Tim Wu es una de esas personas cuyos artículos y publicaciones siempre conviene leer: profesor en la Universidad de Columbia, abogado, experto en tecnología y en sus efectos, y creador original, entre otras cosas, del término «neutralidad de la red», la suya no suele ser una opinión para ser tomada a la ligera.
Su último artículo en The New York Times, «A TikTok ban is overdue«, plantea una tesis sumamente dura y que llevo mucho tiempo avanzando: que por muy ideal e interesante que nos pueda resultar la idea de una internet global, no tomar ningún tipo de acción contra China, un país que ha instrumentalizado la red hasta más allá del límite de lo imaginable, es sencillamente de tontos.
Un planteamiento de asimetría que muchos más, indudablemente, también defienden: China no solo dejó fuera de su red a las empresas extranjeras y las privó del acceso a su enorme mercado, sino que además, la ha interpretado como un arma de influencia política, que no ha dudado en utilizar para bloquear el acceso de sus ciudadanos a la información, para vigilarlos, o incluso para interferir en la política de otros países. En esas condiciones de asimetría, seguir planteando que internet es una red universal y que las empresas chinas tienen ahora derecho a interpretar que el mundo es su mercado y que pueden extenderse por él es, simplemente, no tener sentido de la justicia. ¿Por qué razón debemos seguir dando acceso a China a los mercados de internet de todo el mundo, si el país se niega expresamente a seguir las reglas de la Internet abierta?
El planteamiento de Wu puede estar justificado: las actuaciones de China, en efecto, llevan ya muchos años siendo claramente asimétricas, hasta un límite completamente injustificable. Si alguien ha hecho méritos para romper la idea de una internet global con reglas únicas y un acceso ilimitado a todo tipo de recursos, esa ha sido China, seguida, con una importancia y una influencia desmesuradamente menor, por países como Irán, Cuba, Rusia, Arabia Saudí, y recientemente, Turquía o India. Pero China ha sido la que ha marcado la pauta, la primera que interpretó que la globalidad de internet podía ser sometida a los intereses de su gobierno, y la primera que convirtió en completamente habitual el hecho de teclear la dirección de una página determinada y en perfecto funcionamiento desde dentro de sus fronteras, y que esa página no enviase ningún contenido.
¿Quiere eso decir que debemos plantearnos, más de veinte años después de la creación de la Gran Muralla por el gobierno chino, empezar a responder al gigante asiático con la exclusión de sus empresas? La idea me parece sumamente complicada, y además, no tengo nada claro cuáles serían sus efectos. La estrategia china a lo largo de las últimas décadas, por asimétrica que, efectivamente, haya podido ser, parece claro que ha funcionado: las cadenas de valor de medio mundo dependen de China, nacen allí o pasan por allí de algún modo. Muchísimos de los productos que consumimos en el mundo están fabricados o ensamblados allí, y cada día más, muchos están diseñados allí. Del «assembled in China» al «made in China», y de ahí, al «engineered in China». Renunciar a ese nivel de globalización sería claramente perjudicial para todas las compañías del mundo, especialmente las norteamericanas.
Por otro lado, cualquier movimiento en ese sentido evoca una división del mundo en bloques, siguiendo el modelo geopolítico anticipado por George Orwell en su «1984», y supondría una indudable escalada de las tensiones. Excluir a China del mapa internacional del comercio es una acción descomunal, que los Estados Unidos únicamente podrían plantearse buscando un consenso amplísimo a nivel mundial, consenso en el que, indudablemente, habría países que se alinearían en el bloque representado por China, y otros que optarían por tratar de defender a toda costa su no alineamiento.
La tesis de Tim Wu es que, por mucho que Donald Trump pueda ser la figura equivocada para defender ese tipo de tesis y que la forma unilateral en la que ha tratado el tema de TikTok y WeChat pueda tener escaso recorrido, es ya el momento de que el mundo se despierte, abra los ojos, y vea a China como lo que es: el primer país que vulneró hasta el límite las leyes de una internet abierta, y el que se ha aprovechado de ellas hasta el límite. Seguir planteándose aceptar algo así y seguir sin hacer nada al respecto es, sencillamente, seguir haciendo el tonto.
Al final, la creación de una red abierta y global como internet y su evolución para convertirse en splinternet va a terminar teniendo muchas más consecuencias geopolíticas de las que algunos pensaban. Para que algunos pretendan que no es la tecnología la que domina el mundo…
The original article was also published on Forbes, «China is driving a wedge into the internet: what can we do about it?«
No seamos tontos, simplemente se sigue comerciando con China porque a Occidente le pone cachondo comprar barato….No es culpa de China es de Occidente.
Resulta que opinamos sobre Trump que es lo peor porque quiere romper esa dinámica con China. Hombre… pues alguna cosa puede acertar… aunque sea un porquero.
Lo mismo que podiamos hacer nosotros (Europa) con EEUU por la que nos lía con el aceite, el vino, las aceitunas,… bastante dificil es vender a un «gocho americano» que cocine con aceite de oliva en vez de con sebo para que encima tenga el 25% de arancel.
Gracias por tus artículos
Entonces, ¿en qué quedamos?, seguimos respetando el statu quo actual, aunque China haga lo que le da la gana, o las empresas europeas y americanas vuelven a crear y ensamblar sus productos en Europa y América.
Igual que sucede con internet tambien con los bienes producidos allí en respecto a los derechos laborales y el medio ambiente.
Si en España se respetaran los derechos laborales y el medio ambiente como en China seguro que los bienes que fabriquemos serian más baratos. Eso sí quedaria un país contaminado y un población enferma (con poca salud y una baja calidad de vida).
Por cierto. Hace mas o menos tres años, se acabó la neutralidad de la red en Estados Unidos. Los «profetas digitales» auguraban todos tipo de males debida o a aquella ley, que acababa con la neutralidad de la red.
Sin embargo, no he tenido ninguna noticia de que Internet en USA sea un caos y que las pequeñas empresas hayan quedado fuera de Internet.
Ello puede ser por dos causas, que Internet en USA sea tan cerrado, como lo es en la en China y que se censure con todo rigor cualquier noticia que dude de la bondad del «Fin de la Neutralidad de la Red», o bien que los males que auguraban los «jeremías digitales» no se hayan cumplido.
¿Alguien tiene noticias al respecto?
Enrique, espero que no pierdas la perspectiva con este tema. Esto es como si un cierto día Dubai se convirtiera en un centro financiero más poderoso que Wall Street. Si eso llegara a ocurrir, ¿qué sucedería después? Pues por lo visto, presiento que en ese caso el «mundo» (o más bien su jefe, desde la oficina oval) se daría cuenta, por fin, de que dicha ciudad (y emirato) no es una democracia, que hay discriminación contra las mujeres y que su nivel de defensa de los derechos humanos resulta cuestionable. Ante esa situación, se esperaría que el «mundo» (o sea el jefe y los que haya logrado convencer) reaccionara de manera adecuada y realizara algún tipo de bloqueo contundente en contra de la mencionada ciudad.
No te dejes engañar por Donald Trump, Enrique. El gobierno chino es el que es desde hace muchos años. Naturalmente no hay que cerrar los ojos ante las injusticias que ocurren en otras partes del mundo, pero en este caso se trata simplemente de la venganza de Trump ante los que él considera que están detrás del boicot al acto inicial de su campaña electoral en Tulsa, Oklahoma.
Aislar a china tecnológicamente tanto en HW como SW y contenido (internet) es imposible. Es como si Europa hubiese marginado a USA en plena guerra fría de los 60/70 porque no nos gustaba como se introduce la CIA en UK y Alemania, hasta el tuétano, y en Francia algo menos, Ah De Gaulle!
Pues ahora lo mismo, habrá discrepancias en como enfrentarse a China como antes las hubo en como enfrentarse a la URSS. Unos más duros, otros más blandos y flexibles. Al final a la URSS se la derrotó porque ella sola no pudo asumir los costes la carrera tecnológica contra occidente, los PC de la URSS eran malísimos, Glonass mucho peor que GPS…etc, etc, etc.
Ahora creo que será diferente. China puede aguantar mucho más que lo que la URSS hizo en los 60 y 70. A disfrutar observando estratégias y aprendiendo cosas en esta nueva guerra fría, y al igual que la anterior, podemos perderla y hacernos mucho daño, o ganarla y conseguir una sociedad mejor.
Curiosamente la teoría de WU , » ¿Por qué razón debemos seguir dando acceso a China a los mercados de internet de todo el mundo, si el país se niega expresamente a seguir las reglas de la Internet abierta?» , es la que he mantenido yo aquí en diversas ocasiones con motivo de discusiones sobre el 5G y Tic Tok.
Sin embargo, hemos de reconocer que los tecnólogos somos pésimos pitonisos,
Si fallamos en predecir algo que es nuestra especialidad, como eran las consecuencias del fin de la «neutralidad en la red» ¿Cómo vamos a acertar en algo que se aleja tanto de nuestra especialidad como es la geoestrategia?
Que consecuencias tendría aislar a China en vista de que ellos no levantan su Telón de Bambú. Pues ni idea. ¿Sabríamos hacer bombillas LED en Occidente? ¿Y suministro médicos?
http://spanish.xinhuanet.com/2020-02/09/c_138767862_4.htm
Nos hemos dado cuenta tarde de que China jugaba con otra baraja, ahora ya es la Banca.
Pongo un LIke
Sorprendido me has :)
Está muy bien la metáfora de la baraja. Pero pienso que tiene un fallo, ya que todas las barajas se basan en lo mismo : la combinación del consumo energético, con el manejo del comportamiento humano.
Y en ese campo combinatorio no hubo imperio chino, ni mandarín ni maoista, que sobreviviera al despertar humano por la libertad. Y por la necesidad, más apremiante (aparentemente), de calentarse ,y no solo con calor externo, si no con la que resulta aún más básica : alimentarse.
Ni el burro de Stalin consiguió que la macarra pregunta leninista de «para que la libertad», tuviera un recorrido mínimo en términos de tiempo evolutivo.
Y poner de positivo que el carcamal de Trump abriera un frente con China, es como decir que Hitler fue un gran campeón estratégico, por abrir (y después de Napoleón) un frente con Rusia. ¡Por favor!
Leo este artículo en otra parte y jamás le hubiera atribuido a usted su autoría… en estado de shock me ha dejado.
Por si sirve de algo: la fábrica de Apple en la India comenzará el año que viene a fabricar iPhones de última generación. Pasito a pasito.
Y según avance la robotización en la fabricación de todo tipo de productos, más fácil será huir de China.