Tercera entrada larga dedicada a Google Buzz en un corto espacio de tiempo, pero es que su lanzamiento está siendo muy interesante para los que nos dedicamos a estudiar y analizar estas cosas: la llegada de Google Buzz está teniendo una interesante serie de efectos colaterales. A la espera de datos sólidos al respecto, tengo algunas impresiones que, de comprobarse, demostrarían que lo que la gente de Google tenía buzzing in their heads cuando diseñaron el producto era una jugada de mucho más calado destinada a ser mucho más que un simple servicio más.
Por efectos colaterales no me refiero a las múltiples quejas o problemas derivados del lanzamiento: hay cuestiones como los esquemas de opt-in o el opt-out y su relación con la privacidad, o el esquema de integración con Gmail, que pueden ser sometidas a análisis interesantes y a las que, según se comenta, Google está prestando muchísima atención y tratando de reaccionar muy rápidamente, pero no es el análisis que pretendo hacer ahora. Procuraré más bien centrarme en las implicaciones estratégicas del tema.
En primer lugar, el efecto ya comentado anteriormente de creación de una capa de replicación, un instrumento para hacer de repositorio o consolidar otros servicios: todavía no suficientemente abierto ni perfeccionado, pero una idea muy interesante reforzada por la posibilidad de realizar búsquedas sobre ella.
En segundo lugar, al lanzar un producto social como Buzz vinculado de manera irremisible a Gmail, Google se ha asegurado una fuerte inyección de popularidad para un tercer producto relacionado: Google Profiles, sus perfiles personales. Este producto, en realidad, es central y clave en las llamadas Identity Wars, una de las batallas más interesantes que se están jugando en la web, con jugadores tan importantes como Facebook o Twitter, y con intervención de piezas como OpenID u OAuth. Todavía no he visto números publicados, pero estoy seguro de que Google Profiles ha debido experimentar un ascenso fuerte, un paso interesante a la hora de definir quién termina convirtiéndose en las «páginas blancas» de la red. Además, Google Profiles tiene, frente a competidores como Facebook o Twitter, un diseño que refuerza y hace mucho más visible la parte social, con todo lo que ello conlleva.
En tercer lugar, la creación de una capa de «metacomentarios» con una organización curiosa: en el apartado de Buzz aparece un contador que se actualiza con todas aquellas personas que sigues, pero aquellos hilos en los que participas pasan automáticamente a la bandeja de entrada. Esto provoca un fenómeno curioso y que, de hecho, no me gusta: que en ocasiones aparezcan conversaciones interesantes que se «deslocalizan» de su fuente original. Lleva varias ocasiones en las que veo comentarios a entradas mías que me encantaría tener recogidas en la entrada correspondiente, pero que al aparecer en el hilo de Buzz, se «pierden». En ese sentido, Buzz tiene un punto de «apropiación de la conversación» que, como generador de contenidos, no me termina de convencer, y que podría crecer si el uso directo de Buzz se populariza (algo de lo que todavía no estoy completamente convencido). La fuerte integración con Google Reader es otro punto más que permite tangibilizar esa capa social: ver de repente los artículos que compartes en Reader sometidos a un nivel adicional de visibilidad en Buzz proporciona una sensación de «mayor potencia de fuego»: en Reader ya existía la posibilidad de comentar sobre los elementos compartidos, pero desde que apareció Buzz, el número de comentarios en mis entradas ha crecido sensiblemente. La última vez que me pasó algo así fue con Menéame, y lo solucionamos mediante un plugin de WordPress desarrollado por mis amigos de Blogestudio.
En cuarto y último, la aparición de una nueva fuente de tráfico social: es pronto para decirlo, pero de nuevo, si el uso directo de Google Buzz crece, veremos cómo se convierte en un importante referral de tráfico para los creadores de contenido, como algunos ya hemos experimentado con Facebook o, sobre todo, con Twitter. Este posible desarrollo se vería acompañado con total seguridad por la aparición de botones del tipo «enviar a» (Buzz this, como ya ha hecho por ejemplo Mashable) que los creadores de contenido pondríamos visibles junto con su respectivo contador para potenciar el efecto, lo que otorgaría una visibilidad adicional a la aplicación.
En resumen: es todavía muy pronto para vaticinar si Google Buzz progresará en su curva de adopción o quedará como un intento de los muchos que Google no ha conseguido posicionar. Según algunos, Buzz está siendo un enorme éxito de adopción, con estadísticas que ascienden a más de 160.000 entradas y comentarios por hora, y se habla del servicio como de un auténtico game changer, y no olvidemos un efecto adicional que podría funcionar incluso aunque el modelo de adopción directa no fuese masivo: la capacidad que daría a Google de convertirse en un actor importante a la hora de indexar la real-time web. Pero consigan o no dinamizar la adopción directa, tengo pocas dudas acerca de que estos efectos colaterales estaban ya bien factorizados y tenidos en cuenta en su diseño.
La integración de Google Profiles con buzz es una especie de mini-facebook muy interesante.
Una cosa que ho se ha hablado mucho es de la geolocalización de los Buzz, lo veo increible. Integrado con Google maps 4.0 en capas puedes ver todos los buzz de todo el mundo pero en concreto los que tienes a tu lado es muy curioso. Hoy en barcelona esta plagado por la llegada de gente al MWC, el concepto red social geoposicionada lo veo increible. Con comentarios de todo tipo puedes seguir que esta pasando en la ciudad, si os acercais (virtualmente podeis ver que ha pasado hoy en barcelona (hemos tenido mucho frio, una media maraton y está llegando un monton de gente que esta descubriendo que son las tapas y los bares en España.
Saludos,
Pues yo insisto en que el poderío de esto del buzz está en la palma de la mano.
Los dispositivos móviles serán los que triunfen, con el iPhone en la cabecera y el Nexus One escalando posiciones, y llevar buzz en el bolsillo para buscar buzz en el mapa o en la barra de búsquedas tendrá consecuencias que ahora ni conocemos ni somos capaces de predecir.
A todos esos que maldicen a Buzz y que se lo quitan del Gmail les digo que pronto se lo pondrán porque todos los que tienen Gmail automáticamente tienen un Twitter y no al revés. El valor sigue estando en el correo, en las búsquedas y en hacer de Google el ecosistema.
Dónde he leído yo esto: http://goo.gl/fb/SI3F
#002, #003: Estoy seguro de que va a ser un tema muy interesante. Lo que pasa es que este análisis está hecho desde la experiencia personal, y por ahora lo de la movilidad lo he probado entre poco y nada. Es lo que tiene no ser usuario de iPhone ni Android… llevo un iPod Touch encima habitualmente, pero como que no me acuerdo de usarlo para eso.
Me ha desagradado que en mi correo de Gemal aparezca de repente Buzz, la razón es que me gusta hacer las cosas que quiero, un cosa es que sea fácil incorporar Buzz a gmail y otra muy diferente, que en un espacio que yo considero personal y privado y no de Google, como es mi interface de Gmail, (que lo sea o no, es otro tema), alguien decida por su cuenta y riesgo, añadirme servicios que no he solicitado me parece pasarse un par de pueblos.
Dicho esto, con la experiencia adquirida con Twitter y Facebook a los que inicialmente no encontraba ninguna utilidad, y actualmente si me son útiles, calculo que probare Buzz para ver de que me es útil, en algún momento próximo, pero he decidido esperar, por varios motivos:
1) Porque de naturaleza no soy «Early Adapter». La experiencia me dice que todos los productos salen con muchos defectos y prefiero ser cauto y esperar a que se asienten un poco, pues no tengo vocación de conejo de indias.
2) Porque no siento la obligación, que por ejemplo tiene o edans, de dar a mis lectores urgentemente mi visión sobre el tema. Lo mio actualmente es el huerto y puede que buzz sea práctico para los hortelanos, pero ahí las tecnologías se inventaron hace 4000 años, así que siempre se puede esperar un mes más para hablar de una pequeña variante sobre lo que hacían los caldeos, sin que pase nada.
3) Espero que los demás desbrocen el camino y encuentren utilidad al invento. Pese a que estoy convencido que hasta que personalmente no pruebas una herramienta de estas, no ves claro para que te puede servir, siempre ayuda estudiar los usos que le dan los demás
.
Una curiosidad y me gustaria que especuláramos sobre ella.
Evidentemente no podemos absorber nuevas tecnologías indefinidamente, es decir que si adoptamos una nueva abandonaremos otra, ¿Cual es la tecnología que puede ser desplazada por la incorporación de Buzz, no porque Buzz vaya contra ella, sino simplemente porque de la panoplia de tecnologías que tenemos alguna tendremos que prescindir de usar?
Por ejemplo a mi el uso de Facebook, me ha reducido la necesidad de utilizar el blog (aunque todavía le mantengo)
¿Por qué? – Pues lo que buscaba con el blog es diálogo y consigo más eso en foros escogidos de Facebook en los que voy participando sobre temas específicos que me interesan, que en el Blog, donde se procude sobre todo un monologos por mi parte, con pocas intervenciones interesantes de los lectores.
¿Desplazará Buzz a Twitter, como Amdroid deplaza a Firefox?,
El autofollow ha jodido mi experiencia inicial con Buzz. Esperaré unas semanas a que se me pase el cabreo por semejante quiebra de mi privacidad, y a que Google ponga unos controles mínimos sobre grupos. Llevo usando Gmail desde hace años, y puedo tener miles de contactos… una estrategia muy buena para Buzz aprovecharse de MIS contactos, sí, no lo niego, pero claro, resulta que a mí no me da la gana que esos contactos accedan a ver a quiénes yo sigo o dejo de seguir (autoseguir, dicho sea de paso), o qué posteo o dejo de postear.
Esto no es Twitter, donde lo que dices sabes que lo dices en público. Ni FaceBook, donde sabes a quién le dices lo que dices (en teoría). La frontera no está tan clara en Buzz y por ello mucho mayor motivo para andarse con cuidado. Al igual que en toda conversación humana, no le diría lo mismo a toda persona que conozco. A algunos se lo diría suavemente, a otros directamente, a otros no se lo diría, y a los últimos les diría exactamente lo contrario. El mismo motivo que ha llevado a muchos usuarios de FaceBook a ser más selectivos con lo que siguen o dejan de seguir ya lo tenemos instalado en Buzz automáticamente y sin preguntar. Pues genial, conmigo no va el tema.
Por ahora he bloqueado absolutamente Buzz a todos mis «followers» y he eliminado todos mis «followings», además de evitar poner un solo mensaje en él. Quiero que se aclare 10 mil veces mejor cuál es el alcance de lo que uno hace o deja de hacer con Buzz, y que pongan un sistema de control de grupos, tanto de following como sobre todo de followers, mínimamente aceptable. Estoy seguro de que Google lo hará, de hecho ya lo está haciendo. Ya veré si me entran ganas de empezar a usarlo en unas semanas.
Ya existe Facebook para socializar, y Twitter para compartir… Google Buzz es solo un intermediario creado para que Google se haga aún más rico.
Creo que buzz es claramente una competencia directa hacia twitter por lo de los seguimientos, me gusto mucho aunque me parece que todavia le falta :) creo que google pensaba poner twitter en gmail pero porque no inventar su propio «twitter»? y posiblemente de alli nacio google buzz
#004 Enrique ¡cómprate un iPhone o mejor aún, un Android! es una gozada y una maravilla tener uno de estos teléfonos. El iPhone OS está bastante majete pero particularmente me gusta más el Android, más abierto aunque todavía le queda madurar. Toda una experiencia esto de tener metida Internet en el bolsillo de verdad, te abre los ojos a otra nueva perspectiva de la Red. La movilidad es el presente y el futuro muy por delante de cualquier otro tipo de dispositivo.
#010: Ya, en algunos temas se están distanciando claramente del resto. Pero sigo teniendo bastante prevención por las interfaces exclusivamente táctiles, sin teclado físico. Por más que lo intento, me siguen resultando muy incómodas con respecto al teclado. ¡Me estaré haciendo viejo! :-)
En la part bajo deGmail hay un apartado (o click) titulado «desactivar» Buzz. Funciona de maravilla!
Buzz no me va a cambiar en nada.
Twitter si mola.
Hay quienes creen que el nombre comercial de las cosas no es tan determinante ni tiene mucha importancia pero creo que en estos casos importa. Y «buzz» no suena tan bien. «Buzz» recuerda a «bus» pero también se parece a «bush» (con sus connotaciones de guerra de Irak y otros malos recuerdos cercanos).
Daré un consejo que vale cientos de millones: cambien el nombre coloquial «Buzz» por «ZZ» o «GB» (acompañado por un logo discreto y simpático) o cualquier otro que suene mejor y multiplicarán sus posibilidades (la racionalidad del ser humano a la hora de identificarse con una marca que le ofrece un producto o servicio es, en ciertos aspectos, relativa pues somos seres bastante «connotacionales» y «subconscientes».
Totalmente de acuerdo en que juega a ganar la Identity War.
Respecto a los comentarios que se pierden, es justo lo que te comentaba en la otra entrada. Los sitios generadores de contenido que se menciona en Buzz pierden las visitas y la interacción en sus propias plataformas. Más difícil encontrar lo que dice la gente (cuando eres el emisor de la información) y un peligro para los datos de tráfico si el contenido se publica íntegro visible en el Buzz… Un reto más y una variable más, pero también una oportunidad más para hacer ruido. Interesante! :)
La verdad, me parece que Google está siendo demasiado agresivo con esto de Buzz. La primera cosa que te encuentras en Gmail después del lanzamiento de Buzz es una ventana bien gorda donde te pinta Buzz como muy bonito y te da la opción de empezar a usar Buzz o no. Esto es spamm del malo. ¿Cada vez que Google quiera lanzar un nuevo producto me va a pasar lo mismo?
Yo le dije que no, y a continuación me apareció la pantalla principal de Gmail… con una bonita carpeta de Buzz. Según parece, que yo le haya dicho que NO quiero usar Buzz es un dato irrelevante para Google.
Leyendo en los foros te acabas por enterar de que hay un pequeño enlace abajo del todo que te permite desactivar Buzz. Lo pulsas y ya está… hasta la siguiente vez que Google quiera activarme un nuevo servicio sin mi permiso.
A esto hay que añadirle las cagadas de Google con la privacidad de Buzz, estilo «eres periodista y los correos de todas tus fuentes aparecen publicados en Internet, y ya de paso también la dirección de tu amante». Según parece, Google no es capaz de distinguir entre «correo privado» y «red social».
Claro está que hay muchos millones en juego, pero se supone que su lema es «don’t be evil». Para mí Google ha bajado muchos puntos con esto.
Creo que buzz convierte a Google en Google 2.0 . Al integrar todos los servicios son los propios usuarios los que van a catalogar la información y permitir un buscador eficiente, dinámico, en tiempo real. El objetivo de buzz no es otro que convertir al buscador de google en una experiencia única e irrepetible. Su aplicación fragmentará de una vez por todas la red, haciendo que entre las valoraciones personales, la geoposición y las relaciones personales la red se vuelva tan local para los usuarios que el propio buscador la fragmentará en miles de millones de piezas. Google 2.0 significa que estamos observando el baile de una bandada de estorninos mientras circulamos en una motocicleta. No habrá dos entradas en el buscador iguales. Por otro lado sustituiremos a miles de programas y algoritmos, Google hará que le ordenemos la red, todos trabajaremos para Google. Sencillamente brillante.
#006: ¿Qué tiene que ver Android con Firefox?
Iker Pérez de Albéniz ha creado un widget de Buzz para WordPress. Sólo muestra los ‘buzz’ y no los comentarios, pero para empezar a integrar Buzz en nuestros blogs es un buen comienzo.
— Javier
Ejemplo de comparativa de difusión entre el buzz de edans, el blog de edans, y el twitt de edans (si te haces seguidor de GoIiat antes de las 16:30 GMT+1), sobre la base de una noticia decidida a ser viral cueste lo que cueste, más que el pesao (cariñosamente) de Larrosa si cabe, y con el mass-media en contra:
Hey Enrique, a ver si puedes difundir esto entre tu círculo de amistades, es de un buen colega al que estamos intentando ayudar para que se sepa lo que le han echo «esos grandes comerciantes españoles», y se ha esforzado mucho por no insultar, ni siquiera criticar (bueno, sale la palabra culo):
http://www.hard2mano.com/index.php?showtopic=72467
Puedes proponerlo en clase a modo de «ejemplo de acción viral». Está dispuesto a llegar hasta donde sea necesario.
Un abrazo, amigo.
#17 ¿De verdad queremos que la Red se fragmente en miles de millones de pedazos? Una cosa es tener Facebook para relacionarte con los amigos, otra que el conjunto de la Red se fragmente en un pedazo por individuo. Imagina que busco «Bluray» en Google, y que ninguno de mis amigos tiene mucha idea de Bluray. El primer resultado de Google 2.0 sería el enlace a la propaganda barata de Bluray que me envió mi mejor amigo el mes pasado.
¿Queremos seguir viviendo en el micro-universo en el que ya vivimos fuera de Internet? ¿O queremos vivir en un mundo global? No creo que nadie conecte a Internet para hablar con sus amigos y ver las tiendas que hay cerca de su casa y recibir en su buzón la propaganda del supermercado de la esquina. Para eso no se necesita Internet. Otra cosa es que en Internet podamos *además* hablar con nuestros amigos.
Un ejemplo de problema por éxito de funcionamiento: Te he agregado porque me interesaba leer tus buzz. Pero me he encontrado con un listado infumable de gente que te contestaba y que me importaba un pimiento, así que he tenido que desagregarte. A ver si mejoran eso.
Hola Enrique, hemos tomado tu entrada como fuente para una breve nota en nuestro newsletter de febrero. Te paso link por si te interesa verlo: http://www.visualmente.es/visualmente/newsletter/20100222/20100222.html
Saludos!