El desarrollo del vehículo autónomo está convirtiéndose a gran velocidad en un auténtico laboratorio de estrategias empresariales, en un terreno en el que mueven sus piezas compañías pertenecientes tanto a la industria de la automoción como de la tecnología.
Así, si hace unos días intentaba analizar la evolución de los posibles esquemas de propiedad de los vehículos autónomos que podrían surgir vinculados a la madurez de la tecnología, hoy querría dibujar un pequeño mapa estratégico con los distintos competidores en liza y una breve descripción de su estrategia y del nivel de madurez de la misma. La lista, obviamente, es abierta y en cierto sentido, arbitraria, dado que he procurado citar a aquellos competidores de los que existe información relevante, sin que ello no implique que otros actores puedan estar también trabajando en el tema, y está ordenada alfabéticamente.
- Apple: las iniciativas de la compañía de la manzana ya las hemos comentado en alguna ocasión, aunque siguen siendo tan oscuras y sujetas a especulaciones como todo lo que hace la compañía. A estas alturas, la compañía alimenta rumores de todo tipo en torno a sus iniciativas en automoción: a lo largo del tiempo, ha contratado varias figuras relevantes con experiencia en la industria, se ha reunido con compañías importantes en el sector, parece haberse planteado la adquisición de Tesla, y se refiere al coche como «the ultimate mobile device«. Se apunta que el equipo destinado a la iniciativa comenzó con doscientos empleados, que tiene como objetivo llegar a los mil, que proceden de compañías como Tesla, Ford o GM, pero también de empresas más pequeñas como A123 Systems, MIT Motorsports, Ogin, Autoliv, Concept Systems o General Dynamics. Estas personas estarían distribuidas en un equipo central en Cupertino, al que se añadirían supuestamente equipos en Alemania y en Austria (en torno al gigante canadiense Magna, a la que algunos ya quieren considerar «la Foxconn del automóvil«). En función de los perfiles contratados, todo indica que sería un vehículo eléctrico,muy posiblemente autónomo, y que se plantearía su salida al mercado en torno a 2020 – todo ello con la evidente precaución que supone hablar de la estrategia de una compañía que se encuentra comodísima alimentando especulaciones de todo tipo.
- Daimler: la compañía alemana se considera pionera en este ámbito, parece una de las más avanzadas en este momento, y tiene en su página web abundante información en ese sentido. Parece tener asociadas esas iniciativas a una de sus marcas, Mercedes-Benz, que ya posee prototipos funcionales tanto en automóviles como en camiones, en donde fue capaz de presentar el primer modelo autónomo a nivel mundial el pasado noviembre. Las pruebas en automóviles parecen estar llevándose a cabo sobre la base de su Clase E, y todo apunta a que la compañía, que comentó el pasado enero encontrarse sorprendida por los avances de empresas tecnológicas como Apple y Google en este ámbito, está ya preparada para la incorporación de tecnología de conducción autónoma a vehículos de fabricación estándar, a falta únicamente del desarrollo de un marco legislativo adecuado.
- Fiat-Chrysler: la séptima compañía de automoción por volumen de facturación parece, aparentemente, ser de las que menos prisa tiene en el segmento del vehículo autónomo. El pasado 5 de marzo de 2015, su CEO, Sergio Marchionne, afirmó categóricamente que su compañía no se apresuraría a ofrecer vehículos autónomos antes de tiempo, entre otras cosas debido a los altos costes de su desarrollo. El pasado abril, sin embargo, firmó un acuerdo con Google para el desarrollo conjunto de vehículos autónomos y el mismo Marchionne se declaró impresionado con la velocidad con la que la tecnología se estaba desarrollando, afirmando que no sería cosa de veinte años, sino de menos de cinco, en 2020. Tras las noticias de la alianza, Google se ha desmarcado relativamente restando importancia al acuerdo y pintándolo como una iniciativa limitada, destinada a producir tan solo unas cien unidades de un solo vehículo, una minivan Chrysler Pacifica Hybrid, con el fin de aumentar la flota de vehículos de la que dispone la propia Google. La compañía italiana ha sido descrita como «el socio perfecto para Google» debido a su escasa ambición en este ámbito.
- Ford: la 5ª compañía de automoción del mundo por facturación afirma encontrarse en una clara posición de liderazgo en el área del vehículo autónomo, a pesar de que hace pocos años no creía en ello en absoluto y únicamente hablaba de tecnologías de asistencia a la conducción. En un momento dado, sin embargo, la compañía pareció abrazar la idea radical de Google, y comenzar a buscar la autonomía total apuntando a su comercialización en el año 2020 además de seguir desarrollando progresivamente funciones una por una, aunque afirma que sus vehículos siempre mantendrán la posibilidad de ser conducidos de forma manual. Sus iniciativas se centran en el Ford Fusion Hybrid a través de una subsidiaria denominada Ford Smart Mobility, cuya flota en pruebas ha triplicado recientemente para convertirla en la más grande de toda la industria del automóvil. Ha avanzado sensiblemente en la tecnología LiDAR, y anunciado pruebas exitosas de conducción autónoma en oscuridad total. Fue la primera compañía en iniciar sus pruebas en la conocida Mcity de Michigan University, y actualmente está haciendo pruebas en trafico real en California, Arizona, Michigan y Pennsylvania (estas últimas en asociación con Uber).
- Google: seguramente, la compañía en la que más personas piensan cuando se menciona el tema de la conducción autónoma, no pertenece a la industria de la automoción, sino a la tecnológica. Fue la primera compañía en comenzar pruebas en tráfico real en el año 2012, pruebas que mantuvo en secreto hasta acumular ya cientos de miles de kilómetros de experiencia. Para sus pruebas, comenzó utilizando Toyota Prius, Audi TT y Lexus RX450h, pasó después en exclusiva a monovolúmenes Lexus y, finalmente, a sus conocidos Koala. La aproximación de la compañía, que lleva a cabo sus iniciativas encuadradas en su subsidiaria X, es radical: vehículos sin volante ni pedales, que eliminan toda posibilidad de interacción humana como única manera de garantizar la seguridad. Su progreso se mide ya no tanto por la capacidad de sus vehículos para conducir autónomamente, sino por su potencial de imitar la conducción humana, tomando decisiones en entornos de marcada relatividad o, por ejemplo, aprendiendo en qué situaciones deben hacer uso de la bocina. Todo indica que la compañía, siguiendo su estrategia habitual, nunca pretenderá poner en el mercado sus propios vehículos, sino ofrecer su software, Google Chauffeur, y u tecnología en forma de plataforma a los fabricantes que lo deseen, como en el caso de Android y los fabricantes de smartphones. Las estimaciones de la compañía son que podría ser capaz de rebajar el coste de toda la tecnología necesaria para convertir un vehículo en autónomo hasta los 10,000-15,000 dólares, lo que indudablemente generaría una adopción masiva.
- Microsoft: la compañía acaba de clarificar su estrategia con respecto a la automoción, sobre la que existía hasta el momento muy poca información, con unas inequívocas declaraciones de su VP de desarrollo de negocio, Peggy Johnson, en las que afirma que nunca estarán interesados en desarrollar un vehículo autónomo, pero sí en ser los proveedores tanto del software que se utilice en él, como del sistema operativo que lo haga funcionar. Microsoft acumula una larga tradición de colaboración con empresas de automoción, y parece estar actualmente en conversaciones con siete u ocho compañías de diversos tipos en la industria de cara a la posible adopción de su plataforma para cuestiones relacionadas con el vehículo conectado, y ha llegado a acuerdos específicos con Volvo sobre el tema de la conducción autónoma.
- Tesla: la única compañía de la industria del automóvil que no cuenta su antigüedad por décadas es, definitivamente, un actor importante en el ámbito de la conducción autónoma. Comenzó a ofrecer prestaciones de conducción semiautónoma en octubre de 2015 como un upgrade de software en los vehículos que ya vendía, y actualmente, parece implicar no solo que su Model 3 será el primer coche completamente autónomo vendido de manera masiva, sino además, que tiene la cuestión de la conducción autónoma completamente resuelta.
- Toyota: la compañía japonesa, que viene a ser la empresa de automoción más grande del mundo por volumen de negocio, se mantuvo escéptica durante largo tiempo en todo lo relacionado con la conducción autónoma. Sin embargo, es la propietaria de más de 1,400 patentes relacionadas con el tema, más del doble que cualquiera de sus competidoras, y parece aproximarse al tema mediante una visión centrada en el llamado «ángel de la guarda», que implica que la máquina toma el control del vehículo cuando el conductor toma una decisión equivocada y el accidente es inminente.
- Uber: la compañía mantiene desde febrero de 2015 una alianza con Carnegie Mellon de cara al desarrollo del vehículo autónomo, alianza que ha pasado por momentos de crisis cuando su agresividad le llevó a ir fichando y apartando de la universidad a cada vez más profesores especializados en el tema. Tras enderezar el rumbo de su alianza con una nueva dotación económica, parece que ya han conseguido importantes avances, que se evidenciaron con la aparición de vehículos autónomos de la compañía en la ciudad de Pittsburgh, basados en la plataforma del Ford Fusion. La compañía integra, junto con Google, Ford, Volvo y Lyft, una coalición destinada a acelerar el desarrollo de un entorno legislativo que posibilite el avance de los coches autónomos, en un movimiento que convertiría a los actuales protagonistas de la plataforma, los conductores, en completamente prescindibles, y que supondría un giro de 180º en su estrategia. De hecho, muchos especulan con que la descomunal valoración de la compañía tiene precisamente que ver con lo que supondría su paso de ser simplemente una plataforma de ajuste entre oferta y demanda, para pasar a ser la propietaria de una enorme flota de vehículos autónomos. En este sentido, se han rumoreado un hipotético interés de la compañía por adquirir cantidades desmesuradas de vehículos semiautónomos de Mercedes-Benz o de Tesla, noticias que han sido posteriormente desmentidas.
- Volkswagen: la compañía alemana, tercer fabricante del mundo por volumen de negocio, acaba de afirmar que será capaz de construir vehículos autónomos más rápido que cualquiera de sus competidores, y sitúa ese escenario de nuevo en torno al año 2020, para pasar a hablar de popularización y mercado masivo en 2025. Menciona el objetivo de «salvar un millón de vidas cada año» y afirma estar construyendo tres Group Future Centers en Alemania, California y China. Sin embargo, la realidad no parece acompañar esos deseos de liderazgo, que podrían ser, junto con el reciente empuje al desarrollo de vehículos eléctricos, un intento de tapar el reciente escándalo en torno a las emisiones de sus motores diesel. Por el momento, presentaron pruebas de conducción autónoma sobre la plataforma de un Audi A7 a principios de 2015, pero las estimaciones de la marca para pasar de la fase de prototipo a la de fabricación se cifraban entre los tres y los cinco años, lo que según lo visto en otras marcas, los alejaría de ese pretendido liderazgo.
- Volvo: la empresa sueca es, según todos los indicios, una de las más avanzadas en el desarrollo del vehículos autónomo. Se considera actualmente a un nivel en su conducción autónoma que, según ellos mismos, convierte a competidores como Tesla en un simple «quiero y no puedo». La estrategia de la compañía, abundantemente publicitada en su página, parece apuntar a poner en el mercado un vehículo completamente autónomo el proximo año 2017, un vehículo en el que la marca estaría dispuesta, según sus propias palabras, a aceptar toda responsabilidad en caso de accidente.
Como puede verse, el momento de apuntarse la medalla de tener el primer vehículo completamente autónomo hace ya mucho tiempo que pasó. Estamos ya en la fase de ser el primero que lo ofrezca comercialmente y a nivel global a cualquiera que lo quiera utilizar, sea en forma de producto o de servicio, con todo lo que ello conlleva.
Llevamos tiempo comentándolo: la tecnología ya está aquí, y lo que falta ahora es pulir cuestiones como el precio, el marco legislativo o la estrategia de lanzamiento en función del modelo de negocio escogido, con marcas que sitúan ese momento tan cerca como el año que viene, y una mayoría que apunta a 2020 como «momento de la verdad». Por supuesto, faltan detalles, muchos detalles importantes, y la verdadera fase de popularización estará repleta de problemas y de casos problemáticos de todo tipo, de errores clamorosos y de movimientos pendulares a medida que nos vayamos encontrando con todo tipo de situaciones, pero la cosa está ya prácticamente aquí, la competencia tiene el efecto que todos sabemos que tiene, y las estrategias que parecen delinearse, a falta de otros actores, tienen ya cuerpo de realidad. Compañías de verdad, estrategias de verdad, planes inminentes. esto ya no es, ni mucho menos, ciencia-ficción.
(This article was also published in English at Forbes, “10 different strategies shaping the transition to the self-driving car»
Muy completo … Falta la estrategia de @taxioviedo … Pero bueno ;)
jajaja… Rixard, insumergible como un corcho. Cuando no haga falta conductor, tu iras en tu taxi dándo al cliente conversación. ¿Qué mejor Cicerone para enseñar Oviedo?
Sigo opinando que quienes ven posible en el corto plazo, el uso por parte del público y como cosa no experimental, de vehículos no tripulados son terriblemente optimistas.
Aun pensando que tal vehículo existiera ya, cosa que admito como posible, pasarán años antes de que se deje circular un camión de treinta toneladas sin conductor por una carretera. Vehículos como el tren AVE, mucho más fácil de ser conducido de forma autónoma, y que de hecho van conducidos de forma autónoma, llevan conductor. Si estos vehículos llevan un conductor «de adorno», el pensar que un autobús de la EMT no lo lleve es muy optimista.
Creo que en una primera fase aparecerán «ayudas a la conducción» que haga que el conductor se desentienda del manejo del vehículo, pero no que no esté dentro del vehículo. Por ejemplo, igual que ahora hay sistemas que te aparcan el coche, puede haber sistemas que en autopista sigan un carril y mantengan una distancia de seguridad con otros coches , o como se está experimentando en los camiones, vayan a rebufo de otro conducido, pero eso no quiere decir que sl vehículo no lleve chófer. aunque este vaya viendo la televisión.
Yo tampoco lo veo a corto plazo, aunque nada me gustaría más.
Por un lado, no todo lo que es tecnológicamente más avanzado reemplaza a lo anterior. La naturaleza humana de la mayoría no es igual que la de una minoría muy avanzada tecnológicamente. Si así fuera, las impresoras de papel habrían desaparecido hace años, la TV en directo salvo eventos deportivos, las bibliotecas con libros sin enchufes en las mesas para los que llevamos portátiles, y con wifi lentísima, etc. Como anécdota, ayer estuve en el centro de atención al cliente de un conocido centro comercial de Madrid muy visitado por turistas japoneses y tenían 4 ó 5 impresoras bien grandes acompañadas de un ordenador con Windows XP cuyo «Active Desktop necesita ser restaurado». Por lógica y cuestión de imagen, en 2016 bastaría una modesta impresora de inyección escondida de la vista para imprimir un papel para aquellos pocos clientes que aún no tienen correo electrónico o teléfono inteligente.
Por otro lado, intentar sustituir a los conductores de metro, cercanías, trenes, autobuses, taxis o camioneros por vehículos autónomos sospecho que traería unas huelgas conjuntas de todos esos colectivos como no se han visto nunca (no tendrían nada que perder…), colapsando las ciudades y el transporte, y ya veríamos la respuesta política.
Lo que lleva a lo que dices, mayores ayudas a la conducción, pero con conductor humano, que puede relajarse algo durante la conducción, pero ya veremos si se puede «echar cabezaditas» durante el trayecto o ha de estar siempre en disposición de hacerse con el control del vehículo en algunos segundos como he visto en algunos vídeos de fabricantes de coches.
Hombre, si lo planteas en términos de «todos a la puta calle», claro que te van a hacer huelgas y lo que haga falta. Pero hay alternativas que como mínimo suavizarían el golpe. En Telefónica, por ejemplo, hay ahora solo una fracción de los empleados que había en 1998 (fin del monopolio), y no hubo ninguna huelga. No es solo que una importante porción del mercado la tengan ahora sus competidores, sino que también un gran número de trabajadores de la propia Telefónica fueron sustituidos por trabajadores de subcontrata.
Pero claro, en Telefónica los han estado prejubilando incluso con 48 años (un primo mío con 53), e incluso hoy día, después de 2 grandes reducciones de personal, está en curso una tercera que consiste en que, si tienes o vas a cumplir 53 años, este año o el que viene, te puedes «retirar» (no ir a trabajar) si aceptas cobrar solo el 68% de tu sueldo.
Por contra, los conductores de tren y metro dejaron de ser necesarios hace más de 25 años, y todavía no se ha sustituido por un conductor automático a ninguno. Tan solo conque no se hubieran cubierto las vacantes de los que se iban jubilando ya tendríamos un importante porcentaje de trenes y metros sin conductor.
Más aún, pongamos que un conductor de tren o metro entra a trabajar a los 20 años, y que la sustitución hubiera comenzado hace 25. Es decir, que desde 1991 no hubiera habido nuevas contrataciones. Con prejubilaciones a partir de los 48 años, al estilo de Telefónica, te quedaría ahora un residuo de unos pocos trenes y metros con conductores de entre 45 y 48 años, residuo que terminaría de desaparecer en los próximos 3 años.
Y eso sin tener en cuenta las recolocaciones, porque si las empresas u organismos públicos de trenes y metros hubieran dejado de contratar hace 25 años, en este periodo también se hubieran jubilado otros que no son conductores, tales como revisores, taquilleros, personal de control de tráfico, etc.
Añádele fallecimientos (no todo el mundo vive hasta los 65 años), bajas temporales, incapacidades permanentes, excedencias, bajas incentivadas, etc.
No quieres comprender que un conductor, no es un empleado normal que se queda sin trabajo por ser sustituido por una máquina, sino algo diferente,
En el Metro no tuvieron ningún problema ni ninguna huelga por sustituir las taquilleras por máquinas expendedoras, Tampoco lo habían tenido antes al eliminar el jefe de tren que el responsable de cerrar las puertas y dar la salida al metro como no lo habian tenido los autobuses al eliminar al cobrador.
Para hacer eso no tuvieron que cambiar los reglamentos,, sin embargo para eliminar un conductor, tiene que cambiar los reglamentos de ferrocaarriles que exigen una persona capacitada como conductor , y eso, no lo hace el Metro, sino alguien en el ministerio de Industria y ese alguien, tiene que estar muy seguro del buen funcionamiento del automatismo, porque es el que carga con la responsabilidad al firmar la autorización y como ni él ni el ministerio, paga las nóminas de los conductores, pues la tendencia es decir, muy bien, que el tren tenga conducción automática, pero que el conductor vaya en la cabina.
Desconozco los reglamentos del Ministerio de Industria pero, si eso es cierto, ¿cómo se explica que la línea 9 del Metro de Barcelona sea automática? No creo que sea ilegal.
Los metros automáticos ya son una realidad y poco a poco se irán implantando. Quizás ocurre que el coste de los conductores respecto al total continúa siendo bajo. Pero si se comportan como si fuesen la última coca-cola del desierto, aumentará el atractivo económico de los trenes sin conductor.
Carlos:
Navegando por la Wikipedia, gracias a tu enlace, he podido ver que son 3 las líneas del metro de Barcelona que actualmente funcionan sin conductor: L9, L10, y L11.
Por algo se empieza. Ya era hora.
Totalmente de acuerdo. Una cosa es el invento y otra qu esté disponible.
Cuando se habla de conducción autónoma solemos (me incluyo) fijarnos en los coches, pero lo cierto es que también implica otras 2 revoluciones bien gordas en el transporte de mercancías (camiones), y en el reparto de pedidos, lo cual a su vez va a tener una importante repercusión en el comercio electrónico.
Los productos salen de una fábrica robotizada, transportados por un camión sin conductor hasta un almacén robotizado. Allí esperan a que alguien los compre (por web o app). Es decir, el almacén transforma los cargamentos mayoristas en pedidos al por menor.
Un conjunto de pedidos sale en otro camión robotizado hasta alguna central de reparto, desde donde unas robofurgos los llevan a puntos de recogida (que pueden ser unas taquillas computerizadas como los Amazon Lockers), o bien la propia robofurgo es una taquilla ambulante de recogida.
Simplemente no hay color respecto a las tiendas físicas en cuanto a ahorro de costes de mano de obra y de caro espacio urbano, y con una oferta muchísimo más amplia y variada.
Por supuesto, también hay tiendas que venden coches. Ahora bien, con mercancías capaces de transportarse a sí mismas sobra hasta Amazon. Es decir, le compras un coche a Tesla, y él solito sale de la fábrica, y se desplaza hasta la puerta de tu casa.
Falta el juguete de Renault, PSA,… Por ahora todo son pruebas de lab. Cuando veamos de verdad coches homologados para la calle con todos sus permisos técnicos y legales resueltos, podremos ver una competencia entre los grandes fabricantes del sector. No con las tecnológicas, que tienen exceso de CF pero del sector ni papa… Buscan posicionarse para tener su trozo de pastel. Es muy infantil pensar que les van a robar la tostada. Puede que haya avances singulares, p.ej. Tema baterías, ahí Tesla parece estar bien posicionada. Pero entre el tiempo que pasa en la introducción en el mercado ya se les acaba la poca ventaja que pudieran tener, … Puede que algún fabricante se vea también afectado por su torpeza. O despunte alguna alianza…
Al final esto es como la radio Blaupunkt, Alpine,..de hace años, hoy en día la calidad de las que vienen de serie en los modelos de media gama son las que tenemos la mayoría. Frikis aparte. Nada nuevo bajo el sol.
En mi opinión, un actor importante, si bien discreto en el terreno mediático con respecto a este tema es BMW.
Te dejo dos enlaces, por si quieres ampliar la lista.
Sobre su asociación con Baidu, en China:
http://www.bmwblog.com/2015/12/11/baidu-and-bmw-to-launch-first-self-driving-car-on-chinese-roads/
Sobre su enfoque gradual (por cierto, en CES 2015 enseñaron un i3 que se iba por sí solo a aparcar y más tarde venía a recoger al conductor). Hay mucha más info si buscas en su web de prensa (press.bmwgroup.com) sobre sus múltiples iniciativas:
http://www.bmwblog.com/2016/03/06/bmw-says-capable-build-intelligent-car/
Un saludo.
Víctor
A mi el coche autónomo me sigue pareciendo aún ciencia ficción por no hablar de los problemas jurídicos de responsabilidad que pueden derivarse de todo eso
Gracias Enrique.
Para mi lo mas relevante lo de Volvo : «Who is responsible?»: «Us». Es nuevo para mi y desconozco si algún otro «car maker» ha tomado la misma postura, como se afirma. Junto con su intención de lanzar un vehículo autónomo en 2017 representa desde mi punto de vista un auténtico puñetazo en la mesa. Por otro lado pienso que su imagen es un caso único en el automóvil y tiene mucho a su favor para subirse al tsunami de forma muy ventajosa.
Lo mas cachondo, como siempre lo de Elon. Primero dice que vivimos en Matrix y luego que la conducción autónoma es un problema resuelto. Genial.
Esto está avanzando a un ritmo tan frenético que nos resulta dificil de creer, y de encajar, pero, nos guste o no, el tema está ya aquí, no es el futuro: ¡es ya..!.
Pero si se está hablando de prohibir el uso de combustibles fósiles ya en paises cómo Noruega, Holanda y otros, ¿habríamos siquiera pensado hace un año que eso fuera posible?.
La tecnología va ya más deprisa que nuestra capacidad de aceptarla…
Completamente de acuerdo, en que todo avanza rápido,.. pero no tanto como para que el ritmo sea frenético.. Lo que ocurre es que ahora todo el mundo tiene que meter en cualquier nota de prensa algo de «coches autónomos»… ¡Si hasta Apple, que no ha dicho nada oficialmente de coches y mucho menos de autónomos se merece una mención!
Si luego lees un poco en detalle las fuentes que menciona Enrique (a veces hay que bajar otro nivel, para llegar a la original), te das cuenta de que hay un 90% de Marketing y un 10% de realidad. Si la gente hablara sólo de realidad también sería muy interesante, pero en estos tiempos todo se trata de «ver quien la tiene mas larga» (dicho rápidamente).
Algunos ejemplos:
– Volkswagen dice que podrían ahorarrse 1.000.000 de muertes en carretera gracias a los coches autónomos. Los datos de la OMS hablan de 1.250.000 muertos por accidentes de tráfico en todo el mundo
http://www.who.int/gho/road_safety/mortality/traffic_deaths_number/en/
Es decir, que para conseguir esa reducción de 1.000.000 de victimas, supongo que estarán pensando en que el 75% de los coches de todo el mundo sean autónomos. ¿Para el año 2150??
Vamos, una parida con todas las letras, pero que ya sirve para que todos hablemos del millón de muertos que se evitarían gracias a los coches autónomos..
– Volvo. Teóricamente en 2017 van a lanzar un coche «totalmente autónomo»… Y cuando llegas a la fuente, lo que se dice es que lanzarán coches autónomos en 2017 para 100 conductores en 80 km de carreteras en Gothenburg.
http://www.volvocars.com/intl/about/our-innovation-brands/intellisafe/intellisafe-autopilot/drive-me/real-life
Como puedes ver, marketing marketing y marketing… (y mucho interés en mantener el hype sobre este tema).
Por supuesto que la conducción autónoma será posible, pero desde luego, el próximo coche que nos compremos no va a conducirse sólo. Podrá tener capacidades de auto conducción en condiciones muy específicas (lo que ya es un avance), peroe so de decirle, sal del garaje, abre la puerta, y llévame hasta la casa del pueblo en un pueblo de Asturias (por ejemplo), va a tener que esperar un poco.
En ese sentido el mas honesto de los fabricantes en mi opinión es Toyota, que habla de incorporar tecnología que pueda tomar decisiones por el conductor ante un accidente inminente. Hace tiempo también se comentó (y creo que Enrique habló de ello en este blog) sobre la conducción autónoma de Toyota, y si leías en detalle de lo únic que hablaba era de un control de crucero adaptativo, pero mas sofisticado.
Si, seguramente tienes razón en que se está exagerando un poco en los medios, pero el interés de grandes empresas y los avances están ahí, y todo va a ocurrir más deprisa de lo que pensamos.