Aunque aún falta alrededor de una semana para que esté disponible, Facebook inicia la campaña de anuncios para su Facebook Home, y acaba de publicar uno de ellos en YouTube. Y el mensaje utilizado corrobora completamente mis impresiones iniciales: la idea es la interrupción constante, la distracción a cada paso, la invasión mental cada vez que sacas tu móvil del bolsillo.
El hecho de ambientar el anuncio precisamente en el momento del despegue de un avión, ese en el que precisamente estás intentando hacer esas últimas tareas con el teléfono antes de que llegue la molesta e injustificada advertencia de apagar nuestros dispositivos electrónicos, consigue que sienta aún menos ganas de probarlo:
A ver: no soy asocial. Me gusta saber qué hacen mis amigos. Me interesa su vida, me gusta que exista una herramienta como Facebook en la que comparten cosas que hacen, que les interesan, que les llaman la atención, noticias sobre lo que leen, lo que les provoca sensaciones de cualquier tipo o las frases ingeniosas o profundas que se les pasan por la imaginación. En general, me gusta Facebook, tengo un perfil personal ahí que utilizo bastante y una página en la que comparto lo que escribo en el blog, no doy el perfil de «enemigo de las redes sociales», ni siquiera especialmente el de «preocupado por mi privacidad», y mucho menos el de «opuesto a probar cosas nuevas». Pero aún con todo eso, la idea de que lo que hacen y comparten mis amigos abandone el plano de lo voluntario y pase a invadir la pantalla principal de mi teléfono, me resulta entre incómodo e inaguantable.
Ahora mismo, saber lo que hacen mis amigos es para mí voluntario: si actualizan algo, me aparece en la línea superior de mi smartphone en forma de un icono de unos tres milímetros. No es poca cosa, ni un lugar discreto: es un punto al que siempre miro cada vez que extraigo el terminal de mi bolsillo. Si tengo tiempo, si es el momento adecuado, si lo estimo oportuno o si simplemente me apetece, deslizo mi dedo hacia abajo y me entero de quién ha hecho qué. Una acción voluntaria, iniciada por mí. Pasar de eso a que lo que hacen mis amigos sea objeto de una invasión constante en todos esos momentos en que saco el móvil del bolsillo para cualquier cosa es algo que me apetece entre cero y menos uno, porque a lo largo del día uso mi móvil para muchísimas cosas, y no me gustaría imaginar cada uno de esos momentos interrumpido por una nueva imagen o notificación de lo que están haciendo mis amigos. Entiendo el interés de Facebook por ganar centralidad, pero sinceramente, creo que supone una hipertrofia de lo social que tildaría casi de preocupante.
En cualquier caso, me pareció adecuada la bajada a lo cuantitativo expresada en este artículo de GigaOM, «Why Home won’t move the needle for Facebook«: en números para los Estados Unidos, partimos de 130 millones de usuarios de smartphones según datos de comScore de finales de enero (en España, los smartphone suponían en enero un 63.2% del total). De ellos, un 76%, o 98 millones, tienen Facebook instalado. Sobre esos, hay que tener en cuenta que el 52% tiene Android (en España, la cuota de Android está por encima del 87%), lo que nos deja una base potencial de instalación de 51 millones. Pero hay más: habría que eliminar a todos los dispositivos Android en los que la app no puede instalarse, dado que está limitada a cuatro modelos de HTC y tres de Samsung… siendo muy generoso, nos quedaríamos con la mitad, unos 25 millones. Si además filtramos los usuarios que no son de contrato, que son un 25% del total y que probablemente encontrarían la opción muy costosa, y finalmente consideramos que el total de usuarios que reporta Facebook está expresado por los llamados MAUs (Monthly Active Users, usuarios que se conectan al menos una vez al mes), y que de esos, el 59% son DAUs (Daily Active Users, usuarios que se conectan al menos una vez al día), el público objetivo de Facebook Home se queda restringido, en el mejor de los casos, a entre un 10% y un 20% del total de usuarios de Facebook en los Estados Unidos, aquellos que tengan un perfil que otorgue tanta importancia a lo social en su vida que no les moleste que eso les interrumpa en cualquier momento cualquier cosa que quieran hacer. No despreciable, pero tampoco parece suficiente como para iniciar un movimiento que convierta a Facebook Home en algo que cambie la manera en que la mayoría de los usuarios se relacionan con las redes sociales.
En cualquier caso, un movimiento interesante, como interesante será estar pendiente de cómo resulta finalmente esa acogida del mercado.
Facebook Home va dirigido a la gente que lo principal que hace con el móvil es mirar FB, que la habrá, pero no es mi caso. Y su intención es centrar la experiencia móvil para quedarse con la publicidad en smartphones.
Por su propia definición, es «canibalizadora» del resto de acciones que se pueden hacer con un smartphone, y por eso a mi no me interesa y supongo que a mucha gente tampoco.
Yo creo que la clave para entenderlo está en el long tail. Ahora mismo FB en publicidad móvil no pinta nada, si con esto consigue plantar sus anuncios en un 1%, 2%, 5%, 10% de smartphones, aun en segmentos muy determinados (quizás gente joven, o gente mayor), estará mejor que ahora. La cuestión como siempre es si le cuadrarán las cuentas, o incluso, cuánto está dispuesto a perder por empezar a facturar en móvil…
Esta vez, no estoy muy de acuerdo contigo Enrique, creo que la iniciativa de home es muy interesante. Representa un facebook phone, sin linkar el concepto a un nuevo terminal, sino a todos. Recuerdo una campaña de publicidad de una de esas tarjetas que permiten llamar desde cualquier terminal que deciá: «si no tienes teléfono, ahora los tienes todos».
Por otro lado, tampoco estoy de acuerdo con la estimación de usuarios potenciales que haces. Fb se está posicionando para ser (todavia más) el centro de las comunicaciones sociales, por encima de las llamadas de voz, los mensajes, etc. En esa estrategia fb home, es una herramienta muy necesaria. Incluso tomando como buenos esos 10M de potenciales usuarios que dices, creo que tendrán un nivel de implicación/influencia en sus contactos en fb (que serán muchos evidentemente) que puede hacer que los números cambien muy muy rápido, como sabes.
Un saludo,
Guillermo
El problema, al menos para mi, es que mi deseo es seguir (y que me sigan), Ofline a mis maigos, es decir tener la posibilidad de saber lo que han hecho, (o han permitido que se sepa que hacen), pero no «lo que están haciendo» Igual me pasa con lo que hago yo, puede q
puede que quiera que vean una foto que he hecho, pero no tengo especial interés en que la vean cuando la hago.
El on-line, come muchos recursos, no de máquina sino de atención del espectador y no están justificado, (al menos en mi caso)
Personalmente tengo el FB en el smartphone porque no se como desinstalarlo del mismo. No me lo permite android, sino ya estaría en el cubo de la basura hace meses.
Enrique:
Completamente de acuerdo¡¡…
De acuerdo contigo en todo. Menos en la última frase.
Sigo diciendo que será un fiasco total.
Creo que me voy a salir un pelín por la tangente.
La manera en que se relacionan las personas a través de las redes sociales. Esta frase, es muy interesante. El hecho de que Home sea móvil, cambia la manera en que se relacionan las personas en Facebook? Cambiamos el medio y la forma. Pero el tipo de relación, sigue siendo, exponer la vida visualmente y tener la sensación de estar mas próximo a personas que viven en otros países?
Me siento un Pelin asocial, porque lo que realmente me interesa de mis amigos y conocidos, son las conversaciones que se tienen delante de un café o una copa de vino. Esos momentos en los que hablas.
Facebook permite comunicarse en capas superficiales de relación. Pero es brillante.
Hay otras perspectivas de redes y relaciones. Ojalá pueda sacar adelante la opciones que se esta gestando!!! :-))
El móvil es un instrumento que ha permitido monetizar un sin fin de usos y aplicaciones interesantes. Se mueve mucho dinero con el móvil.
A muchos les ciega la avaricia y se pasan con sus ansias de protagonismo y de acaparar mercado. Limitar la libertad del usuario se presenta muchas veces bajo la apariencia de falsas ventajas.
Hablaremos de inmediatez, cuyas apps que copan la satisfacción de esa necesidad son whatsapp, line y spotbros en ese orden. Yo al menos, y todo el círculo de amigos que me rodean usamos facebook para anunciar quedadas y eventos de forma «mediata» entendiendo esa periodo de tiempo en unos dos o tres días vista, amen de colgar alguna foto, track o cualquier otra cosa que nos pase por la imaginación que entendamos que pueda ser de interés para los demás. Personalmente no me dedico a colgar chorradas y no hago caso de cualquier post que no despierte realmente mi interés, así que sabiendo que existen usuarios que desde que se levantan hasta que se acuestan publican todas y cada una de sus vivencias (no es mi caso porque los borro directamente) no me quiero imaginar el smartphone de alguno sonando constantemente con dicha aplicación.
Enrique, parece que no eres el target para este producto, pero de acuerdo en que parece escaso el público objetivo al que está dirigido, sobre el total de usuarios de Facebook.
No es mi intención hacer de futurólogo y prever cómo acabará este nuevo intento de FB por conquistar el filón de la movilidad.
El que supongo que estará que no le llega la camisa al cuello por tal intromisión debe ser Google… Es lo que tiene el hacer Android abierto para que cada cual lo manipule a su antojo.
Si Google quiere seguir reportando ingentes beneficios creo que debería tomarse en serio Chrome OS y adecuarlo al formato móvil de una vez.
Un saludo.
Un saludo.