Mi columna en el diario Expansión de hoy se titula «El club de los mil millones» (pdf), y pretende derivar algunas conclusiones de operaciones recientes como las de Instagram y Waze por parte de Facebook, y la más reciente de Tumblr por Yahoo!
En los tres casos hablamos de adquisiciones con un precio elevado: Instagram se pactó por mil millones, aunque terminó siendo algo inferior debido al descenso del precio de las acciones de la compañía, Waze se está moviendo igualmente en torno a los mil millones, y Tumblr llega a los mil cien. Y en los tres casos, hablamos de compañías que o bien no facturaban nada, como en el caso de Instagram, o cantidades que de ninguna manera podrían justificar un criterio de valoración basado en multiplicadores o descuentos de flujos de caja (un millón de dólares en el caso de Waze, y catorce millones en el de Tumblr).
¿Estamos, tal vez, ante la nueva burbuja, ese grito de guerra que a tantas personas gusta tanto? Las circunstancias con respecto a lo que se dio en llamar en su momento «la burbuja de internet» son claramente diferentes: de un mercado incapaz de valorar por desconocimiento y alimentado por unas previsiones claramente disparadas, pasamos a otro en el que muchos de los parámetros son perfectamente conocidos, y en el que las empresas hacen previsiones basadas fundamentalmente en su capacidad de aportar determinados recursos a algo que de por sí funciona de una determinada manera.
Que Facebook o Yahoo! puedan aportar capacidad comercial, de expansión o un modelo de ingresos razonable a empresas como Instagram, Waze o Tumblr no parece una afirmación descabellada, y que en algunos casos eso les sirva para consolidar una posición que dificilmente podrían haber conseguido por su cuenta, también. Lo que esas empresas tenían era algo que, en muchos sentidos, «el dinero no paga»: esquemas similares desarrollados por las empresas compradoras, con muchos más recursos y acceso a talento similar no habrían seguramente dado lugar a competidores viables de estas alternativas. Por tanto, lo que las empresas compradoras hacen es pagar un premium (un premium a todas luces enorme si lo comparamos con su alternativa de cálculo convencional) por algo que no podían construir y que creen encaja plenamente en su estrategia.
La gran pregunta, claro, es si ese factor se puede comprar. Si puedes «meter al genio en la botella» sin que se «desnaturalice». Si hablaremos dentro de un tiempo de empresas reforzadas, o de empresas de las que sus fundadores huyeron, que sufrieron el síndrome post-adquisición, y que terminaron por no cumplir sus expectativas. Pero esos son riesgos que, me temo, se corren en toda adquisición.
A continuación, el texto completo de la columna:
El club de los mil millones
El pasado domingo, Yahoo! anunció un acuerdo para la adquisición de Tumblr, una plataforma de publicación con más de cien millones de blogs creada por un joven de 26 años, por mil cien millones de dólares. La facturación de Tumblr en el año 2012 fue de trece millones.
La operación evoca la reciente adquisición de Instagram por Facebook: por mil millones de dólares (acabaron siendo menos por la caída del valor de las acciones de la compañía), Facebook adquirió una empresa que posibilita que sus más de cien millones de usuarios compartan fotografías. La compañía adquirida no solo no tenía modelo de negocio, sino que tampoco tenía planes para llegar a tenerlo.
La paradoja es cada día más clara: si quieres entrar en el club de los mil millones, crea algo que crezca mucho, cuanto más, mejor… pero que no gane dinero. Si gana dinero, su valoración corresponderá al descuento de los flujos de caja generados por su actividad o a algún multiplicador aplicado a sus ingresos. Si no lo hace, la valoración se calculará mediante sus expectativas, la valoración de las posibles sinergias con la empresa compradora, o el interés por incorporar a su equipo. Las valoraciones del primer tipo corresponden a frías operaciones matemáticas. Las segundas se llevan a cabo básicamente humedeciendo el dedo y levantándolo al viento. Y las recientes adquisiciones parecen demostrar que el segundo método ofrece valoraciones sensiblemente superiores.
¿Son las adquisiciones de Instagram o de Tumblr indicadoras de algún tipo de burbuja? No necesariamente. Los productos, la base de usuarios o el talento de las adquiridas bien puede acabar generando, en manos de sus adquirentes, un valor superior al de su coste de adquisición. En los ’90 se ataban perros con longanizas. Ahora, el entorno de la red genera dinero de verdad, contante y sonante.
Mil millones son muchos millones. Para Yahoo!, Tumblr los vale. Ahí queda eso.
¿Es el precio o el valor de la información del conjunto de usuarios?
lo mas llamativo es que desde AOL de los 80s y mas, veinte, treinta años incluso mas tarde, aun seguimos con expectativas, elucubraciones, especulaciones, nerviosismo, estress y ver que pasara … o pasa algo importante, que estas pocas empresas norteamericanas en coordinacion metan a todo internet en un redil, o sera la enésima burbuja al canto, apuestan tanto porque merece la pena, es meter la red mundial en un cercado, eso si seria el negocio infinito del planeta para 4, osea peor que el siglo XX
#001 Rai, yo creo que se trata exactamente de eso lo cual no deja de resultar sorprendente por los precios que se alcanzan.
La transformación de la información en dinero podría resultar de un proceso menos respetuoso con nuestros derechos de lo que pensamos. Los cruces de datos que uno pueda imaginar seguramente sean práctica habitual en muchas empresas.
Lo admito, prefiero pasarme de paranoico que de ingenuo. Puede que el tiempo tenga la respuesta a muchas de las desconocidas prácticas llevadas a cabo con nuestros datos durante estos años de crecimiento explosivo de Internet.
Si cuando se produce una de estas adquisiciones multimillonarias, te preguntas «¿y esa empresa ingresaba tanto para justificar ese pago?», la respuesta suele ser no.
Los propietarios originales realizan con éxito el sueño de Woody Allen en «Toma el dinero y corre», y si dos años después la empresa es cerrada o tan desnaturalizada que no la conoce ni su padre, ¿a quién le importa?
Enrique, francamente afirmar que operaciones de mil millones se deciden y ejecutan «humedeciendo el dedo» suena más a una falta de argumentos, sobretodo proviniendo de un profesor de una escuela de negocios y especializado en la materia. Si tal fuera la racionalidad detrás de estas adquisiciones, bien haría la IEBS en dictar un programa para humedecer los dedos y desarrollar la sensibilidad -literalmente- digital del alumnado, en lugar de enseñar todo lo que se enseña.
Creo sin embargo que has estado a punto de decir algo en lo que coincidimos, pero que por «pudor» de tecnófilo no has llegado a plasmar en el texto: que no se valoran estos sites por sus resultados ni sus utilidades, ni siquiera por su capacidad de colocarles publicidad, sino por su éxito en lograr que el usuario vuelque en estos servicios data privada en forma masiva y desprevenida.
Me parece que se han sucedido suficientes casos de estos para encontrar el común denominador de estas mega-adquisiciones y hasta para hacer el perfil del tipo de servicios al que deben apuntar los desarrolladores, si quieren hacerse atractivos para sus compradores. Pero hay que ser brutalmente francos al definir que el servicio o la aplicación que vas a crear no debe diseñarse en beneficio del usuario sino con miras a la extracción de su información privada. Este es el norte de la start up.
Al menos, un análisis de este tipo sería más debatible y útil que aquello de mojar el dedo.
OFF TOPIC: Alucinante la psicopatía social del señor Page, y a este loco le confiamos nuestra data.
http://arstechnica.com/business/2013/05/larry-page-wants-you-to-stop-worrying-and-let-him-fix-the-world/
Yo creo que la compra simplemente se trata de implantar en los blogs una alternativa a Ad-sense, hoy prácticamente no hay competencia si eres bloguero a Ad-sense, con esta compra te pueden meter el ad-sense propio de yahoo. Otro tema será que los blogs quieran y no se produzca una huida. Yo como anunciante prefiero hacerlo en blogs especializados que en medios masivos.
¡Humo! ¡Vendeeeeeeeeeemos humo! Adivinanza: ¿Cómo saber que estamos inmersos en una burbuja especulativa? Fácil: Porque los que se benefician de ella no hacen más que negar que exista tal burbuja. Por ejemplo, nuestros dos últimos ex presidentes del Gobierno, unos cuantos miles de gurús de las finanzas y diversas instituciones financieras internacionales a cuenta del «milagro español», también llamado «el precio de los pisos no va a bajar nunca, esto se como tener dinero en el banco»…
¿Quién determina el valor de estas empresas?, ¿qué metodologías de utilizan para fijar esos precios?, ¿los valores tan altos responden a la competencia de las grandes compañías por comprarlos? Muchas interrogantes para mi, aún no veo tan claras las respuestas.
Ok. Para la estrategia de Yahoo, Tumblr los vale. Y para mi, la creacion y el valor de los contenidos también. Parece un tablero de ajedrez :-)) viendo los movimientos estratégicos. Que interesante!!!!
¿Te vendo mil acciones de Lycos, Eduardo?
Yo creo que en estos casos como en muchos otros, a la hora de valorar un proyecto o empresa; no se toman en cuenta los numeros y el dinero que en si mueve el negocio. Sin duda valoran lo mas importante, la marca y la cantidad de información que tienen de sus usuarios.
Si tienes una base de datos con los gustos, o en caso de waze con los trayectos de los usuarios, tienes una mina de oro, otra cosa es encontrar la manera de convertirlos en dinero contante y sonante.