Forbes España ha tenido a bien incluirme en su lista de los 100 influencers, encuadrado en la categoría Business. Además, me pidieron un artículo sobre mi visión de la influencia y el fenómeno influencer como tal, que titulé «El ‘influencer’ y el diván del psicoanalista» (pdf), en el que trato de hacer un análisis de lo que suponen este tipo de figuras en el panorama comunicativo, de sus paralelismos con otras figuras dentro del entorno comunicativo, con las aproximaciones que las marcas hacen a ellos, o con la realidad – o en algunos casos, ficción – que aparece detrás de ellos.
Intenté tocar cuestiones como la necesaria regulación de su papel en la publicidad, la consolidación progresiva de las reglas del juego, la perversión de las métricas para dar lugar a fenómenos, en ocasiones, completamente carentes de sentido, o el fenómeno de los micro-influencers o nano-influencers, que en algunos sentidos parece estar sirviendo para que el necesario uso del machine learning y de la algoritmia depure un poco el muchas veces sórdido panorama que las agencias de publicidad y algunas marcas estaban contribuyendo a construir.
En el fondo, el fenómeno influencer es una colonización de nuevos canales y géneros comunicativos por parte de una nueva generación de creadores de contenido, capaces de dar lugar a interacciones que, en muchos casos, van redefiniendo los estilos y las relaciones con unas audiencias que, además, gracias a las características de esos medios, tienden a volverse más participativas. En ese sentido, encontraremos marcas y agencias incapaces de entender esos cambios y que sistemáticamente intentarán tratar a esos influencers como se trataba antes a «los famosos», y otras que intentarán entender mejor el fenómeno, el significado de la influencia, y la imposibilidad de, en determinados ámbitos, mantener determinados comportamientos.
En cualquier caso, y en lo que a mí me toca como integrante de la lista, agradecer a Forbes España su consideración a la hora de incluirme, y a vosotros – los que me leéis habitualmente, los que comentáis aquí o en otros foros, y los que de alguna manera u otra seguís mis publicaciones – vuestro interés por unas opiniones que intento estén lo más documentadas posible con sus fuentes a un clic de distancia, y que respondan a un análisis lo más riguroso que sea capaz de hacer, sin venderlo nunca a ningún postor. Sé perfectamente que la influencia no se tiene, sino que es un préstamo en una moneda llamada «atención» que te hacen aquellos que te siguen, y que como tal, te pueden retirar cuando estimen que ya no la mereces. Y con esas premisas, y en función de los años que llevo apareciendo en este tipo de listas, parece que no me va mal.
This article is also available in English on my Medium page, «What it means to be included in Forbes Spain list of 100 Influencers«
Congrats!
A propósito, estoy leyendo ahora mismo un libro que trata específicamente sobre el tema: The Tipping Point (El punto clave)
En él, relaciona hechos tan disimiles como las epidemias, las modas y muchos fenómenos más, y cómo todos ellos tienen un factor en común las personas, pero no todas, sino un tipo específico de persona:
– Los conectores
– Los conocedores
– Los vendedores
Hoy usamos los terminos «influencers», que logran esa «viralización» (términos que hasta ahora no aparece en el libro, ya que es del año 2000). Lo recomiendo, y lo estoy disfrutando mucho.
Y claramente me está ayudando ver un fenómeno que solo veía tangencialmente desde una perspectiva poco clara y, lo admito, con cierto prejuicio y desdén. Pero no, tiene una lógica y una dinámica muy clara, que recién estoy empezando a comprender
Todo este tocho fue solo para decir que entiendo el reconocimiento y que, bien merecida la mención está.
Felicitaciones.
Muchas gracias!
La de Malcolm Gladwell es una clasificación muy buena, y sobre todo, muy fácil de asimilar. Yo empecé a usar ese libro en 2001 cuando monté un electivo sobre CRM que seguí impartiendo hasta 2012, y lo he mantenido en varias presentaciones en el de innovación que imparto actualmente, funciona muy bien para entender los fenómenos de difusión de innovaciones, la viralización, etc.
Abuela: Estudia para convertirte en un hombre de provecho
Influencer: Paso, prefiero esto de ser influencer
Abuela: Eres un haragán todo el día en Internet perdiendo el tiempo
Influencer: Gano al mes más pasta que tú, con tu pensión, aqui haciendo el chorra
Abuela: Eres un gilipollas, mal criado !
Homenaje a algunos premiados influencer: el andorrano Rubius, el messianico Ibai, etc etc
Vaya!, Y les dan un premio…
Ahora a ponerte el slip por fuera: Superman. Lo que te ha costado toda la vida estudiando, todos los días un artículo, para compartir premio con estos….
Ja ja ja
Algo debes estar haciendo rematadamente bien o mal, según se mire.
No te dan un premio (al menos a mí no), simplemente reconocen que por la razón que sea, te has convertido en alguien que influye – en todas las posibles y muy variadas acepciones de la palabra. Que se pueda llegar a algo por muchos caminos, sea haciendo un doctorado y escribiendo mucho, o jugando a videojuegos y subiéndolo a YouTube, no implica necesariamente que todos los que estamos en la lista seamos iguales – ni para bien, ni para mal – ni que nos dediquemos a lo mismo, o que pertenezcamos a un mismo club. A lo mejor es interesante ver qué diablos hace esa gente que criticas y tratar de entenderlo. O al menos, puede que sea más productivo que simplemente levantar el puño hacia el cielo y maldecir… ;-)
Gracias por darme la razón y repetir mi argumento. Para llegar a esa lista hay distintos modos. Y como los pimientos de Padrón, algunos con esfuerzo, dedicación y entrega, y otros no.
¿Maldecir, crítica? No, ni mucho menos. Anda ya… Si 300 millones de moscas ya sabemos que comen, la culpa será de las moscas.. No se puede obviar lo obvio.
Cuando en 2012, un bloguero, llamado Enrique Dans, usaba su influencia para arremeter contra los usos de Promusicae, seguramente excediéndote, el juez no vió infracción al honor de tal sociedad y seguramente la gente que te leía en aquel entonces se solidirizaban contigo, y parafraseo el argumento de ese juzgado:
“No siempre una crítica al prestigio profesional se traduce en una transgresión del honor”
Y si tu realidad no coincide con la mía, me sumaré al mismo criterio de ese juzgado, prafraseando_:
“el coste de tus afirmaciones
falsas no se pagan conn dinero,
sino en tu credibilidad”
¿Es esto una enhorabuena? Creo que si, pero a la altura de Forbes: «mediatizada». Para los que no conocen el pasado:
https://elpais.com/cultura/2012/06/15/actualidad/1339762848_867359.html
¿Qué tiempos aquellos en que el enemigo era la SGAE y no Facebook?
Que sensación mas extraña….
Mira que me parecía estúpido que todo adolescente quisiera ser influencer…Y ahora tu eres uno de los mejores…Pero por aquí veo pocos adolescentes…(creo).
Ah, si…¡¡ que quieren ser como el Rubius , no como tu.
Eso te salva :)
Al final se me olvida….Muchas felicidades, te lo tienes muy merecido.
Me alegro por ello… enhorabuena :))
Pués yo también le felicito desde Alemania. Pero algo me resulta extraño aquí, sólo los hombres comentan. ¿Dónde están las mujeres? Soy mujer y le sigo todos los días desde hace años. Sólo una o dos veces me atreví a hacer un comentario.! Felicitaciones!
Muchas gracias! Sobre el sesgo de género, a mí me consta que me leen mujeres porque me lo comentan algunas a menudo, pero todo indica que sois más tímidas a la hora de comentar :-)
Transi y Enrique, yo también me he preguntado varias veces sobre la cantidad de mujeres que visitan este blog, así como también sobre la cantidad de gente de América Latina que, al igual que yo, lee con frecuencia lo que aquí se publica. En uno y otro caso me parece que probablemente son bastantes personas, aunque no me resulta clara la razón por la cual no comentan con frecuencia. Sería interesante, Enrique, que algún día nos cuentes algunas estadísticas que tengas al respecto.
Soy una persona con una edad cercana a los 80 con estudios primarios pero interesado en todo lo que pasa en el mundo de la ciencia, la tecnologia y los medios de comunicación sobre todo lo que dicen como lo dicen y cuando lo dicen. y no sabia lo que era un/a influencer. Soy un lector asiduo de tu Blog a veces, por desgrecia muchas, no entiendo ni papa de lo que estoy leyendo pero me esfuerzo en entenderlo. Si tu eres un influencer puedes sentirte orgulloso eres, para mi, uno de los mejores
¿No agobia un poco saber que tus opiniones influyen tanto en la sociedad?
Felicitaciones, Enrique, por haber sido incluido en esta lista de Forbes, pues lo mereces y en realidad eres más conocido que mucha de la gente que ahí se menciona. A mí el término influencer no termina de convencerme, pues a lo largo de los últimos años se ha usado para denominar a personas tan dispares como Kim Kardashian y Malala Yousafzai, y considero que en tu caso se podría decir, más bien, que eres un formador de opinión (opinion shaper), creador de opinión (opinion maker) o líder de opinión (opinion leader).
Como latinoamericano debo decir que me sorprende no haber oído hablar de casi ninguna de las personas incluidas en dicha lista, lo que significaría que son menos influyentes de lo que Forbes piensa, ya que no somos pocos los latinos que buscamos contenidos producidos en España. En mi caso, únicamente había oído hablar de ti (Enrique Dans), así como de Julio Alonso, Antonio Cambronero, Juan Francisco Calero y El Rubius (que no sé por qué es famoso, pero efectivamente lo conoce media humanidad). Es claro que alguien mucho menor que yo identificará otros nombres y sería interesante que otros lectores no españoles dijeran qué personas de dicha lista les resultan conocidas.
Enhorabuena! Aquí una de tus seguidoras que no se pierde ninguno de los artículos, aunque alguno sea leído de forma transversal por mi desconocimiento de ciertos temas. Soy también seguidora de otros «Influencers» y por eso te puedo decir que tú eres de los buenos, serios y especialmente «coherente» que es lo que más se echa en falta en estos tiempos.
Gracias por seguir compartiendo tus opiniones.
Felicidade Enrique!
De la lista Forbes de los 100 más influyentes a la de los 100 más ricos solo hay un paso!
A mi eso de «influencer», siempre me ha dado a pensar que si alguien te «influye», poco criterio propio tienes…
Prefiero, al menos en tu caso, hablar de «COMUNICADOR» (y asi, en mayusculas… :P
Dicho lo cual, Felicidades…!!! y no lo dejes.. XDD
Enhorabuena, Enrique, te lo mereces a tope.
Hay algo genial en tu página, que sigo desde el primer día: siempre hay algo de valor.
Por un lado, el más claro, me alegro de coincidir con una de las pocas hembras (o lo que decida ser) como es Belén. Hasta en su resalte de la transversalidad en la lectura.Desde que llegué, noto poca presencia femenina (o no binaria, dado el matiz de los comentarios). Pero hay que reconocer que la tecnología está más copada por el machismo, y que, desde luego, soy muy poco partidario de las cuotas obligatorias.
En el lado más «oscuro», del arte de comentar, está mi discrepancia con el término influencer (en inglés).
Te considero más cercano a los autores de la famosa Enciclopedia Francesa, que a los rubitos artistas del comentario banal y mágico, que tantas neuronas hacen colisionar por minuto en la cabeza de la juventud planetaria (rica o pobre). Esos, para mi, seguirán siendo los «influencers» de la internet. Incuídos los nuevos gurús cibernéticos más «serios», tipo Ibai.
Como con el reguetón, siempre diferencio entre la música y el ruido externo, que tanto intenta distorsionar el sonido armonioso (e incluso violento) de la naturaleza.
Y por otro lado, siempre hay un lado diverso (ni la Fuerza tiene solo dos). Soy de los que consideran que los enciclopedistas no se sentían para nada revolucionarios, solo «meros» compiladores/transmisores de información científica desperdigada, que consideraban fundamental para colaborar en la tarea evolutiva de la naturaleza.
Enhorabuena, Enrique. Me ha hecho mucha ilusión aparecer en la lista junto a ti. Sin tu libro «Todo va a cambiar» no habría sido posible. Muchas gracias por todo.