Me hice con «Consent of the networked«, el último libro de Rebecca MacKinnon, en cuanto lo vi disponible, y me lo he devorado en cuestión de pocos días: habiendo escuchado a Rebecca en alguna conferencia y conociendo su trabajo en el Berkman Center for Internet and Society y en Global Voices Online, suponía que el libro iba a estar muy bien, pero ha superado todas mis expectativas.
Rebecca pasó varios años en China como periodista de la CNN, es una muy autorizada observadora de la evolución de la red, y se ha documentado con muchísimo rigor para entender los recientes acontecimientos en la primavera árabe y en países como Irán o los propios Estados Unidos, dando lugar a una obra fundamental para entender y valorar lo que realmente nos jugamos los ciudadanos en todo esto.
El libro parte de la base evidente de que el poder corrompe y predispone a intentar retenerlo, y que la democracia, que se suponía debía ser un otorgamiento de poder ejercido con el consentimiento de los gobernados, responde cada día más a los intereses de actores a los que no votamos y a los que aparentemente no podemos reclamar nada: lobbies, grupos de interés y extremistas de diversa índole. Internet, contrariamente a lo que afirman las utopías, no cambia la naturaleza humana, y por tanto, desde que se inició su popularización, estamos viviendo el permanente balance entre su valor como herramienta de participación y expresión ciudadana y el constante intento del poder por ponerlo bajo su control.
La revisión histórica que Rebecca lleva a cabo del uso de la red en países como China, Irán, Túnez o Egipto está fantásticamente bien documentada , llena de detalles y es, sobre todo, profundamente reveladora. Pero el análisis que lleva a cabo posteriormente de cómo los Estados Unidos y otras democracias teóricamente maduras están utilizando como excusa los deseos de los ciudadanos de seguridad, entretenimiento o confort material para someterlos a un control cada vez mayor y a una renuncia progresiva a sus libertades es profundamente sobrecogedor. Las compañías que ofrecen servicios en la red se convierten en determinantes de nuestras libertades, mediante acuerdos de usuario que firmamos sin leerlos y que dan forma al espacio en el que nos movemos, un espacio que los gobiernos intentan controlar para beneficiar intereses que no tienen nada que ver con los de los propios ciudadanos. Mientras en el mudo físico tenemos referencias para entender cómo funcionan los mecanismos del poder y hemos desarrollado a lo largo de muchos años consensos que funcionan mejor o peor, en la red estos mecanismos están siendo desarrollados de facto mediante procesos muchas veces perversos. En la red, cada día más, hay actores que determinan nuestras libertades y que actúan al margen de todo consentimiento y control.
Un libro fundamental para entender lo que verdaderamente nos jugamos con la preservación de las libertades en la red, su enorme influencia en el futuro modelo de sociedad y la responsabilidad de todos a la hora de mantener una actitud activista en este sentido.
El futuro de las libertades en la era internet depende de las acciones de todos los que en este planeta creamos, utilizamos y regulamos la tecnología. Depende de si somos capaces de defender nuestros derechos en el espacio digital que ahora habitamos de la misma manera en que nuestros antepasados lucharon por sus derechos en un espacio físico que una vez fue controlado por soberanos y señores que reclamaban tener un supuesto derecho divino a gobernar como les viniese en gana.
(…)
Tenemos la responsabilidad de pedir cuentas a los que abusan del poder digital, a los que facilitan sus abusos y a los que colaboran con ellos. Si no lo hacemos, cuando nos levantemos una mañana y nos encontremos con que nuestras libertades se han erosionado hasta el punto de resultarnos irreconocibles, seremos los únicos a los que podremos echar la culpa.
Un libro de verdad recomendable, de esos que terminas y te apetece enviar a unas cuantas personas, y que se va directo a mis recomendaciones para algunos de mis cursos. Acabo de ver en un tweet de Roger Domingo que Deusto lo editará pronto en castellano. Me parece una muy buena elección y una fantástica noticia.
ACTUALIZACIÓN: A través de un tweet de Xavier Solé recuerdo esta charla del año pasado de Rebecca MacKinnon en TED que contiene muchos de los temas tocados en el libro (si quieres subtítulos, haz clic en el enlace para verla en la página de TED, en YouTube no están)
Pero es fundamental ¿por decir lo que ya sabemos?, ¿por vernos reflejados en sus teorias?, ¿por presentar lo que ya sabemos de forma diferente?, o ¿por realmente decir algo nuevo de interes y hacernos re-pensarlo con alguna otra perspectiva?.
Leyendo tu reseña, a mi me parece que no lo voy a comprar. Hace tiempo que se quienes son los malos y cuales son sus trucos.
So…what’s the point?
El planteamiento de Rebecca Mackinnon es claramente acertado. Parece que su libro documenta una impresión que más o menos empezábamos a tener todos para convertirla en evidencia: un trabajo necesario para que la tesis sea sólida.
Seguro que enlaza bien con la Doctrina del Shock, de Naomi Klein.
Gracias, Enrique, por la referencia.
En efecto, lo publicaremos en @EdicionesDeusto a mediados de junio.
Saludos,
Roger
La vedad es que has hecho un «prologo» de la obra bastante bueno, asi que esta misma tarde me voy a dirigir a comprarlo, espero obtener una buena experiencia de su lectura, saludos
Gracias por la reseña. Intentaré pagar por el…
Los grupos de presión son parte del funcionamiento de la democracia, por ejemplo, los sindicatos o Greenpeace (así me lo enseñaron en la “educación para la ciudadanía” inglesa). Jose Antonio Primo de Ribera decía que él era mas de los trabajadores que la CNT y por ello adopto los colores rojo y negro. Es triste que el éxito de un idea sea su fin, que las empresas triunfen con sus lobbies y think tanks.
Creo que la corrupción parte de la naturaleza sectaria de la sociedad:»todo vale si no gobiernan los otros».
Internet «nace de» y genera nuevas experiencias, información, datos, que dan forma a una filosofía racionalista y objetivista, un concepto de justicia para mi época.
Espero que el libro esté a la altura de Adam Curtis y su «All Watched Over By Machines Of Loving Grace». Disculpen si insisto, pero me hace feliz recomendar lo que me apasiona, que sin entenderlo en detalle, me abre los ojos a una visión más completa, como si saliera de la cueva de Platón y me cegara la luz.
Roger, ya puestos sacad la versión digital a la vez que la de papel, … o mejor, hacedlo antes. Sería un puntazo.
Gracias Enrique
Como no soy tecnica en nada , me gustaria saber como lo podemos evitar , ya que no lo emos podido hacer con el capital ni con la politica .Ya se que desde la edad media a esta parte hemos mejorado mucho aquello hera muy barbaro y muy burdo pero quien nos libra de la manipulacion sutil de la tecnologia muy dificil lo veo.
Estoy con la línea de #1: ¿qué hay de nuevo que no hayamos contado tantos? Seguro que el texto es excelente, pero la pelea para un internet libre empieza por no jalear servicios que te convierten en producto comercializando tus datos… o entregándoselos a los gobiernos sin que tu lo sepas. Mucho más cuando todavía subsiste el software libre para hacer cosas como este blog. Y nos pasamos el día diciendo que facebook y twitter son guais, y que liberan mucho… Un retorno a la difusión (para muchos será la primera vez) de lo que era la ideología de los hackers no vendría mal para que la gente supiera lo que hace.
#6 Natxo, en Deusto, y desde hace un par de años, publicamos simultáneamente en papel y en digital exactamente el mismo día.
Ayer se difundió la noticia de que el FBI persigue monitorizar las conversaciones en redes sociales…
http://www.foxnews.com/politics/2012/02/16/fbi-seeks-developers-for-app-to-track-suspicious-social-media-posts-sparking/
INGLATERRA CIERRA PAGINAS DE INTERNET Y AMENAZA A LOS CIUDADANOS CON 10 AÑOS DE CARCEL
http://teatrevesadespertar.wordpress.com/2012/02/17/inglaterra-cierra-paginas-de-internet-y-amenaza-a-los-ciudadanos-con-10-anos-de-carcel/
Mejor este link Enrique, viene con subtítulos:
http://www.huffingtonpost.com/2011/12/07/internet-freedom_n_1133513.html?1323272674