Este artículo en Comunicaciones World, «Aplanados«, resume muchas de las cosas que comenté el jueves pasado en el Foro de Movilidad y Banda Ancha de Ericsson y Actualidad Económica. Porqué cosas como Skype son una amenaza real para unas operadoras con una actitud no precisamente centrada en el cliente, sino en como desplumarlo. Empresas con poca vista que en lugar de «asociarse» con sus clientes, como dice la teoría más básica del CRM, intentan engordar su factura en cuanto éste se descuida mínimamente. Empresas que cuando tienen un servicio innovador, intentan que aquellos menos sensibles al precio paguen importes abusivos por él, en lugar de intentar lanzarlo a un precio que lo haga atractivo «para todos los públicos» y genere un efecto de desarrollo de su utilización. Y que cuando algo así les sale por casualidad, como fue el caso del SMS, son incapaces de replicarlo porque, simplemente, no está en su ADN
No defiendo a las operadoras (¡jamás!). Pero eso es lo que hacen todas las empresas grandes, ¿no?
Por ejemplo, por mucha energía más limpia o eficiente, yo no veo ninguna preocupación por el usuario por parte de las eléctricas. Es más, si pudiesen, quitarían la tarifa nocturna, que es de lo poco que se puede personalizar.
Sólo les falta ponerla por el día (no sé como está el tema, pero en mi casa empieza a las 20:30, en otros lados a las 23:00). No preguntan, simplemente la ponen como mejor les vaya.
Y, la verdad, cuando intentan tener en cuenta al usuario, aparece la cartita: si no nos dice lo contrario, usaremos sus datos para lo que nos venga en gana. Lo que me faltaba, que analicen mis flujos de tráfico (espero que el contenido no:)
Aunque igual me alargo mucho, quería contar una anécdota.
Hace un par de años, en una clase nos comentaron que se había hecho un estudio comparativo entre Corea del Sur y España. Da la casualidad de que somos como el hombre y el cerdo: no son iguales pero se parecen bastante.
Buscaban las causas de la diferencia en número de líneas de ADSL: aquí 1 millón, allí 10 (sobre 40 millones de personas, supone 1 de cada 4!).
Creo recordar que allí se ofrecían dos tipos de conexión: 2 y 8 Mbit/s. El precio creo que eran entre 20 y 30 euros mensuales.
Conclusión: tenemos que ofrecer más velocidad a los usuarios.
Detalles como el precio o la producción de contenidos en coreano fueron descartados…
Absolutamente de a cuerdo. Lo del ADSL en España ha sido la historia de como un monopolio ha destrozado las posibilidades de situarnos en el grupo de cabeza con historias tipo ‘la tarifa plana bloqueará las líneas e impedirá las llamadas normales’, además del vergonzoso ancho de banda del que ‘disfrutamos’.
Monopolios, oligopolios… escasos productos sustitutivos o ninguno. Ellos hacen lo que tienen que hacer. Cargar las tintas contra ellos es equivocarse. Sólo hay un culpable: el gobierno, que sea cual sea, se preocupa de todo menos de introducir competencia real. La culpa es de las autoridades, y de que los votos no dependan de la gestión de normas en estos sectores (banca, telecomunicaciones, electricidad) ni tan siquiera del precio de la vivienda, sino de la frase demagógica de turno. Así nos va, pero somos nosotros los que les votamos.
Me indigna, me indigna y me indigna. Y sobre todo, nos obliga a detraer renta para pagar factores competitivos o de vida básicos, en lugar de poder destinarlos a utilities. Nos hace pobres.
Genial lo del sms, no lo había visto como una ‘casualidad’. :) Pero comparto plenamente la idea…
Enrique,
Estoy de acuerdo en las necesidades que planteas a un sector de las telecomunicaciones bastante restringido por el marco regulatorio, pero creo y entrando en un sector que tú también conoces (enseñanza educativa) precisamente te encuentras en una organización (IE) que poco se asocia con el cliente e intenta engordar su factura con precios abusivos.¿Qué opinas de ello?
Al fín y al cabo las empresas estan en el mercado para generar dinero y aprovercharse todo lo que pueda de la situación (no estoy de acuerdo con esta situación pero esa es la realidad).
Hombre, Antonio, tu pregunta podría derivar en una discusión la mar de bizantina y más adecuada para otro sitio. Esto no es el blog del Instituto de Empresa, es el mío personal. Obviamente no estoy de acuerdo, los precios del sitio en el que trabajo no me acomplejan ni me avergüenzan lo más mínimo, es más, son inferiores a los de escuelas objetivamente comparables en calidad (las que están a su lado en los rankings) Pero eso, que yo no pongo ni influencio los precios, ni mi blog parece el foro más adecuado para esa discusión… En cuanto a la asociación con los clientes, lamento disentir. Los ex-alumnos suelen mantener un muy buen contacto con la institución y volver a ella cuando pueden. Es un caso, como digo en clase de CRM, de insuperable nivel de permiso. Pero claro, es otro sector…