La evolución de la industria de la música frente a la tecnología, analizada en este artículo de PC Actual, «Cambios en la industria musical«, que está ya en los quioscos. Como posiblemente ya hayáis visto los que seguís habitualmente artículos míos, mi colaboración con PC Actual es una de las que más cuido, por razones múltiples: me proporciona habitualmente el espacio que yo quiera, me da fechas límite desahogadas gracias al formato mensual (aunque al final acabe haciéndolos el último día del plazo… perdón, Javier :-), no me toquetea los textos y me gusta mucho como quedan los artículos una vez maquetados y con los destacados hechos. En este caso, Javier me pidió un tema sobre el que llevo estudiando mucho tiempo y que considero muy interesante para entender como una industria puede o debe intentar afrontar los procesos de disrupción (en este caso, como NO debe hacerse), y qué lecciones pueden derivarse de ello. El análisis va, por supuesto, en mi línea habitual, con lo cual para los habituales, pocas novedades aparte de la forma de estructurarlo. Ya me contaréis que os parece.
El enlace no esta disponible a las 14:01
No me funciona el enlace…
Porque no puedo acceder al enlace, me pone «pagina no encontrada», es solo a mi, o le pasa mas gente.
Quizás ese sea el mensaje de Enrique: la industria musical se ha dado cuenta de que con su estrategia tradicional solo consiguen un «404 Error – Page not found» y tienen que cambiarla… ;-)
Perdón, culpa mía. Por escribir de memoria las direcciones de mi ftp… Ya está arreglado.
Decian el otro dia. «Ya todo esta dicho, pero hay que repetirlo porque no escuchan».
Muy interesante el comentario. Si alguien quiere probar una alternativa curiosa que vaya a http://www.jamendo.com/es y verá las posibilidades que ofrece internet a la música.
Pues eso, que totalmente de acuerdo, por cierto en la web de Zona Musical http://zm.nu en la seccion La Tronera, encontrareis una suculenta cantidad de articulos al respecto con una serie de teorias muy interesantes.
Ja, ja, ja, arriba la musica.
SAludos a todos
Mi comentario está en mi blog en el link del Homepage mas abajo. Muy importante tu artículo Enrique.
He leído el artículo y creo que, a fin de cuentas, lo que vienes a decir en él es que si algo se puede duplicar y distribuir gratis –que es lo que han propiciado las grabadoras de CDs y de DVDs e Internet, respectivamente–, no hay por qué pagar por esos servicios. Estoy totalmente de acuerdo; creo que sería una pérdida de dinero y energías. Pero creo que eso no nos da derecho a opinar, como tú haces, que la música debería ser gratis.
Te doy mis razones. La obra final (la obra intelectual) no se compone sólo de la distribución y el duplicado. Hay que pagar al productor musical de la grabación, a los ingenieros de sonido, hay que registrar las canciones para protegerlas ante un posible plagio, hay que distribuir la música por los nuevos medios –que ya sé que sale mucho más barato, pero hay que tenerlo también en cuenta– y hay que publicitarla. No se me ocurre más, pero creo que el coste total no es nada despreciable. Me parece loable que el compositor, así como los demás que han contribuido a realizar esa obra, quieran cobrar a quien quiera disfrutar de élla.
Que una obra sea casi exclusivamente intelectual, no es razón para que no se deba cobrar por ella.
¿De dónde debería, entonces, obtener sus ingresos el artista? ¿De hacer conciertos? ¿Y si no quiere hacer conciertos? ¿No tiene derecho? ¿A qué debe dedicarse el artista: a interpretar canciones o a componerlas? Ya sé que te pagan derechos de autor cada vez que en un concierto tocan una canción tuya, pero una miseria. Se seguirían forrando los de Operación Triunfo y demás productos de marketing haciendo de cantantes de karaoke profesionales. ¿Tú has visto cómo se llena un concierto de los Back Street Boys? Creo que los verdaderos artistas segurían siendo los que menos ganasen –con algunas excepciones, claro–.