Postmates es una startup de diez personas en San Francisco que ofrece un servicio de logística urbana, Get It Now, que está aparentemente empezando a ganar bastante tracción: una aplicación, por el momento únicamente para iPhone, que permite que localices la tienda que quieras en San Francisco y encargues de ella lo que quieras, para que te sea entregado en donde quieras en la ciudad en menos de una hora. La empresa ha sido considerada por The Wall Street Journal como una de las doce startups de las que estar pendiente en 2013.
La compañía contrata personas dispuestas a hacerse cargo del transporte mediante bicicletas u otros medios de transporte, y les proporciona una tarjeta de crédito con la que hacer compras. Cuando un cliente desea pedir algo, formula su petición en la aplicación, y esta lo asigna a un mensajero, que se encarga de ir a la tienda en cuestión, recoger el pedido que el cliente ha hecho y pagado a través de la app, y entregarlo. Si la tienda no está incluida en la app, simplemente lo paga con su tarjeta de crédito, y se lo cobra al cliente al hacer la entrega.
Máxima flexibilidad: la tienda puede dotarse de un servicio de entrega sin riesgo percibido alguno (y de hecho, las pegatinas de «entregamos mediante Postmates» empiezan a aparecer en bastantes sitios en San Francisco). Si el establecimiento quiere estar incluido en la app, puede usarla para introducir su catálogo, opciones y pasarela de pago. Si no lo hace, puede sencillamente entregar el pedido a alguien que le paga inmediatamente, y diferir la decisión hasta comprobar si el sistema se populariza y se justifica estar ahí. Para el cliente, un tipo de logística prácticamente inmediato, a un precio a partir de los siete dólares.
El servicio estuvo dos meses en beta privada con un éxito bastante razonable: mil usuarios que recibieron sus entregas en un tiempo medio de treinta minutos. Tras captar financiación, aparecer en muchos medios y hacer crecer su capacidad logística, han lanzado en abierto en San Francisco, y comienzan con los planes para abrir en otras ciudades y ofrecer su app también en Android. Para empezar, solo en el área de San Francisco compiten con varios tipos de jugadores: empresas clásicas de comercio electrónico como Amazon o eBay que han comenzado a ofrecer ventanas logísticas similares en determinadas ciudades pero que entregan únicamente aquello que puedes encontrar en su tienda en la web, otras como Taskrabbit o Exec dedicadas a hacer recados de tipo general pero que recibían muchas peticiones consistentes en servicios de recogida y entrega, o Instacart, especializada en la entrega de la compra del supermercado.
La idea de usar la red para potenciar el comercio local no es nueva, pero su desarrollo se ha encontrado por el momento con numerosas limitaciones. La propia Postmates ha tenido ya algún problema de confianza con alguno de sus mensajeros, que ha solventado de manera aparentemente rápida y transparente. De una u otra manera, e independientemente del éxito o fracaso de Postmates como tal, parece claro que este tipo de logística ultrarrápida, que algunos denominan como Delivery 2.0, está empezando a convertirse en una realidad. Una propuesta de reducción de fricción que abarca desde el «recógeme estas camisas en mi sastre» hasta un «quiero pasteles de esa pastelería que me encanta en la otra punta de la ciudad», pero que puede abrir oportunidades interesantes para muchos.
muy interesante, a veces estamos trabajando y no tenemos tiempo,y si buscamos algo tenemos que delegar
Pagar un recargo puede servir para ganar una tarde entera. Son varias las ocasiones en las que se puede necesitar un servicio de ese tipo. Tiene que funcionar.
En las ciudades, cada vez más grandes, y con más problemas de tráfico, creo que puede suponer un gran valor añadido.
Este servicio no solo se encuentra en San Francisco. En Zaragoza ópera iKiora.com, una tienda virtual que agrega las tiendas físicas de la ciudad, cuyo concepto es el mismo que comentas en este artículo, la entrega rápida! Además de humanizar su plataforma con un equipo de «dependientas virtuales» que te acompañan en el proceso de compra.
No hay que irse muy lejos para ver estas iniciativas, las tenemos en casa ;)
Me alegra mucho este post del gran Enrique Dans, pues precisamente ahora cuatro socios y yo acabamos de lanzar UrbanSherpas.es, un servicio absolutamente equiparable a Postmates, todavía sólo disponible en Valencia (y pronto en Madrid y Barcelona).
En efecto, la lucha por el reparto en una hora y por la entrega en el punto exacto en el que el cliente se encuentre, son los grandes retos del delivery en el siglo XXI.
Pero no sólo eso! Servicios como UrbanSherpas o Postmates compran por ti y te lo llevan a donde quieras. Las empresas convencionales de mensajería, solamente lo último!
Una nueva concepción de las compras, los recados y los repartos ha comenzado!
Eso los mensajeros lo llevamos haciendo años, aunque sin tanta «app» ni tanta zarandaja. Lo único que los mensajeros trabajamos mayoritariamente para empresas, no por nada, sino porque el negocio está orientado así, hasta ahora era más rentable buscar un cliente grande que muchos pequeños.
No veo mucha diferencia con los mensakas de toda la vida, Ahora se ven poco por la ciudad, pero antes, los he utilizado no solo para llevar y traer paquetes y sobres, sino para hacer pequeñas gestiones como, llevar remesas de talones al Banco, o llevar el listado de nómimas, cobrar facturas, ayudarte a cambiar los muebles de la oficina, o cosas por el estilo típicas de un botones, pero motorizado.
El problema es que se regularizó su contratación por las empresas de mensajería, antes no tenían contrato de trabajo, actuaban como autónomos y coincidió con el auge, primero el fax y luego el email y descendió mucho su necesidad, y ello supuso una subida de precios que les puso fuera de mercado.
Ese es el problema. cobrar 7 euros por traerme de la Casa del Libro una novela de 21 euros, supone aumentar el precio final un 30%, que en mi opinión es algo excesivo, y claro esta, cosas de 150% donde su labor supondría muy poco, no se compran todos los días.
#5 Te equivocas, las empresas de mensajería también pagamos por adelantado si hace falta, aunque no suele ser lo habitual, como trabajamos mayoritariamente para empresas, cuando hacen un encargo suele ser a otras empresas con las que trabajan habitualmente y generalmente se lo cargan en cuenta. El pago en efectivo suele hacerse más «en ruta», envíos desde otras localidades en las que el cliente te avisa que habrá que pagar «X» y desde la central se gestionan esos pagos (ya que la empresa de origen y la de destino son distintas aunque operen bajo la misma marca comercial). En servicios locales a veces hay que hacerlo también, aunque suelen ser cantidades muy pequeñas, cuando es una cantidad un poco grande te la suelen dar por adelantado.
Parece que lo que hacen los americanos (la verdad, soy fan de ellos) es lo único.
Ese servicio lo prestaba hace tiempo en Bilbao, donde yo vivía, una empresa que se llamaba Buenas Noches, y te iba a la farmacia de noche a por una medicina, te traía comida, bebida, tabaco,… por la noche.
Se lo pagabas al mensajero y punto, el único recargo era la cuota de abono.
Hoy, con las nuevas tecnologías, al parecer, lo que se hace es flexibilizar el servicio, más amplitud, cualquier lugar,… de todos modos, imagino que habrá limitaciones porque, aunque sea en bici, cruzarse Madrid en hora punta, puede llevar más de 1 hora, y también depende del tamaño del envío, no os parece?
Buenas noches.
Acabo de ver su ponencia sobre Marca Personal. Sencillamente genial.
Saludos
Enrique, buen post! Aunque se echa de menos menciones a producto nacional , al estilo de Urbansherpas, tal y como dice @rhroyo. Un saludo
Es importante que la logística que se plantee, maneje una logística parecida a la anterior, ya que varios clientes están acostumbrados a la logística que se maneja.
Estimado Enrique,
Nosotros (etece.es) también hacemos delivery de productos (igual que taskrabbit) además de recados y tareas domésticas.
Harías un gran favor al sector de internet en España si además de hablar sobre lo que ocurre en Estados Unidos comentas lo que ocurre aquí, que también es mucho y bueno, pero necesita un gran empujón en cuanto a reconocimiento por parte del público en general. Tu eres una de las personas que llega al público objetivo de forma masiva, y por eso es un poco decepcionante que únicamente te centres en Estados Unidos.
Ramón Blanco