Amazon es uno de esos sitios que no hay que perder de vista, que hay que monitorizar constantemente, no sólo Amazon.co.uk, que es el que tenemos más cerca cuando compramos desde España, sino también la propia Amazon.com, que mejor catálogo, mejores precios a pesar de la logística (y más ahora con el dólar al precio que está) y, sobre todo, una más rápida incorporación de innovaciones. Mi caso es curioso, porque durante los años 1996 a 2000 fui un cliente espectacularmente bueno de Amazon.com (tan bueno como si estuviese haciendo el Doctorado :-) y desde el 2000 hasta ahora lo he sido de Amazon.co.uk (como si fuese un académico :-) Y siempre me he quejado de lo mismo: tengo dos listas de recomendaciones, una en cada sitio, cuando en realidad, dado el valor que las recomendaciones tienen para mí, lo que realmente querría sería tenerlas las dos combinadas. Es completamente absurdo y no se sostiene que para una de las empresas más punteras del mundo en el tratamiento de la información de los clientes, existan dos Enriques con el mismo apellido, uno a cada lado del charco, y con gustos sospechosamente parecidos, ¿no?
Pero, críticas aparte, me acabo de dar un paseo por ambas Amazon buscando datos sobre una serie de libros, y me he quedado impresionado con algunas de las novedades, sobre las que había leído pero que no me había dado tiempo a curiosear con detalle. Primero, la cada vez más agresiva implantación y uso de la función «Search Inside the Book», que mencionamos por primera vez nada menos que el 25 de Octubre del año pasado: simplemente al pasar el ratón por encima de un libro, aparece este recuadro informándote de qué libros lo citan y en cuáles es citado, la frase inicial del libro, y varias páginas (cubiertas, contraportada, índice, etc.) de acceso directo. El uso que Amazon está siendo capaz de hacer de su base de datos es simplemente impresionante.
La otra novedad es el Amazon Theater, una serie de cinco cortos hechos por actores y directores conocidos, que Amazon ha ido publicando a razón de uno a la semana (ya estamos en la quinta). Al final de cada uno, al aparecer los créditos, se referencia todo aquello que puede adquirirse en Amazon, y aparece en forma de hipervínculo activo, de manera que si ves pasar la joya que llevaba la protagonista, mueves el ratón, los créditos se detienen para que no tengas que «perseguirlos», y te permite pinchar y aparecer en la página con los detalles del producto. Es como echar hoy un vistazo al futuro de la publicidad.
Amazon es uno de esos sitios en los que lo que te cuenten no tiene apenas valor. Hay que verlo por uno mismo para ver y tocar el futuro, para entender de verdad la que está liando el amigo Jeff Bezos. Impresionante, de verdad.
Sí, haces unas semanas comenté el Amazon Theater en «posicionarse». Veo la idea fantástica para la televisión interactiva. Para internet… me cuesta un poco más, aunque el contenido «teletienda» es perfectamente trasladable a un entorno online…Hay que seguir la pista a estas iniciativas. Un saludo.
Sí, haces unas semanas comenté el Amazon Theater en «posicionarse». Veo la idea fantástica para la televisión interactiva. Para internet… me cuesta un poco más, aunque el contenido «teletienda» es perfectamente trasladable a un entorno online…Hay que seguir la pista a estas iniciativas. Un saludo.