Mi columna de esta semana en Expansión habla de modelos de teletrabajo parcial, y de su posible efecto en factores como el tráfico y la conciliación de la vida personal y la vida profesional. Precisamente lo lógico que se te puede ocurrir cuando llegas a tu despacho después de una hora y pico de coche para un trayecto que normalmente haces en veinte minutos, y que te hace sentir más como si viniéses de un viaje.
A continuación, copio y pego el texto de la columna:
Tráfico y tecnología
Cuando, en un día de lluvia en Madrid, llegas al despacho tras tardar una hora y media en hacer el trayecto que normalmente harías en veinte minutos, tus pensamientos tienden a oscilar entre el odio a la Humanidad en su conjunto y el genocidio masivo, y alguna idea vaga, aunque sin duda más constructiva, acerca de lo insostenible del modelo. En medio de un atasco y con todo el tiempo del mundo para pensar y elucubrar, uno tiende a fijarse, en primer lugar, en que la vasta mayoría de los automóviles que le rodean, y posiblemente el suyo propio, están ocupados por una sola persona. En segundo lugar, a poco que uno tenga una cierta vocación tecnológica, la pregunta aparece de manera casi evidente: ¿cuántos de mis efímeros vecinos de atasco han cogido el coche en esta mañana lluviosa para acudir a unos puestos de trabajo en los que van a desarrollar tareas que podrían desarrollar exactamente igual de bien – si no mejor, en ocasiones – desde la tranquilidad de sus hogares, provistos de las tecnologías adecuadas? ¿Cuántos de ellos no optarían por hacerlo si ello fuese posible?
Por supuesto, no hablamos de blanco o negro, ni de decisiones radicales de ningún tipo, sino simplemente de abrir posibilidades creativas de cara a modelos de gestión urbana más eficientes – reducción del número de desplazamientos – y a esquemas de conciliación de la vida profesional/personal más adecuados o, al menos, más flexibles. En la mayor parte de los experimentos desarrollados, trabajadores en régimen de teletrabajo prolongado tienden a desarrollar actitudes de desarraigo, aislamiento y desmotivación. Sin embargo, los experimentos desarrollados en regímenes de voluntariedad y flexibilidad, en los que un trabajador puede optar por desarrollar determinadas partes de su trabajo desde su domicilio y, por tanto, permanecer en él un número variable de días por semana, parecen estar funcionando mucho mejor. Por supuesto, este tipo de acuerdos impiden a la empresa llegar a ciertos ahorros de coste que, en principio, parecían obvios: los temores y las crisis empiezan en el momento en que el trabajador se ve privado de ese espacio personal llamado mesa propia o despacho, pero el uso de este espacio en el caso de trabajadores sometidos a teletrabajo voluntario no puede, obviamente, resultar eficiente. Sin embargo, las ganancias en términos de productividad y satisfacción sí parecen incrementarse notablemente.
No todo es color de rosa. El trabajador en un régimen de este tipo tiene necesidades importantes de formación. Las herramientas tecnológicas disponibles hoy en día permiten que una persona pueda acceder a la misma información desde cualquier lugar y con amplia variedad de medios y dispositivos, pero las habilidades necesarias para ello no se desarrollan de manera espontánea. Igualmente, las experiencias anteriores indican que es preciso formar al trabajador para que mantenga una cierta disciplina en sus metodologías: cuando se teletrabaja algunos días a la semana, es importante levantarse a una hora decente y adoptar muchos de los hábitos que desarrollaríamos si estuviésemos en nuestro despacho: no necesariamente vestirnos formalmente, pero sí asearnos y cambiar el pijama o camisón por una indumentaria que nos permitiese, llegado el caso, encender una cámara web y mantener una videoconferencia sin sentirnos incómodos al respecto. O salir a la calle, una disciplina que todo teletrabajador habitual sabe que debe imponerse, aunque sea para ir a comprar el pan.
La combinación de tecnologías de información y comunicaciones existentes hoy en día permiten mucho más de lo que la sociedad y las empresas están desarrollando. En el próximo atasco matutino, piénselo. Tendrá tiempo para ello.
En un momento hablaban HP como un ejemplo en ese sentido (un amigo que estaba en HP Peru asi lo hacia), pero no se si ahora han dado marcha atras, si alguien puede confirmar….
Pues nada, que con blogs como este no queda la menor duda, de la importancia que estos pueden tener , y de la rica fuente de informacion que pueden significar, por eso trabajo en la creacion de uno dirijido especialmente al desarollo personal y al planteamiento de metas para lograr el mismo. Gracias por darnos cosas asi.
Cuanta razón tienes Enrique.
Yo en el trayecto de 20 Kilómetros a mi puesto de trabajo, tardo diariamente 45 minutos si voy a unas horas intempestivas (6:45) .Si me da por levantarme a una hora prudente para mi salud (7:15), llego al trabajo a las 9:15.
Prefiero tener 45 minutos de retención a dos horas de atasco. Y esto lo hacemos mucho, regalando tiempo o perdiéndolo en cafés :)
Mucho del trabajo administrativo, técnico se puede hacer remotamente hoy en día sin problemas.
Yo creo que el problema de todo esto estriba en la Dirección de las empresas. El conceder este tipo de licencias, crea malestar entre los compañeros, que generalmente no lo entienden. Creo que los jefes, por evitar problemas e idas y venidas a la sala de reuniones, pidiendo lo mismo que «ese», evitan este tipo de concesiones.
Si ya tiene poco éxito en las empresas la intensiva del viernes, el teletrabajo por días o semanas no le termino de ver por aquí. Ojalá me equivoque.Sólo lo conozco una empresa americana en España que lo hace y se ve que les funciona(CISCO).
La motivación para la eficiencia en el trabajo es fundamental. ¿Cuántos de nosotros seguramente hemos tenido un día malo y cuando salimos por la puerta pensamos: ! Estoy reventado y no he hecho nada!
Es esto lo que las empresas quieren?. No Productividad a cambio de presencia física?
El balón no está en el tejado de los trabajadores, Enrique.
Comparto bastantes vivencias con Alberto (casi mismo trayecto, mismos pensamientos…) Ciertamente, para dar solución a estas constantes matutinas, es cierto que veo el impedimento del miedo a la iniciativa o al «romper esquemas» por parte de las empresas (e incluyo la mía). Yo misma, podría hacer mi trabajo perfectamente desde casa (no cuando hay presentaciones etc, pero sí mientras se preparan todas las estragias y planes), con tal de tener el acceso a las herramientas y bases de datos que utilizamos. Estoy segura de que rendiría mucho más, y perdería menos tiempo. Aún así, también está nuestra vertiente social, que hace que muchas veces prefiramos el cara a cara y el compartir estancias con compañeros, y que creo es lo que hace muchas veces fracasar estas prácticas.
Y no creo que tengamos tampoco que acarrear a la empresa gran parte de la solución a este problema concreto. Si el transporte público mejorase mucho más (mayor frecuencia, número de comunicaciones, etc.), la gente no tiraría tanto de coche, y los atascos se verían muy reducidos. (Vamos, no creo que entonces me hiciera falta levantarme a las 7 para entrar a trabajar a las 9).
Enrique claro que el teletrabajo podria aumentar la productividad…
Pero realmente piensas que las personas en general en España están preparadas para teletrabajar?
Seguro que muchas si, pero la gran mayoría no…
Simplemente por eso que comentas, teletrabajar, requiere de una disciplina y habitos ferreos que creo los españoles no tenemos aún, teletrabajar requiere trabajar en base a una cultura de objetivos, la cual gracias a dios cada dia se va implantando más, pero de la que los trabajadores huyen como gato escaldado si es posible.
Y si a esto le unimos la «motivación» de la nueva generación, la cual es nula en muchos casos, no entienden el sentido de trabajar, no les motiva, no tienen ilusiones, nunca se sienten valorados, etc…
Mira ya la conversación tipica entre los empresarios, es la problematica de encontrar entre la nueva generación gente apta para desarrollarse en sus puestos, realmente algunas empresas no se expanden ni crecen más por autenticas tragedias con el personal, en esta tesitura crees que realmente es factible el teletrabajo? yo no..
Con el tiempo imagino que se pasará esta crisis de identidad entre empresas que no encuentran lo que buscan y trabajadores que no obtienen lo que quieren y eso unido a que volvamos a tener un clima de motivación adecuado, hará posible que cuestiones como el trabajo por objetivos puro y duro que premie a los que mas trabajan y se esfuerzan y deje en duda a los que se tocan la nariz, realizando un reparto justo de sueldos y el teletrabajo sean posibles..
Ya se que mi comentario va a levantar alguna que otra respuesta enervada :) pero asi están las cosas..
Estoy completamente de acuerdo con el último post de «Juan Ignacio Acosta», en España las cosas son muy diferentes, la mentalidad de la gente en cuanto al trabajo es pasar el día «como mejor se pueda», si no, ahí están las estadísticas que dicen que en España el índice de emprendedores es muy bajo en comparación a otros países. Todavía queda mucho que cambiar aquí.
Claro está que no todo es blanco o negro, este modelo de trabajo podría funcionar en casos donde se tiene referencias que el trabajador cumplirá su parte, y una empresa conoce o «debe» conocer a sus trabajadores.
Si el problema del tráfico y la asistencia al centro de trabajo es un problema tan grande, simplemente, deberíamos de cambiar de estilo de vida. Es así de fácil y difícil.
Yo tardo 3 minutos en llegar a mi oficina. 3. Y por eso vivo en una población pequeña en el sur.
Lo que de verdad debería permitir la tecnología es poder realizar labores productivas lejos de la gran jungla del asfalto.
Hace falta sacrifico y mucha constancia, pero merece la pena.
Y por supuesto fomentar el auto empleo para que la dependencia las empresas.
¿Piensas que eres bueno en lo que hace y nadie te valora?. Pues conviértete en un profesional libre y vende tus servicios.
El problema es que muchos jefes y cargos intermedios se quedarían sin trabajo, si no tienen nadie a quien vigilar, ¿Como justifican su puesto de trabajo?
En efecto, el teletrabajo supone una alternativa eficiente a estos desajustes organizativos, urbanísticos y ecológicos. Jack Nilles, pionero de esta nueva forma de trabajar en red, anunció hace más de 30 años la necesidad de que en la sociedad informacional debiera ser el trabajo el que transitara por las redes virtuales y no los trabajadores por las redes de carreteras. No parece que a estas alturas a muchas empresas todavía, ni a las Administraciones Públicas les haya interesado aprender la lección. En España, aunque se están desarrollando algunas experiencias de teletrabajo seguimos estando a la cola de Europa.
La Sociedad de la Información y el Conocimiento exige nuevos modelos de organización del trabajo, de comunicación, de movilidad, de ordenamiento urbano y participación ciudadana y debe incorporar las ventajas de las TIC para integrar y mejorar los sistemas de movilidad atenuando sus impactos negativos en la estructura social y el medioambiente. Pero para eso es necesario invertir más y mejor en tecnología y conocimiento en el marco de una nueva cultura de la sosteniblidad.
Precisamente eso es lo que vamos a abordar en las jornadas sobr «Teletrabajo, novilidad y desarrollo sostenible» que hemos orgnizado para el 13 de diciembre en Madrid.
Saludos // rafa casado
Seria interesante ver las capacidades del individuo en el ambiente hogareño.
Pero creo que (lamentablemente) somos seres de habito. Y es por esto, que soy esceptico.
Por otro lado, ante una mayor produccion sin un desmedro en el estilo de vida en la casa, seria imposible. No existiria ese «desenchufarse» cuando se llega a casa. Y seriamos mas esclavos de lo que somos.
http://art-of-chileans.blogspot.com
Enrique
No es una opinión, es una experiencia. De la gente que conozco que ha realizado el teletrabajo la mayoria baja bastante su rendimiento.
Luego por otro lado, muchos puestos requieren de reuniones que surgen de repente, con lo cual, no pueden venir
Yo a dia de hoy, para muchos puestos lo veo todavia algo que no se puede utilizar
Hola Enrique.
Recuerdo que cuando me inicié teletrabajando, uno de mis mayores problemas era evitar distracciones. Al estar en casa y no existir ninguna presión, podía pasar horas navegando por Internet, conversar por MSN con amigos, ver peliculas, escuchar música, etc. Y cuando terminaba el día, me daba cuenta que todo lo que tenía que hacer simplemente quedaba inconcluso.
Como bien se mencionó, la disciplina en estos casos es vital.
Teletrabajar es una de las cosas más divertidas que hay. Más aún si lo haces usando Internet y has logrado identificar aquello que disfrutas hacer. Y esto es mas fácil cada día teniendo en cuenta la gran cantidad de oportunidades que van apareciendo.
Desde mi humilde opinión, el teletrabajo no creo que aumente la productividad en general porque al estar en tu propia casa, sin control, hay mucho en donde despistarse con un ordenador delante. Yo soy estudiante de informática y cuando tengo que trabajar con el ordenador pierdo mucho tiempo en otras cosas como el messenger, la web, música, buscar pelis o música para descargar,… y me supone un problema que intento evitar y algunas veces no lo consigo. Le pasa a muchos amigos de clases. Es como algo compulsivo. Es cierto que no hay motivación entre los jóvenes, no valoramos el trabajo, porque creo que tampoco se valora mucho lo que hacemos y tampoco nos preparan para hacerlo bien. Hay profesores que te motivan para que estudies su asignatura(muy pocos) y los hay que parece que están asqueados de tener que explicar la materia. La primera cosa que se me vino a la cabeza al hablar del teletrabajo, es que se habren fronteras( => trabajadores buenos y baratos, como lo que pasa con el téxtil). También va a ser muy importante los temas relativos a la seguridad.
La oportunidad y racionalidad del teletrabajo no cabe ponerlas en duda, puesto que la practica totalidad del personal administrativo, a buen seguro, reconoceria que la mayor parte de los cometidos que realiza ordinariamente bien podria cumplirlos desde el ordenador sito en su propio domicilio, e incluso mantener una comunicacion igual o mas fluida con su supervisor y colegas merced a la telecomunicacion internetera, tanto oral como escrita.
Si los cometidos a desempeñar estan bien claros, solo queda comprobar si son realizados o no, quien cumpla permanecerá.
Para lo que cuenta, gran parte del personal administrativo bien podria residir en la otra punta del planeta y resultar igual o mas eficiente. Un ejemplo claro lo tenemos en los telecentros de asistencia e informacion por telefono que pueden y suelen ser subcontratados.
Seguramente, el condicionamiento recibido durante el perido escolar, e incluso universitario, perjudica la adaptacion al teletrabajo, pero ello no quita para que existan personas para quienes resulte del todo natural el prestar sus servicios mediante la red.
El punto de paranoia relativo a la confidenciaildad de los datos manejados en regimen de teletrabajo puede verse aminorado si se cae en la cuenta de que, por lo menos hoy en dia, son inmensas las facilidades para mover informacion desde un lugar a cualquiera a otro, tanto si el personal trabaja en un centro al que se accede tras pasar por mil filtros como si la mesa de trabajo estuviera la propia acera de la calle.
Pero eso no es todo, las posibilidades de la virtualizacion facultan incluso el manejo a mucha distancia de maquinas-herramientas, como pudiera ser la conducion de un bus urbano desde el salon de tu casa, si mediante los correspondientes sensores de audio y video se recibe de modo adecuado la informacion necesaria.
Sencillamente ocurrirá, si la eficiencia es la misma, o superior, y disminuyen los costes, el teletrabajo gananrá cada vez mas y mas terreno, comenzando por el principio de todo, o sea el sistema educativo, deviendo éste cada vez menos dependiente de la reunion y reclusion diaria en centros donde todo el mundo es sometido a identico regimen.
Quizas la introduccion del pizarrin electronico, el tablet-pc ubicuo y barato, conduzca hacia una enseñanza desvinculada de la regimentacion para todos y la aparicion de profesores o enseñantes que ya no personifican el objetivo, los metodos, ni lai autoridad para definir, indicar y prescribir el exito o el fracaso, sino que son invocados y recompensados en funcion de su eficacia para proveer e impartir la informacion e instruccion que requiera quien quiera que se la demande.
Brrrrrrr, me ha costado tanto redactar mi torpe opinion que cuando le di al boton de publicar no cai en la cuenta de que no habia puesto mis datos. Soy el Anonimous de «La oportunidad y racionalidad del teletrabajo»
El problema es que muchos jefes y cargos intermedios se quedarían sin trabajo, si no tienen nadie a quien vigilar, ¿Como justifican su puesto de trabajo?
nunca mejor dicho , en muchos trabajos prefieren que estes 5 horas delante de el ordenador aunque no trabajes porque no haya trabajo antes de que te marche 5 minutos antes o aunque siempre llegues a la hora de entrada cuando una mañana llegas 20 minutos tarde debes dar explicaciones de hasta cuantas personas estaban en el autobus . Por cierto , para que la gente trabaje desde casa en muchas empresas ni de coña gastan pasta en equipos o medios , ni de coña
En mi blog escribi varios post en esa dirección. Para aquellos que poseemos una discapacidad que no nos permite trasladarnos hasta las oficinas, podriamos realizar nuestro trabajo desde casa, no por comodidad, sino porque no tenemos otra alternativa y más cuando se trata de tareas de IT. Soy profesional de IT y hoy no hay una cultura en las empresas para permitir y administrar recursos humanos profesionales de IT en esta modalidad. Te agradecería cualquier tipo de aporte que realices desde tu blog para fomentar el telework en IT.
Gracias.
Bueno, lo del teletrabajo no es ninguna tonteria, sin embargo, disiento en los detalles.
Yo no veo el teletrabajo como una alternativa hoy en día precisamente por:
a) La escasez de espacio en los hogares
b) Las distracciones
Ambas están intimamente relacionadas, ya que las distracciones en el hogar provienen de que no hay un espacio de trabajo diferenciado.
Sin embargo existe ya la cultura de que cuando «sales a trabajar» estás ocupado y no se te debe molestar, aparte del coste que supone hacerte volver a casa por cualquier nimiedad.
En el teletrabajo estas barreras desaparecen.
Mi solución a los problemas anteriores sería crear «espacios de trabajo» proximos a los empleados de la empresa ¿el problema? el coste para las PyMEs.
Por otro lado una solución más rápida y tecnológica sería mantener bases de datos gubernamentales, aprovechando los sistemas de posicionamiento, que previeran posibles puntos conflictivos y ofrecieran rutas alternativas, en función de accidentes, obras, semaforos, etc. Al fin y al cabo un atasco es un exceso de coches en la misma ruta…
Dubitator: es cierto lo que comentas de los call-centers, pero recuerda que en el 98% o mas los call-centers estan solo deslocalizados, que no «tele-trabajados» esos call centers son salas de trabajo con sus supervisores igualmente…
He puesto en mi blog un articulo en el que me extiendo de la idea de edans con algunas reflexiones, me parece un tema muy interesante para debatir.
Mi mujer y yo teletrabajamos sin problemas. Ella además comparte silla y mesa con otras cinco personas, ya que se desplaza sólo una mañana a la semana al trabajo. En cuanto a la disciplina y distracciones, al principio cuesta, pero para solucionar eso somos adultos.En cuanto a la productividad, en nuestros casos es mucho mayor. En cuanto a la sociabilidad, lo normal es que te apetezca ver a tus amigos, y no a compañeros de trabajo con los que puedes tener la suerte o no de compartir afinidades.Para terminar repito el consejo de un post anterior:Si crees que tienes posibilidades, conviértete en teletrabajador autónomo.
A mi lo que se me ocurre pensar cuando voy en un atasco, es cómo se podrían descongestionar un tráfico. Miro el flujo de coches sobre una autopista y lo comparo con el flujo de un líquido por un tubo, donde a medida que el flujo es más rápido, el líquido es menos denso (mayor distancia entre coches). Se me ocurre pensar como hacer que el líquido mantenga la densidad para la misma velocidad. Pienso en algún sistema que permitiese circular a los coches a una velocidad de 20 km/h, a muy corta distancia del coche anterior y el siguiente. Imagino sistemas de comunicaciones por radio entre coches, donde unos se «atan» a otros llegando a formar una especie de tren. Sigo imaginando e imagino un vehiculo que no va por la carretera, sino que funciona con un gas mucho menos pesado que el aire y que hace elevarlo sobre el suelo, un sistema de trafico que es independiente del sistemma peatonal, donde no hay accidentes, y los trayectos entre dos puntos son muchisimo más rápidos, porque siempre se hacen en línea recta y sin parar, además de las enormes ventajas que tiene el conductor de poder moverse en las 3 dimensiones. Los vehiculos mas lentos vuelan a menor altura, el control de trafico se hace mediante gps, las rutas se definen al comiezo del trallecto y el ordenador se encarga de conducir. Los vehiculos funcionan mediante energía solar y electrica, … Sigo pensando y por fin parece que por fin estoy empezando a salir del atasco…
Estube en tu conferencia el Jueves pasado en Barcelona. Te felicito por la motivación que transmitias en tu exposición.
Respecto al teletrabajo, se habla de ello ya hace muchos años y no despega. Pienso que algunos inconvenientes importantes tendrá. Personalmente creo que hay una opción anterior al teletrabajo que es la de NO concentrar todo el trabajo de calidad en Madrid. En Cuenca o en Segovia seguro que los problemas de desplazarse son mucho menores. Lógicamente el problema no es exclusivo de Madrid sino de todas la macro ciudades fomentadas política y artificialmente. Son unos sistemas no sostenibles.
Alguno se informa antes de salir????, para los de Madrid os recomiendo la página www.madridmovilidad.es/camaras , en ella podemos ver realmente como esta el tráfico en la ciudad. Saludos a todos.