En la página 35 de El País de hoy, en la sección de Cultura, me publican esta tribuna escrita ayer y titulada «Hasta nunca, DRM» (ver en pdf), en la que doy cuenta del significado real del acuerdo anunciado ayer entre EMI y Apple para ofrecer música y vídeos libres de DRM. Un acuerdo que pone a las otras majors en la tesitura de seguir la misma iniciativa, y que vuelve a demostrar las cualidades de Steve Jobs como estratega: el pasado 6 de Febrero escribía su memorándum «Thoughts on music« reclamando la eliminación del DRM, ayer 2 de Abril se hacía la foto junto a una de las majors dispuesta a comercializar sin DRM y a dejar éste sin sentido alguno, y conseguía hacerlo, además, robando completamente el protagonismo a una resolución de la UE que pretendía acusarle de comportamiento anticompetitivo tanto a él como a las majors precisamente debido al uso de ese DRM que claramente está intentando eliminar. Un movimiento estratégico rápido y decididamente brillante. Por un lado, es evidente que la presión del mercado hará que el resto de las tiendas de música online firmen acuerdos rápidamente con EMI o con otras discográficas haciendo que el mercado de la música online se equilibre y iTunes pierda posiblemente algo de su aplastante supremacía, pero por otro, iTunes deja un beneficio completamente marginal a Apple, mientras que el incremento de ventas para los iPod o para el iPhone derivado de su súbita compatibilidad promete ser decididamente superior (históricamente, Apple sabe que el número de canciones de iTunes vendidas por cada iPod no supera las treinta). Y en ese tipo de aparatos, Apple tiene un margen bruto próximo al 50%.
En este sentido, muy interesante también este artículo del Business Week, «Will the Apple-EMI deal end DRM?«, en el que argumenta básicamente de la misma manera: mucho más allá que un mero acuerdo entre dos compañías, la noticia de ayer señala el fin del DRM como estrategia, una estrategia que sólo tuvo sentido para aquel que, desde el primer momento, jugó a beneficiarse, precisamente, de su fragilidad y sinsentido (un tema que toqué ya en su momento en este artículo del 9 de Febrero en Cinco Días, «La música se prepara para sonar sin sistemas anticopia«, que comenté también aquí.
Enrique,
es mano de santo, oiga, tocas el tema MP3, DRM, etc. y los trolls salen como setas.
Por cierto y ya que estamos, un saludo a alguno de los de ayer: Castillo, Chari, Caponcín, etc.
Una cosa es DRM y otra estándares abiertos para que se pueda ejecutar la música en cualquier tipo de dispositivo.
No obstante, no creo que maten al DRM, el problema ahora mismo es que hay muchos DRMs y sería necesario un DRM «abierto».
En el momento en que hay intereses comerciales sumados a una situación on-line tiene que haber algún tipo de DRM. Sin DRM es como si pones un supermercado sin vigilancia, al final nadie pasa por caja.
Intresante.
La pasta que gana por la música, menos que nada.
La idea del acuerdo con EMI será, pues, repartirse los beneficios del IPod.
Al fial, lo online, la red, necesita de algo físico donde agarrarse.
Si DRM fracasa como solución, son los bits los que han fracasado, opino.
«… tiene que haber algún tipo de DRM. Sin DRM es como si pones un supermercado sin vigilancia, al final nadie pasa por caja.»
La realidad demuestra lo equivocado de esa afirmación. La venta de música (incluso con DRM) ha aumentado y sigue en esa línea.
Claro, lo que no funciona es eliminar intermediarios, soportes, etc. (cosa que abarata enormemente el producto) y pretender vender al mismo precio como la compra física de un CD o DVD en la tienda. Eso si que está condenado al fracaso de por sí, no por culpa de otros factores.
Recuerdo que en el Reino Unido se ponía la prensa a disposición del público (desconozco si sigue funcionando así en la actualidad) y, aunque podían tomarlos y marcharse sin pagar ni un penique, la cosa funcionaba bien.
Esto demuestra que no es necesario ningún tipo de protección cuando el precio es asequible y razonable … ladrones los hay en todas partes pero, suponer que todo el mundo es un ladrón, simple y llanamente es pasarse un montón de pueblos.
El DRM hasta ahora parece ser la busqueda de una solucion por la linea equivocada.
Al problema del respeto de los derechos de autor, que cada autor establece al «licenciar» su obra, y la necesidad de retribuirlo, se propone una solucion que limita la distribucion, cuando a lo mejor tiene mas sentido una solucion que permita la distribucion y facilite el pago o el micropago. Y tarifas planas?
De todas formas el tema es complejo, es complejo equilibrar el derecho al acceso con el reconocimiento de los autores. Ahora empieza a ser posible ser un autor y lograr difusión de la obra de uno sin intermediarios. Es una tendencia que va a hacer aflorar autores que desde el principio no van de la mano de la industria, y aspiran a vivir de su creación.
La industria vive de hits, y la sociedad ( y los autores) no los necesitan.
Tiempos interesantes.
Con o sin DRM, los «malos» se enriquecen «liberando» la informacion. Es la «ley seca». Al final, esto no es un problema tecnologico, es un problema de negocio, que debe y puede resolverse desde ahi.
Y finalmente, que nadie compare la informacion con bienes fisicos … no hay relacion. Los bienes fisicos estan limitados por la materia y lo que yo consumo no lo consume otro, los bits solo tienen el coste de duplicacion y mi posesion de los mismos no evita a otro poseer los mismos bits.
Saludos
Gracias a la pantomima del DRM, EMI ha conseguido subir el precio de sus canciones 0.30$, y encima sus clientes están contentos por pagar más.
La ausencia de DRM será el negocio del año.
un saludo
Tratare de exponer mi punto de vista en cuanto me sea posible, si Enrique cree que puede ser interesante para su blog, y tiene interés en conocer otros abordajes para sus lectores. Creo que es un debate que no se les debe escatimar a las personas que no conocen o no tienen una percepción amplia y fundada del concepto tras el DRM.
Si concede la venia, para que exista y prospere este debate en su Blog, en plan Rocky Balboa Vs Apollo Creed, tal vez arrojemos un poco de luz sobre el tema.
Yo me comprometo a hacerle justicia a sus argumentos. Aunque evidentemente el ya se ha pronunciado a través de diversos medios y tal vez tiene más carne en asador que poner en juego. Y tiene derecho a rechazar ese debate.
Con las humildes concesiones de estilo y prosa pertinentes en mi caso, claro.
#4 Por alusiones a lo del supermercado.
He trabajado más de 7 años en Alemania, donde supuestamente es un paraíso y hay en las calles unas hornacinas donde ponen los periódicos del día, la gente echa las monedas y coge el periódico y todo el mundo tan contento. Eso es mentira, porque lo que se hace es que de vez en cuando se ponen a vigilar una de esas hornacinas y al que pillan cogiendo el periódico sin pagar le meten un hostion de 400 euros. Lo mismo que en Alemania cuando uno coge un tranvia o tren de cercanias, tampoco hay nadie vigilando, hasta que un día entras en un vagón y TODO el mundo son revisores y claro te toca pagar.
Ya digo el mundo sería muy bonito sin DRMs, royalties, licencias, multas pero esto son las bases de la economía y de la sociedad capitalista. Otra cosa es que el modelo sea tipo «barra libre» de Fin de Año o cualquier otra historia.
#8
Te sigo diciendo que:
«… ladrones los hay en todas partes pero, suponer que todo el mundo es un ladrón, simple y llanamente es pasarse un montón de pueblos.»
… y, que me metan DRM e historias de esas por considerar, a priori, que soy uno de los de ese bando, no se lo voy a consentir.
Además, ¿donde queda con eso mi derecho a la copia privada si me están impidiendo hacerla?
Pero no me preocupa lo más mínimo porque la solución está en mi mano: ¿Productos con DRM? … No, gracias !!!!
Cuando tengan que comérselos empezarán a razonar, no me cabe la menor duda.
Para mi la clave está en conseguir que comprar música sea mas sencillo (en términos de esfuerzo para encontrar lo que quiero, garantías de que realmente es lo que quiero, compatibilidad con los equipos en los que voy a intentar reproducirlo, posibilidad de descubrir nueva música que también me pueda gustar, a un precio adecuado… etc) que bajarla de cualquier lado.
Y en esta historia el DRM no es más que una de las cosas que complican el proceso y la decisión de compra.
Como en seguridad, hay que sopesar el coste de securizar frente al valor de lo que se quiere proteger,… y normalmente el camino no va por introducir sistemas más seguros, sino en reducir el valor de la información a proteger para que no sea interesante hacerlo:
¿para qué voy a preocuparme en saltarme el DRM (y sufrir los problemas que vienen con ello) si comprarlo me supone 2 clicks y unos pocos céntimos y el producto es de la calidad que espero?
Da gusto ver a personas capaces de escribir en medios tan diferentes como El Pais o Libertad Digital, y no los enfervorizados «hooligans» que se ven por el panorama mediatico de esta pais.