En muy poco tiempo, estamos empezando a ver algunas noticias que apuntan al uso de un indicador, la concentración de glucosa libre en sangre o glucemia, métrica completamente familiar y conocida para todos aquellos que padecen o tienen cerca a alguien afectado por algún tipo de diabetes, como parámetro utilizado para evaluar la actividad de personas perfectamente sanas.
En algunas compañías, particularmente en el a veces un tanto distópico entorno de Silicon Valley, los empleados monitorizan activamente su glucemia sin tener ningun problema de diabetes con el fin de evaluar su rendimiento o su actividad, controla su ingesta de alimentos o mantener la obesidad bajo control.
El tema tiene, por supuesto, mucho sentido: como bien saben los diabéticos que llevan a cabo un control exhaustivo, la glucemia es un indicador muy adecuado no solo para saber cuando necesitan insulina o ingerir alimento, sino en general, para evaluar la actividad. Existen correlaciones perfectamente observables entre nivel de actividad o de percepción de cansancio y niveles de azúcar en sangre. El problema, obviamente, es que como parámetro a controlar, la glucemia no parecía especialmente amigable, dado que en la mayoría de los casos, exigía una extracción, aunque fuese minúscula, de sangre, lo que conllevaba un proceso invasivo e incómodo. Por mucho que te digan que puedes controlarte mejor, la idea de andar pinchándose un dedo para extraer una gota de sangre varias veces a lo largo del día no suena atractiva para prácticamente nadie que no necesite hacerlo por una cuestión perentoria de salud.
La semana pasada circularon algunas noticias acerca de Tim Cook, CEO de Apple, al que se ha visto con un dispositivo en su muñeca que lleva a cabo mediciones de glucemia de manera continua y no invasiva. La idea de Apple de convertirse en un aliado para el desarrollo de sistemas de monitorización de la salud de manera preventiva, sus múltiples alianzas con hospitales y aseguradoras y su interés por tener un impacto en el mundo de la salud podrían indicar el desarrollo de algún dispositivo que, efectivamente, permitiese al usuario evaluar de manera cómoda sus niveles de azúcar en sangre, para así tomar decisiones sobre cuando parar para picotear algo, cuándo se es más productivo, o en general, cómo gestionar un parámetro que tiene mucho que ver con los niveles de energía que sentimos o nuestra capacidad de llevar a cabo muchas actividades. Dentro del movimiento conocido como «quantified self«, la glucemia podría ser, tal vez, el próximo parámetro a monitorizar.
¿Estamos ante un escenario en el que un parámetro utilizado hasta el momento casi únicamente en el tratamiento de una enfermedad, se convierte en algo que resulta interesante monitorizar de manera continua, mediante los correspondientes sensores y apps? El caso anterior fue, claramente, la frecuencia cardíaca. Aunque no sea aún mayoritario, es ya relativamente habitual ver a personas que evalúan su estado de salud o la calidad de su sueño en función de su ritmo cardíaco basal, durante la noche, en algo que en su momento definí como «cardioconsciencia«. ¿Estamos a punto de ver el nacimiento o la popularización de la glucemia como indicador habitual a monitorizar, más allá del ámbito del tratamiento de la diabetes? ¿Tendríais, como usuarios, interés en algún tipo de desarrollos relacionados con algo así?
This post is also available in English in my Medium page, “What do you think about monitoring your blood sugar levels continuously?»
Pues sí, es un indicador cuya monitorización es muy conveniente, junto a la presión arterial y el colesterol para tener la información relevante sobre la situación cardiológica de una persona. Precisamente hoy @DKV Seguros presenta la app Quiero Cuidarme como herramienta de autocuidado gratuita que muestrq el Indice de Vida Saludable de las personas sobre la base de 9 indicadores de salud
Como diabético, esto me resulta extraño. Es un auténtico engorro medirse en según qué situaciones, a veces incluso estresante. La glucemia tampoco responde siempre a parámetros lógicos – mis niveles de azúcar se acaban viendo afectados por todo.
Si ya encima me miro la punta de los dedos y las veo llenas de puntitos por los múltiples pinchazos de cada día, pues menos lo entiendo aún. Que si eres Tim Cook y te apetece probar una pulsera no invasiva, pues puede significar cosas buenas para futuros desarrollos. Pero ponerte hoy en día a pincharte el dedo si no lo necesitas os aseguro que no lo recomiendo.
Enrique, en temas médicos hay que evitar crear falsas expectativas, y creo que todos deberíamos ser conscientes de ello.
Como hace poco un Profesional de la Medicina te explicaba, al poco de que yo te hablase del fraude Theranos, un aparato de medición que no se use la en la práctica médica no puede ser usado para administrar un medicamento, como la Insulina. Ni tan siquiera para llevar un histórico fiable; no es una herramienta para prácticar el running o el Fitness.
El crear la ilusión de que controlar la glucemia te puede ayudar a saber cuándo debes ingerir alimentos, es una idea, en fin, de «esas». Una creencia de pseudomedicina, en el mejor de los casos.
No se come cuando tienes un nivel bajo de glucosa, Enrique. Ni siquiera los diabéticos hacen eso, salvo que tengan una hipoglucemia grave, que es una condición médica, y que aún así, no es patológica y es algo natural que cualquier ser vivo suele llevar con bastante naturalidad. El cuerpo consume grasas, y santa pascuas.
(Te pondría un enlace de la Wikipedia sobre un proceso fisiológico como es la cetosis, pero anda, qué casualidad, lo han vandalizado para convertirlo una cura del cáncer)
La idea de medir el nivel de glucosa o cualquier indicador de una analítica clínica, como práctica rutinaria, solo es un ejemplo de manual de paranoia e Hipocondría o en un caso como este, un indicio de anorexia y desorden alimenticio. Ese sí es un síntoma que habría que cuidar, y no andar midiéndose el meñique, por si ha crecido la última semana.
A propósito, eso que llamas ‘cardioconsciencia’ es un buen indicador de hipocondría en los manuales médicos (la palabra hipocondría, procede de la acción de palparse el corazón) . Y parece recurrente.
Hacer un uso continuado de aparatos y gadgets de todo tipo para alimentar la ilusión de controlar la salud, es más un síntoma en sí mismo, que un hábito saludable.
(Si has visto el último de episodio de Silicon Valley («The Blood Boy»), con transfusiones de sangre incluidas, verás que las modas pseudomédicas, y más en California, no son siempre la mejor forma de tener una buena salud)
Te puedo asegurar que el apetito natural es mucho más fiable. Y está basado en redes neuronales y una red de sensores repartidos por todo el cuerpo, en un sistema pervasivo de receptores de información de última generación. :-)
Bromás aparte, que Tim Cook haga publicidad de sus productos como el Apple Watch, sin más, siendo lo demás pura especulación pseudomédica. Con lo improbable que resulta que Apple anuncie un gadget que mida la glucosa con un propósito clínico o fiable, por las implicaciones legales y médicas. (FDA)
Es sencillamente marketing o un gadget con el propósito de competir en el mercado de las pulseras deportivas, sin ninguna relevancia médica o para la salud.
Ninguna celebridad o CEO de una compañía tiene un conocimiento que le permita hacer aseveraciones sobre la salud o el futuro o la economía, con mayor fiabilidad que leer el horóscopo. Es una ilusión. Es tan sólo una falacia de autoridad.
¿En serio debemos recordarte que Steve Jobs murió de cáncer por no tratarlo y fiarse de sus creencias, eludiendo el consejo médico?
Enrique, tienes que ser más crítico y prudente con la información acerca de la salud que proporcionas (no digamos ya Tim Cook), por la cantidad de gente sin formación que te lee.
No es nada en particular, es que probablemente así tendrías una base más sólida en cualquier teorización ‘especulativa’ sobre el tema.
La mejor App para la salud, es la que te receta un Médico.
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Cyberchondria
Arizonans will get their money back from Theranos
Menestro, perdona que opine (no te molestes), pero creo que olvidas lo mas importante; el gran problema que supone la diabetes en muchos países. Y sobre todo en EEUU donde se dice que la mitad de la población la padece.
«La prevención, de acuerdo al estudio, es lo que está fallando. Entre 1990 y 2002 un 29% de la población se encontraba en riesgo de convertirse en diabéticos, un número que ha ascendido hasta el 38% en 2012.»
«Es un problema que supone una factura médica de unos 245.000 millones de dólares al año, con una media anual de 71.000 fallecidos a causa de este mal, de acuerdo a los datos de la Asociación Americana de la Diabetes.»
EEUU: Una nación diabética
Pues si, el primer indicador de estos interesante que saldria al mercado … lo primero que dice el nutricionista «hay que comer de todo», pero eso es una estupidez, ( todos iran quedando en paro, su tactica consiste en hacer adelgazar en primera instancia, y luego si puede ir conduciendo al paciente al balon gastrico que les reporta miles de euros ) porque en el mercado industrial de hoy, en un supermercado hay miles y miles de productos y referencias y decenas de miles de ingredientes de los alimentos, y pocos metabolismos resisten esa paliza asi que mas de medio pais desarrollado esta gordo y empeorando… como dicen las dietas citogenicas, la de Dukan, Willian Davis ( mira que casualidad los dos perseguidos por la justicia, y nadie persigue las miles de pastillas carisimas que solo provocan diarreas, que casualidad ), pues con este indicador ya sabes que NO comer en abundancia, ya que hasta el siglo XIX se ingerian unos pocos gramos de azucares al año, y en el siglo XXI pueden ser 20, 40 kilos de azucares al año
Es un «gadget» imprescindible…. para los hipocondríacos
Quienes están sanos basta que se hagan un chequeo anual y los que están enfermos que sigan las indicaciones de su médico.
Los que hacemos deporte regularmente conocemos perfectamente eso de monitoruzar la frecuencia cardíaca. Hace años eran simples pulsómetros de muñeca que mostraban las p.p.m, las calorías y poco más. Hoy te dicen si has entrenado mucho, cuantos días debes descansar y hasta como debería ser tu siguiente sesión. Pero casi nadie le hace caso a esas recomendaciones empaquetas en un algoritmo que normalmente se aleja de la realidad.
Las sensaciones son el indicador más efectivo para entrenar.
Estos cacharros, que no dejan de tener su utilidad, combinados con una aplicación en el pc muestran una infinidad de datos y parámetros que la mayoría de los mortales no sabemos cómo interpretarlos. Sabemos lo que significan pero ¿cómo los usamos en el entrenamiento y vida diaria…?
Me hace gracia cuando viene alguien con un pulsómetros GPS de última generación, y me cuenta que mide parámetros de inclinación de zancada, zancadas por minuto, tiempo de vuelo y tres mil datos más…. y no saben para que son.
La población adulta sabe lo que tiene que hacer para llevar una vida más saludable: comer más sano, hacer más actividad física y dormir más. Aún así, muchos lo ignoran y no precisamente de forma inconsciente. Saben perfectamente por su sobrepeso o su dificultad para subir escaleras su estado de salud. No necesitan ningún dispositivo que les dé mediciones.
De los que deciden hacer algo para mejorar su estado de salud, están los que no son proclives a dispositivos, no necesitan cuantificar. De estos también hay muchísimos.
Y luego estamos los que sí usamos dispositivos que nos ayuden y midan algo para ver un progreso, pero no creo que tengan que ser nada sofisticados ni medir muchos parámetros. En mi caso el año pasado bastó una app de móvil (entonces no tenía reloj) con un mapa y un contador de tiempo/distancia para empezar a caminar «en serio» los fines de semana. Junto con una dieta más sana (pero sin pasar hambre), perdí 9 Kg en unos 3 meses, luego he recuperado 2 Kg para estar donde quiero estar y mantengo el hábito de pesarme cada día con una báscula conectada para que no me descontrole de nuevo con la comida. La báscula me da más parámetros pero solo necesito el peso.
De los parámetros que necesitan extracción de sangre sólo me preocupa el colesterol, que he tenido alto hasta el año pasado. Sí me gustaría tener mediciones más frecuentes, tal vez trimestrales en lugar de anuales, pero desde luego no necesito mediciones semanales o diarias. Y con otros parámetros, como la glucemia, lo mismo. Las pulsaciones por minuto solo me las tuve que medir con el reloj el otro día por una taquicardia que me dio.
Nunca entenderé como para denigrar a la «bastarda» paramedicina se puede seguir manteniendo en el altar a la «sacrosanta» medicina…
Yo no soy un Job(s) de la vida, pero no me fío de ningún médico por el título o fama, solo me interesa el grado de confianza que, como profesional humano, me inspira a mi…sí, claro, siempre interviene en alguna medida la «mística» personal!
Todo esto a un diabético no le sirve para nada, porque ni mide la glucosa en sangre, ni te calcula y no te pincha insulina (que es lo que nos mantiene con vida).
Con una pequeña bomba, un buen COM e insulina para que no le falte a la bomba tenemos bastante, lo demás un sacaperras.
respondiendo a las preguntas:
¿Estamos ante un escenario en el que un parámetro …….tratamiento de apps? Si, lo estamos, los datos que se van a recolectar seràn de inmenso valor para futuros estudios, datos que seràn cada vez mas certeros en la medida que las iteraciones de esta tecnologìa lo mejoren.
Estamos en el escenario ideal donde cada vez vivimos mas y nos enfrentamos a nuevos problemas en medicina preventiva, cada vez seremos mas viejos, y en este momento hay muchos actores interesados los mismos enfermos , compañìas de seguros, medicos, y el propio gobierno por lo que represente para un paìs tener una poblaciòn sana economicamente activa.
y respecto a la ùltima pregunta: Claro que estoy interesado por todo lo dicho anteriormente, esto es solo el arranque. no creo que confiar a ciegas en mi cuerpo sea lo ideal, no està de mas una ayuda.
Como se apuntó más arriba, el cuerpo humano tiene de serie multiples y sofisticados sensores que nos avisan de frio, hambre, cansancio, sed, etc. Desgraciadamente el hombre moderno ha olvidado todos esos avisos, y nos apoyamos cada vez más en gadgets tecnologicos que nos dicen hasta cuándo debemos dormir o descansar. Un poco de por favor.
Particularmente, no me veo mirando un smartwatch a ver si tengo que comerme una ración de 200g de carbohidratos, o por el contrario me prohibe ingerir nada hasta pasadas dos horas. Ni siquiera los atletas de élite necesitan parametrizar toda su actividad diaria.
Toda esa avalancha de datos solo son útiles para científicos y médicos, pues todo hay que verlo y analizarlo dentro de su contexto. Así, un atleta de cierto nivel puede tener valores algo elevados de creatina, propios de su entrenamiento, y no tener fallo renal. En un adulto sedentario es motivo de alarma.
Jesús, precisamente se trata de que gracias a la tecnología una app te pueda decir si los niveles de tal o cual indicador son los adecuados según tu estado y características.
Dices de hacer caso a los sensores del cuerpo, pero es bien sabido que muchas enfermedades no presentan síntomas hasta que ya es demasiado tarde. Uno por ejemplo no puede saber de manera natural su nivel de glucemia.
Personalmente me parece un área muy interesante que puede ayudar a prevenir muchas enfermedades y a mejorar hábitos de vida. No se trata de obsesionarse con todos esos datos sino de prestar atención a ciertas señales de alarma que científicamente se han probado que son significativas y conviene tener bajo control.
Pues que queréis que os diga. Estoy con Asier. Ojalá hubiera un medidor de ferritina instantáneo con puntazo de sangre o sin él para los que padecemos anemia ferropénica, para saber qué alimentos nos convienen (no todos asimilamos la misma cantidad de hierro de cada alimento).
Cierto es que monitorizando nuestro cuerpo podemos detectar fallos o disfunciones inapreciables, pero ¿no creen que esto generaría un estado de obsesión continuo? ¿Sabemos manejar esos parámetros? ¿ Y si la máquina no indica «niveles de creatina quinasa elevados…» acudiríamos desesperados al médico?
Creo particularmente que provocaría una avalancha de citas previas a las consultas médicas.
Llevo ya bastantes años monitorizando variables como el sueño, el pulso o la actividad física, y no he notado ningún cambio. Vale que soy biólogo y que en cierto sentido sé interpretar algunas cosas, pero no, no me he vuelto más hipocondríaco. Simplemente he aprendido que en ocasiones me siento de determinadas maneras y tiene origen en algunos parámetros que tengo monitorizados. Tan solo en una ocasión me fui a urgencias por una variación significativa de algún parámetro, lo conté aquí, y la alerta estaba más que justificada…
Como diabético considero que la medición de la glucemia en sangre es un indicador totalmente inútil para alguien no diabético, ya que es imposible extraer patrones lógicos de comportamiento en el tiempo. No solo hay que tener en cuenta la ingesta de hidratos de carbono y la actividad física que realizamos, sino también estados de ánimo y situaciones de estrés.
En relación con los sistemas no invasivos, ya hubo en EE.UU: hace años una compañia que comercializó un reloj para medir la glucemia sin extraer sangre (GlucoWatch) que, finalmente, fue retirado del mercado por grandes (y en ocasiones graves) errores de medición. Es más, en sistemas de monitorización continua de glucosa, que trabajan con un pequeño catéter epidérmico, las diferencias porcentuales con respecto a la medición tradicional son muy importantes.
Tan interesante como siempre, Enrique