Ayer, durante el fantástico hackathon que montaron mis amigos de Spotbros, tuve la oportunidad de jugar un poco con una MakerBot que llevaron Marcos Villacampa y Jon Goitia, de la Universidad Carlos III. La MakerBot es el aparato icónico del 3D printing o impresión tridimensional para aficionados: con un acabado de madera de contrachapado que le da un aspecto entre caja de naranjas y proyecto de trabajos manuales de estudiante, y sobre todo, con su Thingiverse, el repositorio de planos y proyectos creado por los aficionados, la Thing-O-Matic ha jugado un papel importantísimo en la popularización de la impresión tridimensional en numerosos entornos. Había visto estas máquinas en varias ocasiones en sitios como el MediaLab Prado, pero no las había visto funcionar hasta ayer.
La Thing-O-Matic es, en realidad, un aparato relativamente sencillo en su concepción: cuesta en torno a los mil dólares, y se alimenta de un rollo de dos tipos posibles de plástico con diferentes propiedades (Acrilonitrilo butadieno estireno, ABS; o poliácido láctico, PLA), que pasan por un extrusor que lo funde y que tiene capacidad de movimiento en el eje vertical, y que lo deposita sobre una plataforma caliente con capacidad de movimiento en el plano horizontal. Verla funcionar es una delicia: la primera capa se adhiere a la placa por fusión, y a partir de ahí, se van depositando capas una sobre otra. El resultado final es sorprendente: a pesar de las limitaciones (no puede depositarse nada «en el aire» más allá de un ángulo de inclinación determinado), las posibilidades son enormes, y terminan por dar lugar a una pieza algo rústica y con evidencias de las capas que la forman, pero razonablemente bien terminada.
Pero hay más. En toda fase de popularización de una tecnología hay fases, y a las mejoras progresivas que MakerBot introduce en sus máquinas, se unen otros competidores. Precisamente hoy acabo de encontrarme en Wired un artículo titulado «Next generation 3-D printing: higher resolution, tastier, and super cute«, en el que se detallan otras máquinas pensadas para el mismo tipo de uso, pero con otras características. Algunas siguen el mismo principio de extrusión y depósito por capas, otras crean a partir de un bloque que van recortando, otras trabajan con materiales como chocolate para creas diseños comestibles… todo un entorno que comienza su fase de popularización. Atentos a este tema. Promete ser interesantísimo.
Yo estoy deseando probarlas. Una de nuestras lineas futuras de negocio se basa en que esa tecnología sea asequible. Está claro que va a ser una auténtica revolución…
Ya en el plano más lúdico y personal, se me ocurre que los amantes de las maquetas y los aviones teledirigidos van a estar encantados con esta tecnología…
No es por hacer comentarios pesiminstas, pero en cuanto se puedan hacer aparatos en casa de manera sencilla, subira el precio de los materiales, los derechos de autor de los planos se reclamaran por una asociacion tipo SGAE… Me parece uno de los mayores adelantos del ultimo siglo, a la altura de internet, por las posibilidades que permite, pero al final los fabricantes de los dispositivos intentaran que salga mas barato comprartelo hecho, que hacerlo tu.
S2
No sabes con qué impaciencia lo espero
Al hilo de este tema, puede que ya lo conozcas pero hay un caso muy interesante en Kickstarter http://www.kickstarter.com/projects/printrbot/printrbot-your-first-3d-printer
Este hombre necesitaba 25000$ y obtuvo ¡¡¡830000!!!! para iniciar la fabricación de estas pequeñas impresoras 3D. Hay varios videos en Youtube sl respecto.
Un saludo
Otro tipo de impresora que esta recogiendo el máximo interés, estas que imprimen con resinas plásticas sensibles a la luz.
Este Kickstarter ha conseguido la financiación de su proyecto en menos de 24 horas:
http://www.kickstarter.com/projects/b9creations/b9creator-a-high-resolution-3d-printer
Mayor resolución, mejores propiedades físicas del objeto impreso. Apuntaros al futuro, que ya está aquí!
A mi me asombra vuestra admiración, porque conozco líneas de impresoras de este tipo desde hace años y no tiene más problema que el coste de las reproducciones, bajo si lo que vamos a hacer es por ejemplo una maqueta de arquitectura, un prototipo industrial o molde de fabricación, pero alto como si vamos a hacer piezas como hobby
dejo un video que lo demuestra http://www.youtube.com/watch?v=TWq3XIsEhA8
Desde hace años lo utilixzan los museos para hacer reproducciones de piezas valiosas como huesos de neardental, vasos griegos o cosas similares ,a partir de sacanner 3D que también existen
http://felixmaocho.wordpress.com/2008/12/08/arte-digital-–-solidos-digitalizados
La única diferencia con el equipo que indicas, es que este rellena el espacio con un polvo de talco que permite construir en el «aire que luego se absorbe o del interior de las objetos cerrados se saca conpor un orificio con aire a presión si es necesario vaciarlo. Ya van bajando de precio aunque aun no han llegado a nivel de artículo de consumo.
Cualquiera puede imprimir ya sus diseños 3D en múltiples materiales a elegir con servicios como el de Shapeways que no es demasiado caro para prototipar con muchos de los materiales que ofrecen y razonablemente rápidos teniendo en cuenta que te lo mandan desde Holanda.
Enrique
Mira este ejemplo para fotografía en 3D. No lo he probado pero la idea me parece increíble
http://bumpyphoto.com/
Hmm. Alguien me ha estado ocultando la posibilidad de imprimir con chocolate.
Jon, tenéis que diversificar. ¡yo la adopto! ;)