Mi visión de la política española

referendum-elmundoElena Mengual, de El Mundo, me contactó por correo electrónico para preguntarme si estaba a favor de que se celebrase un referéndum monarquía – república, y un breve párrafo explicando por qué. 

La pregunta no era si estaba a favor de una monarquía o de una república, sino específicamente si estaba a favor de un referéndum. Y en el contexto español, claramente demasiado aficionado a una metodología que intenta mantener a los ciudadanos lo más alejados posible de los procesos de toma de decisiones, mi opinión es que la respuesta a esa pregunta debe ser siempre afirmativa.

Revisemos la metodología de nuestra supuesta democracia: el papel del ciudadano se reduce a meter una papeleta en una urna a lo sumo cada cuatro años para dar su apoyo a una lista cerrada de candidatos elegidos por una persona que los ha puesto ahí y a la que deben no solo lealtad sino auténtica obediencia en el marco de unos procesos internos de partido que son por lo general lo más alejado de la idea de una democracia. Dado que los «elegidos» – ungidos por la gracia de su líder – no representan, ni tratan de representar, ni responden siquiera al ciudadano que les votó, sino únicamente al líder que les ha puesto en la lista, el ciudadano de manera efectiva carece de poder alguno de decisión, lo que convierte el acto de votar en un simple intento de justificación de algo a lo que llaman «democracia», pero que, en realidad, no lo es en modo alguno.

Una pequeña comparación con otras democracias permite observar – con envidia – cómo en otros países, cuando el ciudadano tiene una opinión sobre un tema, puede contactar a su representante para solicitarle que traslade esa opinión en uno u otro sentido. Las campañas en favor de determinadas cuestiones con apoyo popular en otros países inciden claramente en el contacto con el representante: escribe o llama al parlamentario al que diste tu voto y explícale por qué quieres que su voto se exprese de una u otra manera. Ese vínculo entre representante y representados existe, y puede hacerse efectivo: si el representante no traslada la opinión mayoritaria de sus representados, se juega su posible reelección.

El problema, desde mi punto de vista, no es ideológico, no tiene nada que ver con si se apoya una monarquía o una república, o con si se es «de derechas» o «de izquierdas», una dualidad convertida ya en auténtico esperpento reduccionista y sin sentido, sino puramente metodológico. Se trata de apoyar que un país que se considera a sí mismo democrático sea gestionado de verdad y de manera efectiva como una democracia, y no como la triste caricatura de una democracia en la que el ciudadano, en realidad, no tiene ninguna implicación ni posibilidad de influir sobre la toma de decisiones.

A continuación, mi respuesta completa a la pregunta formulada por Elena:

 

Yo siempre estaré a favor de que se pregunte a los ciudadanos cómo desean organizarse como sociedad. La organización política española tiene un problema fundamental: es una democracia falsamente representativa, en la que el vínculo entre representantes y representados es inexistente, y donde los ciudadanos, por tanto, no pueden expresarse a través de aquellos a los que supuestamente votaron para que les representasen en las instituciones públicas. Si combinamos esa ausencia de canales representativos con una evidente falta de democracia interna en los partidos, con una separación de poderes sumamente mejorable, y con una tendencia a no preguntar nada al ciudadano, tenemos la imagen clara de una democracia muy deficiente. Independientemente de lo que diga la Constitución, si se detecta un movimiento razonablemente significativo en la sociedad en favor de un cambio, se deben orquestar los mecanismos necesarios para que los ciudadanos puedan expresar libremente su voluntad.

33 comentarios

  • #001
    Garepubaro - 9 junio 2014 - 10:45

    si referendum sobre monarquia pero que incluya tambien si seguimos queriendo las autonomias viendo el fracaso absoluto que son, todavia mas importante, en fin entre los dos se suprimiria medio gasto inutil de España es verdad, pero me temo que nada …

  • #002
    iokin - 9 junio 2014 - 10:56

    Totalmente de acuerdo con tu respuesta. No puedo añadir otra cosa.

  • #003
    José Carlos - 9 junio 2014 - 11:20

    Más democracia participativa, por supuesto, y no sólo políticos que dentro de aproximadamente un año volverán a reactivar sus ya olvidados perfiles de las redes sociales. Pero no a un referéndum solicitado por una minoría con el único objetivo de obtener una respuesta determinada (si no la obtienen, volverán a pedir un nuevo referéndum) y sobre un asunto concreto. Si votamos, lo votamos todo, y en cualquier sentido: sindicatos, autonomías, etc. No sé yo si depositar nuestra confianza en esta España que hace líder al Sálvame y superventas al libro de la Esteban será lo mejor, pero tal vez ese ya sea otro problema y no del referéndum en sí.

  • #004
    Goomer - 9 junio 2014 - 11:26

    Siendo evidentemente cierto lo que comentas de los efectos de las listas cerradas, de la falta de democracia interna de los partidos, de la escasa separación de poderes, el asunto de pedir referendums para este tipo de cuestiones no es exactamente lo mismo, y menos, eso de intedependientemente de lo que diga la Constitución.

    Además, con todos esos problemas que citas, ¿mejorará algo tras ese referendum?

    Yo personalmente creo, que como en casi todo lo relacionado con el 15M, hay personas que anteponen su ideología, antes que el bien general, gente a la que les importa más que en este caso haya una república, a que sea un debate que ahora en este momento sea relevante con tantos problemas como tenemos más importantes.

    ¿Nos podemos permitir ahora todo el proceso de cambio de modelo para poner a uno de los políticos actuales o pasados, González, Aznar, Chaves, Aguirre…, como presidente de esa república?

    Además, que en este país vamos siempre de un extremo al otro, de los más europeístas, a los menos, de que el rey era intocable, a que lo tiramos a los pies de los caballos… todo a fuerza de modas y de demagogia…

  • #005
    AlejandroQ - 9 junio 2014 - 11:30

    Creo que algunos no terminan de creerse esto de la democracia en España… de realizarse el referendum «monarquía o república»… ¿aceptarían tan campantes los republicanos una continuidad de la monarquía? Y viceversa, por supuesto. En este país las hostias han venido casi siempre por ahí.

    Más que si la maquinaria democrática funciona de forma correcta mi duda es otra: ¿es España un país genuinamente democrático? ¿Estamos preparados los españoles para aceptar una decisión de esta magnitud en las urnas?

  • #006
    Enrique Dans - 9 junio 2014 - 12:05

    #004: Yo no me he pronunciado sobre si monarquía o república, aunque evidentemente tenga mi opinión – que no viene al caso ni influye en absoluto en lo que he escrito. Mi opinión podría sostenerla exactamente igual siendo monárquico o republicano.

    Pero en cualquier caso… ¿por qué te parece tan «necesario» un Presidente de la República? ¿Por qué no optar por una república en la que el jefe del Gobierno sea a la vez presidente, en lugar de una en la que el presidente y el jefe del Gobierno tengan competencias diferenciadas e incompatibles entre sí? La decisión no es entre «Borbón bien preparado, que habla idiomas y lleva toda la vida siendo educado en esa función» y «político elegido por un pueblo que vete tú a saber a quién elige», ese supuesto dilema no es serio. Si la elección estuviese entre el sistema norteamericano y el francés, tengo bastante claro con cuál me quedaría, pero es que no es ni siquiera así. Yo a lo que respondo es a la pregunta sobre si referéndum sí o referéndum no, no a la de monarquía versus república…

  • #007
    Anónimo - 9 junio 2014 - 12:28

    Mi opinion es que España hizo algo modélico, que fue hacer la salida pacifica del franquismo, algo que fue posible por un muy loable afán de servicio a la población, tanto por parte de las derechas como de las izquierdas e incluso de los nacionalismos, exceptuando la ETA.

    La democracia que de allí salió, venia lastrada por dos razones, una que respondía a la necesidad de encontrar un punto de acuerdo entre franquistas y antifranquistas y la segunda razón, es que se establecieron unas reglas democráticas, que sobre el papel funcionaban, pero que en la practican han demostrado no funcionar, en este paquete de cosas estaba Don Juan Carlos, bisagra entre el framquismo y la democracia, la ley D’Hont, que evitaba la llamada en su día, «sopa de letras» y potenciaba los nacionalismos, el poder del «aparato del partido» frente a los «líderes políticos» y, (a mi juicio), una excesiva descentralización, que ha dado lugar a los cacicazgos y alcaldadas.

    Después del funcionamiento de un montón de años de esta Constitución, creo que el más largo de la historia de las constituciones, pienso que ha llegado el momento de la revisión de la misma, para cambiar y corregir los errores que la practica ha demostrado que existen y que a mi juicio son, acabar con el equilibrio de los poderes clásicos, legislativo, ejecutivo y judicial, en favor exclusivamente del legislativo, la escasa e imperfecta representación del deseo popular, debido en especial la Ley D’Hont, que ha consagrado el bipartidismo y la existencia de listas cerradas, asi como la excesiva descentralización que hace a los habitantes de este país excesivamente diferentes en derechos y obligaciones. Por ejemplo un señor residente en Canarias, paga 50 veces más, que uno residente en Madrid, por heredar la misma casa, o que un señor de Treviño. no le atienda la Seguridad Social de Bilbao, por ser de otra autonomía.

    Por ello creo que se debería abrir otro proceso constituyente, donde se discutieran la conveniencia de superar los problemas constitucionales actuales, en el que un punto más a estudiar sería la Jefatura del Estado, sin que ello en principio suponga el fin de la monarquía y que posteriormente la nueva constitución se votara en referendum, por todos los españoles. El 15M demostró que los políticos están hoy alejados del pueblo, y decir que los que alli estábamos eramos todos perroflautas es engañarse, yo no lo he sido ni de joven y ahí estaba.

  • #008
    astur - 9 junio 2014 - 12:45

    ya que algunos plantean las autonomias, otros nos planteamos tambien… el estado central, a lo mejor no queremos todo ese gasto excesivo de funcionarios, ministerios y politicos en madrid y sobretodo miles de chiringuitos publicos del estado central (exactamente hay casi 1.100 organismos publicos en madrid) pagados por todos los epsañoles para beneficio exclusivo de madrid, y que nos atan d epies y manos a todos.

    Quizas habria que suprimir el estado central al completo y que cada autonomia se autogestionara sin interferencias externas…. Pero eso a algunos no gusta claro, es mucho mas comodo vivir de los impuestos que pagan las «provincias»…

  • #009
    Anónimo - 9 junio 2014 - 13:16

    Teniendo el dni electrónico, aplicaciones móviles y móviles que reconocen la huella dactilar no sé porqué ciertos temas no se votan.

  • #010
    Goomer - 9 junio 2014 - 15:10

    #6 Enrique, evidentemente puestos a cambiar este modelo de estado, se pueden elegir otros. Como bien dices, tenemos el modelo francés, el italiano o alemán, el americano, etc. Pero si se pide un referendum, es para que sea vinculante, y para que si se decide cambiar, se cambie.

    El fondo de mi opinión, es que con todos los problemas que tenemos ahora, y que bien has resumido en tu artículo, no veo que, por una parte plantear un cambio de modelo de estado vaya a tener ninguna influencia en resolver nuestra crisis de democracia, ni a resolver los problemas de la economía, como se está diciendo de forma implítica, o explícita. Todo lo contrario, llevaría a un tiempo de inacción política, que anteponen los que están por república si, antes que por salir de esta situación. Y por otra parte, tampoco veo claro que la solución para mejorar la democracia sea tener referendums sobre las decisiones importantes. Para mi esto es como en el fútbol, si paramos el partido para repetir las imágenes de posibles penaltis, goles fantasma, fueras de juego, corners o saques de banda… al final pasa el tiempo y no se juega. Además que veo complicado que alguien no jurista pueda votar si o no a un cambio de código penal, o alguien no economista, a una ley de presupuestos, por decir un par de ejemplos de leyes importantes.

    Para mi los políticos son un mal, pero necesario, y defiendo que los ciudadanos ejerzan su influencia supervisando su trabajo, y que bajen al terreno y expliquen por qué están a favor y en contra de lo que votan, por supuesto que con la transparencia total que defiendes. Y quizás para esto podría defender el referendum en otras circunstancias, pero ahora, veo cosas mucho más importantes.

    Aunque mi opinión de monarquía si o no no es tampoco importante para mi comentario, la monarquía para mi es algo anacrónico, y que habrá que corregir algún día. Solo que creo que ahora no es el momento, por tener esta débil democracia otras muchas tareas pendientes…

  • #011
    Anónimo - 9 junio 2014 - 16:05

    Tengo 53 años. No he podido votar ninguna constitución ya que en 1978 no era mayor de edad. Llevo 35 años pagando impuestos. ¿cuando podré manifestar mi opinión sobre la forma de estado, de gobierno y de representación territorial de mi país? Mis padres sí votaron la actual constitución, pero están tan muertos como Salmerón.

  • #012
    Esteban - 9 junio 2014 - 17:23

    Sería deseable una mayor participación de la sociedad, pero también que esa participación se hiciera desde la información y la reflexión. Quizás es algo que podríamos ir aprendiendo a hacer.

    No estoy seguro de que la gente decida siempre con un criterio que venga de la información y la reflexión. Y a eso no ayuda lo de «aprovechar la coyuntura» que también saben utilizar los líderes. Todos los líderes.

    Como dice el reciente Premio Principe de Asturias en Ciencias Sociales, Joseph Pérez, la II República estaba abocada al fracaso, debido a las circunstancias históricas (crisis de 29, alza de los absolutismos en el mundo). Parece que es mejor hacer las cosas con cabeza que por coj…

    En Canarias muchos no quieren saber nada de las prospecciones petrolíferas. Pero no es una opinión que tenga que ver con la razón o la información: no se entiende cuánto es eso del «escaso riesgo» y se prefiere no correr riesgos en absoluto, aunque de hecho Marruecos sí vaya a hacer lo que le de la gana ahí mismo o que en aguas Canarias haya enormes petroleros surcando continuamente las aguas y recalando en sus puertos (sin el petróleo Canarias actualmente no tendría energía eléctrica).
    Y mientras, a cada lado, los líderes dibujando la realidad a su manera: unos haciendo reconstrucciones fotográfica en dónde una torre petrolífera parece estar dentro de la misma bahía del Puerto de Arrecife (Lanzarote) y otros promentiendo riquezas y puestos de trabajo (que no serán nada comparado con lo que da el turismo). A los líderes no parece interesarles mucho exponer datos en crudo. Por otro lado, igual la gente no los entendería.

    Como anecdota: en un viaje a China, después de unos cuatro vuelos entre ciudades , a muchos integrantes del tour les parecía que habían tentado demasiado a la suerte. Me pregunto que pensaría de «tentar a la suerte» los pilotos que vuelan cada día y durante años. No, no es fácil ser reflexivo.

  • #013
    Mireya Trias Monllau - 9 junio 2014 - 17:32

    Muy agree con todo lo expuesto. Hay que preguntar a los ciudadanos siempre y en todo. Creo que tiene que pasar lo que la mayoría de ciudadanos quiera que pase. En mi opinión hace tiempo que España suspende año tras año en democracia. Excelente post.

  • #014
    Llorenç Roviras - 9 junio 2014 - 17:58

    ¿Y cuál es su opinión sobre la celebración de un referéndum en Cataluña para decidir si se quiere un estado propio, señor Dans?

  • #015
    Antonio Castro - 9 junio 2014 - 18:02

    Yo creo que el uso de la libertad necesita un aprendizaje pero que la democracia española ha tenido tiempo de sobra para ir cediendo responsabilidades de decisión a la ciudadanía.

    El problema es que se ha viajado en sentido contrario. Se parió una democracia a medias por miedo a las reminiscencias de poderes del antiguo régimen franquista y se ha usado es excesivo poder concedido a los partidos para continuar ganando poder a los ciudadanos.

    El resultado es que España ha fraguado toda clase de estrategias liberticidas y antidemocráticas mediante el arte de la manipulación y el control social.

    Han hackeado las instituciones, la separación de poderes y ahora quieren hacerlo con Internet.

    No creo que la monarquía tenga ahora mismo ningún sentido. De todas formas, creo que hay problemas mucho más urgentes y más dañinos por resolver. Me refiero a que las cárceles están vacías mientras toda una castaza que se ha lucrado con delitos de guante blanco, continua de rositas y manipulando para que la sociedad funcione como ellos quieren.

    El problema no es tanto esta monarquía, que sin duda lo es, sino la repugnante castaza que es una especie de nueva aristocracia.

    Los aristócratas de francia que perdieron sus cabezas en las guillotinas a manos de la indignación popular eran unos santos comparados con las hordas de corruptos y asquerosos traidores a la democracia que venimos padeciendo.

    Hemos alcanzado un nivel de disfuncionalidad democrática realmente surrealista.

  • #016
    Anónimo - 9 junio 2014 - 18:04

    #014 Llorenç Roviras
    Y cual es su opinión si extendemos el referendum a toda España porque al resto también nos afecta señór Roviras

  • #017
    Benedicto - 9 junio 2014 - 18:06

    Buenas tardes, profesor.

    Es un tema interesante.

    En mi opinión, no es posible afirmar que la nuestra sea una democracia «falsamente representativa». Por el contrario, se trata de (precisamente) una democracia representativa. Los representantes elegidos libremente por los votantes, toman sus decisiones sin consultar al electorado. En eso, precisamente, consiste el poder de representación que se les otorga.

    Creo que lo que desde ciertas posturas se defiende en estos días, es la necesidad de introducir mecanismos de democracia directa (que no representativa).

    Por otra parte, cuando usted revisa la metodología de nuestro sistema, olvida señalar que los ciudadanos españoles están en disposición de votar a partidos que sí funcionan democráticamente (pese a ello, prefieren al PP, qué le vamos a hacer.)

    También olvida que, incluso en el caso de que ninguno de los partidos funcionara al gusto del votante, el sistema español permite a ese votante la creación de partidos con resultados tan notables como el de Podemos (4 meses, 1.2 millones de votos). Con independencia de lo que puedan llevar en el programa, creo que el resultado de Podemos sólo puede darse en un país con un alto nivel de calidad democrática.

    Por las dos razones anteriores, hablar de que España es una «supuesta democracia» es, cuanto menos, aventurado. Una supuesta democracia es Venezuela, no se si me explico.

    Por último, coincido al 100% con usted en la necesidad urgente de aplicar reformas estructurales que mejoren la calidad de nuestra democracia. La ausencia de separación de poderes o la aplicación de medidas como la denominada tasa Google son dos buenos (malos) ejemplos.

    Un cordial saludo

  • #018
    Enrique Dans - 9 junio 2014 - 18:13

    #017: No, Benedicto, no me están representando. La representación nunca puede ser incondicional. Si no me preguntan ni me permiten influirles en su proceso de toma de decisiones, no me están representando, me están sustituyendo. Están pasando de mí, de mis intereses y de mis peces de colores. Eso no es representación. Representación es votar a la persona, pedirle que me represente, y tener además mecanismos de control ciudadano para de alguna manera exigirle que lo haga, no tener que conformarme cuando en lugar de hacer lo que yo creo que es mejor para mí, hace lo que es mejor para el lobby de turno. Eso no es democracia. Es partitocracia. Como diría el de Podemos, con el que no me identifico en absoluto, es «casta». Y es casi tan peligrosa para la democracia como el populismo, que es lo que es Venezuela.

  • #019
    Benedicto - 9 junio 2014 - 18:42

    #18: Muchas gracias por su rápida respuesta. Siempre es un placer opinar en su blog.

    Sin embargo, no puedo coincidir con su análisis. Su mecanismo de control son las elecciones (además de otros derechos que la Constitución recoge, como la figura de la Iniciativa Legislativa Popular, el Defensor del Pueblo, el derecho a manifestarse y opinar libremente, etc.) Son mecanismos susceptibles de actualización, claro. Pero no podemos negar su existencia. De hecho, los datos indican que la mayoría de los electores optan por no ejercer siquiera ese mínimo control que implica ir a votar cada cuatro años.

    Por otra parte, aceptará que hay ocasiones en las que la idea tiene la gente sobre lo que es mejor para ellos no coincide con la realidad o con el bien común. De los representantes se espera que sean capaces de tomar medidas impopulares sobre temas complejos (como, por ejemplo, una subida de impuestos), y ello pese a la opinión de sus votantes.

    Creo que las opciones que usted parece proponer implican precisamente el riesgo de derivar en figuras populistas. Yo preferiría tener más políticos capaces de legislar en función del bien común, aunque ello implique contradecir a sus votantes y, consecuentemente, perder las siguientes elecciones. Lamentablemente, esto no parece abundar.

    Un abrazo

  • #020
    Enrique Dans - 9 junio 2014 - 18:51

    #019: Gracias a ti, Benedicto. A ver: creo que el problema está precisamente en que lo que consideras causa es en realidad consecuencia. Me explico: la gente deja de ir a votar precisamente porque consideran que el sistema no les representa, y por tanto, no vale la pena. Si todo lo que puedo hacer es votar a unas siglas que no me van a representar a mí ni a mis necesidades o intereses, porque no voy a volver a tener un posible control hasta dentro de otros cuatro años, pues para qué votar… lo que es necesario es que se vote a personas y poder exigirles a esas personas cosas con un mecanismo de control inmediato o cercano en el tiempo. Un sistema como el anglosajón, por ejemplo, en el que tu representante es tu representante, tiene nombre y apellidos, y lo votas porque efectivamente te va a representar a ti y a la comunidad que lo votó, sin someterse (necesariamente) a la disciplina de un partido. Lo que verdaderamente da envidia de los Estados Unidos es que si se va a discutir algo en el Congreso, los ciudadanos pueden enviar correos electrónicos o llamar a sus congresistas para influir en su voto. Aquí si escribes o llamas a tu supuesto representante (que no existe, porque no lo votaste a él sino a unas siglas), te acusan casi de estar «acosándolos»… eso no es democracia.

    ¿ILPs? Las ILPs no sirven porque están desincentivadísimas, porque es muy difícil recopilar las firmas de manera que se considere válida (olvídate de usar la red, por ejemplo) y porque además, pueden ser rechazadas sin siquiera someterlas a discusión. El sistema no necesita una actualización, necesita una redefinición completa.

    En cuanto a las decisiones impopulares como una subida de impuestos, no espero que se tomen en mi contra. Espero que me las expliquen hasta el punto de que aunque personalmente no me interesen, las termine por entender y apoyar. No hay decisiones impopulares, hay decisiones mal explicadas o mal comunicadas. Democracia no es elegir al que va a hacer lo que le dé la gana independientemente de lo que te prometió o lo que tú quieres que haga.

  • #021
    Benedicto - 9 junio 2014 - 19:05

    #20. Ya termino, lo prometo ;)

    Sólo para reseñar que en España sí existe una forma de gestionar ILPs a través de Internet, confirma electrónica. Yo conozco esta: https://www.mifirma.com/. Y funciona. Seguro que hay más.

    Por lo demás, a mi también me gusta el sistema americano. Existen cosas que podríamos importar, como las listas abiertas (que me parecen muy bien). Pero coincidirá conmigo en que allí también hay lobbies y se cometen barbaridades como las escuchas de la NSA, lo que en ningún caso puede hacernos concluir que en los EEUU no hay democracia. Hay democracia. Como aquí. Imperfecta y mejorable, claro.

    De nuevo, muchas gracias por su interés y un abrazo

  • #022
    harenawer - 9 junio 2014 - 20:21

    Una parte fundamental de un estado democrático es el respeto a las leyes, y en particular los procedimientos definidos para cambiarlas. Cambiar la constitución es algo extremadamente importante y más aún cuando estamos hablando de modificar el ¡artículo 1!

    Por eso me parece sospechosamente frívolo olvidarse de que el referendum es, en este caso, el último paso en la reforma constitucional y no el primer paso (artículo 168 de la CE).

    En este contexto, coincido mucho más con la opinión, vertida en el mismo artículo, de Fernando Savater

    «No estoy de acuerdo en hacer el referéndum ni en hacer creer a la gente que la Constitución puede reformarse así en un asunto tan importante. Estamos en un Estado de Derecho, no en una asamblea de la Facultad de Políticas. Otra cosa sería que en las próximas elecciones los partidos favorables a ese cambio lo llevasen explícitamente en su programa como algo a realizar de inmediato. Si alcanzaran peso suficiente, podrían iniciar el procedimiento legal para esa transformación. A mí eso me parecería muy bien, porque como ideal prefiero la república a la monarquía. El partido que propusiera en su programa el giro republicano debería hacerlo de verdad. Es decir, incluyendo la supresión de todos los elementos antirrepublicanos de la Constitución: los derechos históricos, la fragmentación irreversible de la lengua común, las supervivencias clericales en educación y ceremonias políticas… De nada sirve cambiar al rey por un presidente y luego predicar el «derecho a decidir de los pueblos», algo más arcaico y anticívico en nuestras circunstancias que el peor monarca».

  • #023
    Joaquin Aguado - 9 junio 2014 - 21:16

    Magnifico articulo y magnifica respuesta Enrique. Clara y al centro del problema, más allá de la que también magnificamente señalas como falsa dualidad izquierda-derecha. Que pena que la falsa polémica haga que la mayor parte de nuestros conciudadanos pierdan el enfoque y se centren en falsos síntomas que impiden concentrarse en el verdadero problema.

  • #024
    Anónimo - 9 junio 2014 - 22:12

    Es el sentir de muchos en este pais nos trtan como a menores si a favor de las consultas
    yo votaria monarquia pero que decida el pueblo mas democracia

  • #025
    Esteban - 9 junio 2014 - 22:18

    Zapatero gobernaba a golpe de encuesta, por miedo a perder las próximas elecciones de turno. Un día le pararon los pies. Nos quedará siempre la duda de a dónde habría ido a parar todo de haber seguido por ahí.

    Todo el mundo sabe que los vertederos son necesarios, hasta que se invente otra cosa, pero nadie los quiere cerca de su pueblo.

    Todos piensan que hay un problema cuando los inmigrantes que llegan en patera abarrotan los centros de acogida, pero nadie quiere que parte de esos inmigrantes los lleven a centros cerca de su ciudad, no es su problema.

    Ningún colectivo protestó por los recortes hasta que les tocó a ellos mismos.

    A muchos les parece bien que España tengan nuevas fuentes de energía, y menos dependencia en este sentido, menos si vives en Canarias o Baleares.

    A lo mejor sólo es cuestión de explicarles las cosas mejor, para que acepten esas medidas «impopulares».

  • #026
    Antonia Febrer - 9 junio 2014 - 22:20

    Todos queremos un cambio; aunque nos olvidamos de lo más importante, una gran mayoría de españoles no estamos preparados para decidir cómo queremos esa urgente necesidad de cambio.
    Las decisiones tomadas en base a la indignación conducen a otro fracaso peor del saliente. Es por ello, que tenemos que recuperar la Ley del esfuerzo y sacrificio; empezando a sembrar cada uno de nosotros nuestra semilla del buen hacer y SI trabajando con perseverancia y paciencia conseguimos una sabiduría que nos abre puertas inalcanzables a día de hoy.

    Todavía no nos hemos dado cuenta que vivimos en un mundo dinámico y estamos creando normas como si estuviéramos en un mundo estático. La naturaleza es sabia y lo que está ocurriendo a nivel político social es debido a nuestro no conocimiento de cómo funciona nuestro cuerpo globalizado: físico-mental-espiritual. Empecemos por el princio.

  • #027
    ana - 10 junio 2014 - 09:21

    Sin monarquía pero también sin presidente de la república. Que sería otra duplicidad. Ya tenemos bastante con el senado y las diputaciones. Hay que tener las instituciones justas y necesarias.

  • #028
    cj - 10 junio 2014 - 10:30

    «El sistema no necesita una actualización, necesita una redefinición completa»: Estoy de acuerdo, pero primero habría que elaborar esa redefinición y luego votarla, no al revés, porque entonces estaríamos votando a ciegas.

    Por cierto, si alguien piensa que con república y listas abiertas habría menos corrupción y más cercanía al ciudadano, que se vea dos o tres episodios de «House of Cards» (sí, es una serie de ficción, pero me da que no se aleja mucho de la realidad).

  • #029
    Krigan - 10 junio 2014 - 12:14

    #19 Benedicto:

    Lo que defiendes no es una democracia, es una dictadura en la cual se elige dictador cada 4 años. Es una dictadura suave en las formas, te permiten manifestarte y otras cosas (también en China hay miles de manifestaciones cada año), pero sigue siendo dictadura aunque la mona se vista de seda.

    La definición de democracia es que gobierna el pueblo, así como suena, sin aditivos extraños. Se puede discutir mucho entre democracia representativa y directa, pero si nos ceñimos a la representativa, esta consiste en que el pueblo votará a unos representantes que harán lo que el pueblo quiere que se haga.

    No sirve de nada votar si luego el representante va a hacer lo contrario de lo que quiere el representado que le votó. No sirve de nada el descalabro electoral del PSOE en las generales del 2011 (por la política llevada a cabo desde mayo del 2010), si luego llega el PP y se dedica igualmente a violar la voluntad de sus propios votantes. Tu concepto de democracia consiste en que cada 4 años elijamos al que más bonito hable y más guapo nos parezca para que luego no se haga lo que queremos.

    ¡Ah, las decisiones impopulares! Esas famosas decisiones impopulares… La propia palabra lo dice, son lo que el pueblo no quiere que se haga, y por tanto no se debería hacer. Que si el pueblo no está preparado, que si son cosas necesarias aunque el pueblo no lo vea así, que si el representante es muy democrático porque fue el más hábil en engañar al pueblo en las elecciones…

    Toda dictadura tiene su base social, sin la cual no puede sobrevivir. La de esta consiste en aquellos ciudadanos que estiman que es legítimo que el representante haga si le place justo lo contrario de lo que quieren sus votantes. Obviamente esta es una idea muy popular entre los políticos, el problema es que esta idea ha calado también en un buen número de votantes. ¿Qué sería de nosotros, pobres votantes, si nuestros representantes hicieran lo que queremos?

  • #030
    Miguelo - 10 junio 2014 - 19:01

    #22 De acuerdo con harenawer. Podemos someter a referendum el tema de si monarquía o república. Pero hagámoslo cuando antes nos hayamos puesto de acuerdo en que tal cuestión la decidiremos por referendum. Porque de momento tenemos un acuerdo sobre cómo decidiremos eso (en la Constitución) y ese acuerdo no consiste en que se decida directamente por referendum. Lleva otro camino.
    Si nos saltamos el procedimiento legal para eso porque nos parece razonable ¿qué argumentos tendríamos para evitar que otros quisieran saltárselo en otros temas en los que no nos lo pareciera? ¡Ojo! que no es un tema baladí.

  • #031
    Marcos - 11 junio 2014 - 11:21

    Enrique, sin acritud y admiración. De acuerdo con tus palabras, pero has cometido un error al decir:
    «es una democracia falsamente representativa,» Si la democracia no es representativa no puede ser nunca democracia. Si no se da el requisito de la representatividad(que en nuestro sistema no se da) ni tampoco existe separación de poderes(que tampoco se da, ya que hay separación de funciones) entonces no se puede hablar de democracia. O lo uno o lo otro pero las dos a la vez no. Por ultimo apuntar que a pesar de que pueda darse un sistema de libertades sin democracia como es el caso actual lo que no puede nunca darse es la no existencia de libertad con democracia, y todavía muchos lo confunden.

  • #032
    Anónimo - 11 junio 2014 - 17:48

    Antes de nada te felicito por tus artículos. Me gusta la forma en la que expresas tus opiniones, siempre con respeto, algo que los españoles siempre olvidan.

    Estoy de acuerdo acerca de que lo que vivimos no se le puede llamar democracia. Como bien dices en otros países fácilmente se recogen las quejas de los ciudadanos y se transmiten a las autoridades. El problema es que en esos países las personas tienen criterio y respeto. Aquí en España apoyamos ideales porque «parecen bonitos» o quedan «guays». Eres más «cool» si dices ser republicano que monárquico. Por otra parte todo lo que sea opuesto a un ideario se considera peligroso y por obligación hay que exterminarlo. No buscamos información, no leemos y nos da miedo reflexionar para no perturbar el bienestar del grupo. Solamente aprendemos como papagayos las frases típicas y ahí se resume nuestro ideario, un ideario copy&paste.

    Lo que vengo a decir que dar la oportunidad de votar a una sociedad que ya sus ideales los elige por la moda del momento no es buena idea. Entiendo que es muy fuerte lo que digo, estoy diciendo que no me parece buena idea que la sociedad hable, una cuestión que a mí misma no me gustaría. Lo que deseo con todas mis fuerzas es que nos relajemos, reflexionemos, informemos y nos unamos. No nos metamos de cabeza a reformas rápidas si no sabemos ni lo que queremos.

  • #033
    Maestre Patarran - 19 junio 2014 - 15:57

    Hola Maestro.
    Inicialmente en una primera lectura no estaba de acuerdo con usted.
    La Representacion Politica -entendida como tal- no está ahí porque si.
    Aunque de manera peyorativa se puede entender como una evolucion «necesaria» del original Sufragio Censitario… la realidad es otra.
    Es de naturaleza prospectiva y nunca retrospectiva.
    Y -por supuesto- es representativa (si no sería Democracia)
    Otra cosa sería que exite cierto déficit democratico… pero eso lo da la Ley Electoral y la circunscripcion de voto (que, casualmente se «parieron» así por la necesidad de llegar a acuerdos en su momento: Pesaban mas las ansias de libertad y el «ponerse en marcha» que las ideologías.
    En ese sentido iba a ir mi «discrepancia»
    Pero en una segunda lectura y viendo comentarios y respuestas… ya no estoy tan «en desacuerdo».
    Efectivamente, algunos sistemas como el sajón (del suizo ya ni comento) producen cierta envidia por la «cercanía» entre representantes/representados.
    Ya me gustaría, ya.
    En ese sentido si que apostaría (con las debidas cautelas y reservas) por un referendum acerca de «que». No estoy tan seguro del «como».
    Porque a mi parecer, coincido en que el debate entre Monarquía y República (entendido asi, sin mas) es algo estéril, que no lleva a ninguna parte.
    Un saludo.

    http://patarrantrantran.blogspot.com.es/2014/06/republica-o-monarquia-el-debate-esteril.html

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