Ayer examiné a la mitad de mis alumnos en el Master in Management de IE Business School, con un mini-caso que desarrollé para ello con la colaboración de Emov, el segundo proveedor de car-sharing con precio por minuto surgido en Madrid tras la llegada de Car2go, y una de esas compañías que ven pasar por la calle todos los días cuando se mueven por la ciudad.
Emov es una joint-venture entre Groupe PSA y EYSA. Inició sus actividades en Madrid en diciembre del año pasado poniendo en la calle quinientos vehículos eléctricos Citröen C-Zero, y ha experimentado un crecimiento meteórico desde entonces: más de 110,000 usuarios registrados, lo que supone una media de más de mil altas al día, apoyadas por un proceso de alta completamente online y por la posibilidad de utilizar vehículos de cuatro plazas que, además, pueden llegar a algunas zonas más allá del primer cinturón de circunvalación de la ciudad. Un mercado indudablemente vibrante, con competidores de diversos tipos y formatos, que se está desarrollando en ciudades de todo el mundo.
El examen fue, como es habitual en mis cursos, a ordenador abierto. Pero además de contar con el mini-caso y sus enlaces, y con una presentación suministrada por la propia compañía, a los diez minutos aparecieron Fernando Izquierdo, CEO de la compañía, y Carlos Blanco, Director de Marketing y ex-alumno del IE, para someterse a una sesión de preguntas y respuestas que se prolongó durante unos veinte minutos, y en la que compartieron detalles de todo tipo, incluyendo cifras detalladas de presupuestos publicitarios, acciones anteriores, detalles de la operativa, patrones de uso, pautas de adopción, perfil de cliente, etc. de una manera completamente abierta.
Sobre ese escenario, y con toda esa información para digerir en hora y media, los alumnos debían evaluar y diseñar acciones de branding, de adquisición de clientes y de incremento del engagement utilizando social media. Dado que hablamos de un lanzamiento muy prudente en términos presupuestarios, la práctica totalidad de las acciones tuvieron como contexto los medios sociales, lo que hacía el caso muy adecuado para su uso en un curso como este, titulado «Social media and the customer». Y sobre todo, me proporcionó la oportunidad para examinar a mis alumnos con uno de esos casos que además de ser completa y rigurosamente reales, se materializan ante sus ojos en forma de personas de verdad, que toman decisiones de verdad y se juegan dinero de verdad. Y, con suerte, de que hayan sido capaces de ver algo con tan mala reputación como un examen convertido en una oportunidad de aprendizaje y, si cabe, incluso en una experiencia razonablemente memorable.
Cada día me gusta más mi trabajo :-)
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Es que llamarle examen a ese momento de interacción «profe-alumnado-material auxiliar» resulta dejar en demasiado buen lugar a la palabra examen.
No me extraña para nada la frase final.
Suscribo absolutamente tu comentario #001, no se podría explicar mejor. Creo que esa es la manera de aprender, a través de la implicación del alumno en los casos propuestos.
Wow! Tenía tremenda curiosidad por ver el tipo de examen y veo que has enlazado el .pdf. ¡Gracias! Ahora solo falta que enlaces algún tipo de respuesta que obtendría una buena nota ;-)
Yo, como todos, he «sufrido» toda mi vida una enseñanza basada fundamentalmente en la memorización, o bien de datos para repetir como un papagayo, o bien de cómo resolver problemas que ya habías hecho, o parecidos. Recuerdo que en COU en un examen de matemáticas no sabía cómo resolver un problema (porque no habíamos hecho ninguno de ese tipo), y caí en la cuenta repasando mentalmente los teoremas que habíamos visto en los dos meses anteriores. Durante mi carrera de ingeniería, en algunos exámenes nos dejaban llevar libros, pero era más que nada porque aunque tuvieras la teoría y las fórmulas, tenías que pensar en cómo se resolvía el problema, que tenía solución única.
Solo tuve un examen con un profesor de historia en BUP en el que las preguntas no eran de contestar en plan loro… ej: «El papel del ejército en el gobierno de fulanito», y no había ningún párrafo en el libro o apuntes con tal título, era algo que tenías que responder pensando y relacionando.
Y sin embargo, años más tarde pensé que muchos exámenes tendrían que ser como aquel de historia, o como el que has enlazado, sin una respuesta única, y donde se trata más de pensar, relacionar, y, toma ya, aprender. Incluso en exámenes de ingeniería se puede introducir más la comparación de diseños, valoración de pros y contras y costes de las soluciones técnicas, etc. Hoy en día, cada vez que un cliente me pide algo, tengo que «insistir» a mis equipos que no le vamos a dar una solución única, sino dos o tres, cada una con un pequeño análisis de ventajas, otro de inconvenientes, el dato del coste y finalmente nuestra recomendación como proveedor. Pero cuesta que cale…
Otra enseñanza es posible, incluso desde pequeños:
Los colegios se rebelan
Hoy he leído en La Vanguardia el artículo Un estudio apunta a que los niños con altas capacidades sufren más acoso
Afirma que un 17% de los niños tiene capacidades cognitivas muy por encima de la media y de estos, el 46% ha sufrido acoso escolar. Y en un 9% de estos niños identificaron pensamientos suicidas.
Es decir, que no solo no se fomenta ni se aprovecha el potencial de los mas inteligentes sino que, además, se les hace pasar las penurias del acoso. Luego, cuando crecen, suelen fracazar, y si tienen éxito, es normal que se «venguen» de la sociedad que les ha maltratado haciéndose millonarios egoístas (hay muchos casos).
Si no comenzamos por cambiar la educación poco podremos progresar en los temas que realmente importan.
Que los colegios comiencen por rebelarse quizás sea una buena señal.
Por lo que leo, has copiado el método que utilizan en las Oposiciones a Notarias. :-)
Por aquel entonces, cuando yo me matriculaba -estudiante no se podía llamar-, nunca me hicieron un examen así.
A lo mejor algún día todos los exámenes en todas partes son como este. Bueno, aunque no todos lleguen a tener visitas inesperadas.
Vaya evolución!!! Por fin alguien se da cuenta de que los casos tienen que cambiar…