Lo comentamos aquí mismo el pasado noviembre, con respecto a un estudio realizado entre teenagers coreanos: el uso del e-mail estaba descendiendo drásticamente en favor de medios síncronos como la mensajería instantánea (IM), el SMS y otros medios síncronos. Ahora, las dinámicas de comunicación de la «generación síncrona» han llegado ya a los Estados Unidos, y se manifiestan en el último estudio de Pew Internet & American Life Project Report: los jóvenes norteamericanos utilizan el e-mail para enviar mensajes a padres, parientes, personas mayores o instituciones, pero no entre ellos. Sobre el total de jóvenes norteamericanos, un 87% utiliza Internet, un 75% usa IM (42% en la población adulta), y un 48% lo hace todos los días
IM is a staple of teens’ daily internet diet and is used for a wide array of tasks — to make plans with friends, talk about homework assignments, joke around, check in with parents, and post «away messages» or notices about what they are doing when they are away from their computers.
Por supuesto, se puede arguír que las necesidades de teenagers y profesionales son diferentes, que los primeros se comunican casi siempre «por placer» y los segundos más «por trabajo», o que ya irán entrando en el e-mail a medida que vayan creciendo e incorporándose al mundo laboral. Pero la tendencia está ahí, y me parece enormemente interesante. El uso del IM en entornos profesionales, entre persnas con una cierta madurez y experiencia en su utilización me resulta fascinante, porque pasa de la idea de conversación (ventana intrusiva que se abre y a la que tengo que atender y dejar de hacer lo que estoy haciendo) a la de «presencia» (sé que esta persona está ahí, le puedo preguntar cosas que necesito, pero no me preocupo de la pesada «etiqueta», todo el preámbulo, el «hola, ¿que tal estás?», el «bueno, te tengo que dejar», o el «¿sigues ahi?») Igual de fascinante que otro tema también comentado recientemente, el de la «conexión permanente» o always-on entre jóvenes norteamericanos. En momentos de fuerte evolución y desarrollo de nuevos medios, las dinámicas de media choice behavior se están convirtiendo en un tema verdaderamente apasionante.
Presencia en la red de forma continua, por IM, por email, por comentarios en blog (mira en microsiervos y su conversación distribuida), por videoconferencia, por donde sea. Cada vez mas conectados
El problema del e-mail en el ámbito profesional es que se asume que el destinatario ha leido, entendido y aceptado el correo salvo que responda lo contrario
Se ha convertido en un hábito «reenviar» problemas o guardar e-mails para sacarlos en momentos clave como prueba documental
Una comunicación sincrona evitaría esto
Tambien en el ámbito personal… http://www.bel.hm/funny/stuff/GIF/1.gif
Buenísimo el chiste, seguro que lo acabo usando en clase :lol:
Efectivamente, el e-mail es muchas veces una forma de «prueba», algo que la comunicación síncrona no tiene. En el IM se puede guardar el log de la conversación, pero no sé, no sé…
Los SMS son sincronos??? Una llamada telefónica sí lo es, un sms no.
Creo que Felipe esta en lo correcto…los SMS son asincronos. Los mensajes son enviados desde los telefonos hasta el SMS-C (Short Message Service Center) de los operadores, el cual los envia al movil de los destinatarios…si bien muchas veces es recibido de forma practiamente intantanea, si no logra ser enviado exitosamente por el SMS-C entra en una cola de reintentos que es configurable (les asigna reglas de expiracion a los mensajes y de intentos de reenvio)…
Si bien la mayoria de los mensajes son enviados exitosamente, no hay una garantia por parte del operador celular de que los mensajes vayan a ser entregados/recibidos
Sí, la verdad es que tenéis razón. De hecho, resultan mucho menos intrusivos que el teléfono precisamente por eso.
El otro día envié a un cliente unos archivos por e-mail solicitando acuse de recibo de los mismos. Nada, ni flowers… La madre que los parió…
Cuando se trata de mensajes importantes siempre solicito confirmación personal. Y cuando me envían un e-mail importante, siempre contesto aunque sea sólo para decir ‘recibido’.
Que sensación más mala la de enviar algo y no saber si lo han recibido o no…
El problema, Neil, viene del procedimiento. Yo soy un desastre con esas cosas, porque leo el correo desde mil sitios diferentes, y muchos de ellos (el BlackBerry, Gmail, etc.) no devuelven confirmación automática. Manualmente intento confirmar a quien me lo pide, pero si tengo tres cursos a la vez y les pido un trabajo, se vuelve imposible. En general, creo que la madurez de la tecnología da, casi, casi, para pensar que un e-mail siempre llega, y si no, nos rebota, salvo en un número muy bajo de excepciones. Aunque muchos usen eso de «no, no lo he recibido» como excusa. La confirmación puntual, manual y por un motivo determinado (es una cuenta que no he usado en mucho tiempo, creo que se ha cambiado de trabajo, etc.) me vale, la sistemática no me gusta nada y no me funciona nada bien…
Yo cuando era un ‘teenager’ tampoco usabe el email, y creo que de haber sido una tecnologia a mi alcance, lo habria usado mas bien poco (estaba siempre en la calle). Y de haber tenido una tecnologia tipo IM, la habria usado hasta exprimirla a tope. A mi, mas que interesante, me parece de cajón.
De todos modos, yo, sin ser un visionario, no me creo que el email vaya a caer en desuso, por mucho que los blogueros de turno escriban un articulo al respecto cada 2×3. Lo que sí me creo es que de aqui a 10 años va a pasar una de estas dos cosas:
1) El email evolucionará y se redefinirá de la A a la Z
o
2) Aparecerá un nuevo medio que conserve todas las cualidades del email (asincrono, contenido «rico» y pudiendo incluir contenido de gran tamaño, etc) que lo sustituya.
Pero con toda seguridad, existe, y existirá cada día más, un medio de comunicacion electronica asincrono y con esas otras cualidades, que ni el IM, ni el SMS ni cosas parecidas ofrecen ni creo que vayan a ofrecer.
Eso si, ofrece base a un interesante debate. Igual un dia de estos le dedico unas lineas, aunque personalmente, vaticinar el futuro es algo que veo con demasiada frecuencia y me aburre bastante.
Estoy de acuerdo con Pasajero de la red.
Para mí el descubrimiento que más satisfacciona me proporciona es el correo electrónico y, especialmente, las listas de correo.
Leo lo que quiero, contesto lo que quiero y cuando quiero.
Las conversaciones en tiempo real me producen rechazo. Me obligan a estar pendientes de ellas. Los interlocutores pueden tener tendencia a acapararte y me siento presionado, cuando tengo poco tiempo.
No lo desprecio. Tiene una utilidad incuestionable, pero, para el uso que yo quiero darle las listas de correo son mi prioridad absoluta.
Después, por orden de practicidad, para mí, son los foros que incluyen suscripción a los hilos. También me resultan muy prácticos. Si no tienen suscripción su practicidad baja muchísimo, no tengo tiempo de estar acordándome cada cierto tiempo el acudir a ese foro determinado, del que es posible que ni recuerde el enlace.
«Argüir», no «arguír», ;-)
¿»Arguír»?
Zahorin, Enrique detesta las listas de correo :-) Considera que es algo del pasado. Claro, es algo «del pasado» que es hoy utilizado por más del 80% de la población internetera – contra los blogs que apenas rascan el 10% – y que, si las estadísticas no me fallan (y yo las tengo «en casa») es un medio que por el momento no ha experimentado un decrecimiento en su uso o creación, sino al contrario, cada día se siguen creando más listas que el día anterior, y dada su enorme versatilidad (p.ej. una lista puede ser accedida como un blog, como un foro, etc.), no veo un solo motivo para deshecharlas, en absoluto.
Yo no predico el futuro, echo una miradilla al futuro pero vivo el presente, y definitivamente, en el presente todavía existen justificaciones de sobra para utilizar listas de correo. Cada medio tiene sus ventajas (y desventajas) y yo desde luego no estoy por la labor de deshechar un medio para intentar sentar cátedra, entre otras cosas. Quizas, otras personas, más «visibles» sí se vean en esa necesidad. Me encantan las listas, los blogs y todo lo que sean medios de comunicación asincronos (los que me dejan «always on» no tanto).
Um.. Me retracto en la primera frase que dije en mi comentario anterior. No es mi costumbre el poner en boca de otros algo que no hayan dicho y no recuerdo habe leido a Enrique decir que detesta las listas, simplemente las critica como algo del pasado, a mi juicio equivocadamente, y los motivos ya los he comentado.
Alguien dijo hace poco (no tengo el enlace a mano en este momento) algo asi: «empecé a usar RSS en lugar de listas o newsletters para desahogar un poco mi buzón de correo, y ahora me encuentro con el problema de que tanto mi buzón como mi agregador estan sobresaturados, con la desventaja de que además tengo que ir consultando y filtrando la información en dos sitios diferentes, y para colmo, con RSS, si no consulto una fuente con cierta puntualidad, me pierdo notificaciones antíguas salvo que vaya luego a buscarlas a mano».
Yo me defiendo bastante bien con ambos medios e incluso algunos otros, pero es una opinión no desmerecedera de atención.
conoces algun programa por el que pueda saber si han recibido los mails que envio
gracias