Una iniciativa de Google es aplicada para solucionar un problema a la hora de intentar ubicar en un mapa lugares en la India rural que carecen de una dirección postal, y se convierte en un desarrollo a escala planetaria que la compañía propone como sistema abierto para todos aquellos que encuentren interesante utilizarlo. En la imagen, por ejemplo, el Plus code que define la dirección de mi despacho en IE Business School: cualquiera puede introducir ese código, indistintamente en letras mayúsculas o minúsculas, en Google Maps, e identificar la dirección de manera inequívoca.
Obviamente, en el caso de la dirección de mi despacho en pleno centro de Madrid, la idea de proporcionar a alguien ese código en lugar de simplemente un nombre de calle y un número resulta más bien poco operativa. Sin embargo, considerando que según una estimación del Banco Mundial, la mitad de las personas en el mundo viven en calles que no tienen nombre y carecen, por tanto, de una dirección postal propiamente dicha, los beneficios aparecen ya de una manera mucho más evidente. Carecer de una dirección postal implica, en muchos casos, la exclusión del acceso a servicios tan básicos o críticos como el correo postal, las entregas de mercancía a domicilio, los servicios de emergencia o el registro de votantes.
Además, Google ha diseñado el sistema en modo completamente abierto y gratuito, lo que permite que cualquiera que quiera utilizarlo e integrarlo en aplicaciones pueda hacerlo si lo desea. En realidad, Plus Codes está basado en los Open Location Codes u OLC, un sistema de geocodificación diseñado por varios ingenieros en las oficinas de Google en Zurich y publicado en Github en 2014 bajo licencia Apache 2.0, como una forma de codificar la ubicación en un formato más fácil de usar que mostrando las clásicas coordenadas de latitud y longitud. Los Plus Codes pueden ser utilizados dentro de Google Maps desde agosto de 2015 o ser visualizados en un navegador añadiendo el código tras una barra a la dirección de la página plus.codes, , y algunos argumentan que, aunque obligan a utilizar el smartphone – que por otro lado prácticamente siempre llevamos encima – para un proceso que hoy, si conoces razonablemente algunas calles, no lo hace necesario, también tiene sus ventajas cuando esas calles no resultan tan obvias o cuando los números no son fácilmente visibles, o como en muchos puntos de mi Galicia natal, cuando una dirección es especificada como la combinación de Lugar, Parroquia y Municipio: un lugar, como tal, puede contener múltiples viviendas, lo que convierte la tarea de localizar una dirección específica en ocasiones en algo no tan obvio.
El sistema es una cuadrícula que divide la superficie geográfica de la Tierra en pequeñas áreas de mosaico progresivamente subdivididas en áreas cada vez menores, y atribuyendo un código único a cada una de ellas: este código se establece como un formato que cualquier persona puede generar, compartir y buscar utilizando simplemente Google Maps en cualquier dispositivo. Los primeros cuatro caracteres son el código de área, que describe una región de aproximadamente 100 x 100 kilómetros, mientras los últimos seis caracteres son el código local, que describe el vecindario y el edificio, un área de aproximadamente 14 x 14 metros, aproximadamente del tamaño de la mitad de una cancha de baloncesto. Lógicamente, si estás proporcionando una dirección en una ciudad determinada, los primeros cuatro caracteres no son necesarios. Además, se puede agregar otro carácter opcional para proporcionar más precisión hasta definir una región de 3 x 3 metros. Ese nivel de versatilidad permite que puedan ser utilizados, por ejemplo, para designar distintos accesos en un mismo edificio, para proporcionar una ubicación exacta en un camino o carretera rural larga, o para geolocalizar el lugar de un accidente por parte de los servicios de emergencia.
A lo largo de muchos años, el uso de sistemas de coordenadas geográficas especificados mediante longitud y latitud nunca ha llegado a ser utilizado de forma habitual y popular para designar lugares: en general, la mayor parte de los usuarios consideran estos sistemas con grados, minutos y segundos como farragosos y complejos. Lógicamente, se puede argumentar que el sistema de latitud y longitud no es utilizado de manera más habitual porque en muchos casos, con una simple dirección de nombre de calle y número, posiblemente imperfecto, pero decididamente más fácil de memorizar y que no precisa el uso del smartphone y de una aplicación en concreto, resulta razonablemente suficiente. Otros métodos propuestos, como What3Words, que codifican coordenadas en palabras del diccionario fáciles de recordar, utilizan algoritmos propietarios y, aunque han obtenido un buen nivel de financiación en sucesivas rondas de inversión y tienen algunos clientes interesantes, no parecen estar despegando especialmente en cuanto a popularidad o número de usuarios.
Google, en realidad, encuadra este tipo de ideas y metodologías dentro de lo que considera formas de ofrecer valor a lo que muchos han dado en llamar «the next billion users», los próximos mil millones de usuarios. ¿Podría llegar a popularizarse el uso de este tipo de códigos – o al menos, a llegar a ser más popular que la combinación de latitud y longitud que casi nadie utiliza – para designar direcciones o lugares geográficos? ¿O se limitará su uso, como propone el modelo original, a quienes de verdad lo necesiten por carecer de una dirección como tal?
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Es de una lógica aplastante, en un mundo donde google Maps es el standard y todo el que quiera lo lleva gratis en el bolsillo, las coordenadas Google son lo siguiente. Pilla las 3D? Sería interesante, la mitad de la humanidad y casi todas las oficinas habitan en altos edificios, que te señalen la puerta de la calle igual no ayuda mucho.
Hace varios años que existe un sistema similar pero mucho más fácil de recordar, basado en 3 palabras: https://what3words.com/
Me parece magnifico, …. pero ya existían las coordenadas geográficas y muy pocos las utilizaban. Lo que han hecho es algo así como dar las coordenadas en sexagesimal en vez de decimal,, Quizá no sea algo tan revolucionario, lo sería si a nadie se le hubiera ocurrido hasta ahora, dar la posición recurriendo a dos datos.
En general el deletrear letras es mas confuso que deletrear números, por lo que ahora que vamos a hacia dictar a los dispositivos, creo que es un atraso, la letra que dictamos puede ser B y V o M y N .
Deletreado tupropia direccion tiene los siguientes problemas
C para cualquier sudamericano le resulta difícil diferenciar entre C S y Z
G suena como J
R los españoles la decimos co RR mientras que los centroeuropeos dicen GR
Creo que claramente es fonéticamente mas sencilla una dirección en números
Estoy de acuerdo que es más fácil dictar números que letras, pero el ejemplo que pones de la C no es el más adecuado. En América Latina y España las letras C, S y Z se llaman ce, ese y zeta y son fácilmente identificables aunque haya seseo.
Pues sí, esto es el viejo sistema de coordenadas geográficas de toda la vida, solo que codificadas de otra forma supuestamente más fácil de manejar. Ni siquiera tiene la ventaja de una mayor precisión, porque con el sistema tradicional también se pueden especificar las décimas o centésimas de segundo de arco (una centésima de segundo de arco son menos de 31 cm).
Efectivamente. Y además no es necesario recurrir a unidades sexagesimales. Se puede hablar de una localización Latitud, Longitud: 42.35563, -1.81091. Por ejemplo.
Con toda la precisión que se desee, pueda o necesite.
Por otra parte, en las pruebas que yo he hecho, mirando la geolocalización de, verbigracia, una foto hecha con mi móvil, resulta que no es muy preciso, estoy hablando de errores de 40 ó 50 metros.
Posiblemente esto será muy útil para la India rural y muchos otros sitios.
Es, además, la idea de unos hackers muy listos que se harán así un poco mas dueños del mundo.
Todo sitio de Internet tiene su dirección IP, pero como las IP son difíciles de recordar se han inventado los nombres de dominio, fáciles de recordar. Luego, alrededor de estos dominios se ha creado un negocio.
8CGRC8Q6+3X no es fácil de recordar por lo que habrá que ofrecer una equivalencia, un dominio que corresponda a este código. Estos dominios de localización de sitios físicos seguramente los administrará Google y cobrará, lógicamente, por el servicio, que podrá incluir «personalización», donde la exclusividad se puede cobrar muy bien.
Luego, como en todas estas cosas, habrá también especulación (o como ocurre con las subastas de matrículas de coches en Arabia Saudí).
El negocio de la venta masiva de dominios
Es una idea de negocio que no se me había ocurrido, pero no veo que para ello sea necesario este sistema, se podría hacer exactamente igual desde las coordenadas geográficas . Lo importante en ese caso, es ser el dueño del soporte que relacione un nombre con un punto geográfico y ese soporte es Google Maps-
Pues no es lo mismo que el sistema de coordenadas geográficas.
Los códigos plus están abiertos a los desarrolladores para implementarlos fácilmente en cualquier aplicación. Están basados en Open Location Code y ya aparecieron en la versión beta hace unos años.
Sus ventajas son múltiples: representan un área y no un punto concreto, están disponibles en todo el mundo desde el momento de su creación y sin registro, son independientes de la política local y entendibles en cualquier idioma, lugares adyacentes tienen códigos parecidos y se pueden acceder sin conexión a internet.
Al representar áreas, los códigos plus dejan en manos de las organizaciones locales si quieren añadir números adicionales para mejorar la precisión y por ejemplo nombrar edificios concretos.
Tomado de www.xatakandroid.com
No sé cuales serán los planes de negocio de Google para esto, pero a medio plazo podría tener bastante potencial.
what3words es extremadamente útil y es común su uso en mi país, desde restaurantes hasta edificios de gobierno publicitan sus tres palabras, en general el sistema esta más orientado para humanos que de Google, este lo imagino como reemplazo de los código de barras y lectores portátiles usados en paqueterías.
Estos sistemas sirven como complemento a las calles y números porque si bien 3Words y Plus codes especifican un lugar, sólo por calles y números sabemos como llegar hasta ahí, excepto en el remoto caso que google invente la tele-transportación.
El problema de las direcciones postales es real, pero además suele haber otras dificultades adicionales. Comparto algunas cosas que seguramente pasan todavía en muchos países y que he visto desde mi niñez:
1) El servicio postal puede ser muy lento y poco confiable.
2) Las viviendas carecen totalmente de un buzón, incluso las de la clase media.
3) Los paquetes desde el extranjero tienen que pasar un larguísimo tiempo en la aduana y los impuestos pueden ser desmedidos.
4) Nunca se ha consolidado una verdadera cultura epistolar.
5) Las necesidades de comunicación familiar han sido casi totalmente cubiertas por el teléfono celular.
6) Los paquetes hacia otras ciudades no suelen ser enviados por correo sino a través de las empresas de buses y el retiro de los mismos se lo hace en la oficina de dichas empresas.
Las coordenadas geográficas lucharon durante años con los problemas de conversión de DATUM. Las diferencias en las geometrías de referencia (geoides) hacía que el margen de error no fuera despreciable.
Aparte de eso, es de celebrar un sistema así, aunque actualmente el «compartir posición» a través de la mensajería whatsapp/telegram es muy universal y eficaz.
Las emergencias, además de sistemas como este, disfrutarían de las ventajas de lograr cierta «redundancia». Es decir, garantizar que un error parcial no genere una posición válida y que algunas referencias intermedias garantizan al menos el acercamiento a la zona correcta. Ademas de calles y municipios, requerirían la oficialización de barrios y zonas. Cosa que actualmente no se hace.