Mi columna de Expansión de esta semana se titula «¿Desconectado por vacaciones?» (pdf), y reflexiona sobre el balance de la desconexión total en vacaciones frente a tener que hacer frente a una barbaridad de mensajes al volver a trabajar. Me estoy encontrando cada vez más casos de personas que, al ir mezclando progresivamente un uso de la red profesional con uno personal, optan por mantenerse completamente conectados o por desconexiones relativas en lugar de llevar a cabo un alejamiento total. Me llamaron la atención los resultados de este estudio publicado en GigaOM, con un 85% de personas que se mantienen en diversos grados de conexión durante las vacaciones frente a tan solo un 15% que se desconecta por completo, y pensé que era el momento adecuado del año para escribir sobre ello.
Durante el mes de Agosto, Expansión no publicará su suplemento de tecnología, con lo que la próxima columna será el día 4 de Septiembre.
Interesante el artículo. Seguro que genera diversidad de opiniones. La tecnologia hoy en dia siempre nos acompaña y a veces es dificil despegarse de ella unos días, a todos nos ha pasado alguna vez, no?
Un saludo.
Yo no creo que esto vaya de tecnología y redes. Va de personas que no saben o no quieren poner el trabajo en el lugar adecuado cuando deciden irse de vacaciones con su familia o sus amigos. La blackberry siempre a mano no es la culpable, pero eleva la adicción al trabajo y su entorno hasta un extremo casi patológico.
No pasa nada por no leer un email en 3 semanas. Has decidido irte de vacaciones? Parar de trabajar? Entonces para qué necesitas seguir «sufriendo» cómo van las cosas cada día? Te vas a costar más ponerte al día a la vuelta? Pues depende, quizá la mitad de lo que ocurra mientras no estás no tiene ninguna relevancia. Igual llegas y ya se han solucionado los problemas que llevas leyendo minuto a minuto, no?
En fin, adicción en general de gente que no prefiere dedicar su tiempo y energía al engaño del trabajo en vez de a su familia, amigos o a si mismo. Y pensar que aún cientos de empresas (españolas) no dan blackberry más que a medios o altos cargos con lo que esclaviza y lo barata que es. Es bastante gracioso que aún hoy sea un símbolo de distinción! :))
Yo no me desconecto para estar en vacaciones. Para mí el flujo entrante de información no es en realidad «de lo que tengo que descansar». Casi diría que forma parte de mi ocio, no de mi negocio (aunque muy matizado últimamente, por suerte)
Por eso, aún en mis vacaciones, buscaré dónde seguir conectada, aunque sea un par de veces al día. Desconectar del todo, me causaría esa ansiedad extraña de notar que me falta algo. (Estoy mirando hacia India en el mapa, jejeje, espero que haya cybercafés)
Nunca he creido que la tecnología tenga la culpa de nada sino que depende de lo que nos angustie su falta. Nuestro grado de adicción es el factor realmente preocupante.
Me gustaría que un día reflexionases sobre los adictos digitales que se ven prejuvilados laboralmente. Cuantas nuevas altas en LinkedID o Facebook lo son trás un despido ??
Por cierto, yo continuo conectado durante vacaciones pero SOLO cuando me apetece.
Yo me apunto al carro de los que no desconectan del todo en vacaciones.
Seguiré con el iPhone mirando el correo, accediendo a Facebook (aunque me vaya de vacaciones sigo teniendo amigos y contactos), posteando en Twitter y navegando. Como se suele decir, «sarna con gusto no pica».
Yo tengo la suerte de que me despierto antes que mis hijos y mi mujer.
Cuando ellos se levantan ya he leído la prensa y los mensajes de la BB.
El resto del día estoy desconectado de la BB y conectado a ellos, hasta la mañana siguiente.
Aunque puede haber excepciones. Son los momentos BB, cuando normalmente te pones nervioso pero la BB se convierte en una terapia (como en el anuncio de Voll-Damm). Ahí van algunos tópicos:
– Sentado cómodamente en una tienda con aire acondicionado mientras tu mujer se prueba ropa o zapatos (Ella encantada porque te ve tranquilo y sin prisas).
– Apoyado en la pared mientras haces cola, y ésta no avanza.
– Sentado en la sombra mientras tus hijos están en los columpios y no hay manera de que los suelten.
Creo en la paradoja que supone el hecho de que en ocasiones, estar conectado a la red y desconectado de lo que te rodea, puede ayudar más a la convivencia, especialmente en situaciones que ponen a prueba tu paciencia.
Totalmente de acuerdo con Emilio, hay que saber desconectar por la propia salud física y psíquica y por el bien familiar, hay mucha adicción en todo esto.
Saludos
A mí me ocurre lo mismo. Yo comienzo mis vacaciones ahora, y dudo mucho que consiga desconectar del todo… ;-D
También es una cuestión cultural. Si leo el periódico en papel nadie me dice nada. Si leo el periódico en la BB me llaman adicto.
Es bueno el comentario de Xavier. En mi caso si leo el periódico en papel me llaman aburrido, y si lo leo en la BB se presupone que estoy resolviendo mis asuntos urgentes del trabajo, lo que implica: «no molestar a papá».
Ciertamente las tecnologías mejoran la convivencia. Apoyo la idea al 100%.
Para los que estamos jubilados, las vacaciones son una temporada extraña en la que el resto de la gente viaja más, razón por la cual resulta más difícil conectarnos a ellos.
El email, Twitter o Facebook no son molestias, nos valen para conectarnos a la vida.La vida es muy diferente desde esta perspectiva.
Es precisamente la existencia de un «síndrome de abstinencia» lo que define una adicción. Muchos fumadores (de cigarrillos) piensan que fuman por placer y porque el cigarrillo les hace sentir mejor, cuando el efecto positivo no es más que la dosis de nicotina correspondiente para calmar el mono.
Otra cosa es el fumador de puros habanos, que sólo los disfruta de cuando en cuando y los saborea de verdad. Aunque el ejemplo no es muy bueno respecto a la tecnología, también existen perfiles muy distintos de usuarios, adictos y algún que otro yonqui.
Yo me considero un enfermo de la conexión. No puedo vivir sin estar conectado al ordenador. Prefiero estar conectado a aguantar a la mujer y a los crios.
Es interesante eso de que cualquier cosa que se hace con una blackberry parece importante. Yo suelo jugar a juegos sencillos con el teléfono mientras voy en el metro y cuando me encuentro con algún conocido me saludan diciendo, «no te molesto que estarás trabajando»
Kiki, lo tuyo si que es un topicazo. Si a lo que haces con tu mujer y tus niños lo llamas aguantarlos, creo que deberías considerar lo del divorcio. Es sencillo y casi siempre dura para toda la vida.
En mi caso la respuesta es «depende». Si he dejado algo de trabajo colgado a solo un email de completarlo, me conecto remotamente y lo acabo. En esos casos hago un barrido muy selectivo del buzón de entrada y solamente accedo a aquello que es de verdadera importancia. En unas vacaciones de 3 semanas puedo permitirme «sacrificar» media hora de mi tiempo así, porque lo tranquila que me quedo no tiene precio.
#13 lo ha bordado. Lo mismo pasa con el «business travel». La de tipos que están encantados que los envíen «a donde sea» para librarse de las responsabilidades familiares. Pues mirar innecesariamente el correo del trabajo en vacaciones, lo mismo.
16# Fui business traveller durante años. Me apuntaba a cualquier cosa con tal de estar fuera de la oficina. Es lo mejor Dietas, hotel bueno, etc, ninguna atadura, nada.
El problema es cuando dejas de meterle puntos a la tarjeta de fidelidizacion y te cortan las alas y vuelves a la central y descubres que nadie está interesado en tus charlas sobre países exóticos y al volver a casa no te espera nadie.
6# Efectivamente coincido contigo en que ir a comprar zapatos con la mujer con la BB es una experiencia mucho más gratificante que el suplicio de antaño.
Reconozcámoslo hay yonkis de esto. Yo soy uno de ellos.
Teía un jefe que estaba convencido de que todos hacíamos horas extrordinarias, aun sin cobra, con tal de no volver a casa antes de las 10 de la noche.
La verdad es que comparto con enrique y con algunos de los comentarios la visión de la desconexión necesaria en vacaciones.
Si eres jefe, o el negocio es tuyo, entiendo que siempre tienes que mantener algo de control, o bien que alguien lo haga en tu ausencia. Para los que trabajamos por cuenta ajena, y nuestro trabajo no nos lo hace nadie, simplemente cuando volvamos tendremos una pila más alta de lo normal, pero si algo se rompe se supone que habrá alguien para arreglarlo mejor o peor que nosotros, pero lo arreglará, o al menos debe hacerlo.
Hace falta y es necesario para la salud descansar en vacaciones.. Leer el periódico o conectarte un momento a facebook, no creo que merme ese descanso, pero si el tener un ordenador cerca te lleva a terminar consultando el correo del trabajo, a veces es mejor no llevártelo.
Lo que pasa, es que vivimos tan conectados que no sabemos vivir sin estarlo, hay gente a la que le es más fácil, quizá por que internet, el ordenador, es una mera herramienta que usan en su trabajo y en casa quizá para el ocio, pero los que quizá tenemos una relación más estrecha con el «medio», nos cuesta un poco más de lo normal.
Yo envidio a la gente que puede desconectar totalmente en el día a día al llegar a casa, a los que teletrabajamos , es bastante más complicado que al resto, o al menos en mi caso.
En verano procuro hacerlo, dedicándome a tener la cabeza ocupada en otras cosas.. AL igual que cuando trabajamos no tenemos tiempo de pensar en otras cosas, cuando hacemos otras cosas, no tenemos tiempo de pensar en el trabajo, o por lo menos hay que intentarlo.
Para mí el trabajo es una actividad a la que se dedican al día un número de horas estipuladas en un contrato a cambio del cual se recibe una remuneración. Yo oriento mi vida al ocio, no al trabajo, y utilizo la remuneración para generar ocio. Es decir, el trabajo es un medio y no un fin. El que hace horas extraordinarias sin cobrar, el que no desconecta, el que atiende a los asuntos del trabajo en sus vacaciones, es un MAL COMPAÑERO, por culpa del cual los jefes se acostumbran a que el trabajador tiene que estar siempre disponible. Si todos nos levantáramos de la silla a la hora que dice en nuestro contrato y nos fuéramos a atender lo que importa (que es nuestra vida, nuestra familia, nuestro ocio y no el puto trabajo), el mundo funcionaría muecho mejor. El problema es que hay mucho lameculos.
Adolfo, cobras poquito…¿verdad?.
Otro asunto:
Personalmente creo que deberíamos poner en cuestión qué significa «desconectar». Yo creo que cuando decimos «desconectar» nos referimos a despreocuparnos temporalmente de los asuntos del trabajo. Pero, ¿por qué pensamos que usar el ordenador, la BB o lo que sea es «estar conectado al trabajo»?. En mi ocio, yo uso el ordenador para escribir e-mails a mis amigos, compartir fotos, reirnos en un foro, escribir en una página web personal, ver películas y videos, escuchar música … cosas que hago como parte de mi ocio, porque me gustan, y son parte de mi felicidad. ¿Desconectar de eso?. No, por favor. Que parece que el ordenador sólo sirve para trabajar… Ayer en la TV decía uno: «No, no desconecto, en vacaciones miro el correo…», ¡coño!, claro, pero el mío personal, no el de la empresa.
Por otro lado, la única preocupación que debemos tener es la de que desconecte quién desee hacerlo o quién debiera hacerlo por preescripción médica. El que no quiera… que no lo haga, ¿qué problema hay?. Este despotismo ilustrado me parece una injerencia inconveniente por parte de los demás.
Bueno, supongo que para las personas que trabajamos en internet y encima somos dueñas de nuestro propio negocio,como es mi caso, conseguimos acomodarnos y trabajar desde casa para conciliar vida familiar con vida laboral, pero, ¿es realmente esto del todo positivo?. Llevo poco tiempo con mi web y cuando tenga mis primeras vacaciones os lo dire, de momento cierto es que puedo estar en mi trabajo y atendiendo a mis hijos si su salud (no pudiendo ir al cole algun dia) asi lo requiere. Todo no esta totalmente a gusto de una.