Enrique Dans

Yahoo! lanza en beta un motor de búsqueda que localiza páginas no en la Web, sino en tú Web, en la que tú y las personas que tienes en tu red social definen con sus historiales de búsqueda y sus favoritos. La idea me parece buenísima, porque pone en sintonía todos esos conceptos que llevamos tiempo barajando como origen de eso que se está dando en llamar Internet 2.0 (aunque eso de Internet 2.0 era un nombre ya asignado para ese backbone de altísima velocidad disponible en algunas universidades); folksonomías/tags, redes sociales, estándares abiertos, etc. En el banner de saludo cuando entras en la página aparecen todos esos conceptos, y también cosas como Flickr (recordad: , aunque lo ponga muy pequeñito y casi no se note).

¿La idea? «Search, with a little help from your friends». Al entrar, te pregunta si quieres que importe tus bookmarks, conforma tu «esfera personal» de favoritos y tags en la que se integran los tuyos y los de tus amigos, y busca por defecto ahí, a no ser que le pidas que no restrinja la búsqueda y la haga extensiva a toda la Web. Lo que se pretende es que tus resultados no sean «los resultados», sino «tus resultados», influenciados por la comunidad de amigos que tienes definida en Yahoo!, y con los que se supone que compartirás una serie de elementos comunes que harán que ese filtro los dote de significado y relevancia. En función de la instrumentación del tema, que aún no he tenido tiempo de probar en profundidad, me parece que puede tener detalles muy interesantes. Obviamente, su utilidad dependerá del grado de definición de una persona dentro de Yahoo!, algo que constituye a la vez oportunidad y amenaza: por un lado, podría representar la oportunidad de dotar de tirón a varias de las piezas de esa arquitectura social de Yahoo! que, por la razón que sea, no han alcanzado madurez en muchos mercados. Pero por otro, esa misma falta de madurez podría representar una amenaza: al haber llegado relativamente tarde al fenómeno de las redes sociales, muchas prestaciones de la red social de Yahoo! carecen de un elevado grado de consolidación en muchos mercados (en USA no va nada mal, pero en España, por ejempo, el nivel de adopción de, por ejemplo, Yahoo! Messenger o Yahoo! Mail es más bien bajo, y sí serían en cambio, piezas que me gustaría ver integradas en mi «ecosistema social».

La sensación es curiosa, porque te das cuenta de que es realmente un producto de integración: si no has «dado de comer» a tu Yahoo! convenientemente, la prestación no resulta interesante. El interés en, por llamarlo de alguna manera, «cross-selling», resulta más que evidente, porque la herramienta parece tener solo sentido y utilidad para alguien que sea verdaderamente un Yahooligan. Si tienes una cuenta en Yahoo!, pero no guardas favoritos, no etiquetas nada o no das de alta a tus amigos, la cosa, obviamente, no funciona, o lo hace mucho peor. En mi caso, por ejemplo, la red social de Yahoo! me llegó cuando ya tenía muy desarrolladas otras redes sociales, o la posibilidad de almacenar bookmarks la encontré cuando ya llevaba tiempo alimentando mi del.icio.us, de manera que necesitaría vías de importación-exportación para poder de verdad darle cierto sentido.

Miguel habla del tema en Redes Sociales, el blog de Alianzo Networks.