Comics y management

IMAGE: René Goscinny et Albert Uderzo

Susana Carrizosa, de El País, me llamó por teléfono para pedirme que le enviase un correo electrónico breve describiendo mi relación con los cómics y hasta qué punto me influenciaban actualmente, si los utilizaba como modelo, etc.

El pasado lunes 3, Susana publicó su artículo sobre el tema en El País, «¿Y si mi jefe fuera como Astérix o Tintín?» (pdf), en el que recoge algunos de mis comentarios.

En mi caso, quise destacar la obsesión que tenía mi padre por conseguir desarrollar en mí el hábito de la lectura, y cómo me compraba cómics sin parar para conseguirlo. En parte, creo que, además, los cómics le encantaban a él también, porque cuando ya tuve ese hábito completamente desarrollado y me leía hasta las enciclopedias, siguió comprándome cómics de manera habitual, cosa que yo agradecía muchísimo porque me encantan (aún hoy, es ver algunos cómics y lanzarme a leerlos como si fuera un auténtico drogadicto).

Actualmente, los cómics forman una parte imprescindible de mi actividad como profesor, una forma de introducir conceptos complejos de una manera accesible y agradable. En casi todas mis clases o conferencias intento introducir esos momentos de contenido aparentemente más relajado en formato viñeta, pero que permiten hablar de algunos temas de una manera que me resulta comunicativamente muy eficiente.

A continuación, los comentarios que envié a Susana:

Mi padre siempre insistía mucho en que leyese, algo que en mi caso no le costaba demasiado porque yo era el típico niño repelente que se leía hasta las enciclopedias (y de verdad que no es una figura retórica, mis padres tenían una Salvat de 4 tomos que yo me dedicaba a leer como si fuera un libro y, para desesperación de algunos de mis tíos, luego metía en conversaciones «palabros» que había visto allí… según ellos, era imposible ser más pedante!!) y para ello, me compraba habitualmente cómics, que yo devoraba. Si iba a casa de amigos o de mis primos, era habitual que encontrase alguno de esos tomos gordos de cómics de Bruguera y que me pasase media visita leyendo en algún rincón tranquilo.

¿Los cómics como influencia? Me entretenían mucho, sin duda, pero los cómics clásicos españoles en general, aparte de divertidos, me parecían siempre «colecciones de desastres» que no me han influenciado demasiado como tal, más allá de algunos estereotipos divertidos a los que recurres ocasionalmente. En el lado francés, con Tintín y, sobre todo, con Asterix, me parece que encontré más inspiración como tal, y de hecho, he recurrido a ellos muchas veces en presentaciones: la aldea gala y su resistencia al invasor está presente muchas veces en mis imágenes. También tiendo a encontrar muchos temas interesantes en los cómics geeks que sigo habitualmente: Randall Munroe en XKCD con sus arquetipos de los nerds y las tecnologías, las metáforas de Matthew Inman en The Oatmeal (llevo años recomendando uno de sus cómics como lectura para mi primer día de clase), o los clichés de Rob Cottingham en Noise to Signal son elementos habituales en mi forma de comunicar y de hacer accesible la tecnología y sus efectos.

A Asterix lo utilizo para varias cosas, bien en negativo (la resistencia al cambio ejemplificada en la aldea gala que quiere mantenerse al margen de la romanización), o en positivo (la tecnología como poción mágica y como forma de solucionar determinados problemas). A Tintín lo suelo utilizar como ejemplo de estrategia y planificación, pero que deja sitio para la improvisación y las reacciones rápidas. Lo mejor es que son referencias bastante universales (mi audiencia es 95% no española y se perderían si utilizas cómics intrínsecamente españoles como Mortadelo, Anacleto o Zipi y Zape), y que los asistentes captan muy rápido por dónde quieres llevar el razonamiento. Son «momentos ligeros» en una presentación, que siempre vienen bien para «dar algo de aire» al mensaje.


This article is also available in English on my Medium page, «The comic side of teaching in a business school»

22 comentarios

  • #001
    Juan T. - 6 octubre 2022 - 09:59

    Casi que me estaba viendo a mi mismo cuando hablabas de los comics, aunque yo los abandoné casi por completo en la edad adulta, pero recuerdo que en lugar de hechar la siesta en verano , que en mi casa era obligatoria, me pertrechaba con 10 0 15 cómics cada dia, tebeos los llamabamos y me tiraba mis dos buenas horas, y lo curioso es que siempre encontraba con quien cambiar los tebeos. Leía 100 veces mas de lo que compraba.

    Me ha dolido que digas que no utilizas a Mortadelo en tus clases por que tus alumnos sean en su mayoria extranjeros. Vamos que mas universal que Mortadelo, no lo hay. Imagina que Mortadelo hubiera tenido el marketing de Spiderman.

    Es como si un profesor de literatura con alumnos extranjeros no utiliza el Quijote.

  • #002
    Gorki - 6 octubre 2022 - 10:02

    Hay géneros literarios que solo se centran en un pequeño mercado desconozco por qué razones, Desgraciadamente los comics se centraron en los géneros. «infantil» y «adulto», y las fotonovelas en lo sentimentaloide femenino,

    Siempre he considerado que son géneros literarios muy desaprovechados, que podían haber entrado en otras áreas literarias, por ejemplo yo siempre he echado de menos, la Iliada y Odisea en comic. y utilizar la fotonovela para visitas guiadas a los museos.

    Dicho lo anterior, como el padre de Dans, yo también he utilizado el comic y el TBO como forma de iniciar, y con gran éxito, a mis hijos en la lectura, el «master» lo hicieron con el «Señor de los Anillos» y no es la primea vez que públicamente, doy las gracias a Marcial Lafuente Estefanía, por ser quien me llevó a mi a la lectura.

    • JRamon House - 6 octubre 2022 - 11:14

      Homer en comic

      https://issuu.com/mazzymazzy/docs/iliada_y_odisea._el_manga_homero

      No hay mujer frígida, sino varón inexperto en google XDDD

  • #004
    Javier - 6 octubre 2022 - 13:50

    Mi madre me inició a los 7 años en la lectura con un libro de la Biblioteca Billiken: La vuelta al mundo en 80 días. Fue terminar el libro y tirarme de cabeza al resto:

    20.000 leguas de viaje submarino
    Viaje al centro de la tierra

    Recuerdo, unos años más tarde, de niño todavía, estar en la casa de mi abuela, literalmente en el medio de la nada y descubrir en la biblioteca de la casa, el libro Robinson Crusoe de Daniel Defoe. La sensación que todavía recuerdo es que fue la de haberme ganado el gordo de navidad. Lo que disfruté ese libro…

    Mi madre tenía la costumbre de comprar unos comics de D’artagnan que fue donde me inicié en el mundo del comic.

    En 1991, A los 17 años (pre internet, cuando la tierra todavía estaba caliente) empecé a trabajar de canillita en un puesto, vendiendo periódicos y revistas, que fue más o menos, como entrar a trabajar a una chocolatería…

    Ahí conocí y disfruté como un poseso comics y autores de todo tipo. Así, sin esforzarme demasiado, recuerdo comics como:

    El Cazador

    De este, recuerdo que, como la gente me veía a la mañana desde las ventanas de su casa, a veces me veían desternillarme a carcajadas, sobre la silla, solo, y más tarde cuando me veían me preguntaban: ¿de que te reías tanto hoy a la mañana? Les daba mucha curiosidad, porque a parte me la pasaba leyendo.

    Ahí conocí a Roberto Fontanarrosa, un genio al que no tengo palabras para describir. Quizás un epíteto pueda graficar mi admiración por él, pero desentonaría con el texto que estoy escribiendo.

    Quizás muchos no lo sepan, pero los guiones y sketchs de Les Luthiers eran en gran parte escritos por él. Eso da una idea su talla como autor y escritor. Su muerte se sintió en las presentaciones posteriores del grupo. Uno podía sentir que «faltaba algo». Faltaba el negro, como le decían cariñosamente.

    Pero es que además era un dibujante tremendo.

    Bueno, basta, que tengo que ponerme a trabajar.

    Gracias por el post.

  • #005
    Javier M - 6 octubre 2022 - 14:16

    Te recomiendo un capítulo del podcast Geopolítica Pop (podcast bastante interesante): la geopolítica de los superhéroes.

    https://open.spotify.com/episode/2v2PFbFK7JUh1KmrCvKDnw

    Hablan de lo que querían vender o influenciar desde Superman, Batman, Capitan América o tantos otros.

    Altamente interesante.

  • #006
    Benji - 6 octubre 2022 - 15:34

    Mis padres compraron los mismos en aleman para motivarme, xD.

    Tengo todos digitalizados gracias a CRG, junto a los clásicos españoles como El Jabato, El Corsario de Hierro y tambien los de Principe Valiente

  • #007
    Crispin - 7 octubre 2022 - 07:12

    En aquel tiempo se leían tebeos Enrique, los comics vinieron después. Ojalá el sistema educativo incorporase los tebeos en primaria.
    Yo aprendía hasta italiano con algunos.

    • Marcos - 7 octubre 2022 - 09:23

      En un capítulo de “Riley y el mundo”, serie de Disney+ con niños protagonistas (pero que recomiendo a todos, porque no es la típica serie infantil, los adultos no se comportan como idiotas y hay una clara muestra de aprendizaje sano en ella…), hay un capítulo en el que utilizan “El caballero oscuro” para trabajarlo en clase y hablan de cómo el cómic es un arma narrativo igual de válido.

      Me encantó ese capítulo especialmente, pero la serie en general es excepcional.

    • Javier Cuchí - 7 octubre 2022 - 11:33

      No, perdón, cuando yo tenía 14 o 15 años -es decir, allá por 1969 o 1970- al cómic ya se le llamaba cómic. Por lo menos entre iniciados. Sin detrimento, en aquel entonces, de la palabra tebeo, también en perfecto uso, sobre todos por aquellos a los que les gustaba la historieta, pero no le daban mayor importancia (tebeo leído, tebeo tirado).

      ¿Los tebeos en la primaria? Bueno, quizá, pero todo tiene su espacio, lugar y momento, y pretender meter en el sistema educativo todo aquello que es o puede ser bueno simplemente porque es o puede ser bueno, es una manera de sobrecargar (más aun) el sistema educativo.

      • Alfredo Hoz - 7 octubre 2022 - 11:48

        Coincido… siempre ha sido «comic», salvo en España, que el apelativo tebeo se ha usado siempre como un «genero menor» o mas infantil…

        De ahi, el famoso TBO, de donde proviene el nombre…

  • #011
    Javier Cuchí - 7 octubre 2022 - 08:14

    Sin discutirla frontalmente -porque hay quien, como Enrique o Gorki, la defienden sin reservas- yo nunca he podido ver esa trasposición del cómic a la lectura [de libros]. Para mí son mundos interesantísimos -en mis años más jóvenes desarrollé una verdadera locura por el cómic- pero separados, aunque tangencialmente se cedan espacios uno a otro.

    Veo muy difícil que el cómic lleve al libro. Al libro te lleva el milagro de un día que descubres cómo esa aburrida y larguísima consecución de letras contiene un mundo maravilloso, apasionante, tanto más cuanta mayor imaginación pongas de tu parte. A mí, ese milagro me llegó, como a mi tocayo #004, con «La vuelta al mundo en 80 días»; a mis hijas, con Harry Potter (aunque nunca la he leído, no me cansaré de bendecir a J.K. Rawling) y la menor es hoy graduada en Filología Hispánica con un máster en Literatura Hispanoamericana y otro en Edición, no está mal la cosecha.

    El mundo del cómic -particularmente, en mi caso, el franco-belga: Asterix, Tintín, Blueberry, Tanguy, Aquiles Talón, Iznogud…- me llegó a apasionar casi hasta el paroxismo durante el Bachillerato (el antiguo, el de seis años más COU, del que fui primera promoción) y ese fuego se apagó durante mis años universitarios, aunque nunca dejó de haber brasa y sigue habiéndola hoy, todavía hay algún ratito en que pillo de mi estantería algún Buck Danny o algún Príncipe Valiente (el cómic Marvel siempre me importó un rábano y esas cosas que hacen ahora, la verdad, no me gustan absolutamente nada, aún reconociendo su calidad gráfica). Pero lo que preside mi vida intelectual sigue siendo el libro, que lleva casi cincuenta años de mi vida siendo no preponderante sino casi único.

    Al César, lo que es del César…

    • Marcos - 7 octubre 2022 - 09:29

      Quizás más allá de alzar al libro sobre el cómic, que no digo que lo hagas…, al menos en mi caso, es la explotación de la curiosidad sana.

      He leído kikos y kilos de tebeo español en mi juventud y sí dio paso después a libros. Pero de igual manera, los videojuegos han pasado también a formar parte del esquema.

      La cosa es que cada medio tiene su obvio estilo narrativo y cada uno puede contar un historia diferente. Pues bien, al final, esa curiosidad de encontrar nuevas historias de nuevas maneras es lo que puede llevar a ampliar los horizontes. Es como ese entramado de ideas acerca de los videojuegos. Obviamente, matar extraterrestres frenéticamente poco o nada tiene que ver con Monkey Island por ejemplo.

      • Javier Cuchí - 7 octubre 2022 - 11:49

        Pues fíjate que a mí el videojuego nunca me ha llamado la atención (ojo: estoy haciendo una circunstanciación, no una valoración); he probado algunos en distintas épocas y o no les he visto la gracia o al poco tiempo o rato me aburrían soberanamente. Únicamente me conquistó en largo plazo el Flight Simulator; ése sí me enganchó (la aeronáutica es una de mis pasiones) y permanecí pillado tres o cuatro años durante los 90. Pero pasan tres cosas: primera, que llamar juego al FS puede provocar que la comunidad te declare anatema; segunda, que bien jugado… en fin, practicado, requiere una cantidad imposible de horas; y, tercera -exclusiva para mi caso- que en 1999 salté a Linux only y el FS se acabó (después apareció la versión para Linux de X-Plane, pero yo ya me había desenganchado; y Flight Gear es infumable). He seguido probando videojuegos en Linux y en Android, pero ninguno -más allá del Klondike y de alguna aplicación de ajedrez- han resistido instalados más de una hora.

        • Marcos - 7 octubre 2022 - 12:55

          Entiendo perfectamente lo del Flight simulator; recientemente he comenzado a jugar a otro juego, City Skylines y madre mía… voy a necesitar semanas para construir mi ciudad a mi gusto. Es un juego de estrategia de gestión, que me encantan estos.

          Pero otros como Final Fantasy o Monkey Island (rol o aventura gráfica respectivamente) ofrecen algunas veces unas historias increíbles y apasionantes.

          En el caso de Monkey Island, que los combates entre piratas sean a insultos (blancos) y dejar mal al oponente, no tiene precio, de verdad.

          Es como Nintendo; sus juegos en este caso no ofrecen historias demasiado elaboradas, pero la genialidad de sus juegos radica en la jugabilidad. Hay de todo.

          Como dije, al final hay muy buenas historias en todos los medios, solo hay que ser curioso.

          • Enrique Dans - 7 octubre 2022 - 13:15

            Yo no soy muy de juegos, pero tuve mis épocas… creo que el primero que me enganchó fuerte fue el Wolfenstein 3D, pero también tuve temporadas buenas con el Simcity, el Civilization, y algunos más. Los simuladores de vuelo nunca me gustaron especialmente, probé el de Microsoft en sus tiempos y me parecía complicadísimo…

          • Alfredo Hoz - 7 octubre 2022 - 13:28

            Wolfenstein 3D….

            Deberiamos vernos las caras… :P

            Digame que tambien le gusta el Age of Empires, que monto un servidor y nos vemos alli… :P

            • Enrique Dans - 7 octubre 2022 - 13:31

              Jajaja, digo que me enganchó un montón y que me lo pasé entero hasta matar a Hitler… ¡pero no que fuera ni medio bueno, yo creo que lo mío era más por perseverancia!! :-D Pero tuve una época en la que caminaba por los pasillos del IE y un amigo decía que me asomaba en cada esquina por si acaso había que entrar disparando!!

          • Alfredo Hoz - 7 octubre 2022 - 13:37

            Entonces es de los mios (ultimamente me he pasado por X vez, New Colossus, New Order y Old Blood… y si, modo Ultra)

            Lo de AOE no es coña… es tecnologia, avance, innovacion, pero claro, en sus tiempos justos… me temo que ahi le doy una paliza… :))))

          • Alfredo Hoz - 7 octubre 2022 - 13:51

            Ya que hablamos de videojuegos y aun siendo OFFTOPIC…

            Hasta siempre, Origin: Electronic Arts se despide de su launcher para apostar por EA App

            y relacionado con hace un par de articulos… STADIA:

            «Lanzar productos es lo único que vale para ascender»: exempleados de Google explican la razón del adiós de Stadia y otros servicios

            Hay un motivo por el que Google lanza (y abandona) servicios todo el rato. Y tiene que ver con unas ratas

            Creo que sin desmerecer los argumentos de Menestro (que bien me sirvieron), esto desmontaria algunas cosas… o darian para articulo a parte…

  • #020
    Alfredo Hoz - 7 octubre 2022 - 09:14

    Mis inicios fueron también de muy joven. Mi padre tenía una buena colección de libros, en su mayoría de historia y ciencia, que yo iba cogiendo para leer “entre horas”.

    Uno de mis hobbys, era coger la enciclopedia Monitor, de Salvat (12 tomos tamaño supremo), y leérmela de la A a la Z (tenia tiempo de sobras para jugar con mis amigos a la vez, yo no era ningún repipi en este aspecto) , que fue la enciclopedia que me ayudo en mis trabajos de EGB.

    Pienso como el Sr Cuchi, que no forzosamente el comic te lleva a la lectura de libro (ni al revés) pero tampoco levanta una barrera infranqueable. A la vez que devoraba libros, Mortadelos y el resto de personajes de Bruguera, me acompañaban, así como para mi francés, tenia a Asterix, Spirou, Tintin… (a escondidas me compraba Dossier Negro, Vampus, Creepy… no muy del agrado de mi madre)

    Fue desde los 13/14 que implosione con el Comic (y la música) Prácticamente todo el Catalogo de Norma Comics, Metal Hurlant, Rambla, Totem, 1984, Cimoc, etc. Además de álbumes de autor, Moebius, Jodorowsky, Hugo Pratt, Richard Corben, Victor Mora, Carlos Gimenez, etc

    Pero uno se va haciendo mayor, y cambia historietas por libros de algoritmos, circuitos digitales, manuales de programación, teoría de compiladores… todo “muy divertido” :P


    Pues me esta tocando hacer «limpieza» en casa de mis padres, y en concreto en mi antigua habitacion…

    Casi 300 libros de «clasicos» (de mi infancia), y que he tenido que regalar muy a mi pesar (solo me quedo con los filosofos y los de historia).

    Pero me duele aun mas mi vertiente Comic. Los Ases del Superhumor (Bruguera) ya estan colocados asi como casi 8 años de Cimoc, 1984, Metropol, etc…

    Me quedan El Vibora, maestros del underground. Una caja llena desde el numero 1 al 290 y tantos.

    Precio a convenir :P

  • #021
    Javier - 7 octubre 2022 - 10:37

    Gracias Enrique por la aportación.
    Nunca he utilizado en mis clases ejemplos de comics, pero me lo apunto y me probare en ese registro. sí películas y sobre todo libros. Creo que un profesor puede ser un buen descubridor de lecturas para sus alumnos.
    En mi caso tengo por norma llevar a clase el libro que estoy leyendo ese día, hay veces que algún alumno le pica la curiosidad y pregunta, creo que podemos ser unos buenos prescriptores para ellos.

    Con respecto a los comics os recomiendo dos que he leído este verano
    – Magallanes y Elcano: Más allá del horizonte http://www.nuevoviernes-nuevolibro.es/2022/08/magallanes-y-elcano-mas-alla-del.html … Hay estrategia, dirección, gobierno, gestión,
    – Nebrija http://www.nuevoviernes-nuevolibro.es/2022/08/nebrija.html lo primero que podemos encontrar en el combate contra la ignorancia, una sociedad preparada, culta, instruida cuánto puede retornar al ecosistema

    Sigamos leyendo, busquemos ejemplos que le hagan más amigables a los alumnos querer leer, descubrir, crecer, ilustrarse…

    ABRAZOTES

  • #022
    JM - 7 octubre 2022 - 23:09

    Jajaja! Yo también era de los de leerme la enciclopedia XD (y cualquier otra cosa que había por casa).

    Recuerdo el día en que me llevaron a la biblioteca cerca de casa. ¡Tantos libros por leer! Se me pusieron los ojos como platos :D

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