Es un tema sobre el que va creciendo la evidencia empÃrica: a medida que aumenta el ancho de banda y la disponibilidad de contenidos en régimen de streaming, disminuye la necesidad de descarga de dichos contenidos. Con el desarrollo de sitios que ofrecen contenidos para ser vistos o escuchados de manera inmediata, el interés por descargar contenidos y conservarlos en el disco duro empieza a desaparecer: siguiendo a Stephen Downes, sitios como YouTube o Last.fm se convierte, de alguna manera, en un grifo que podemos abrir en cualquier momento para obtener acceso a los contenidos que queremos, como si fuera una utility, como el agua o la electricidad, algo que no tenemos necesidad de almacenar. Un movimiento que, lógicamente, cuenta con todos los parabienes de la industria de los contenidos: resulta mucho más sencillo intentar llegar a acuerdos de licencia con este tipo de sitios que intentar controlar la incontrolable descarga directa de los usuarios en redes P2P completamente desestructuradas.
En el mundo de la música, la madurez de la tecnologÃa y la abundancia de este tipo de sitios está llevando ya que muchos usuarios abandonen la práctica de la descarga: con conexiones a Internet cada dÃa más ubicuas y sometidas a tarifa plana, la descarga pierde gran parte de su sentido. En vÃdeo, en cambio este movimiento parece no haberse dado todavÃa. Un estudio de Horowitz Associates referenciado en GigaOM afirma que la descarga de contenidos por parte de usuarios de banda ancha en los Estados Unidos está en fuerte crecimiento: un 61% de los usuarios descargan contenidos de manera habitual al menos una vez a la semana, mientras que un 86% afirma hacerlo al menos una vez al mes, comparados con los valores de 45% y 71% respectivamente obtenidos en el estudio de 2006. Las descargas que más fuertemente están creciendo son episodios de series de televisión, en un modo de uso que viene a sustituir en gran medida al TiVO o DVR. Las cadenas que reciben más descargas son, en recuerdo espontáneo, NBC y ABC, y «AnatomÃa de Grey» la serie más habitual.
El estudio viene a subrayar el interés de las cadenas por ofrecer sus contenidos en abierto, pudiendo asà acceder a métodos de financiación de los mismos basados en publicidad en lugar de ver cómo estos contenidos son descargados en redes P2P sin intervención alguna por su parte (más allá de «sembrar» irregularmente los contenidos en estas redes para incrementar su popularidad al principio de su vida y antes de que se tome la decisión sobre su continuidad) y sin posibilidad de ejercer ningún tipo de control. La evolución lógica, por tanto será que sean los propios creadores de contenidos los que ofrezcan éstos en la red para su descarga, momento en el que medidas como las propuestas por Nicolas Sarkozy en Francia intentando sancionar a los usuarios que descargan contenidos se volverán simplemente estúpidas, dignas de alguien incapaz de entender el funcionamiento y las dinámicas de la red.
La verdad es que tiene mucho sentido este planteamiento.
Cada año los discos duros van creciendo. Recuerdo mi Commodore Amiga que no tenía HD y ahora me quiero comprar un HD de 1000 Gigas. ¿Se invertirá la tendencia?, parece lógico pensar que sí. El ipod touch tiene sólo 8 gigas, menos que sus antecesores, está pensado para que escuches online, seguro que el ipod de 2010 viene casi sin capacidad de almacenamiento.
Utilizaremos aplicaciones en remoto. ¿habéis visto el editor de video de Youtube?
¿Como se llamaba ese ordenador tan barato que venden en Walmart, pensado para «solo» navegar? Es lo que viene, seguro.
Ahora hay que conseguir un cambio de paradigma en el mundo editorial, anquilosado desde hace décadas. Es vergonzoso que sólo el ámbito musical cambie.
¡Pobre Sarkozy! Comparto todo el artículo, cada vez menos necesidad de la tele y de la radio, la cobertura con Internet es total.
El otro día en casa con unos amigos lo fliparon viendo el concierto de The Rolling Stones en el 82 en el Calderón en YouTube.
El Espoiler y la Chica de la Tele están en mi Reader y me orientan y facilitan una barbaridad. Son unos fenómenos.
No creo que el acceso a contenidos para consumo inmediato acabe con la descarga de contenidos, sea esta del tipo que sea. Sería como volver a reinventar la radiodifusión y la televisión.
Y ya sabemos que al invento de la radio le siguió el de la cinta de casette y el betamax y luego el vhs,
Esta es una de las predicciones que hace ya más de una década dijo Nicholas Negroponte en Being Digital.
Además de poder oir/ver/leer en el instante la gente quiere (queremos) poseer. Creo que el motivo tiene más que ver con la psicología que con la disponibilidad de medios on-line.Buena parte de nosotros descargamos contenidos, se a de la forma que sea, aún sabiendo que nunca los leeremos/oiremos/veremos.
¿Porqué, si no, todos los intentos de comercializar pcs, tvs etc cómo cajas tontas han fracasado?. Y, desde luego, no me creo que en USA, país del consumismo por antonomasia, vayan a dejar todos de comprar contenidos, para sólo consumirlos en streaming.
Las compañías de producción de contenidos deberán aprender a convivir con ello, y se verán obligadas a comercializar determinados contenidos on-line, a abandonar la venta de contenidos enlatados fisicamente, a ofrecer contenidos gratuitos por canales y vias on-line, y acostumbrarse a que simultaneamente una cierta cantidad de gente realice descargas de redes y sitios alternativos. Diversificar los medios para llegar al cliente ( Y no tratarlo como delincuente a priori, vamos),
Saludos.
¿Qué te gustaría más: un iPod lleno de 100 gb de media, o un ordenador micro que pueda reproducir toda la media que hay en línea? Lo que nos falta es el equivalente de ADSL inalámbrico. Cuando lo tengamos, el disco duro gigantesco va a ser obsoleto.
Lo que dice jincho en #4 de reinventar la radiodifusion y television tiene mucho sentido ya que en realidad de eso mismo se trata. Reinventar.
El viejo modelo de radio y television incentiva el grabar y guardar cosas dado que no es posible solicitar su redifusion a pedido y capricho.
Pero si merced a una modesta cuota de abono tienes acceso a la discografia y filmografia mundial el coleccionismo de grabaciones deviene en mero fetichismo.
Lo que se desea no es exactamente poseer, ya que en realidad se trata de un intangible, si no de asegurarte su accesibilidad, o sea que lo tendras a mano en el momento que lo desees o necesites.
En mi caso concreto, por el momento, aun no descargo ni grabo musicas, filmes ni series de TV, pero si e-books. Guardo en el disco duro muchos mas ebooks de los que pueda tener esperanza de llegar a leer, pero cada uno de ellos los he elegido individualmente, en tanto que me ha interesado algo a su respecto y deseo asegurarme el tenerlos a mano, pues me consta que el lugar o sitio donde lo he obtenido puede desaparecer de un dia para otro.
Reconozco que aun en el supuesto de que existiera la susodicha accesibilidad universal desearia poseer algunas copias tanto por motivos sentimentales como por el prurito de garantizar aun mas su disponibilidad, pero eso ya no se pareceria en nada a la fiebre de las descargas, esa voragine de trasiego y multiplicacion de copias.
Si el ancho de banda de la conexion permite reproducir contenidos, e incluso el uso de aplicaciones, con identica inmediatez y agilidad que si aquellos y estas residieran en el propio ordenador se dará el caso de que ya no necesitaremos guardar copias ni programas, o tan siquiera disponer de todo un ordenador, sino una cuenta de conexion y un simple terminal remoto.
A proposito, me intriga el que las telefonicas no hayan ofrecido aun el servicio de escribir hablando ya que me consta que muchas comunicaciones telefonicas breves podrian ser mas practicas y eficientes si trocan en un mensaje escrito que no obliga a la atencion inmediata y compulsiva por parte del destinatario.
O bien, aunque solo fuera para mejorar y flexibilizar la comunicacion con sistemas automaticos de informacion y asistencia, dado que el mensaje escrito es mucho mas inteligible para la maquina (o programa) a la vez que el usuario se asegura mejor de lo que ha dicho y le ha entendido la maquina.
Fetichismo. Yo también creia que para mi era importante coleccionar «mi música» en cedes, creia que era importante guardar algo tangible.
Hace un año cambie de casa. Guardé todos mis cedes (que tantos años y dinero me habían costado reunir) y los metí n una caja. Todavía siguen en la caja. No creo que los vuelva sacar de ahí, y os puedo asegurar que eran mi tesorito.
Saludos.
En otras palabras, la carga digital está pasando de los discos duros al ancho de banda. La pregunta es, ¿está la red española preparada para el cambio? Tod@s intuimos una respuesta.
Una puntualización Enrique… You Tube no distribuye contenidos en streaming… de momento.
Un saludo.
Lo que dices tiene toda la lógica. Un ejemplo es lo que ha pasado con las enciclopedias, Quien quiere comprarse hoy una enciclopedia Espasa, que ocupa una librería, cuando puede consultar enciclopedias on-line constantemente actualizadas por Internet.
Claro está, que con un programa araña podemos recorrer Wikipedia y bajarla a nuestro disco duro,. ¿Alguno de vosotros se os ha ocurrido hacerlo? ¿Creéis que lo haréis alguna vez?
Por la única razón que yo bajo determinados vídeos de youtube, es porque me da miedo que su propietario los borre, como ya me ha pasado en alguna ocasión, dejándome sin vídeo un post que había escrito, así que hoy los bajo y los guardo como reserva., Salvo eso, ¿para qué voy a bajarlos?
Por otra parte, es mi teoría, si un suplemento pagado al proveedor, permitiera la suscripción a un «servicio premium ADSL» que aparte de mejor velocidad, te permitiera consultar, (o bajarte), cualquier cosa de calidad, vídeos, partidos de fútbol, cine, literatura, música , noticias, sin ningún límite, como un super Canal +, mucha gente lo pagaría.
Bastaría que los proveedores de contenidos se repartieran con el ISP ese dinero recaudado en función de las descargas conseguidas. ¿No sería eso mucho mas justo e inteligente que el canon que es lo mismo, pero no te da derecho a nada?
@6.- Dubitator: coincido con tus matizaciones. Efectivamente, yo quise poseer libros, discos, casettes, cintas vhs, cds… fisicamente. Ahora no es tanto poseerlos sino tener garantía de su accesibilidad. Y si seguimos descargando, ( y si, a veces es descarga compulsiva)…. ¿No será porque no nos fiamos de que de verdad se nos pueda garantizar dicho acceso, o de que de repente nos cobrasen precios abusivos por ello?.
@ Enrique Dans, ¿Piensas que hay verdaderas posibilidades de negocio en esa gigantesca forma de disponibildad de contenidos? Hablas de que es un grifo que podemos abrir en cualquier momento. Pero tambien la compañía de aguas potables puede cerrarte el grifo de repente, ó subirte los precios de forma brutal….
¡Ah!, y, lo de la caja de montones de cds, que acaba almacenada en el último rincón, sospecho que nos ha pasado a más de uno…
Saludos
Esto que cuentas es muy importante. Yo mismo después de una primera etapa donde descargaba bastantes cosas ahora casi no descargo: no hay necesidad.
Veo programas en you tube, escucho música en pandora o last fm y puedo, incluso, ver la televisión.
Ahora que evolucionan las redes sociales sin colisionar tanto con los conceptos de derechos de autor puede que las compañías y las asociaciones de autores entiendan mejor el beneficio y el provecho que se puede obtener.
El como se convertirá en negocio no lo se pero contenidos accesibles, fáciles de encontrar a un precio bajo y asegurados creo que son pasos básicos: ¿quien descargaría algo de origen espurio pudiendo tener algo legal, asegurado y con asistencia por pocos euros?
Gorki, a mi me gustan las enciclopedias en papel, quedan muy bien en mi biblioteca :).
Efectivamente, productos como Joost hacen que nos vayamos más al streaming que a andar todo el día copiñando cosas.
Miro es mejor que Joost (http://www.getmiro.com/).
Lo que crecerá será la descarga de libros, ya que hay muchos que no se editan digitalmente.
Siempre lo he observado, a la semana de recibir nuestra primera linea de banda ancha, estamos afectados con el síndrome de Diógenes. Algunos logran superarlo, cuando la colección de soportes físicos sobrepasa los límites razonables, pero hay otros que acuden a Ikea para poder seguir dando placer a ese efecto.
Y esto no es sólo de la época de la banda ancha recuerdo en pleno esplendor de las BBS los soportes del momento se llenaban con mensajes, ficheros y documentos de todo tipo que caían en el olvido el mismo momento que aterrizaban.
Las descargas no van a desaparecer, siempre habrá casos en los que te interese conservar algo por el motivo que sea, y el caso más importante seguirá siendo durante mucho tiempo que el acceso a Internet no es universal ni gratuito: por la calle no tienes acceso a Internet (o es caro), en el lugar de vacaciones no tienes acceso a Internet, etc.
Es lógico que si la accesibilidad «oficial» crece las descargas p2p disminuyan, pero el streaming es un pobre sustituto de las descargas en muchos casos. Si me voy a ir de viaje, necesitaré 2 horas de streaming para «grabar» una peli de 2 horas, mientras que una descarga de 700 MB la puedo hacer en 10-12 minutos con una conexión de 10 megas. El streaming es un paso atrás con respecto a la descarga de una copia. En algunos casos (YouTube, Last.fm, etc) ese paso atrás no trae consecuencias negativas para el usuario, pero en otros sí. En consecuencia, ahora están tirando por el streaming (por su mentalidad de dinosaurios), pero a la postre la accesibilidad «oficial» incluirá las descargas gratuitas en muchos casos, o tal vez en todos.
Una moraleja interesante de esta historia es que los productores que mas se resistan a que sus contenidos sean accesibles serán los que más los van a ver en el p2p (porque están restringiendo la accesibilidad por los canales «oficiales»), y con los contenidos individuales (al margen de quién los haya producido) pasa lo mismo.
@Enrique Castro: ¿qué crees que hace YouTube?. YouTube es puro streaming.
@Gorki: ni siquiera necesitas un programa araña, la Wikipedia está disponible para descarga en forma de ficheros.
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Ciertamente, el tema de los contenidos multimedia on-line está cambiando de paradigma. Lo digo con conocimiento de causa.
Actualmente soy programador reciclado en director audiovisual (mezcla explosiva y productiva donde las haya) y no me planteo una distribución clásica de mi trabajo.
En el terreno editorial (libros acompañados de DVD, que ya intuyes qué es lo que se compra en realidad) la venta clásica de los contenidos aún prima sobre las descargas (aunque tengas que «fabricar un pack» para ello) pero en lo que a contenidos multimedia «a saco» se refiere, no cabre duda… Gracias a mejores medios de divulgación, ancho de banda, codecs… el paradigma no es que esté cambiando, sino que ya cambió.
Ahora, la gracia es saber ser rentable ante este nuevo escenario :P
Saludos. Tus reflexiones invitan a la reflexión, bravo ;)
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Yo es que eso lo tengo claro: justo ese el futuro modelo de negocio de la industria. Si la Sony Music, por ejemplo, cuelga online TODO su catálogo para que se pueda escuchar en stream, ¿quíen se lo va a querer descargar? ¿Para qué? Si siempre esta ahí disponible. Y lo que tienen ellos entonces en un sitio con un tráfico brutal: y ese y no otro es el nuevo oro.
@Krigan You Tube es descarga de archivos .flv o Adobe Flash almacenados en una Red de Servidores…no es streaming.
Lamento contradecirte, pero se de lo que hablo. ;-)
#20 Me atengo a lo dicho por la Wikipedia cuando busco «streaming»:
http://en.wikipedia.org/wiki/Streaming_media
Nótese que en la sección «Streaming Media Technologies» aparece Adobe Flash, y que en la sección «Streaming Media content providers» aparece YouTube.
Tienes razón cuando dices que son archivos flv, pero no aparece en YouTube ningún enlace para su descarga, tienes que recurrir a trucos especiales para obtener el fichero aparte.
@16.- Toni.Martz .. «Síndrome de Diógenes Digital «. ¡¡¡ Buena descripción!!! Supongo que los psicólogos que estudien los trastornos asociados a la red tendrán a bien usarlo… ;-)
Saludos.
Lo de YouTube se llama Ã?Å¡Progressive DownloadÃ?Å¡.
Es una mezcla entre Streaming y Download.
Es streaming en cuanto a que puedes ver el contenido antes de que el archivo se baje completo. Tan solo hay que esperar a un minimo buffering.
Es download, porque el fichero (flash) efectivamente se ha bajado a un archivo temporal en tu disco duro, que si quieres puedes conservar en tu PC (simplemente pasandolo del folder temporal a tu escritorio p.ej.)
En puro streaming, solo hay un archivo temporal para el buffering. Conforme vas viendo el archivo, lo que ves se borra de memoria. Al final, no queda ningun archivo en tu PC.
El modelo de Subscripcion es efectivamente el que mejor funcionaria para modelos en streaming. Te subcribes a un catalogo y puedes acceder a todo su contenido (con o sin limitacion) por una tarifa mensual.
Imagenio (IPTV de Telefonica) tecnicamente funciona asi.
En IPTV, los distintos canales se distribuyen por streaming IP multicast sobre un ancho de banda sobre dimensionado para soportar los 1.5-2Mbps necesarios para Standard Definition (para HDTV hablariamos de unos 10Mbs).
Como el Operador controla el ancho de banda de su red, puede garantizar el suficiente para evitar pixelizacions, re-buffering, etc
#23 Gracias por la aclaración, pero el término «Progressive Download» es tan infrecuente que ni siquiera aparece en la Wikipedia en inglés.
Otra cosa más, de la misma manera que a alguien le dio por llamarlo «Progressive Download», también le podían haber llamado «Advanced Streaming», dado que la única diferencia con un streaming «antiguo» sería que toda la obra (vídeo o lo que sea) entra en el buffer temporal, lo cual tiene la ventaja de que puedes ver el vídeo sin cortes por muy lenta que vaya la conexión de red (si es necesario, esperando a que se complete la descarga).
La gran pregunta no es tanto cómo queramos llamarlo, sino si el streaming «puro» (o «antiguo») tiene sentido o no en el mundo actual. Si te fijas, sólo tiene utilidad cuando el cacharro reproductor no es capaz de almacenar todo el vídeo, por falta de memoria. Sólo entonces necesitas lidiar con los inconvenientes de un buffer temporal incompleto.
El punto con el que nadie parece contar es que olvidandonos de las descargas y dejándolo todo en manos de servicios como Youtube o sus descendientes le damos a un tercero la oportunidad de controlarnos. ¿Y si de repente deciden que tal autor no debe ser visto por el público porque es molesto? ¿O tal otro cae en desgracia?
Ceder de esa manera el control de los contenidos y de lo que puedes ver y no ver a un tercero es muy peligroso.
La única duda que se me plantea es: ¿Qué pasaría si quien nos acerca todo ese contenido en línea casi inmediato, le da por cortarnos el grifo? ¿Y si desde un determinado momento, nos ofrece únicamente lo que le interesa? Entonces tendremos que buscar esa caja OMR #8 y rezar para que no se haya estropeado.
#27 Nacho
Exacto, Nacho, eso es lo que quería decir.
me4 fasiliten la descarga de contenido para mi claro