El indudable éxito de Google Classroom en términos de adopción, debido no solo a sus interesantes características como producto sino también al hecho de que la compañía sigue un modelo de gratuidad tanto para las instituciones como para los alumnos que lo adoptan, y a un modelo de plataforma que permite integrar una creciente gama de aplicaciones, hace posible visualizar algunas de las interesantes contradicciones que surgen en torno al cambio de un modelo educativo que, mientras el contexto social cambiaba de forma drástica y evidente, se ha mantenido con escasos cambios y sometido a una innovación puramente incremental durante generaciones. Sí, la sociedad ha cambiado mucho en función del contexto tecnológico, pero… ¿realmente ha cambiado tanto en ese mismo período la forma en que educamos a los jóvenes?
El producto de Google está, pese a los intentos de reacción de sus competidores, tomando gran ventaja sobre ellos en términos de adopción y destacándose como mucho más adecuado para un modelo de enseñanza activa que otros basados en dispositivos que promueven una interacción más pasiva. Según algunos expertos, Google Classroom define la clase del futuro: tiene una configuración muy sencilla al alcance de cualquiera, permite el desarrollo de todo tipo de actividades sin recurrir al papel, conecta con otras herramientas de la compañía como Google Docs o Google Drive, posibilita la colaboración instantánea y sencilla entre los alumnos y con los profesores tanto dentro como fuera de las aulas, y permite a los profesores seguir el desarrollo individual de cada alumno de manera sencilla.
Pero obviamente, no todo puede ser tan sencillo como crear una herramienta, distribuirla gratuitamente y esperar que funcione a la perfección. Así, en las últimas semanas estamos viendo artículos en diversos medios que hacen referencia a cómo Google Docs se ha convertido en «la herramienta más popular de mensajería entre los estudiantes«, la versión moderna de las «notitas que antes se pasaban de mano en mano en las clases«, o en «el chat que usan delante de las narices de sus padres y profesores sin que estos se enteren«.
Los artículos hacen referencia a una contradicción clarísima: pretendemos dar a los estudiantes una educación moderna basada en la colaboración, que refleja cómo se trabaja hoy en día en cada vez más entornos, pero nos alarmamos cuando vemos que los estudiantes utilizan esas herramientas para comunicarse entre sí. Obviamente, el problema deriva de la adopción de una herramienta por conveniencia o por sus buenas condiciones, pero sin aceptar sus premisas fundamentales de funcionamiento: cualquiera que haya utilizado Google Docs alguna vez es consciente de que, además del uso de redacción colaborativa de un documento, permite abrir una ventana de chat en la que comentar cualquier cosa, pensada originalmente para hablar sobre el documento, pero que puede, por supuesto, utilizarse para cualquier otra cosa.
El resultado de la implantación de una herramienta como Google Class es, de manera inmediata, la aparición de una enorme – e imparable – cantidad de posibilidades de que los alumnos se comuniquen entre sí. Muchos profesores o padres, acostumbrados a un modelo de educación que restringía esa capacidad de comunicación durante el desarrollo de las sesiones, se alarman de forma inmediata y tratan de impedirlo, con la sorpresa de que, simplemente, no es posible. Lo que consideran un bug, un problema o un error del sistema, no es tal, sino que es un feature, una característica esencial para el funcionamiento del modelo. En cierto sentido, esa aplicación que esos profesores o padres educados en el modelo antiguo creían que era simplemente un programa para escribir, ha resultado ser no solo eso, sino un cambio de filosofía completo en el modelo de educación, que no tienen ni idea de cómo encajar.
El cambio en la educación no es solo una cuestión de herramientas. Es un cambio de filosofía completo que incluye un replanteamiento de todo, empezando por el formato de las clases, siguiendo por la manera de obtener información, por la forma de trabajar, por el modelo de evaluación… es mucho más profundo que simplemente dar a los alumnos una herramienta y tratar de hacer lo mismo que hacíamos antes. De hecho, como queda claramente demostrado, si intentas seguir haciendo lo mismo, fracasas claramente, porque la herramienta prácticamente «te boicotea» y parece trabajar en contra de tus intereses. Si no replanteamos el modelo de manera radical, la educación «de antes» simplemente «no encaja» en la herramienta.
Colaboración es colaboración. Y si abrimos la posibilidad de colaborar, abriremos necesariamente la posibilidad de comunicarse, para lo que sea. La educación consiste en hacer que los alumnos entiendan que toda herramienta puede ser utilizada con propósitos variados, y que les interesa utilizarla de la manera adecuada si quieren obtener unos fines determinados. Por supuesto, el problema no está únicamente en administradores, profesores o padres: está también en los alumnos, y la solución no es en absoluto sencilla, se requiere mucho trabajo para obtener un cambio de mentalidad. Pero eso no quiere decir que no sea importante conseguirlo, o sobre todo, que debamos, como hizo Francia, prohibir las herramientas nuevas y dedicarnos a consagrar el modelo antiguo como si fuera el ideal.
Las herramientas de la educación del futuro serán de Google o de otro, me da exactamente igual y carezco de interés personal alguno en ese sentido. Pero cuando el contexto cambia, y es claramente evidente que ha cambiado, la educación debe adaptarse al nuevo contexto, y pretender mantener el modelo antiguo se convierte en absurdo. Es hora de entenderlo y de plantear no simples adopciones de herramientas tecnológicas, sino una reflexión integral de cara a un cambio radical del modelo educativo.
This article was also published on Forbes, “Hope all well today. Here we go with a particularly thought-provoking piece«
«Pero cuando el contexto cambia, y es claramente evidente que ha cambiado, la educación debe adaptarse al nuevo contexto, y pretender mantener el modelo antiguo se convierte en absurdo»
Espero que en el nuevo contexto haya clases de redacción y reciclaje básico del profesorado. Alumnos míos han suspendido por expresarse así.
Buenas! Aquí Jaír, de EfectiVida.
Aquí tenemos un ejemplo claro de por qué las nuevas herramientas no funcionan en determinados sectores. Se lee literalmente y se da más importancia al cómo que al qué o al porqué.
(Todavía estoy intentando ver qué tiene de incorrecta la frase)
Lo que sí he visto claramente es el sistema de premio o castigo, aprobando al que memoriza y suspendiendo al que se equivoca, en vez de preocuparse de la correcta aplicación de cosas útiles para la vida real.
Se ignoran las enormes diferencias entre los alumnos, y se ensalza la inteligencia matematico-lógica, a la vez que se desprecian todos los demás tipos de inteligencia. (Para más referencia: La teoría de las 9 inteligencias)
Cuidado Enrique, porque todavía te pueden suspender, jejeje.
(Y a mí también, por el jejeje)
Sigo:
Se dedican horas vitales a materias obsoletas y muy relativas, mientras se obvian temáticas fundamentales, como el auto-conocimiento, la resiliencia, el conocimiento financiero, la gestión de prioridades, el uso del tiempo, técnicas de oratoria, y un largo etc.
Se dedican jornadas enteras a preparar y/o celebrar fiestas religiosas como la navidad, los reyes, papá noel, los carnavales, san Valentín y un montón más (aparte de otras no tan religiosas, como el Halloween). Cada cual celebrará las fiestas que quiera, de la religión que quiera, pero yo no mando a mis hijas al colegio a aprender ferias y festejos. Ya de eso nos encargamos en casa. Además, para eso están los días festivos, en los cuales -qué curioso-, no hay colegio.
Básicamente, el modelo educativo sigue siendo el que se inventó en Prusia en el s. XVIII, cuyo objetivo era fabricar perfectos soldados obedientes y sumisos. Hoy es parecido, solo que en vez de soldados, se trata de trabajadores del sistema.
Si un profesor de hace 50 años entrara en un aula de hoy día, se sentiría como en casa. Incluso es posible que pudiese dar clases sin que se notara mucho la diferencia.
Conozco bastantes docentes, orientadores escolares e inspectores de educación que aman su profesión, y hacen lo que pueden, a pesar de no contar con herramientas, opciones y recursos apropiados. Mi más sincera enhorabuena y agradecimiento por su esfuerzo.
Por contra, otros siguen anclados al pasado. Seguramente habrá muchas razones para preferir los viejos tiempos. Una, sin duda, es esperar con más ansias la nómina del mes, que el bienestar educativo de sus alumnos.
De todos los profesores de mis hijas, solo una usa Google Classroom en una clase de mi hija menor. Por supuesto, estamos encantados, y mi hija también. Se aprenden mejor los conceptos, se interactúa en tiempo real, y sobre todo, se progresa disfrutando, que de eso se trata.
Y no, no nos importa que su redacción no sea la mejor.
Un saludo desde Las Palmas!
Espero redactar bien, que a mi edad un suspenso duele mucho (ironía).
Coincido al 100% con el post de Jaír, era justo lo que iba a escribir. Las maneras y modos de enseñar llevan 3 siglos con nosotros y el iPhone salió al mercado en 2007. Habrá que tener algo de paciencia.
Intentar criticar así a Enrique Dans, que además de preparar sus cursos en una universidad y llevar su vida personal, se molesta desde hace años todos los santos días en escribirnos un post interesante, profundo, extenso e impecablemente argumentado y redactado, sin pedirnos casi nada a cambio (solo nos pide un poco de respeto, que por algo es su blog)…
Insinuar que le hacen falta clases de redacción, cuando se nota que siempre pone un cuidado exquisito en todo lo que escribe…
Insinuar que le hace falta un reciclado básico… ¿de qué se tiene que reciclar Enrique Dans, si nos da 3 vueltas a todos en casi todo lo que dice? ¿Quién le va a dar las clases de reciclaje? ¿Usted, Macarena Fernández sin tilde?
Se puede escribir una composición sin faltas de ortografía, y emplear un nivel o vocabulario no adecuados.
Usted ha visto en alguna web que un profesor de primaria o secundaria use un estilo de lenguaje tan vulgar como «a mi me la pela» usada en una respuesta en este mismo artículo. ¿Le parece un ejemplo de excelencia?
La cultura puede entenderse como un mecanismo de adaptación al entorno y usar un nivel de acuerdo al nivel con el que queremos comunicar, y con el que queremos que nos perciban.
Al Sr. Trento le puede parece muy interesante seguir al Sr. Dans pero ha de reconocer que poner un cuidado exquisito en todo lo que escribe, no parece que lo practique. Sino al contrario, se vanagloría de utilizar un lenguaje zafio, día si y día también. Puedo estar equivocada y que ese estilo es con el que se identifica y luego utiliza en sus clases.
Por ello a la pregunta ¿el Sr. Trento sigue este blog por el nivel que exhibe el Sr. Dans, o adapta el Sr. Dans su nivel a los Sres Trento que le siguen?
Como personlamente no me siento identificada con la segunda posibilidad, he expresado mi opinión sobre el asunto.
M. FERNANDEZ, sin tilde en las mayúsculas.
En mi casa, estimada Macarena, me expreso como me da la gana. Si tienes algún problema, no te pases por ella, porque maleducadas como tú, de esas que van a casa de alguien y se ponen a criticar la decoración, las cortinas, los muebles y todo hasta que le dan un muy merecido corte, no son bienvenidas en absoluto. Ah, y no te molestes en contestar.
Creo que la comentarista sabía de sobra, que no llevaba tilde, y ha practicado la ironía. Vamos que se la pela ;-)
Por lo que expones supongo que te parece igualmente censurable el lenguaje que usa Pérez-Reverte. Pero, sinceramente, dudo que te atrevieras a criticarlo.
A ver si ahora va a resultar que eres un genio por ser un malhablado.
Jajaja, no me j…
Tengo de genio lo mismo que de enano. Pero currar, curro una cosa mala! ;-)
http://www.rae.es/consultas/tilde-en-las-mayusculas
De nada
Lo único claro es que con el avance de la tecnología, los usuarios deben estar siempre en un proceso de apropiación de la misma, que implica análisis y valoración de ventajas y desventajas. De lo contrario, o bien tal tecnología será “satanizada” o “idealizada”.
El alumnado no sabe expresarse después de montones de buenas intenciones para que lo haga. Las notitas ente el alumnado se deben demonizar en vez de sacarles rendimiento pedagógico.
El profesor está en el aula para transmitir y dirigir el proceso de instrucción que hace del discente una nueva enciclopedia (que no sabe expresarse oral y textualmente, menos iconicamente). Parece ser que el profe no es un dirigente que interactúa con el alumnado mediante diversos mecanismos tecnológicos (la tiza es pura tecnología, no punta, pero pura!).
El profe no tiene que adaptarse a un entorno a años luz de la Universidda de Paris (medieval). No tiene que rentabilizar el esfuerzo de programadores, que pueden tener ciertos fallos de visión (les falta la praxis), y por eso necesitan un profesorado preparado para ayudarles a superaralos.
La wikipedia, los diversos youtuberes y globeros/as de internet (aparte de documenetales de todo tipo y la última información de la NASA, por ejemplo),, que duplican y triplican la capacidad didáctica de buena parte del profesorado son elementos demoníacos pedagógicamente hablando.
Por cierto, ¿será necesario aclarar que se me escapó algo de ironía?
Y podíamos seguir. La evolución no es un simple concepto para chapar en clase de Biología. La evolución es un proceso natural, que puede ser ayudado o frenado por la actitud (teórica y práctica) del llamado ser humano. El sapiens, porque las versiones anterioeres no supieron (puede que no quisieran) adaptarse.
El sistema que se apoya en un sistema de transmisión de la informacion, sin desarrollar al estudiante en un perfil de contextos varios (Deportivo, artistico, tecnológico, social, constructivo, critico etc…) y que le permita desarrollarse para expresarse segun sus capacidades, limita mucho el potencial del contexto. La estandarizacion de contenidos y resultados esperados a mi.modo de ver, es muy dañina. Pero tambien lo es, dirigir los mensajes intencionales para condicionar el pensamiento. Si no puedo cuestionarme la realidad, profundizar, contrastar, debatir, asumir diversas posiciones y posibilidades, continuamos en la dualidad y la fragmentscion de la realidad. El cambio de co texto, lo sintetizaria como la habilidad del docente para desarrollar el potencial de todos los perfiles de estudiantes, con avances significativos de aprendizaje y desarrollo para desenvolverse en la vida. La herramienta ayuda a materializarlo pero concuerdo en que un cambio de mentalidad, es mas complejo que desarrollar a jovenes actualizados y hambrientos.
Sr. Dans, justo hoy el canal de Curiosidades con Mike ha subido un vídeo usando a Alexa para resolver tareas escolares: Alexa hace la tarea de matemáticas del colegio
Vídeo hecho a colación de una noticia en la que una madre ha pillado a su hijo de 6 años preguntándole a Alexa las soluciones a los problemas de sus deberes. Bastante trascendente, en mi opinión.
¡Muy interesante el post! La tecnología es una gran herramienta que debe aprender a usarse. En el instituto de mis hijos usan tablet y algunos se pasan gifs animados o fotos vía Airdrop… yo pasaba notitas en papel y no creo que mi rendimiento académico se viera muy afectado por ello.
Genial el video de Alexa en «Curiosidades con Mike». Si los padres le preguntan sus cosas ¿por qué no va a hacerlo él con las restas? Otra cosa es que deba estar Alexa enfrente del cuaderno, el niño sólo haciendo los deberes… Es responsabilidad de padres y profesores enseñar a usar encontrar cada momento cada «device».
…Y cuando menos no lo esperemos, en un Spring cleaning la herramienta es discontinuada. Gracias pero aunque puede ser una idea interesante, eso de depender de un Google que hizo gala del patético «Don’t be evil» cada día me da más grima.
Si quieres herramientas colaborativas, existen varias, como Kolab y OnlyOffice. Ambas ofrecen soluciones incluso auto-hospedadas, para que tus datos se queden donde deben estar: bajo control y lejos de las miradas más indiscretas del mundo: Google.
La educación es a tecnología, como el jamón pata negra es a la mortadela, valga la analogía.
¿qué herramientas poseemos?
* El cortafiambres, lo «último» en tecnología!. Con una precisión milimétrica. (Aceptarme la licencia en lo de último)
* El cuchillo jamonero, lleva siglos entre nosotros
Y mi reflexión, ¿ es mejor producto la mortadela sevillana que el jamón 5J, porque se puede utilizar mejor una máquina cortafiambres que un cuchillo?
Parece que no, y que el «contexto» está fuera de lugar, y pretender comparar una herramienta con otra. La tecnología de la tiza y pizarra, es utilizada por ejemplo en clases del MIT de Matemáticas (ejemplo 1)
y no veo la verdad como el uso de google classroom, influye en el «contexto».
https://www.youtube.com/watch?v=L3LMbpZIKhQ
Falacia de autoridad: porque una clase se imparta de una manera en el MIT no quiere decir que sea buena: las clases de matemáticas en el MIT con pizarra y tiza son un coñazo se miren como se miren (dicho por muchas personas educadas en MIT), y como experiencia académica podrían mejorarse muchísimo. Que tengan lugar en el MIT no las hace mejores, lo siento, y nada dice en ningún sitio que el MIT sea algún tipo de sancta sanctorum en términos de metodología académica. De hecho, no lo es. Lo es en otras muchas cosas, pero no en eso. Además, por contexto me refiero al contexto social, a lo que ha cambiado la sociedad: ¿te parece normal que la práctica totalidad de los elementos y actividades en la sociedad cambien, desde cómo compramos a cómo nos orientamos, pasando por cómo nos relacionamos, cómo leemos, cómo nos informamos o cómo seleccionamos pareja, y en cambio, la forma en la que enseñamos no cambie prácticamente nada?
Y por último, yo no santifico la herramienta. Ninguna herramienta. Nunca lo hago. A mí me la pela que la herramienta que se use sea Google Classroom o cualquier otra que sea buena. Lo que defiendo es que la metodología para enseñar tiene que cambiar necesariamente, evolucionar para ser menos unidireccional, y parecerse más a la forma en la que se trabaja hoy en cada vez más empresas.
Las clases en pizarra o en «google classroom», o «en el videowall de IE», pueden ser un coñazo o una bendición. La herraimienta no da la calidad.
Personalmente no me importaría asistir a un coñazo de clase de matemáticas con tiza en el MIT. Llámele «falacia de autoridad» o llámele «confianza» que me da esa institución.
Prefiero el jamón pata negra del MIT a la mortadela con aceitunas y el envase con colorines. Pero no me parece mal que vd. prefiera otras metodologías. Es su elección. Normalmente esas tecnologías se usan para reducir costes y subir precios. Pero ese es otro debate.
Yo no puedo comparar su «contexto», no hay clases suyas colgadas en youtube para comprobar si su método es realmente pata negra o chopped.Lo más parecido que tenemos es el video que nos ofreció el otro día. Y creo que para ser justos con su argumentación, es mejor no usarlo como comprobante.
https://www.enriquedans.com/2019/02/que-esperar-del-mwc-2019.html
Pues ahora que lo comentas, no estaría nada mal tener unas clases magistrales de Enrique en youtube.
Igual no las pone porque la metodología de la clase magistral no es compatible con su metodología. Pero tengo curiosidad en conocer su método de enseñanza. En vez de la letra con sangre entra, me imagino que la frase es con hostias la innovación entra ;-)
Pues básicamente, les digo a mis alumnos que por mucho que yo lea y publique, mi opinión es absolutamente discutible, y que ni tengo autoridad, ni la quiero. Y a partir de ahí, empezamos a discutir sobre temas cuidadosamente escogidos durante quince sesiones!
Las mayúsculas se acentúan:
4.10. Acentuación de letras mayúsculas
Las mayúsculas llevan tilde si les corresponde según las reglas dadas. Ejemplos: África, PERÚ, Órgiva, BOGOTÁ. La Academia nunca ha establecido una norma en sentido contrario.
Alucino con el «debate». Que si tiza y pizarra en el MIT (!), que si herramientas… un profe nefasto en el MIT lo hace fatal con tiza o conectado a internet. Si hay en el MIT gente de ese tipo, puede ser por ser capaz de interactuar con su alumnado a través de la pizarra (es totalmenet posible). O puede ser porque el MIT también padece de universititis y tiene a algún que otro mausoleo pedagógico, No llega con ser premio Nobel para ser buen profe.
Conclusión (una!): la herramienta que más falla en el sistema educativo español tiene un nombre, algunos le llaman profesor.
Vaya! Ya hemos recibido los docentes… mejor no responder nada…
Lo que cuenta Enrique en su artículo es una verdad y una realidad como una catedral. No es la tecnología, ni el profesor siquiera… es la metodología imbécil! (parafraseando a Clinton). La función principal de la escuela a sido y sigue siendo preparar a los niños y jóvenes para desenvolverse con éxito en la sociedad (a mi me gustaría también añadir a ser críticos con ella), y cabe preguntarse si estamos en el camino de ello. Personalmente pienso que si, cada vez son más los centros, y afortunadamente también familias, que demandan una educación que prepare a sus hijos para los retos que nos plantea ya la sociedad del SXXI.
Un saludo!
@msayrach