a 11 es gratis y de 11 a 12 será gratis también. Me parece genial y una necesidad para ellos, puesto que tanto Apple como ChromeOS y Linux (gracias a Snap y Flatpack) se están convirtiendo en verdaderos quebraderos de cabeza para redmond.
En empresa somos 5.500 empleados y todos con Windows+Office. Me imagino que estamos secuestrados por todas las otras empresas. Pero ostras, el ahorro de pasarnos a Ubuntu sería brutal.
Microsoft sacó a flote a Apple cuando estaba técnicamente quebrada, y en W10, te ofrece Linux como subsistema. No te olvides que Google subvenciona a Apple con 15mil millones por ser la página por defecto….
quebraderos de cabeza… todos ganan manteniendo el status quo actual. Apple para la élite que le gusta pagar por pagar, y WSL para los pseudo-friquis que no se atreven a perder windows.
Ahora pregunta por google que papel juega… en el quilombo
Cuando compro un dispositivo digital nuevo, compro un «pack» formado por una hardware y un sistema operativo, pago y supongo que una parte va a parar al fabricante del equipo y otra parte ira al creador del SO. Así ha sido en los móviles que utilizado, en mi actual equipo de sobremesa Gigabyte y en mi teléfono Galaxi A5i. Nunca he discutido pagar el SO, y nunca he tratado de meter otro libre como pudiera ser Linux.
Junto al SO me daban una serie de utilidades gratuitas, que ni yo pedía ni estaba dispuesto a pagar como ajuste de fotografías, calculadoras, calendarios, el tiempo, … que son de agradecer y que desconozco la razón por la que las dan gratis, pues tampoco parece que vivan de mis datos
A esto añado programas, (todos gratis) que considero convenientes. Buscador de Google, Libre Office, Processing, FSMlogo,… antes añadía alguno pirata, como era el Office de Microsoft pero lo han puesto tan complejo el piratearlos, que hoy prefiero no bajarlos y buscar los sucedáneos gratis, que todos tienen.
Se puede vivir perfectamente con lo que es gratis, No tengo Netflix, porque no tengo tiempo entre otras cosas de ver la televisión, pero tengo en Youtube cosas realmente interesantísimas de ver y no siento la falta de ver series, por ejemplo estoy viendo uno documentales sobre las batallas de la Guerra Civil en un canal llamado CANAL DOCUMENTALES que me parecen francamente buenos y que estan exentos de propaganda ni de un lado ni del otro.
Si quisiera tengo montones de películas completas gratuitas a mi alcance, lo que pasa es que hoy un programa de hora y media, no es el formato mas adecuado a mis gustos cuando veo algo en casa. Otra cosa es ir al cine, donde vas a «echar la tarde» no sólo en la proyección, sino en el antes y el después, pues suelo ir con amigos que antes y después del cine tomamos algo en cualquier parte .
Conmigo la táctica de Netflix no ha funcionado, pero yo creo que es mas culpa mía y de mi mujer, que somos rarillos, que de Netflix, que posiblemente ha hecho una «siembra» muy adecuada y hoy esta recogiendo el fruto.
¿Eras de los que no pagabas por el móvil porque te lo «regalaba» la operadora? El modelo de negocio no está muy claro cundo no interesa que lo esté. La sabiduría popular nos recuerda que «nadie da duros a cuatro pesetas»: Mezclas productos gratuitos OpenSource con servicios en los que el producto eres tú y lo pagas con tu sangre, digo con tu tiempo de atención y tus datos. Estos despistes nos pueden llevar por inacción a situaciones que hubiéramos considerado distópicas hace 20 años. Vamos, Que nos hubieran parecido demasiado exageradas como argumentos de Black Mirror.
Creo recordar que siempre he pagado por el móvil, eso si, compraba los que estaban en oferta, porque nunca quise un contrato de permanencia, aunque de hecho siempre he estado con Movistar, porque las otras operadoras con las que he tratado han sido aun mas desastre que Movistar.
En cuanto a los datos personales, soy de la opinión que la intimidad, como la virginidad, solo se pierde la primera vez, Cuando tiene tus datos de nada vale que se los ocultes, Es mas, yo soy partidarios de ponerles fácil captar nuevos datos míos falsos, con la intención,no se si muy optimista, de añadir confusión a la imagen que tienen formada de mi.
No le hecho de menos. HBO , mejores series, 3 euros compartiendo. Bye Netflix.
Todas las empresas que tocan fondo. Si no desaparecen, crecen aunque sea por rebote.
Qué bonitas las estadísticas.
Cómo era eso de los 3 tipos de mentiras ?
Yo no todavía tengo una cuenta se Netflix compartida. Cuando me la corten dejaré de ver Netflix o pagaré una VPN o compartiré otra plataforma de streaming diferente o volveré a emule y similares.
El SO Linux desde siempre.
El mono de Netflix no es en general tan grave como el de las drogas químicas, pero puede ser preocupante.
El problema esencial sigue siendo el método del traficante, que lo llevamos implementando en nuestro adn social negativo, desde que existe la capacidad de seducción en el ser humano.
Una seducción que, a diferencia del resto de animales, toca muchas teclas en esa computadora tan bestia que tenemos como cerebro. Por esa razón se le llegó a llamar arte.
Cuando un amante se hace con con el control mental (dicen que «del corazón y esas cosas») de su pareja, ya no le tiene gracia seguir el proceso de conquista, por lo que se pasa a favorecer el mono «de amor» (o de afecto amistoso/filial, de sexo, de maltrato placentero…). Es decir, se pasa a la siguiente fase, de manipulación descarada, para que siga siendo grato el interactuar con esa persona.
Nada nuevo bajo el sol del mercado libre. Yo te doy esto gratis y muy placentero, hasta que te paso l factura correspondiente, por el gasto hecho en «el spa» de los afectos. Y eso vale, claro, para «el spa» de las ventas, de la política… y, desde luego, de la domesticación «vendida» como educación.
Como alguien podía decir, elemental querido, el problema (y la solución) está en los filtros.
Que cualquier empresa, teja sus medios para enganchar a la gente, es licito (lo etico, lo dejamos de lado). Al fin y al cabo, el problema reside unicamente en quien decide prestarse a ello…
pero para todo hay solucion
Un americano con recursos. Que grande !!
Ha inventado el híbrido portátil o el gasógeno 2.0
wiki
Que a Netflix le haya funcionado su política de compartir como en su tiempo a Microsoft no me extraña, lo que realmente me sorprende es que, quitando ese 25% de altas con publicidad, el resto sean altas o permanencias pagando el doble. Claro que, acabado el chollo de compartir, no sabemos cuántos usuarios han permanecido en la plataforma reduciendo su contrato…
Todos los servicios de streaming cuestan menos de 10€/mes, compartible y con calidad de imagen hasta 4K. Netflix cobra el doble por un servicio no compartible y 4K, o menos con menor calidad i/o con publicidad.
Esto es lo que realmente me sorprende.