Independientemente de la opinión que genere la desmonetización de la India emprendida por su presidente, Narendra Modi, dentro de los expertos en política monetaria, no cabe duda de que se trata de un proyecto con un elevadísimo nivel de complejidad.
De los 1,300 millones de habitantes de la India, más de mil millones poseen una tarjeta de identificación Aadhaar emitida por el gobierno central, que recoge sus datos biométricos (huella dactilar, iris, y biometría facial) y demográficos, los almacena en una base de datos centralizada, y les suministra un número de identificación único de doce dígitos, en lo que supuso el mayor proyecto de despliegue de número de identificación nacional de la historia.
En la actualidad, 400 millones de los 1,120 millones de cuentas bancarias del país están vinculadas ya con los números de identificación de Aadhaar, y el gobierno pretende que pronto, todas lo estén, con el fin de luchar contra actividades ilícitas como la falsificación de billetes, el movimiento de dinero negro, la corrupción o la financiación de actividades terroristas.
La desmonetización del país alcanzó uno de sus momentos culminantes cuando, el pasado 8 de noviembre, el gobierno de la India anunció, mediante un mensaje televisado del propio Narendra Modi a toda la nación, que los billetes de 500 y 1000 rupias, que se calculaba integraban en torno al 80% de todo el dinero en circulación, dejarían de tener valor a las doce de la noche de ese mismo día, y tendrían que ser intercambiados por unos billetes con un diseño nuevo o ser depositados en una cuenta bancaria antes del día 30 de diciembre. La radical medida, que provocó un fuerte malestar y enormes colas en los cajeros automáticos, con los bancos cerrados por mandato gubernamental, tenía como medida obligar a todos los implicados en actividades ilícitas a aflorar su dinero, supuso un coste calculado en torno a los $19,000 millones de dólares, y provocó una caída de medio punto en las expectativas de crecimiento del país.
Además de hacer aflorar el dinero negro, la siguiente cuestión era cómo proporcionar alternativas viables de intercambio económico a la población, en un contexto en el que el porcentaje de analfabetismo supera el 25%, y donde únicamente 268 millones de personas poseían un smartphone a finales del tercer trimestre de 2016. Para ello, el gobierno, en conjunción con el mayor banco privado del país, ha lanzado una app, llamada Aadhaar Pay, una interfaz de pagos unificada (UPI) que permite que cualquier comerciante pueda aceptar pagos con un smartphone Android al que añada un lector de huella dactilar de una lista de dispositivos aprobados. Para pagar, los usuarios tienen que elegir el nombre de su banco en un menú, introducir su número de identificación Aadhaar, y escanear su huella dactilar, sin necesidad de utilizar ninguna tarjeta o de memorizar contraseñas. El sistema, además, está libre de comisiones, y abierto a que cualquier otro banco lo integre en sus apps de pago.
Hablamos del mayor proyecto de la historia para ofrecer un sistema de pagos móvil, 1,300 millones de habituantes de un país que pasan, sin necesidad de contar con una determinada base instalada de dispositivos, a ser capaces de pagar mediante un sistema electrónico, y que permite además al gobierno monitorizar sus transacciones y ejercer un mayor nivel de control sobre la actividad económica.
La desmonetización, la eliminación del uso de dinero en efectivo, planteada como una manera de reducir algunos de los problemas más importantes de una de las economías más populosas del mundo. Sin duda, un hito y una tendencia que muchos en otros países estarán observando con el fin de plantearse alternativas similares. ¿Veremos iniciativas como esta en otras economías? ¿Veremos como se convierte la desmonetización en una tendencia a nivel global?
This article is also available in English in my Medium page, “Great technological challenges of the 21st Century: the demonetization of India»
Entiendo que esta medida pueda ser visto como un fascinante reto técnico. Pero desde el punto de vista de las libertades, la privacidad y el respeto a la propiedad privada, base de nuestra civilización, es un ataque frontal y totalmente repudiable.
En adelante, cualquier funcionario gubernamental o empleado bancario tendrá acceso a nuestro historial de compras y pagos, sin que podamos (puedan) hacer nada para evitarlo.
Cabe recordar que el «dinero negro» es dinero, en muchos casos limpia y honestamente ganado… solo que no ha pasado por la «caja» del estado.
Para los que vemos los impuestos como algo que hace honor a su literalidad, y por tanto deberían ser abolidos, la digitalización de los medios de pago, sin ninguna otra alternativa, es un futuro de negros nubarrones de los que deberíamos huir. Hay retos técnicos mucho más interesantes y esperanzadores que ofrecer tu vida al estado.
Yo creo que en realidad, ahora si alguien quiere no ser seguido, puede usar bitcoins o alguna otra similar.
Si no hubiera tantos no honrados y tantos honrados que buscan la forma de contribuir lo mínimo posible al sostenimiento de las infraestructuras comunes (que luego, felizmente utilizan), no sería necesario tomar medidas de esta naturaleza.
En adelante? Pensabas, de veras, que eso no sucede en la actualidad? De veras eres tan credulo de que el Gobierno y entes privados respetan tu privacidad?
Este movimiento es un golpe frontal para hacer mucho mas dificil la existencia de negocios turbios, mercado negro asi como labores economicas de grupos terroristas. Es a ellos a quienes les golpea. En la practica, para los ciudadanos promedio pasa por ser una molestia temporal solamente.
A mí me parece una aberración que se someta a un control tan desacerbado el dinero de los ciudadanos. Por muchas ventajas que pueda aportar, el ansia estatal de control sobre lo ajeno debería ser motivo suficiente para rechazar este tipo de medidas.
Estoy de acuerdo con usted, pero ya puede dar por descontado que este sistema lamentablemente triunfará y que al político sobrecontrolarle le encantara. Dirán que es x nuestra seguridad etc. > Solución Bitcoins?
Independientemente de que como todo tenga facetas positivas y negativas, como indica el comentario anterior, siempre me ha extrañado que los g Gobiernos no hayan intentado eliminar el dinero como forma de combatir el dinero negro y la corrupción, Claro que a mi juicio hay un motivo dinero negro y corrupción es lo que mantiene los partidos políticos y nadie es tan tonto que tire piedras a sus propio tejado.
Sin embargo yo pienso que desaparecido el dinero, no tardará en aparecer otra mercancía de trueque, pero esta, no controlada por el gobierno y por lo tanto aun mas difícil de controlar. Recordemos que la moneda, es algo muy posterior al trueque mediante el intercambio de mercancías de amplia demanda, como puede,, las conchas, las puntas de flecha, las pepitas de oro y cobre, o los cereales,
No me extrañaría nada que los analfabetos, pero muy inteligentes indios, aprendieran en 48 horas el manejo de los bitcoins.
Desafortunadamente cierto, las operaciones de los políticos por debajo del agua son la savia que los nutre.
No, probablemente, y como históricamente ha sucedido, lo que es más factible que acontezca es, la creación de sistemas de pago alternativos, liberados del escrutinio del estado y monedas alternativas, como la divisas criptográficas.
La mayor parte de la gente, incluidos los políticos, no tiene una cultura económica que les permita entender los mecanismos que subyacen a la existencia de un moneda y su soporte.
No se trata solo de un «valor al portador» sino que implica un serie de convenciones, de dotan a la moneda de un valor intangible; gran parte del valor de una divisa no es solo su contrapartida como titulo de deuda, al cambio monetario contra otras divisas o la garantía de un tesoro nacional, sino que además implica un relación de confianza en su valor y perdurabilidad en el tiempo.
Los primeros sestercios, se acuñaban con la efigie del Cesar, porque él era el garante último de esa estabilidad de la moneda. Un especie de compromiso político con su valor e intercambiabilidad, al igual, que los billetes siguen siendo firmados por el presidente del banco Europeo, ya sea Draghi o Trichet.
Eso evitaba una fragmentación económica de la naciones estado o las colonias. Era parte de la colonización romana.
Lo que está haciendo Narendra Modi, es crear su propia idea de una divisa, garantizada por un sistema de pagos centralizado.
No es probable que funcione bien, y seguramente será un factor político que acabe en pasando factura en las urnas. Un sistema de pagos oficializado, supone una auténtica barrera de entrada para cosas como el comercio electrónico fuera de sus fronteras, o la exportación para pequeñas empresas.
Y ya actualmente, es difícil trabajar en transacciones electrónicas con el sistema bancario de la India, que no sigue el estándar SWIFT de transferencias internacionales. Por eso allí están funcionando tan bien sistemas como Transferwise.
La tecnología no sólo son chips ‘tangibles’, o electrónica de estado solido. También hay una tecnología implícita detrás de las monedas. Y ha funcionado muy bien durante siglos.
Otro día hablamos del porqué funciona de una forma tan efectiva Bitcoin; hoy escribo rápido y no puedo dejaros enlaces.
:-)
Otro paso atrás. Lo que sí sería totalmente innovador y una mejora sin parangón en la vida de los ciudadanos/as de todas partes es la total desaparición del uso del dinero. Acabo de escribir sobre ello un tema hoy en mi blog en respuesta a este de Enrique. Espero que os resulte interesante.
Cómo crear una sociedad sin dinero
http://wp.me/p1jWhS-xc
Saludos desde Nueva York y Feliz año nuevo ;) ,
Juan Navidad
¿Que precio tiene un café?
Imaginemos que una unidad de cuenta, en n supuesto standard pagando impuesto y dejando margen comercial a todos los particpantes del café ahasta llegar al que se lo bebe. (Productor, Importador, Almacenista, Transportista, Vendedor, Barman y Estado central, local,… )
Cuando pagas una unidad de cuenta en un bar de Vallecas y 10 unidades en Puerto Banus. Eso es librempresa.
Cuando el empresario de P.Banus no le guste pagar impuestos por su café a 10 unidades de cuenta. Es que el Estado se queda muchos impuestos. Solución cuando hay muchos ladrones…. un ejemplo el de la India,
¿Quieres hacernos creer que es igual tomar un café en Vallecas que en Puerto Banús?
Medio punto de caída en las estimaciones de crecimiento del país me parece poco. Sólo lo que van a sufrir en caída de turismo hasta que se estabilice esto ya debería ser más.
En Venezuela el desgobierno quiso hacer algo similar el 15/12/2016 pero en 72 horas. Como no pudo, extendió el plazo hasta el 2 de enero 2017. Hoy 27/12 todavía los bancos no tienen los nuevos billetes para sustituir al no aceptado billete de Bs. 100. Es probable que haya prorroga. Saludos Enrique
Otro bolivariano. Y más que hay por las europas.
Es sabido que los terroristas y delincuentes más importantes almacenan su capital en rupias.
Hacia ello vamos. De ese modo los terroristas y ladrones sólo lo serán ellos y sus amigos. Habrá corralito permanente para los de siempre y puertas traseras también para los de siempre. Nos limpiarán cuando quieran y cuanto quieran. El que quiera vivir al margen de la dictadura tendrá que volver al trueque.
¿Seguridad? Obtener un número de 12 dígitos que no puede cambiar, identifica unívocamente a la persona y obtener un molde las huellas dactilares (http://www.theverge.com/2016/5/2/11540962/iphone-samsung-fingerprint-duplicate-hack-security) que no puedo repudiar ni cambiar y conocer el nombre del banco de la persona. Y ya puedo tomar café gratis en el Starbucks o adquirir cualquier cosa que no deje rastro…
Me temo que hay algo que no entiendo….
Me llama la atención respecto al pago en el comercio la frase ‘El sistema, además, está libre de comisiones». No parece muy creíble.
El comercio necesita un Smartphone y un lector de huellas en cada caja. ¿Cuánto cuesta esto y quien lo paga?¿300€, 400€….por caja?
Comparativamente un tpv de pago actual cuesta unos 100-120€.
¿De verdad queremos creernos que una solución 3 o 4 veces más cara costará menos o será gratis?
Y esto sin contar que será el comercio el que pague las comunicaciones de ese móvil.
Cuando ese móvil se caiga al suelo y se rompa, ¿la reparación también la tiene que pagar el comercio?