Pepe Cervera se marca un artículo buenísimo en El Retiario uniendo tres fallos judiciales de muy reciente actualidad: IBM contra SCO, P2P contra RIAA y Microsoft contra Eolas, con el hilo conductor de los derechos de propiedad intelectual.
Me ha resultado muy inspirador, en gran medida porque me pilla terminándome el libro de Lessig. La primera vez que se empezó a hablar de la protección de la propiedad intelectual se hizo en la constitución norteamericana, detallándose que se hacía por tiempo limitado y con el fin de proteger el progreso y la innovación. De ahí, al aparataje legal que se desarrolló y que ha dominado el mundo durante años y años, va un abismo. No querría yo verme explicándole a los «padres de la patria» que trabajaron en la escritura de la constitución de los Estados Unidos que gracias al desarrollo de esa protección limitada de la propiedad intelectual, hoy en día alguien puede hacer las barbaridades que algunos intentan hacer.
En no demasiado tiempo se recordará la época en la que los mafiosos de la propiedad intelectual dominaron el mundo como «los años oscuros», como aquella Edad Media en la que unos pocos oprimían a la mayoría, y que puso freno a la innovación durante años. Afortunadamente, las cosas parece que empiezan a apuntar en otra dirección.