¿Veis esta imagen? Hoy aún aparece en la Web, pero en breve será una reliquia. Tras casi cuatro años de caminar juntos, Amazon ha presentado una demanda contra Toys «R» Us en la que le exige 750 millones de sólares en compensaciones por su incapacidad para cumplir con los compromisos de suministro, como de hecho ya ocurrió a Toys «R» Us cuando se dedicaba a hacer la guerra por su cuenta (sí, aquella malvada jirafa que dejó sin juguetes a los niños al romper stock en la Navidad del 2000, lo que motivó en parte el establecimiento del acuerdo). Por su parte, Toys «R» Us exige el retorno de los200 millones que pagó a Amazon a lo largo de cuatro años por una exclusiva de comercialización de juguetes en la Web de Amazon que ésta rompió constantemente al permitir a otras empresas vender productos que se suponía que sólo ellos debían vender.
Ya lo decía Lou Gerstner, anterior Presidente y CEO de IBM, en una cita que yo utilizo profusamente en mis clases:
The “e-” of “e-business” does not stand for “easy”
Para las empresas de toda la vida, esto de la Web no resulta una cosa fácil, ni siquiera subcontratándolo.