Acabo de volver a casa tras la que ha sido mi primera clase presencial desde principios del mes de marzo. Poquísimos alumnos en clase, la mayoría desde sus casas a través de Zoom, muchísimas mesas con una X que las marca como vacías, mamparas de metacrilato en la primera fila, cámaras termográficas en la puerta, dispensadores de gel hidroalcohólico por todas partes, cámaras y monitores adicionales en las aulas… nada siquiera mínimamente parecido a algo que pudiésemos pensar en llamar «normalidad».
Y mi clase ha sido en IE University, una institución que se ha tomado enormemente en serio las medidas de seguridad y que cuenta con los medios para instalar todo lo que sea necesario instalar. He salido de mi casa, me he metido en mi coche, he aparcado a pocos metros de la puerta, y he dado mi clase. Sin más problemas, sin ninguna inquietud ni percepción de peligro. Pero si salgo de ese entorno y miro alrededor, lo que veo hace cualquier cosa menos tranquilizarme: personas con aparente sensación de que «todo ha terminado», con la mascarilla a medio poner dejando la nariz fuera, colgando de una oreja o en la papada, yendo a fiestas… y cifras de contagios que vuelven a subir.
No, esto no ha terminado. No tengo el menor incentivo para ser tremendista, pero esta pandemia está muy lejos de haber concluido. No, no estamos esperando ninguna segunda fase: estamos aún completamente metidos hasta el cuello en la primera. La Organización Mundial de la Salud está avisando de todas las formas posibles: las infecciones están aún en fase ascendente, y especialmente en algunos países. El mapa con el que ilustro este artículo, tomado de una impresionante infografía de The New York Times, «How the virus won«, y que muestra el número de casos confirmados entre el 9 y el 23 de junio, lo deja meridianamente claro: presionados por volver a abrir sus economías, muchos países decidieron ignorar la evolución de la transmisión de la enfermedad, y están experimentando fortísimas oleadas de infecciones, en algunos casos con una elevada letalidad. El mapa es aterrador. Y los que podríamos dibujar en Brasil, México, Perú, Chile, Rusia o India no son para nada mejores.
El caso de los Estados Unidos es especialmente grave: llevados por la grandilocuencia de un presidente que parece estar ya en la fase de «emperador loco» capaz de tocar la lira mientras su país arde, y por una campaña de muchos de sus seguidores y de bots que presionaban para la apertura y que en muchos casos se niegan a utilizar mascarilla, los Estados Unidos parecen haber decidido colectivamente ignorar la pandemia, algo que está dando alas al ritmo de la infección. Múltiples estados están evolucionando fuertemente al alza en el número de casos y de víctimas, otros están falseando las cifras de tests o de víctimas, o respondiendo de formas que llevan a la pandemia a evolucionar a peor. El mundo está empezando a poner a los Estados Unidos en cuarentena.
La respuesta a la pandemia del ejecutivo de Donald Trump, junto con sus homólogos – nunca mejor dicho – en Rusia y Brasil, Vladimir Putin y Jair Bolsonaro respectivamente, ha llevado a su país a encabezar el ranking mundial por número de casos y de víctimas, algo completamente incomprensible tratándose de una superpotencia mundial, de uno de los países más ricos del mundo, con algunos de los mejores científicos, innovadores, emprendedores, universidades, ejército y funcionarios gubernamentales del mundo. Como recientemente afirmaba un artículo de Max Boot en el Washington Post, si Donald Trump hubiese sido presidente durante la Segunda Guerra mundial, este artículo estaría escrito en alemán.
A medida que evoluciona, la pandemia se vuelve menos democrática: ahora, incluso en el inexplicable caso de los Estados Unidos, se ceba con países pobres y con comunidades que, simplemente, no pueden permitirse el lujo de pensar en un confinamiento, porque carecen de recursos económicos para soportarlo. Además, ahora sabemos que los factores de riesgo no se limitan a la edad, sino que incluyen afecciones renales, pulmonares, cardiovasculares, diabetes, obesidad, y de otros tipos.
La evolución de la pandemia está dejando claro, sobre todo, lo espantosamente malos que somos a la hora de aprender unos de otros: la aterradora evolución de los Estados Unidos tras el fin de las medidas de confinamiento o los nuevos brotes en otros países no están aparentemente enseñando nada a los países que van por detrás, o a ningún otro: somos muy rápidos olvidando, y eso nos convierte en mucho más vulnerables ante nuevas oleadas o ante otras pandemias.
¿Qué se puede hacer ante una pandemia aparentemente incompatible con una gran parte de la actividad económica? Si tu compañía está lanzando el mensaje de la reapertura y la vuelta a la normalidad mientras el número de casos sigue multiplicándose en todo el mundo, ten cuidado: los consumidores no olvidan fácilmente, y otras empresas, como Apple, están haciendo exactamente lo contrario. Si como en España, llevados por las prisas por reabrir un mercado turístico del que depende en gran medida la economía del país, nos dedicamos a importar casos de países en los que la infección está aún en fase ascendente, seguramente lo pagaremos muy caro.
Pocas veces un aprendizaje fue tan difícil y tan caro. Pero al final, mucho me temo que tendremos que aceptar dos grandes verdades: la primera, que nunca volveremos a la normalidad, sino que tendremos que construir otra normalidad completamente diferente. Y seguramente, esa normalidad conlleve interpretar la economía o el trabajo de maneras muy distintas a como lo entendíamos, desaprender algunos de los axiomas que llevamos décadas tomando como verdades absolutas. De hecho, contrariamente al pensamiento general, es muy posible que no estemos siquiera esperando a tener un tratamiento o una vacuna que nos permita volver a la normalidad, porque volver a lo que era insostenible nos llevará de nuevo a una situación de insostenibilidad.
No, esto no se ha terminado. Nos queda aún mucho por desaprender.
This article is also available in English on my Medium page, «The pandemic isn’t over yet: we still have so much to unlearn«
Yo solo digo una cosa: estamos con poco más del 5% de la población que ha tenido el virus (tienen anticuerpos), y se necesita según los médicos en torno al 60% para alcanzar la inmunidad de grupo. El que se piense que esto ha acabado simplemente no sabe de lo que habla.
Que si el virus volverá en otoño dicen… suerte tendremos si no tenemos otra oleada masiva de infecciones en julio.
No te molestes, en España el exceso de muertes por la pandemia acabó el 22 de Mayo, es decir hace un mes, y las estadísticas no vislumbra una segunda oleada, que en cambio si es probable que pueda producirse en el otoño.
Con la cuarentena nunca se trató de evitar los contagios, sino simplemente reducir la velocidad de contagio, evitar los colapsos hospitalarios, «rebajar la curva» decían, lo que no era reducir en numero de contagios, sino repartirlos en un periodo mas largo..
Por ahora, y se espera que se siga, estamos muy lejos de esos colapsos hospitalarios, por lo tanto, no hay razón para evitar los contagios, que en solo un uno por ciento son peligroso y centrado sobre todo en ancianos. Los posibles contagios que puedan haber ahora, no hacen mas que reforzar el «efecto rebaño», algo que es positivo de cara al otoño.
Por supuesto que aun muere alguien de coronavirus, pero son muchos menos, que los que pueden morir de otras muchas enfermedades, y por supuesto puede haber infecciones en lugares donde no llego la primera oleada de la pandemia, Casi seguro, que con la diáspora veraniega se producirán casos de rebrotes en pueblos que hasta ahora se habían librado.
Pero en mi opinión, solo los ancianos como yo, que posiblemente no la hemos pasado, tenemos que tener especial cuidado, Un chico de 20 años lo mejor que le puede pasar si ha de contagiarse , es hacerlo en este momento, cuando se le pueden dar todo tipo de ayudas hospitalarias, en el caso de ser la persona, que con menos de un 1% de riesgo, le toque la china.
La situación a principios de marzo también era de brotes aquí y allá, que trataban de controlar y no pudieron. El 14 de marzo acabamos teniendo el estado de alarma.
La cuestión es: que mucha gente (no toda) mantenga el metro y medio de separación y se evite el contacto físico, además de mamparas, mascarillas (que ya había gente que las usaba en marzo, aunque menos), etc ¿va a evitar una segunda oleada de contagios en el verano?
Si es así, ¿nos hubiera bastado con el metro y medio, etc. para evitarnos el estado de alarma en marzo? Varias de las medidas preventivas de entonces eran las mismas o casi que las de ahora.
La expansión de un agente infeccioso sigue una progresión geométrica. Si la razón es inferior a 1 el virus irá a menos, que es lo que pasó en el estado de alarma. Si la razón es superior a 1, volveremos a tener una explosión más pronto que tarde. Esos brotes aquí y allá parecen un claro indicador de que la razón ha vuelto a ser superior a uno.
Efectivamente la gente no entiende las progresiones geométricas con r > 1 (aunque sea ligeramente). Solo ven que son unos pequeños puñados de contagiados.
Ojalá me equivoque pero a falta de vacuna/tratamiento, con las medidas adoptadas:
– Distancia de 2m: la gente se separa 1,5m.
– Distancia de 1,5m: la gente se separa 1m
– Distancia en las oficinas: se juntan sin distancia en los desayunos (30m) o en el restaurante (1h) fuera de la oficina.
– Mascarilla: se lleva en el cuello, o en la mano, u «olvidada en casa o en el coche». Detallazo: en la app de Amazon Prime se puede reportar como queja de la entrega que el repartidor no llevaba mascarilla.Y a día de hoy mucha gente no sabe que la mascarilla higiénica no le protege al que la lleva.
– Mampara en mostrador de establecimiento: se bordea y se habla directamente a la cara del dependiente (hacen falta cristales blindados como los bancos de los 80…)
– Lavado manos 45-60s: 15s si eso…
– Potenciación del teletrabajo: en cuanto se pueda, de vuelta a la oficina lo máximo posible (4 días/semana los funcionarios sin hijos, menos mal que han reculado)
– Aforo 1 persona/ascensor: menuda pereza subir escaleras o esperar…
– Sentido de la circulación de entrada/salida: ni caso.
Y así todo…
Creo que hablas solo del territorio nacional, Gorki y ese es tu fallo.
Mira, leía hace ya algo más de un mes, creo que en Variety, una reflexión interesante acerca del sistema (total) de Estados Unidos.
Mucha gente no querría salir de su casa por miedo a estar infectada. Pero no por miedo a morirse, que también, sino en primera instancia porque una sanidad como la de Estados Unidos, no permite que te pongas enfermo y te vayas de rositas.
Es decir, ya el ciudadano ni tan siquiera Puede pensar en morirse sino quedarse en la calle porque a saber a cuanto puede ascender una factura por atención Covid en USA.
Justo hoy, en mi empleo hemos vuelto a la actividad. Trabajo para Grupo Sade, que viene a ser una piedra angular en el festival de Cine de San Sebastián.
Pero claro, todo el calendario se ha ido a la mierda desde el momento en el que New York no abrirá cines cuando se esperaba, Los Ángeles tiene cifra Récord de contagios y todo a expensas del tercer gran mercado Americano, San Francisco.
Todo el mercado nacional depende de esos tres territorios, pero… todo el mercado internacional…, depende de esos tres mercados. Así se ha retrasado Tenet y Mulan, sin ir más lejos.
Y afecta de lleno a la actividad en Donosti en el Sector.
Quiero decir, que podemos estar contentos pero que se acaba por caer en los mismos errores. Hoy comentaba Josep Parera (uno de los mejores periodistas de cine y que realmente controla conocimientos de movimiento de mercado) que dudaba que se fueran a hacer las cosas como hace décadas, donde las películas iban a mantenerse durante X tiempo en la taquilla (el bueno, el feo y el malo estuvo un año en cartel en Francia, por ejemplo). Ahora, es imperante que Mulan rompa taquilla los tres primeros días en todos los mercados. TODOS.
Porque de lo contrario es un fracaso y se venderá como tal. Es decir, estamos sumidos en una huida hacia adelante donde todo debe pasar por ser un éxito a toda escala.
¿Tiene sentido no mover intereses comerciales en una España donde se puede acudir al cine, ya de forma considerable, porque en San Francisco tal o cual? ¿Y otros mercados?
No tiene ningún sentido, pero los estudios lo apoyan, la prensa sigue en esa corriente y los aficionados se tiran tartas a la cara dependiendo el súper héroe en estreno.
Parece que nadie quiere bajarse de un burro que está más que fatigado.
solo los ancianos como yo, que posiblemente no la hemos pasado, tenemos que tener especial cuidado
Pues los ancianitos de mi barrio, o se creen superheroes o son unos suicidas en potencia, porque les he visto hacer de todo, desde saltarse el confinamiento (paseando arriba y abajo con una barra de pan debajo del brazo), hasta ahora, llevar la mascarilla «de muñequera», saludar, abrazar y besar… XDDD
Ya sabeis, creo, que mi mujer es enfermera, y es sentarnos en una terraza (la unica de mi barrio que «cumple» medidas) a tomar algo, y horrorizarse con todo lo que ve… ella tambien dice que en Julio tendremos sorpresa…
No haces mas que darme la razon, ya lo digo mas abajo.
Si no henos sido capaces de frenar el SIDA, ¿Vamos a evitar que la gente socialice a menos de dos metros?
Así es. Y ahora es mucho mas difícil que se colapse el sistema porque está mas preparado. Los contagios como bien dices son relevantes en relación a la población en riesgo y la cantidad de camas disponibles por municipio – cosa que debería adaptarse por lo menos durante lo que dure, a la temporada estival o el aumento del turismo. Habrá mas contagios seguro pero solo afectará a menos del 5% de la población. Coincido
Directamente desde la Organización Mundial de la Salud
«Pasaportes de inmunidad» en el contexto de la COVID-19
Todavía es una hipótesis, pero en principio parece que la inmunidad dura entre 6 y 12 meses, tomando como base los virus del resto de la familia del Coronavirus.
Parece que el hijo de puta, nos va a poner a parir por un buen par de años…
Lo que parecen olvidar todos aquellos que presionan para que se abra todo y regresemos a la «normalidad» de antes es que mucha gente, yo diría que la mayoría, sigue sin confiar en poder evitar el contagio con las «medidas» que aplican bares, restaurantes y tiendas varias.
Nosotros no hemos vuelto a ir ni a un bar, ni a un restaurante ni a ningún otro tipo de establecimiento al que no sea imprescindible ir.
Mucha de la gente que conozco hace lo mismo, con lo que por mucho que se abra la gente no va a volver de un día para otro.
El que lo hagas me parece perfecto a para ti, con ello consigues indudablemente, reducir y en mucho tu probabilidad de contagiarte.
Pero como indica Dans «Pero si salgo de ese entorno y miro alrededor, lo que veo hace cualquier cosa menos tranquilizarme: personas con aparente sensación de que «todo ha terminado», con la mascarilla a medio poner dejando la nariz fuera, colgando de una oreja o en la papada, yendo a fiestas… y cifras de contagios que vuelven a subir.»
Esa es la realidad y lo cierto es que tal proceder no tiene reflejo en las estadísticas que miden el número de muertos en España (MO MO),
Lo que indica, o que los contagios son leves y que superados. aumentan las seguridad de todos, o que no los hay, debido a que hemos entrado en el verano y el sol y la sequedad del ambiente esterilizan antes los posibles focos de contagio y estos se producen mas dificilmente
Como digo que personas sanas y jóvenes se contagien su pone un riesgo muy moderado, para ellos y mayor seguridad para el conjunto, Solo los viejos y mas aun si tiene problemas respitatorios, deben proceder con prudencia tratando de esquivar el contagio, pues en ellos hay muchas mas probabilidades de que genere graves complicaciones..
Lo mas peligroso de cara al otoño es que queden grandes bolsas de población sin anticuerpos, pues con ello aumenta el riesgo que en otoño vuelva una gran oleada, que nuevamente sature los hospitales.Si una buena parte de la poblacion goza de anticuerpos se reduce por un lado el riesgo de contagios y por otra parte lógicamente los contafiados no serán ellos.
Pero Gorki, muchos de los brotes que se están detectando son de decenas de contagios. Eso es incompatible con la idea de que el sol y la sequedad impiden los contagios. Si el virus estuviera teniendo ahora gran dificultad para contagiar, ya fuese por el clima veraniego, ya por el metro y medio de separación, o por cualquier otra causa, entonces cualquier brote que se detectase tendría que ser de muy pocos casos, incluso de un solo caso muchos de ellos.
En lugar de eso, el promedio de contagios por brote está siendo de 20 en Andalucía, que no es precisamente la región más fría de España.
Me remito a las estadísticas, La media de muertos por todos los conceptos en España en estas fechas es de unas mil personas,
Muy probablemente morirán por accidentes de trafico y ahogados en el bañio mas personas que de Covid, ¿Aconsejas no viajar ni ir a bañarse?
El hecho de vivir supone un riesgo. P.odemos encerrarnos en una urna de cristal, con el aire filtrado y depurado, pero eso no es vida.
Si no henos sido capaces de frenar el SIDA, ¿Vamos a evitar que la gente socialice a menos de dos metros?
El problema no son los muertos de ahora, también a principios de marzo había pocos muertos. El problema es que es una progresión geométrica. Si es de razón mayor que uno, el crecimiento al principio puede ser muy lento, incluso inapreciable, pero después te viene el estallido.
Por cierto, en Lisboa varios distritos vuelven al confinamiento.
Pero es que aunque sólo tengan que ser ingresados el 1% de los menores de 30 años con lo rápido que se extiende la enfermedad y con lo que dura la convalecencia seria ya una barbaridad.
Supongamos que haya 15 millones de menores de 30 años, si hay que ingresar al 1% eso serían 150.000 que saturarian la sanidad. Incluso si solo hay un 10% de esa cantidad ingresados en un momento determinado también la saturarían. Incluso un 1% de eso no sería ninguna broma.
Haz los números y las especulaciones que quieras, pero lo cierto es que hoy estamos muy lejos de la saturación de los hospitales. que es lo que se intentaba, «aplanar la curva»,
Yo, lamentablemente, veo que esto no tiene solución posible.
Los países no pueden estar permanentemente confinados porque la economía se desploma (más aun en países cuya principal fuente de ingresos es el turismo como España) y es peor el remedio que la enfermedad … y por otro lado, a la mayoría de la gente se la pela absolutamente todo y no cumple ninguna de las recomendaciones, como tú mismo comentas en el artículo. Y cualquiera que sea joven y tenga redes sociales habrá visto como el finde pasado y la noche de San Juan practicamente toda la población en esa franja de edad salió de fiesta y este finde sucederá otro tanto.
A ver para ser un poco disruptivo (Factores de riesgo lo pone claro) https://arstechnica.com/science/2020/06/younger-people-not-immune-from-severe-covid-19-new-cdc-guidance-suggests/#p3. Mas de 70, con subyacentes – ya así ES salvo rarísimas excepciones – Menos del 5% (o cerca) de los contagiados en el mundo sufren problemas graves. Pregunto: Porque aislar al 95% restante. Cuando vienen los astronautas de la luna los meten en cuarentena a ellos o al resto del planeta?. A nadie se le ha ocurrido la brillante idea de aislar a la población en riesgo 5% y formar un sistema de «alarma» para todos ellos. Colocando unidades de aislamiento próximas (en cada barrio) completamente equipadas (podrían haber sido los ambulatorios por ejemplo. A toda esta gente la sanidad del mundo los tiene perfectamente localizados con apretar un botón. – nada a nadie se la ha ocurrido – a aislar al resto que lo mas probable es que nada tengan (como la mayoría de los que conocemos políticos y demás que los solucionaron con Paracetamol, Agua y un tiempito de reposo). Carece de toda lógica ANIQUILAR al sector privado mientras el público – como si nada – ni un ERTE público (podrían haberlos echo) ninguna reducción salarial – NADA – da que pensar. España tuvo y tiene 4/5 meses mas casos que USA. España tiene 45 millones de habitantes y USA 350 millones. Los contagios solo son relevantes respecto la población en riesgo – y esto es un dato no una suposición -. Lógicamente si te contagias puedes llevarlo a alguien que está en riesgo si…deberían estar «alarmantemente supervisados y aislados en lo posible» ellos…el resto vida normal con precauciones. La saturación de los sistemas sanitarios era inevitable…y ninguna evidencia hay de que sin aislamiento hubiera sido peor (ausencia de grupo control). De hecho para poco sirvió, cuando empezó había 100 y cuando termino 40.000 muertos (se estima)
Hay sobrada evidencia de que el confinamiento sí para los contagios, como así sucedió en China, España, y otros muchos países. Sí hay lo que llamas «grupo de control». En Gran Bretaña trataron de hacerlo de otra manera, permitiendo los contagios, y Boris Johnson tuvo que recular. En USA Trump y compañía también lo están haciendo de manera diferente, y el resultado está siendo un desastre.
Hablas de un 5% de la población como si tal cosa, pero eso en España son 2,3 millones de personas. No, no puedes permitirte 2,3 millones de personas cayendo enfermos de gravedad porque viven en un país donde los 43,7 millones restantes se han infectado a mansalva en poco tiempo. Eso sí que sería una saturación de los hospitales y las UCIs tan bestial que la inmensa mayoría de esos 2,3 millones no iban a poder recibir ningún tratamiento, con el lógico aumento estratosférico de la mortalidad.
Y sí, el confinamiento sale económicamente caro, muy caro. Pero lo que es funcionar, funciona. En España, sin ir más lejos, acabamos teniendo solo un 5% de la población con anticuerpos, con lo cual está claro que al virus todavía le quedaba mucho terreno virgen en el que expandirse (según los médicos, la inmunidad de grupo se alcanza en el 60%). Sin embargo, pasamos de los casi mil muertos diarios a entre cero y dos al día.
¿De verdad crees que esto no fue por el confinamiento? Entonces, ¿cuál fue la causa? ¿La baba de caracol? ¿Las Power Balance? Oh, wait! ¡Pero si la gente ya hace años que no usa las Power Balance!
Tan solo quiero que me expliques esto, cómo es que pasamos de los casi mil muertos diarios a los casi ninguno, con un 95% de la población todavía sin infectar. Cuando me lo expliques, tal vez esté dispuesto a dar por bueno tu temerario «ninguna evidencia hay de que sin aislamiento hubiera sido peor».
Hasta las pelotas de expertos de pacotilla, de super valientes y egoistas. Parce que los jóvenes tienen menos riegos para si mismos pero son tan peligrosos como todos a la hora de transmitir. No se trata de MIS circunstancias, valores, ideas y creencias, se trata de que existe el prójimo, de empatía, de unos mínimos valores, de respeto,… lo contrario es o puede ser una vía perfecta para la muerte del otro. El miedo es libre y nadie me lo puede gobiernar, el desconocimiento, incluso entre científicos, todavía es muy grande. Demasiados listos tipo Djokovic, Bolsonaro, Trump o Putin, que al margen de la salud y ética han hecho una muy mala apuesta también para la economía.
Asi, sin mas…
https://elpais.com/espana/madrid/2020-06-26/mas-de-100-dias-arrastrando-el-coronavirus.html
No se trata de lo que YO opine, se trata de lo que ELLOS hacen y todos estaís de acuerdo que no se cumplen las normas que se dieron,
– Distancia de 2m: la gente se separa 1,5m.
– Distancia de 1,5m: la gente se separa 1m
– Distancia en las oficinas: se juntan sin distancia en los desayunos (30m) o en el restaurante (1h) fuera de la oficina.
– Mascarilla: se lleva en el cuello, o en la mano, u «olvidada en casa o en el coche». Detallazo: en la app de Amazon Prime se puede reportar como queja de la entrega que el repartidor no llevaba mascarilla.Y a día de hoy mucha gente no sabe que la mascarilla higiénica no le protege al que la lleva.
– Mampara en mostrador de establecimiento: se bordea y se habla directamente a la cara del dependiente (hacen falta cristales blindados como los bancos de los 80…)
– Lavado manos 45-60s: 15s si eso…
– Potenciación del teletrabajo: en cuanto se pueda, de vuelta a la oficina lo máximo posible (4 días/semana los funcionarios sin hijos, menos mal que han reculado)
– Aforo 1 persona/ascensor: menuda pereza subir escaleras o esperar…
– Sentido de la circulación de entrada/salida: ni caso.
Hombre Gorki, si copias/pegas al menos pon la referencia al autor XDDD
Yo soy muy estricto con el cumplimiento de esas normas, incluso mas, y no han sido pocos los «incidentes» que estoy teniendo estos dias en la calle por culpa de la relajacion de la gente… porque encima se te rebotan si les adviertes…
Lo jodido del asunto es que vamos a pringar por igual, los que respetamos y los que no. Los primeros por culpa de los segundos…
Tampoco. Si sigues todas las normas, las probabilidades de que te infectes son mínimas.
El problema es que casi nadie sigue esas normas….
Ya no es cuestion de si YO me infecto o no, sino de la duracion de pandemia y posibilidades de que ocurra…
Y seguir las normas, tampoco te «invulnerabiliza», siempre habra un resquicio por donde se puede colar el bicho…
El proiblema, es que aunque tu sigas toda recomendacion, si el resto no coopera… mierda
Off Topic (o no)
– Dime padre, Por que diste orejas a los humanos, si nunca escuchan?
– Hijo mio, dentro de 2020 años, enviare un virus a la tierra…
– Y entonces te escucharan?
– No, pero con algo tendran que aguantar la mascarilla…
Cuando la crisis de la hipotecas y demás, hubo muchas voces («del pueblo») que defendían al común de los mortales, porque toda la «culpa» era de la banca y fondos de pensiones. Claro el que mucho tipo listo «de a pie» se quisiera hacer rico de la noche a la mañana no era causa de tal desaguisado. El pueblo nunca derrocha, eso solo lo saben hacer los muy ricos…y así seguimos. Se fue la crisis económica (en aperiencia ) y ya todo el mundo volvió a cenar fuera de casa el sábado (e incluso el viernes).
Con la pandemia se da una gran confrontación entre la salud y la economía (como si la salud no influyera en la economía, y mucho). Y volvemos a hacerlo….se nos da rienda suelta y ya estamos empeorando la salud, sin mejorar la economía (o acaso un enfermo rinde económicamente?). Y además, ¿que mejor situación, para regenerar una economía semihundida, que una población sana y con ganas de ganar la partida?
Hay un virus que nos demuestra, mutando cada dos por tres, que es mucho más «inteligente» que el ser humano (teórico sapiens), que no es capaz de cambiar sus hábitos, por mucho que la realidad se lo esté pidiendo.
Y no son las hipotecas o las cenas solo, que las ansias de poder tienen mucho que decir. Ellas pueden mucho más que la Tabla de los Diez Mandamientos y el Corán combinados linealmente.
Desde que el Vaticano permitió ser cristiano y rico, y luego el Felipe animó a ser socialista y rico, ya todo es posible en los reinos del Señor. Las consideraciones sociales de Jesucristo o Marx quedaron olvidadas en el desván de los recuerdos.
Querrás decir el Vih, por que el SIDA es otra cosa
Totalmente de acuerdo. El agente infeccioso sigue una progresión geométrica o logarítmica (son de algún modo exponenciales), que es un tipo de progresión geométrica. Lo único claro que tengo es que hay cada vez más psicosis cada vez que las noticias empeoran (somos marionetas y tienen un efecto directo sobre nuestra tensión, nerviosismo y miedos, somos sus súbditos), y eso está bien en su justa medida para extremar medidas de prevención con quien no es de tu confianza y no conoces de forma 100% segura su estilo de vida y hábitos. Ahora los psicólogos tienen mucho trabajo con las consultas, debido al miedo inevitable que tanto nos afecta de la Covid.
La verdad que donde hay tumultos deberían extremarse precauciones. Le auguro poco futuro a la mascarilla por desgracia con el calor. Pero también es verdad que la ley contempla excepciones a la obligatoriedad de utilizarla en el caso de personas que, como yo, tienen un informe médico que nos permiten no tener que llevarla puesta. Yo, en la medida de lo posible, si hay cerca gente, me la pongo. Desde que en la primavera pasada estuve 5 días en la UCI por un cáncer de tiroides y 7 en planta, tengo la respiración agitada y me agobia, muchas veces he tenido que parar los pies a alguien con mi certificado, porque a muchas personas se les olvida esas cosas. No obstante, si tengo anticuerpos (y no lo digo por el anticuerpo que se me ha hecho con tanta cuarentena :-) ), la verdad es que no lo sé; a lo mejor he pasado algo este año entre enero y febrero (tuve el peor resfriado de mi vida, me hacía vomitar la cena el esfuerzo de ataques de tos seca y con flemas de sangre del esfuerzo, aunque no tenía fiebre). Me diagnosticaron en ese momento intolerancia a la humedad o hipersensibilidad al frío porque siempre me ha pasado otros años). Así que no sé si tengo inmunidad. No tuve más síntomas que esos, pero parecen coincidir, y mi estilo de vida es saludable, no es de viajar y apenas salgo. Fue al cambiar el tiempo cuando me pasó. Pero no me he sometido al test de diagnóstico. Confío en mi buen hacer y soy extremadamente prudente, porque evito aglomeraciones de personas. Creo que es más bien, en última instancia, una cuestión de confianza, y que esto va para largo, no sé si 2 años.
Primero se manifestó «la derecha» pidiendo el fin de las medidas de confinamientos y una semana después a ver quien le decía a los de George Floyd que no podían protestar…
Hace 120 años hundieron el Maine para tener un enemigo exterior que uniera a la opinión pública tras la voluntad de sus líderes, y hoy que lo tienen «gratis», el virus Chino, en vez de aprovechar para LIDERAR, lo confunden con la política diaria de escupir mierda a los enemigos.
¿El 11M de Trump? Ojalá, pero no vendamos la piel del oso antes de descuartizarlo.
La situación a principios de Julio tiene poco que ver con la que teníamos en Marzo por varios motivos, eso permite que las medidas a tomar sean distintas.
Por un lado se conocen mejor los mecanismos de transmisión del virus, algo que ha permitido cambiar confinamiento por máscaras, algo mucho mas soportable y compatible con una vida normal y saludable, sin las consecuencias negativas a las que estaba dando lugar el prolongado confinamiento.
Ha habido un cambio sustancial es en el tratamiento de la enfermedad, en Marzo los médicos se enfrentaban a lo desconocido, no sabían cuales eran los tratamientos adecuados, luego se ha descubierto que algunos de los que se aplicaron no solo no curaban sino incluso empeoraban la situación del paciente, algo inevitable, la medicina tiene muchas incógnitas pero no tiene todas las respuestas.
Al día de hoy los tratamientos incorrectos ya no se aplican y los que se están aplicando ofrecen resultados, eso evita que los enfermos empeoren y acaben en las UCIs con el colapso a que eso dio lugar.
Seguimos a la espera de test fiables y de conocer detalles como el grado de inmunidad de los que ya han sufrido la enfermedad.
Eso aún llevará su tiempo, hoy estamos mejor que ayer y mañana mejor que hoy.
No te quiero quitar la ilusión, me gusta de veras tu última frase, pero lo que ha permitido cambiar confinamiento por máscaras no es que se conozcan mejor los mecanismos de transmisión del virus, sino que los contagios bajasen de casi mil muertos al día a entre cero y dos al día.
Los tratamientos habrán mejorado, pero este bajonazo en contagios (medido en muertos) fue por el confinamiento. Lo de las mascarillas, el metro y medio, y demás, está solo para ver si conseguimos evitar tener que volver al confinamiento, que a día de hoy es lo único que le para los pies al virus cuando los contagios se disparan.