La primera noticia que me cita en El Español, medio de cuyo consejo de administración formo parte, no es una columna mía (que escribiré y enviaré la primera esta tarde), sino una noticia escrita por Pablo Romero acerca de un desarrollo de análisis multivariante llevado a cabo por Hitachi y alimentado con registros de criminalidad histórica, transporte público, meteorología y conversaciones en redes sociales, que algunos departamentos de policía están probando como herramienta para tratar de optimizar su presencia en ciertas zonas, reducir los índices de criminalidad, o incluso prevenir algunas acciones específicas.
El artículo se titula «Así detectarán el crimen antes de que pase«, y tiene bastante relación con algunas otras cosas sobre el tema que he escrito anteriormente. Fundamentalmente, tomar una historia que evoca a la ciencia-ficción, despojarla de los elementos «mágicos» (aquellos supuestos «mutantes adivinadores» que destrozaban toda posible credibilidad de la película), y adentrarse en las posibilidades del análisis multivariante y el machine learning aplicado a la predicción de la distribución de una variable del comportamiento humano.
El texto del mensaje que crucé con Pablo para comentar el tema, a continuación:
La prevención de la criminalidad es una cuestión espinosa: lo que en principio parece razonable – prevenir el daño a terceros mediante la violación controlada de un derecho como la privacidad – puede claramente convertirse en un abuso por parte del vigilante.
El estado de madurez actual de la tecnología, unido a los usos y costumbres que nos llevan a compartir cada vez más cosas con nuestro entorno, posibilitan que una vigilancia bien desarrollada pueda llegar, de manera eficiente, a prevenir un número elevado de situaciones de potencial criminalidad. ¿Quiere esto decir que resulta lícito poner bajo vigilancia a toda la población y tratar de conocer sus tendencias o la probabilidad de un comportamiento criminal más allá incluso de lo que la conocen ellos mismos?
Un terrorista sabe que va a delinquir y tiene todo el sentido del mundo intentar evitarlo. Sin embargo, alguien que va a sufrir un brote psicótico o que va a convertirse en maltratador es muy posible que no lo sepa, que su acción no se corresponda necesariamente con una premeditación, y sin embargo, puede ser perfectamente detectable con antelación. ¿Significa esto que tendría sentido avanzar hacia el desarrollo de Departamentos de Pre-crimen en las policías de todo el mundo? El balance que separa al «Estado protector del bienestar y la seguridad de sus ciudadanos» del «Estado policial que los controla hasta el límite» es extremadamente delicado, y requiere de un sistema de controles y balances muy riguroso.
Un sistema de controles y balances muy riguroso….del que lamentablemente estamos cada vez mas lejos, añadiría yo.
Yo aún no he perdido la esperanza…
Un tema interesante: en la ficción parece estarse moda, en Usa acaban de sacar una serie de Tv sobre Minority Report, adaptación de la película. Otra Person of interest también reflexiona sobre el tema pero un anime japonés llamado Psycho Pass lo plasmo a la perfección con una sociedad dominada por un sistema de pre-crimen y sus derivaciones. Con que veas el primer capítulo de su primera temporada o una película que sacaron hace poco, puedes sacar ideas interesantes sobre este debate. En la película instauran el sistema en un país en guerra civil de una forma curiosa y cuestionable. En la serie indagan sobre los fallos de un sistema supuestamente perfecto y superior, la falta de libertad individual, el determinismo social, etc.
Parece que en un futuro muy lejano algún gobierno hará una prueba piloto de algún sistema similar, aunque seguramente de forma oculta a la opinión pública….sino lo están haciendo ya. EE. UU. y China deben estar viendo este tema para tener controlada aun mas a su sociedad.
Me hace el efecto que hemos vuelto a resucitar a Cesare Lombroso, pero en digital. Sinceramente creo que el intento de relacionar registros de criminalidad histórica, transporte público, meteorología y conversaciones en redes sociales, va dar tanto resultado como estudiar las formas de la calavera de las personas, que era lo que decía Lombroso
Otro rasgo característico de la obra de Lombroso es la precariedad de su método científico, frecuentemente de la observación empírica, a veces sobre la población, y de relaciones de causalidad escasamente fundadas. Por ejemplo, de la comparación entre la temperatura anual media en las distintas provincias de Italia y el índice de homicidios en cada una de ellas concluye Lombroso que el calor favorece este tipo de delitos.
¿No os suena igual?
No, no me suena igual. O me suena tan igual como el primer ser humano que concibió la rueda y el «econosistema» que hoy desarrolla el automóvil del futuro.
Nuestro método científico puede ser cualquier cosa menos precario.
Otra cosa son sus límites, sus ámbitos de aplicación y los incentivos que gobiernan su uso.
¿Limites? Muchos.
¿Ámbitos de aplicación? Se quiere en todos.
¿Incentivos? Cuantiosísimos, sin reparar en gastos, a costa del pueblo, pero sin el pueblo.
Saludos
Me entristece que utilices los brotes psicoticos de una manera tan estigmatizante.
Las personas con enfermedad mental suelen victimas de violencia mas a menudo de lo que la ejercen.
Tiene usted razón, pero también es cierto que un brote puede desencadenar en una conducta criminal. Dicho esto, si seguimos por la senda de criticar en términos de «estigmatización», vamos a un callejón sin salida: en último término, cualquier palabra es estigmatizante, cualquiera.
Ahora bien, lo que se esconde detrás de esta tecnología de tres al cuarto, es la resurrección del Dr. Lombroso de la mano del Dr. Mengele.
Pregunta: ¿A que no van a meter en semejante máquina de feria a nuestros gobernantes y a su caterva de fieles sátrapas que nos gobiernan? ¿Por qué nunca se dice que entre ellos están los mayores criminales de la historia porque ellos son los que han hecho la historia de las atrocidades?
Así que cada vez que se habla del pre- crimen lo que se trata no es tanto de estigmatizar, sino de criminalizar a toda la población, ¡¡¡menos a ellos!!!, por supuesto, los más criminales de la historia de la humanidad.