Mi columna de esta semana habla sobre «El efecto rebote«, y sobre como afecta a aquellos que no saben reaccionar en el nuevo escenario hiperconectado, sea en tecnología, en consultoría, en política o en los medios. Pasamos de un mundo en donde los medios o los políticos nos daban de comer con una cucharita y nosotros simplemente consumíamos, votábamos y callábamos, a otro en el que podemos ser muchas cosas, pero no callados o indefensos. Las consecuencias de una sociedad participativa en todos sus extremos.
Vaya por dios. Una de las cosas que me engancharon de tu blog fue tu aparente neutralidad política, en favor del sentido común. Pero veo que al final la susodicha política lo llena todo de mierda.
Obviemos que el señor Losantos es un individuo que bajo la bandera de la libertad de expresión aprovecha para insultar a diestro y siniestro y a crear un clima de preguerra civil. Eso es opinable. Pero el argumento de la columna no se sostiene: a nadie le va a gustar más o menos el señor Losantos porque en Internet se hable de su presunta censura. Los que están (estais) con él seguireis estando, y los que no, seguiremos sin soportarle. Aunque el tema se trate en 100.000 blogs.
Supongo que no tendrá mucha importancia para ti, pero has perdido un lector y un enlace en una web. Es una cuestión de principios.
«No estoy de acuerdo con lo que piensas, pero defenderé con mi vida tu derecho a pensar así» (más o menos) Voltaire.
La misma libertad de expresión para Jiménez Losantos y para Santiago Carrillo. Yo defiendo ambas, porque eso es la base de la democracia
Serlio… tengo tendencias políticas como las tiene casi todo el mundo, y nunca las he ocultado. Si me leías por mis tendencias políticas y te he defraudado, supongo que harás bien en dejarme de leer, aunque lo sentiré porque valoro tus comentarios por su frecuencia y su contenido.
Otra cosa es que yo quiera utilizar o habitualmente utilice mis tendencias políticas para mis argumentos. Ahí mi respuesta es decididamente no, intento ser todo lo académicamente neutral y menos tendencioso que pueda. Siempre. Como académico, mi credibilidad es lo único que tengo. Como norma de fe académica y casi como norma de salud mental, evito toda referencia extra-académica en mis análisis. Y en el caso de esta columna, FJL es un ejemplo que espero adecuadamente contextualizado.
No tengo el menor interés en escribir una columna pro-FJL ni anti-FJL, sólo en ponerlo como ejemplo de que en la sociedad actual, y en gran medida gracias a las nuevas tecnologías, ya no puedes hacer cosas que hacías en la sociedad de antes. Secuestrar un periódico, cerrar una cadena o censurar a un locutor son cosas que ya empiezan a tener muy poco sentido y sí mucho efecto rebote, como titula la columna…
Serlio deja claro en su comentario que, aunque valoraba la supuesta neutralidad política de Enrique, él no lo es. De hecho censura todo pensamiento e idea si viene de alguien que no comulga con su credo político: «Supongo que no tendrá mucha importancia para ti, pero has perdido un lector y un enlace en una web. Es una cuestión de principios.»
Desgraciadamente hay muchos casos como éstos en la blogosfera (y fuera de ella).
Libertad digital es todo digital y poco libertad.
Ya he dicho aquí que me molesta profundamente que alguien sectario haya podido registrar libertad como paraguas para decir sandeces. Yo tengo todo el derecho a opinar como los demás tienen el derecho a opinar sobre lo que yo opino. Reconozco, a la vez, que es difícil ver a personas que renuncien a algo por cuestiones de principios. Una de las cosas más preciadas de la libertad occidental (conquistada a pesar de los FJS) es que yo decido con quien quiero comunicarme y con quien relacionarme. Desconectar de los blogs y de otras fuentes de información es un acto tan libre. No necesita justificación.
Pablo no tiene razón en sospechar de Serlio. Yo soy neutral en política, completamente neutral y se debe al ejercicio de mi libertad. Yo no me puedo hacer responsable o participe de las sandeces de los demás. El PP ahora y el PSOE desde siempre tienen de partidos (sectas de sectas) todo y están anclados en el fracaso de las ideologías sin poder ofrecer nada más que tensiones inútiles.
Para que te hagas una idea, estimado Pablo, yo conozco por encima las opiniones de Ezquerra Republicana sólo porque me afectan y sólo porque alguien ha decidido que me afecten. Leer sus panfletos o sus blogs o lo que te tengan, pues como que no.
Por exagerado que parezca la actitud de Serlio, que lo puede ser, yo estoy tan cansado y harto como él. Lo que motiva mi hartura son otras consideraciones: yo no soporto el momento que vivimos en ¿España? donde los socialistas promocionan con sus críticas a FJS para que el pensamiento liberal aparezca como un esperpento radical y clerical.
Porque, desgraciadamente, la izquierda, en sus ultimas políticas ha conseguido aunar a la derecha alrededor de sectarios y curas. Lo han hecho tan bien que pasarán años antes de que los conservadores pierdan esos complejos con la izquierda. Siento la marcha de Serlio, creo que Enrique no tiene nada que ver con FJS y espero que lo que no es izquierda reaccione y no deje a FJS ser el creador de opiniones y del ruido decimonónico.
Por cierto, espero que por decir esto no me hagan masón por que en la TMT, FJS descubrió a 8 en el gobierno y a dos logias durmientes en el PP.
JFT, dices que «Desconectar de los blogs y de otras fuentes de información es un acto tan libre. No necesita justificación». Amén. El problema es que Serlio se justifica. Y su justificación parece ser que el valor de un trabajo, de una opinión depende de la posición política de su autor (o de lo que él entiende que el autor piensa). Y a eso le llama «una cuestión de principios» (Principio según el DRAE: Norma o idea fundamental que rige el pensamiento o la conducta.). Me parece un disparate.
Por supuesto que no te leo por tus creencias políticas, que es algo que por supuesto respeto. Las tuyas y las de todos.
Vamos a ver, así es como yo veo las cosas: vivimos en un momento en el que todos los poderes del Estado, principalmente partidos políticos y medios de comunicación (perdón, se me olvida la Iglesia), se afanan en conseguir/mantener el poder político/económico pasando por encima de un buen puñado de normas éticas. Esto es aplicable igual para FJL, para el PSOE, para el Grupo Prisa, para los partidos nacionalistas, para el PP, para El Mundo, etc, vamos, para cualquiera que actualmente detente un cierto poder. Y al otro lado estamos los ciudadanos de a pie, como se dice por ahí. A nosotros ni nos va ni nos viene toda esa lucha de poder. Nos quieren vender que lo hacen por nuestro interés, pero hay que ser Caperucita Roja para creérselo. Y me parece muy triste la cantidad de Caperucitas que hay en España, que terminan borrachos de las frases megalomaniacas de esos poderosos y terminan apoyando a uno o a otro como quien apoya a su equipo de fútbol: con el corazón en vez de con la cabeza.
A FJL nadie le ha quitado la palabra. ¿Que tiene presiones? ¿Es que él no presiona al PSOE? ¿Por qué unos poderes tienen más derecho a presionar que otros? Ah, claro, el Estado tiene más poder que los medios. Pero los medios echaron a Felipe González… Ah, no, echó el sólo por corrupto… y así argumentando hasta la náusea. No, hombre, no, ese no debería ser nuestro punto de vista. FJL está metido en una guerra de poderes a un nivel que no nos concierne. Nuestro punto de vista debería ser «dejad de daros patadas en las espinillas (por no decir otra cosa) y sed más constructivos, a ver si conseguís arreglar los problemas en vez de llenarlo todo de mierda». Ese es mi interés como ciudadano.
Cuando veo que alguien toma partido por una de las partes en esta guerra, sólo puedo pensar dos cosas: 1)Que es un Caperucita Roja. 2)Que tiene algún interés (real) en esa guerra. Te aseguro, Enrique, que no te tengo por Caperucita.
Me imagino que opinarás que no has tomado partido. ¿De verdad piensas que el «efecto rebote» aplicado al tema FJL va a hacer cambiar la opinión de una sola persona al respecto? ¿Tú sabes quién lee los blogs que hablan sobre ello? Estoy absolutamente convencido de que todos ellos leen también los periódicos además de los blogs, y, o bien ya tomaron partido y leer esos blogs solo les sirve para radicalizarse más o, bien, como yo, sienten una arcada y cambian de página. Creo que eres lo suficientemente inteligente como para saber que no hay efecto rebote ahí, o si lo hay es absolutamente mínimo. Me sorprendería lo contrario. Eso es lo que me hace pensar que has tomado partido.
Y me cuesta muchísimo apoyar de alguna manera a quien ha tomado partido en la guerra, sea el bando que sea. Yo sólo apoyo a los del sentido común, lo siento. Son mis principios.
P.D.: Pablo, brillante comentario. Sólo se te olvida un pequeño detalle: no tienes ni p. idea de cuál es mi credo político. Desgraciadamente, de gente que critica los pensamientos de los demás sin conocerlos hay muchos casos en la blogosfera (y fuera de ella).
P.D.2: A pesar de lo que puede parecer, mi comentario, salvo las postdatas, está completamente escrito antes de haber leido el de JFT. Me alegra que haya más gente con esta idea de la vida.
Joder Serlio, no hace falta ser un lince para intuir los derroteros por los que discurre tu credo político. Enrique escribe un artículo en el que, segun tu, apoya a FJL ¿y tu reacción es retirarte como lector y referenciador del blog? Por favor, creo que mi sobrina de 5 años tiene reacciones parecidas cuando no le dejo ver la peli que ella quiere.
Yo no veo la defensa de FJL en el articulo de Enrique por ningun lado y, aunque la hiciera, eso no invalida la calidad del resto de contenido del blog.
Por si hay dudas, el susodicho FJL me parece lo peor que hay en el panorama periodístico español. Creo que tiene un poco de charlatán de ferie, un bastante de incendiario, y practicamente nada de periodista.
Pablo: entre el blanco y el negro están todos los colores. No nos niegues la opinión de que dos colores son pocos y que estamos cansados de tensiones esteriles. La libertad es algo que posees por ser persona y no algo que nos da la COPE todas las mañanas. Ejemplo: ¿en que momento Antonio Herrero dejo de ser profesional del periodismo y empezo a ser político del PP?.
Insisto en que a Serlio no le has descubierto ni por el forro su posición política. Hay un batallón de cansados y hartos de que roben lo más sagrado de nuestra civilización para demonizar al resto de la humanidad. Hace no menos de 80 años para la Iglesia ser liberal era pecado mortal. Ahora ser liberal es tener la bragueta bajada y un deseo irreprimible por que la economía de mercado me beneficie (construcción y turismo). Cualquier persona con un mínimo de cerebro no sabe si vivimos en Venezuela o en Argentina.
Serlio, eres muy libre de censurar a alguien porque no compartes algunas de sus ideas, pero no me lo vendas como sentido común. Si para ti despreciar el todo por una parte te parece lo sensato y un principio en tu vida creo que te cerrarás muchas puertas: gente, ideas, conocimiento…
Puedes cambiar lo de «con su credo político» por «con su manera de pensar».
Por cierto, a mí me preocupa que haya mucha gente con una idea de la vida como la tuya.
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JFT, precísamente es Serlio el que niega que se pueda pensar de otra manera. O estás conmigo o estás contra mí, parece decir. Él es el que pinta blanco y negro (o negro y negro). ¿Acaso no tenemos todos amigos con los que coincidimos y disentimos al mismo tiempo?
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Un saludo para todos sin acritud (y no va con segundas ;)).
Como veo que al final todo se trata de si eres del PSOE o del PP, voy a decir para quién ha sido mi voto desde que tengo derecho a ello: en blanco. ¿Qué periódicos leo? El País, El Mundo y Libertad Digital, en los tres casos con una pinza en la nariz, pero es que no hay muchas más maneras de enterarse de qué narices pasa en España y en el mundo. Y no leo más porque no me da tiempo: me paso más de 12 horas al día metido en una oficina tratando de sacar adelante lo que alguien me confía. En el poco tiempo de ocio que tengo me gusta no encontrarme con la refriega, sencillamente me da asco. Ahora la etiqueta para mi «credo político» la poneis vosotros, yo no tengo ni idea de cuál es.
Y voy a explicarme de otra manera, porque evidentemente me he explicado mal. No hay nada de política en todo esto. Me da igual que Enrique hable de FJL o de Polanco, eso es lo de menos. Puede que Enrique recuerde que en otras ocasiones que ha criticado a ciertos/as ministro/as por no tener ni idea de lo que hablan en temas de Internet, he sido el primero en darle la razón. Pero eso es distinto: hablaba de política. Me encanta hablar de política. Pero es que no hay política en el acoso del Gobierno a Losantos, es simplemente un quítame allá esos millones, igual que no la hay en el acoso de Losantos al Gobierno. Es una lucha de poder en una realidad paralela a la de nuestra sociedad. O al menos a la mía.
Sencillamente no esperaba encontrarme con el engrudo diario que nos hacen tragar en un sitio que normalmente leo con muchísimo agrado. Si eso es de tener 5 años, me parece bien, no me ofendo. Mira, ya somos 3, JFT, la sobrina de Pablo y yo. ¿Alguien más se apunta a vivir un poco más tranquilos?
Para terminar, Enrique, me gustaría que entendieses que si he escrito todo esto es porque te respeto y porque creo que, sencillamente, te has equivocado (es mi opinión). En el caso de otros sitios me limito a no leerlos, no me va andar poniendo comentarios en medio Internet, menudo rollo. Pero este blog es para mí otra cosa, y sé que te gusta saber lo que pasa por la cabeza de tus lectores. Gracias por tu respetuosa respuesta, estoy de acuerdo en que «Secuestrar un periódico, cerrar una cadena o censurar a un locutor son cosas que ya empiezan a tener muy poco sentido» pero el tema es que eso no ha sucedido, no te dejes engañar.
Pablo, no te entiendo. ¿A quién he censurado yo? ¿No leer a un autor es censurarle? Todos los días descubro sitios a los que echo un vistazo, decido que no me gustan y no vuelvo a visitarlos. Y lo mismo hace todo el mundo. ¿Es eso censura?. ¿Es eso decir «o estás conmigo o estás contra mí»?. Lamentablemente poner un enlace en una web es booleano, o se pone o no se pone, pero de eso no tengo la culpa, no puedo ponerlo con matices, qué le vamos a hacer (por cierto, ahí sí que hay campo para la web 2.0).
¡Blanco y negro! ¡Pero si precisamente lo que quiero decir es que hay muchas más cosas que blanco y negro! Que nos olvidemos del seguidismo, que no caigamos en sus cantos de sirena. Que cada uno piense como quiera y no como le digan. Que no nos convirtamos todos en soldados de dos o tres ejércitos. En fin, no sé qué decirte, si tú crees que soy intransigente pues nada, créelo. De verdad creo que te equivocas, pero no sé cómo demostrarlo.
Enrique, has metido la pata con este artículo, pero hasta el fondo.
Tu mismo hablas del efecto rebote, veremos si tu artículo también tiene efecto rebote y te termina salpicando.
Lo quieras admitirlo o no, has tomado partido solo hablando de una parte del efecto rebote, casualmente la de tu jefe en el periodico. Aqui tienes un ejemplo de la otra parte del efecto que has ocultado por omisión:
http://www.royo-villanova.net/firmas
Hay mucha más gente en la misma línea que estos firmantes con blogs e iniciativas similares, con razón o no, pero está claro que no hay un solo efecto rebote en una sola dirección.
No entiendo por qué te hacía falta meterte en camisa de oncevaras. Me parecía extraño que publicases en Libertad Digital, solo mira el editorial de hoy de Libertad Digital:
«Zapatero, hombre sin principios donde los haya»
Esto no lo ha dicho nunca el ABC, ni la Razon, que tienen su línea clara, pero nunca insultan ni desprecian. Esto solo te lo encuentras en Libertad Digital y tu Enrique, estás dentro de esto.
Que te aproveche.
Erlamio
De verdad creo que esto se está yendo de madre…
1Ã?º El articulo era sobre el efecto rebote, lo se FJL era sólo un ejemplo. A lo mejor mal elegido, pero es que es el que ha disparado la reflexión.
2Ã?º Entiendo que todo el mundo tendrá derecho a leer lo que le de la gana y publicar donde le parezca, digo yo. Y a tener las ideas políticas que le parezcan.
Por favor, que haya paz, que me rechina mucho ver tanta agresividad en este blog.
Y por cierto, me alegro de que Serlio siga por aguí.
Efectivamente, lo de liarse la manta a la cabeza y lanzarse a debatir eludiendo la cuestión que planteaba Enrique en su columna, ¡pues mire usted, qué quiere que le diga! ;)
Hola
Dos cosas, una es que por lo que conozco de Enrique Dans, es una persona 100% idependiente de todo, es decir empresas y politicos (osea dinero). En este caso creo que el ejemplo que ha puesto es para explicar otra cosa, y ha pasado como a los tontos de los pueblos que les enseñabas la luna señalando con el dedo y se quedaban mirando al dedo.
Y la otra, este es un claro ejemplo como no se debe introducir temas de politica, futbol o religión entre varias personas, siempre termina todo mal.
Pablo: La única posición de acritud es la que supone el pensamiento político de alguién porque no esta de acuerdo con la manera de hacer las cosas de otras personas a las que tú apoyas sin fisuras.
Hoy he defendido una libertad en peligro ante el PSOE. NO la libertad de un puñado de sectarios a hacer lo que quieran en sus centros de enseñanza, sino a que el Estado no no diga que tenemos que pensar y creer. He defendido la necesidad de tener libertad de oportunidades: que no nos obliguen a emigrar porque todo lo que aprendan mis hijos es a usar el SMS de su teléfono ;). Pero eso sin tener nada que ver con esos personajillos que enfrente tiene sólo rojos y masones. Hay algo que me consuela. Si después de más de 100 años la derrochona ha aprendido que hay derechos y libertades, ya hemos ganado algo. Me siento muy orgulloso de ello. Decía un buen liberal que el hilo dorado de la lucha por la libertad que recorre la Historia se ha roto varias veces en cada generación. Hoy la libertad esta amenazada por los liberticidas que se disfrazan de una especie de liberal de bragueta y por esos que se creen por encima de todos aún posesos por esa liberación final del genero humano, el progresismo decimonónico.
Para el que pide paz en los blogs: en el cementerio tienes de sobra para un par de meses. Cuando vuelvas a estar entre los vivos, dejanos eso mismo: vivir.
Para calmar por un breve instante la tensión política, os dejo aquí un ejemplo de efecto rebote que he leído en Euskal Graffiti:
«Desde CNews, y a través de Slashdot, leo que una mujer canadiense, madre de tres hijos, ha sido demandada por las declaraciones que hacía en su blog sobre la actividad de una constructora en su barrio. La constructora Activa Holdings Inc. consideró que Louisette Lanteigne había incurrido con sus artículos en difamación, con la intención de dañar la imágen de la empresa, y ha decidido demandar a Louisette por dos millones dólares.»
Todo el artículo en: http://www.euskalgraffiti.com/index.php/archives/2005/11/13/el-poder-de-los-blogs-protesta/
Y yo, aunque tampoco comparta la opinión de FJL, seguiré leyendo este blog. Porque no lo leo por política, sino por lo demás, «desde videojuegos hasta telefonía» que decían en una entrevista.
GUAU!!
me uno al coro de los decepcionados.
poner a la misma altura el caso de un ex-empleado de axpe con el de jiménez losantos, que ya tiene una radio y no le hace falta el apoyo de blog alguno para difundir su «mensaje» (y ya no quiero ni entrar en el contenido ni el tono del mismo porque entonces me congestiono) me parece un volatín de trapecista que pueden dar con tus huesos en el suelo enrique: ni intelectualmente ni moralmente se sostiene presentarnos a losantos como una víctima de nada. ¡qué morro!
yo te seguiré leyendo, pero para mí (y para muchos) estarás siempre asociado a él… y no es nada bueno.
cuando me enteré que colaborabas en «esa web que se llama libertad digital» (uf) me quedé con ganas de preguntarte si no tenías cargo de conciencia… ahora ya me has contestado
a ver si el efecto rebote lo vas a sufrir tú. de momento tienes efecto feed-back de lo lindo… es lo que tiene los blogs
Me cachis… Pocas veces dejo pasar más de dos días sin visitar este blog. Qué rabia me da haber llegado a este hilo cuando ya parece agotado. Aún así, no puedo sustraerme a la tentación de soltar la mía: como ejemplo del «efecto rebote», que puede producirse (y que Internet quizá contribuya a intensificar), cuando el poderoso empeña toda su fuerza en coaccionar al débil, el caso de Don Jesús (de) Polanco contra Federico Jiménez Losantos es de manual básico: una evidencia, una obviedad, un buen ejemplo que se desnuda, se sube a la mesa y empieza a bailar cantando el estribillo de aquella famosa canción que decía «ya ha llegado el buen ejemplo». Se puede discutir el optimismo con que Enrique Dans pondera el factor blog y, en general, el potencial que atribuye a las nuevas tecnologías como igualadoras o compensadoras de fuerzas. Se le puede incluso llamar ingenuo. ¡Pero cómo se puede discutir seriamente la oportunidad del ejemplo! Es casi imposible encontrar un caso más ajustado a la idea, mejor encajado. El desequilibrio de fuerzas es manifiesto: Polanco/GrupoPrisa (yo-soy-el-pastor-España-es-mi-rebaño)/PSOE/Gobierno (¡toma castaña!)/Grupo Z/Grupo Godó (¡que no decaiga!)/todos-los-nacionalistas-todos-oiga-que-no-falta-ninguno vs. Losantos-COPE-Conferencia Episcopal-y-unos-del-PP-que-pasaban-por-allí-pobrecitos-en-el-País-los-van-a-destrozar. Lo de David contra Goliat era un empate técnico comparado con esto. Puede no gustar Losantos, se le puede despreciar, odiar, algunos pueden desear incluso pegarle un tiro (otro tiro, quiero decir), se puede uno alegrar de la precariedad de sus armas y de la fortaleza inexpugnable de sus enemigos, puede uno celebrar anticipadamente que su derrota esté cantada, pero ¡dudar de que su situación es un ejemplo pertinente de desequilibrio de fuerzas! Un poquito de por favor, amigos. Hace falta ser muy, muy doctrinario. En fin, Enrique, lo que decía Ortega: «los ejemplos se vengan».
Por cierto…quizás con retraso respecto al día que se publicó esta entrada del blog…
sin que tenga mucho que ver…es un rebote al contrario…
los mensajes de apoyo que FJL está recibiendo en las páginas de Libertad Digital…
el poder de la red
jima